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ARCH. SOC. CANAR. OFTAL., 2016; 27: 20-23 ARTÍCULO ORIGINAL
Queratitis estromal necrotizante
por virus herpes simple: A propósito
de un caso
Necrotizing stromal keratitis: a case report
ESPINOSA BARBERI G1, TANDÓN CÁRDENES L1, MEDINA RIVERO F2
RESUMEN
Caso clínico: Se presenta el caso clínico de una mujer de 74 años con baja agudeza visual (AV)
en el ojo derecho (OD), además de neovascularización corneal importante (tanto profunda
como superficial), quemosis conjuntival, secreciones blanquