LA TECHUMBRE VEGETAL EN LA VIVIENDA
TRADICIONAL HERREÑA: LA CUBIERTA PAJIZA
Sixto s~'inchez Perera
© Del documento, los autores. Digitalización realizada por ULPGC. Biblioteca Universitaria, 2017
A Eloy Quintero Morales:
Artesano de la vida y embajador del sentir herreíio.
Hoy el Gdroé destila lágrimas por tu ausencia.
15 de enero de 1997
"Yo ... mi gusto ha sido siempre rescatar de Los viejos
pa traducir a Los jóvenes ... , ha sido mi gusto toda La
vida, desde niño, no sé si estará mal o bien ... "
(Eloy, El Pinar, 1 de mayo de 1993)
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INTRODUCCIÓN
Con el siguiente artículo I pretendemos realizar una aproximac1011 al
conocimiento de una técnica artesanal en extinción, estrechamente vinculada a
un tipo de arquitectura tradicional que se ha venido realizan.do en Canarias desde
hace al menos cinco siglos atrás. Se trata del procedimiento utilizado en la
confección de las cubiertas pajizas, sistema que conlleva otra serie de labores
previas encaminadas tanto a la obtención como a la prep~ración de la materia
prima empleada.
Para la elaboración del tema hemos recurrido a diversas fuentes de
aprendizaje, entre las que destaca la que proviene del trabajo de campo. La
observación directa de las labores que intervienen en la confección de la cubierta
pajiza nos facilitó el intercambio de conocimientos con las personas directamente
implicadas en ellas, que pudimos contrastar con la información oral
expresamente recabada como método de trabajo.
Esta información se la debemos a dos personas con un amplio conocimiento
en la materia, pues ejercieron de tapadores durante buena parte de sus
vidas:
- D. Juan Antonio Casañas Oliva, de 80 años, natural de Los Mocanes
(Frontera), entrevistado en Los Mocanes en julio de 1996: "Yo lo hice con mi
abuelo, mi abuelo tendía y yo amarraba".
- D. Felipe Casañas Padrón, de 65 años, natural de El Hoyo de El Barrio
(Valverde), entrevistado en Guinea en julio de 1996: "A losl6 aiios estaba yo
ya ca.siendo y tapando".
CARACTERÍSTICAS CONSTRUCTIVAS DE LA CASA PAJIZA
HERREÑA
La modalidad arquitectónica de casas pajizas se remonta en Canarias al
momento inmediatamente posterior a la Conquista europea, proceso que se
desarrolla durante buena parte del siglo XV. Los nuevos colonos que se
1 Este artículo surge como resultado del estudio para la realización del Proyecto "La vivienda
tradicional herreña en el Valle de El Golfo, El Hierro", subvencionado por la Dirección General
de Patrimonio Histórico del Gobierno de Canarias.
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establecen en las islas trajeron consigo toda una serie de esquemas constructivos
que debieron adaptarse a las peculiaridades del Archipiélago, dando lugar a
diferentes tipologías de esta variante de hábitat.
El paulatino abandono de esta práctica constructiva en los pequeños
núcleos urbanos de Canarias comienza a principios del siglo XVI, y da lugar a
que las casas pajizas queden relegadas a zonas rurales y a los sectores soc iales
más desfavorecidos. Sin embargo, en El Hierro este tipo de cubierta vegetal
estará más extendido y tendrá una mayor prolongación en e l tiempo, tal como
atestigua el siguiente texto de P. Madoz ( 1986:222) de mediados del siglo XIX:
"Consta la Villa y sus barrios ó pagos (. . .) ele 1.30 casas, la mayor
parte terreras, de piedra seca y cubiertas de paja"( ... ).
Las características constructivas de este tipo de edificac ión obedecen a
un planteamiento arquitectónico senci ll o, que origina un prototipo de hábitat
austero. Con el paso del tiempo éste evo luciona y se adapta a las crecientes
necesidades de sus moradores, al tiempo que incorpora nuevos materiales y
técnicas construct ivas.
A grandes rasgos y citando textualmente a J. Pérez Vidal ( 1967:56):
"Existían, más por las dimensirmes _ grado de pe1fecció11. que por las
diferencias de traza, dos clases de casas h.erreí"ias de cubierta de paja:
una pequeíía y construida con poco cuidado, que recibía el nombre de
pajero, y otra más amplia y confortable, que mi informador llama
antigua o tradicional".
La primera representa el modelo más sencillo y a los estamentos
socia les más hurni !des de la población. La segunda, contemporánea de aquél la,
se asocia a las clases acomodadas. Sin embargo, ambas comparten una serie de
características simi lares:
- Un único módulo rectangular de una o dos plantas.
- Paredes de piedra seca.
- Techumbre vegetal de roll izos con cubierta de paja a dos aguas .
- Ausencia de revestimiento ex terior en las paredes.
- Revestimiento interior en paredes y solados con bosta.
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En cuanto a la técnica constructiva empleada para levantar las paredes
encargadas del soporte de la techumbre, ésta responde a una serie de patrones
habituales en la arquitectura tradicional canaria: las paredes de mampostería
son de considerable grosor, que oscila entre los 60 y 80 cm, mientras que las
cualidades del elemento constructivo -consistencia, textu~a, forma y tamañofacilitan
una distribución que será la causante de que, por regla general, se
prescinda de argamasa, excepto en aquellas localidades cercanas a zonas
arcillosas o en construcciones con una fábrica más cuidada.
El remate de las paredes condiciona la forma de ·1a techumbre ya que,
después del enrase de la frontal y trasera, se procede a elevar la altura de las
laterales en forma de triángulo. Esta parte del lienzo recibe el nombre de
mojinete y determina la pendiente de cada uno de los lances o vertientes de la
cubierta. De esta forma obtenemos la estructura base sobre la que se colocan
los elementos vegetales que constituyen la cumbrera.
LA TECHUMBRE
El entramado de rollizos
Una vez finalizadas las paredes de la estructura, se procede a colocar el
entramado de madera que servirá de soporte a la cubierta de colmo.
En primer lugar, se coloca la hilera o viga cumbrera que descansa
sobre los vértices de los mojinetes y forma el lomo de la armadura donde se
apoyan los pares o hibrones. A contiliuación, sobre éstos se disponen, a manera
de malla, las correas o latas con las que se da por concluido el entramado de la
techumbre.
Dado el carácter perecedero de la materia prima de estos elementos, se
procuraba que ésta tuviera una serie de cualidades naturales que garantizaran la
mayor longevidad de la estructura: solidez, rigidez, resistencia ... Es por ello que
como viga se elegía la madera de tea del pino canario (Pinus canariensis), cuyo
núcleo es prácticamente incorruptible: " Para que la tea sea buena, es necesario
que el árbol sea viejo, aproximadamente uno o dos siglos, e igualmente que
tenga un año de cortada para que no se tuerza o alabee"(Martín Rodríguez,
F.G., 1978:62-63).
La información oral nos lo atestigua de la siguiente manera:
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"Usted va con el hacha, con el mocho le quita eso podrido por.fuera y
se trae el esqueleto de dentro, que es la tea buena. No es tumbar un
pino como ahora, es que eso estaba de los ciclones que venían, de los
temporales, los pinos caídos ahí de años( ... ) y así se cogían las vigas y
se traían"( ... ).
(J.A. Casañas Oliva)
Desde la viga hasta el enrase de las paredes frontal y trasera se
distribuyen los hibrones a espacios equidistantes de aproximadamente 45 cm,
comenzando junto a las paredes laterales y de manera que sobresalgan al
exterior formando un pequeño alero que las resguarde del efecto de la lluvia.
La madera elegida para este fin responde a las mismas cualidades
anteriormente descritas para la viga; así vemos la preferencia por la tea o la
sabina (Juniperus phoenicea) y, en su defecto, algunas especies de la lauri silva
insular.
"Lo principal de antes era tea, la hibronada de tea o sabina( ... ) iban
a La Dehesa( ... ) a cargar Las bestias de hibrones, ahora por último a
no: una viga de mocán, una viga de haya, de palo blanco o de cárico"
( ... ).
(J. A. Casañas Oliva)
En la techumbre tradicional los hibrones se ensamblan sobre la viga
mediante un sistema similar al de caja y espiga, y una variante de éste que
requiere que la caja esté totalmente horadada -para que la espiga perforada la
atraviese y deje al descubierto el orificio, que será sellado por un pasador-.
"La tea no se puede clavar, la tea se tiene que trabajar enmalletada
( ... ) pues los hibrones ( ... ) Los e¡¡grampaban así sobre la viga" ( ... ).
(J. A. Casañas Oliva)
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Detalle de cumbrera: viga, hibrones y latas
"Los hibrones (..) la punta con una azuela los cortaban y los abrían un
hueco y después metían uno dentro de otro y después una estilla
cruzada(..) como enmalletado"( ... ).
(F. Casañas Padrón)
Dispuestos ya los hibrones, se procede a colocar sobre ellos el enlatado
o latas de asiento: varas gruesas de madera de haya (Myricafaya), brezo (Erica
arborea), acebiño (Ilex canariensis), o mocán (Visnea mocanera), formando un
entramado más o menos tupido en función de la consistencia que se le quiera
dar a la techumbre.
"La lata siempre la buena la buscábamos de mocán (..) casi la más
corriente la ponían de haya, porque el cárico al clavarlo abre, se rcya,
usted lo clava bien, pero según va secando se va abriendo (..) los
herreros hacían clavos pa eso".
(J.A. Casañas Oliva)
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Una vez finalizado este proceso, la cumbrera queda preparada para
recibir la cubierta de paja.
La cubierta pajiza
"Zancas vanas, zancas vanas,
luego espigas, tarde granas".
(F. Casañas Padrón)
Tradicionalmente se ha elegido la paja de centeno o colmo como la más
apreciada para el tapado de cubiertas pajizas. Las ventajas de ésta con respecto
al resto de las gramíneas consisten en una serie de cualidades naturales, como
son el tallo fino, recto, largo y compacto, que la convierten en un material dócil,
resistente y duradero.
( ... ) "paja de centeno y cuando no había que estaba muy apurado en
la tapa, de trigo, pero trigo escogido (. .. ). Porque el centeno [es] (. .. )
más grueso y más derecho y más fuerte, ,nenas hueco que el trigo".
(F. Casañas Padrón)
El colmo, para que adquiera todas sus cualidades, requiere una serie de
condiciones estrechamente vinculadas con el medio donde se cultiva, tales
como: grado de nutrientes del suelo, proporción entre semilla y terreno a
sembrar, o la relación relieve-clima, que influirá en que se aprecie de distinta
manera el de una u otra zona de la Isla.
"El centeno a veces se nos acodan algo cuando tiene exceso de abono
químico o la tierra (. .. ) tiene muchos humos, rnucha riqueza, entonces
sale muy frondoso y se acoda (. .. ) Eso hay que empanar/o clarito (. .. )
cuando se siembra (. .. ) al tirar la semilla al voleo (. .. ) si se siembra
mucha cantidad, sale acodado" ( ... ).
(J .A. Casañas Oliva)
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( ... ) "en El Macana!, más hacia abajo a Tancajote, que ahí hay
siempre calor, ahí está más fuerte el centeno: menos hueco tiene
dentro. Y ése es mejor centeno que el que se planta por arriba por la
medianía y por esa parte de arriba"( ... ).
(F. Casañas Padrón)
La siembra del centeno en las zonas más cercanas. a. la costa se realizaba
durante los meses de diciembre y enero, mientras que en las medianías esta
actividad se retrasaba hasta el mes de febrero. Avanzada la primavera, una vez
que el centeno ha madurado lo suficiente, comienza la tarea de la siega y, en
consecuencia, la formación de los mallos.
"Ibamos segando y haciendo las paveas y deJpués se hacen los mol/os
(..) los amarrábamos y entonces los apilábamos ahí, con el mismo
colmo".
(J.A. Casañas Oliva)
Sacudiendo, peinando y formando el colmero
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El siguiente paso consiste en preparar el colmo para su posterior colocac1on
sobre la techumbre. Este proceso se divide en dos faenas complementarias:
sacudir y peinar. Para ello se acondicionan las eras con unas lajas de
piedra en posición inclinada -piedras de sacudir-, contra las que se golpean
manojos de paja, al tiempo que se peina con un rastrillo de madera a modo de
gran peine de mano.
La finalidad de este tratamiento consiste, por una parte, en desprender
el grano de la espiga y, por otra, en despojar a los tallos de sus cortezas y
eliminar aquéllos defectuosos, para pasar a continuación a formar los colmeros.
"Después se tiende [al so l], se le da (. . .) el primer golpe (. .. ) y se
sacude (. . .) nunca se le da que toque el tronco en uno (. .. ) porque si
toca en uno lo dobla (. . .) vuelve a darle el golpe y sacude y cuando ya
usted ve que no tiene grano entonces ¡déle como quiera! " .
(J.A. Casañas Oliva)
( ... ) [Se peina] "pa quita/e lo que no sirve, mire, la lioja y uno que es
el menudo que queda en medio, se peina, se peina bien., después se
empareja, entonces se vuelve a dar de nuevo y entonces se pone allí
para hacer los colmeros: primero son mallos, después es colmero,
cuando está limpito" .
(J.A. Casañas Oliva)
El proceso de tapado
El conocimiento de la técnica de tapado o formación de la cubierta
paj iza, era dominio de determinadas personas a quienes se recurría tanto para el
primer tapado como para sucesivas reparaciones. Se trata de las figuras del
tendedor y cosedor, a quienes asiste un ayudante -el que da el recado- cuya
función es la de alcanzar los manojos de colmo y las latas de coser.
"El tendedor que es el que atiende a colocar eso [el colmo] y el
cosedor que va (. .. ) atando de abajo y le mete el pie y hala y apreta
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(. . .). Aquí teníamos al compadre Juan Toledo, Juan Machín y el viejo
Demetrio ( ... ) estaba Eulalia Méndez ( ... ). Yo lo hice con mi abuelo, mi
abuelo tendía y yo amarraba".
(J.A. Casañas Oliva)
Los materiales utilizados para tapar los integran una serie de elementos
y herramientas muy simples que le dan al trabajo un caiicter eminentemente
artesanal. En primer Jugar, se precisa de un sistema de andamiaje que permita
un desplazamiento sobre la cubierta, sin pe1judicarla a medida que se reali za. El
resto de los materiales lo componen el propio colmo, las latas de coser, las
cintas de costura, la piedra de tapar y·un cuchillo o tijera.
La camisa
La primera fase del tapado comienza con la disposición sobre el
entramado de la techumbre de una camada de paja, no muy abu ndante, que se
denomina camisa. Ésta se realiza mediante el tendido y la superposic ión de
sucesivas hiladas, o carreras de colmo, que se sujetan mediante el cosido de
nuevas latas. Su finalidad es la de revestir y proteger el interior de la cubierta
de cara a futuras reparaciones, ya que, al estar al resguardo de la intemperie, la
camisa tiene un mayor período de vida útil.
"La camisa no era sino para evitar el que no se vea de dentro las
espigas del colmo ( .. .) es como si fuera un cielo raso pa después
cuando ponga el colmo dencima que no se vean las espigas"( ... ).
(J.A.Casañas Oliva)
La colocación de la camisa, al igual que el posterior tapado, debe
comenzar por uno de los lances de la cumbrera: "siempre haga primero de onde
bata el tiempo, el otro el último", con la finalidad de que la inclinación de éste
sirva de pantalla protectora contra la acción de los vientos dominantes.
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En función del sentido ascendente o descendente en la disposición de
las carreras de colmo, las espigas pueden o no quedar vistas al interior de la
vivienda:
( ... ) [disposición] "de arriba pabajo pa poner la camisa y después a
tapar de abajo parriba ( . .) la primera carrera que garre arriba, que
monte, que tape la viga"( ... ).
(J.A.Casañas Oliva)
Con esta modalidad las espigas quedan ocultas, pues siempre montan
sobre los tallos de la carrera anterior.
Colocando la camisa
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"Se empieza con la camisa, siempre con la camisa, de abajo hacia
arriba. La camisa empieza por ahajo a terminar en la cumbrera" ( ... ).
(F. Casañas Padrón)
Siguiendo esta variante, las espigas quedan vistas, pt1es los tallos de las
sucesivas carreras montan sobre ellas.
El tapado
Una vez colocada la camisa se continúa con el tapado, proceso casi
idéntico al anterior a excepción del mayor grosor de las carreras de colmo y el
sentido siempre ascendente de su disposición.
El cosido
La técnica de sujeción del colmo sobre la techumbre se denomina
cosido, procedimiento que se realiza sin otro instrumento que las manos y que
requiere gran maestría, puesto que de él depende la solidez e impermeabilidad
de la cubierta.
"Según se va haciendo la carrera se va recogiendo el palo pa ir uno
pisando siempre con un pie· en el palo y el otro clencima de la lata
apretando la lata para el suelo para que el punto [ de cosido] quede
bien sujeto, bien requintado (. .. ). Desde el momento que eles el punto
tienes que emparejar la paja para que ese punto no salga directo [que
no quede hueco]" .
(F. Casañas Padrón)
"El goteo hay por la sencilla razón que meten la mano, buscan,
amarran y después no unen (. .. ) la cincha del tapaclore es la unión"
( ... ).
(J .A. Casañas Oliva)
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Para el cosido se precisan nuevas latas que: "tienen que ser finas, como
los mimbres y eso así(..) las de coser son finitas y si fueran largas mejor", que
irán amarradas a las interiores atravesando para ello la camisa: "a la lata de
abajo, por entremedio la camisa, a la del interior (..) al enlatado ( .. ) que va
sobre los hibrones". Antiguamente el cosido se efectuaba con cintas vegetales
de zarza (Rubus inermis), mimbre (Salixfragilis) y, últimamente, con alambre.
Para ello se emplea el nudo conocido por lazo-balde.
Una variante, la constituye la modalidad derivada de coser la cubierta a
las latas del cosido de la camisa.
( ... ) "ésa va cosida a la lata de la camisa, no va al enlatado sino a la
lata de la camisa".
(F. Casañas Padrón)
Cosiendo
Esta modalidad tiene una serie de ventajas e inconvenientes: por una
parte, el punto de costura no atraviesa la camisa desde la superficie, lo que
previene de posibles goteras ·-puntos independientes- y facilita la reparación de
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la cubierta ante un posible deterioro, puesto que se puede reemplazar el colmo
sin descoserla del todo, quedando la camisa siempre sujeta. Pero, por otra parte,
las latas de coser, al ser finas, proporcionan una sujeción menos segura a la
cubierta.
"Nosotros las amarrábamos siempre adentro (. .. ) queda más fiterte
amarrada adentro".
. .
(J.A. Casañas Oliva)
El elemento vegetal utilizado a modo de hilo para efectuar el cosido,
necesita de un tratamiento previo muy similar al que se realiza en la cestería
tradicional, con el fin de que sus cualidades naturales -resistencia y flexibilidad-
cumplan a la perfección su cometido.
"Se cosía con zarza, se cosía con mimbre, se cosía con alambre (. .. )
había que abrirla, abrirla a la mitad y después de esa mitad irla
abriendo en tiras que no sean muy anchas ni muy débiles (. .. ). Después
pa coser había que ponerla en agua, antes ele coser pa que se esté
amorosa, porque si no se estalla(. .. ) [el mimbre] había que ponerlo en
el mar y el mimbre lleva muchos días en agua para que se amarase,
también igual que la zarza ,· abierto a la mitad y después en tiras
según" ( ... ).
(F. Casañas Padrón)
Emparejar el colmo
La acción de empareiar la superficie de la cubierta pajiza, se realiza de
manera simultánea a la colocación de la misma. Consiste en acomodar el
desnivel resultante de la superposición de las carreras de colmo, logrando una
pendiente lo más homogénea posible que contribuye en gran medida a su
imper-meabilidad. Este proceso se real iza con el empleo de una piedra porosa y
liviana: "la piedra pa tapar, una piedra como picollenra que viene a ser casi la
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misma piedra como para raspar el cochino, tenía su agarradero bien hecho pa
garrar y abajo bien enlajada, más bien como redonda".
"Se van emparejando según va terminando la carrera (..) y después ya
cuando se barra entonces es cuando se empareja definitivamente todo"
( ... ).
(F. Casañas Padrón)
El caballete
La formación del caballete representa el hecho de encumbrar o rematar
la cubierta en su vértice superior. Este es un proceso laborioso y delicado, que
condiciona la perfección del cerramiento o unión entre los dos lances. Dicho
objetivo se consigue, primero con la colocación sobre la viga de dobleces
alternos del colmo que sobresale como resultado de la disposición tanto de la
camisa como del tapado de la cubierta.
Emparejando
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Cerrando la cubierta
( ... ) "la espiga que caiga sobre la viga (..) y después cuando venga el
lance de allí entonces se dobla la espiga pallá pa que quede más
acaparado, más protegida la viga (..) las dos allí: una debajo y otra
dencima"( ... ).
(J.A. Casañas Oliva)
"Las puntas que sobresalen del [lance] de abajo, ésas se doblan y se
meten dentro para el otro lance que tape (..) se garra a manojos, se va
doblando y se va metiendo pa dentro, pa la viga, pa que no se vea
después la claridad'( ... ).
(F. Casañas Padrón)
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Finalmente se da paso a la formación del caballete, que debe iniciarse
por el mismo lance por el que se empezó la camisa: ''pa que el viento no tenga
[tropiezo] sino que pasa por dencima", ya que de esta manera el ensamble
resultante del contacto entre ambos lances queda protegido. Para ello se
emplean nuevas carreras de colmo colocadas de tal manera que queden
enfrentadas a tope -tallo contra tallo-, prescindiendo posteriormente de las
espigas. Por último, sobre las latas de amarre, que permanecerán a la intemperie,
se sitúan unos rollizos de colmo cuyo cometido consiste en cubrir los
últimos puntos de costura e impedir así la filtración del agua.
"La última [carrera] arriba ya es veciversa, el tronco parriba y las
puntas pabajo sobre del tapado (..). En cada punto va un mano jito (..)
el brazado ése es pa tapar que no gotee por el punto, eso no se pone
sino pa que el agua no entre, pa evitar de que entre por los dos puntos
que quedan"( ... ).
(J.A. Casañas Oliva)
Caballete
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Detalle: vista superior del caballete
( ... ) "al contrario, al revés: la espiga pabajo y el tronco pa la
cumbrera, después se coge en línea recta pa que diga bonito y se va
cortando toda la espiga ésa (..). Entonces el manojo ese se lo pones tú
dencima del punto para que resbale el agua y no baje por el punto ése
directo. Ése es el significado que tiene el manojito ése".
(F. Casañas Padrón)
Los parapetos
El último proceso que se realiza y da por culminada la confección de la
cubierta, consiste en formar los parapetos: grandes lajas de piedra que descansan
sobre los mojinetes de las paredes, con la finalidad de cubrir y proteger los
extremos del entramado de la cubierta.
"Encima des o ... de las puntas de las latas y parte del colmo van unos
lajones sujetando para que no entre el viento al tapado que se le da"
( ... ).
(F. Casañas Padrón)
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Volver a tapar
La pervi vencia de la s cubi ertas pajizas depende de una serie de factores
en estrecha re lación tanto con la calidad y cantidad de la paja utilizada, como
con la ubicación y/o locali zación topográfica de la vivienda dentro del territorio
insular y los factores climatológicos predominantes en la zona.
"Eso depende del tiempo y de cómo es el centeno, en qué parte .fue
plantado" ( ... ).
(F. Casañas Padrón)
"Aquí en El Golfo dura, dura rnucho, siere u ocho aiios".
(J .A. Casañas Oliva)
Una vez la cubierta se deteriora, bi en por el paso del ti empo, o debido a
a lgún incidente, se procede a su reparac ión. La frecu encia de ésta se supeditaba
principalmente a la di sponibilidad económi ca del núcleo familiar.
" Hay quien tape luego, hay quien no lo tenga y lo tenga más
distanciado, eso según la capacidad de uno y según el dinero de uno"
( ... ).
(F. Casañas Padrón)
" Uno siempre tenía que reservar, por ejemplo yo estaba de medianero
donde se plantaba (. .. ) y vendía el colmo, porque yo me garraba a lo
mejore quince o veinte reoles de colmo, o treinta, pero siempre dejaba
dos, tres pa (. .. ) si venía un viento y me la llevaba, pa tener pa reponer
(. .. ). Antes se guardaba el colmo como se guarda ahora el din ero pa
poder comprar" ( ... ).
(J. A. Casañas Oliva)
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viga cumbrera
!atas de asiento
Cubierta de casa pajiza en El Hierro
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La magnitud del deterioro de la cubierta condiciona su reparac1on ,
encontrándonos, por tanto, con diferentes grados de actuación: parcial y total.
Para una reparación parcial se procede primero a desmontar el caballete y
parapeto de uno o los dos lances de la cubierta, según se requiera, y luego se
tapa de nuevo al igual que la primera vez, pero sobre el tapado anterior.
"Cuanto más le queda, rnás segura la casa: menos se sale" ( ... ).
(J. A. Casañas Oliva)
( ... ) "la camisa queda siempre(. .. ) tendrían que pasar muchísitnos aíios
para quitar la camisa".
(F. Casañas Padrón)
Sin embargo: "cuando desmontaban el que tenían era cuando las latas,
la lata de abajo, el enlatado fuerte se rompe, entonces sí hay que quitarlo
todo".
Estas actividades se desarrollaban durante el estío: "se tapaban en el
verano, fin de verano que se sacudía, antes de empezar el invierno ya se
empezaba a tapar".
- ¿Por qué se techaba con colmo?
"Porque no había reales para comprare, por necesidad, no había otro
techo sino ése porque no se podía, después vino aquello, alguna de
cinc pero todo no, ¡no había dinero!" ( ... ).
(J.A. Casañas Oliva)
AGRADECIMIENTOS
Este artículo no hubiera sido posible sin la ayuda y colaboración de las
siguientes personas:
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- D. Francisco Méndez Morales.
- D. Francisco Cejas Pino (D. Ramiro).
- D. Domingo Pérez Morales.
- D. Nelson Rodríguez Padrón.
- D. Juan A. Casañas Oliva.
- D. Felipe Casañas Padrón Herederos y maestros de una vieja tradición .
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GLOSARIO
- ACODAR: Doblar en forma de codo.
- BOSTA: Argamasa resulante ele ligar excremento ele ganado vacui:io y ceni za
vegetal.
- CABALLETE: Arista o coronación ele un tejado.
- CÁRICO O CÁRISCO: Acebiño
- CARRERA: Conjunto o serie de cosas puestas en orden o hil era.
- CINCHA: Habilidad en el trabajo.
- COLMERO: Brazado de co lmo una vez Limpio o desprovi sto de grano u hoja-rasca.
- CUMBRERA: Parhilera. Entramado de ro llizos que forman la techumbre.
- EMPANAR: Echar la simiente en la tierra.
- ENCUMBRAR: Culminar la parte más a lta de un techo.
- ENGRAMPAR: Trabar.
- ENMALLET AR: Atrapar.
- LANCE: Cada una de las vertientes o aguas de un tec ho.
- LATAS: Vara de madera sin pulir, por lo común en rollo.
- MOLLO: Brazado de colmo sin lim piar.
- PARAPETO: Terraplén mac izo que se levanta para hacer una defensa.
- PAVEA: Cada una de las porciones de mies segada, dispuesta en montoncitos.
BIBLIOGRAFÍA
AA.VV. ( 1973): "La arquitectura popu lar en el Archipiélago Canario". En
Arquitectura popular espaFí.ola. Vol. 5º. Parte cuarta.
AA.VV. (1994): Diccionario de canarismos. Francisco Lemus Editor. La
Laguna.
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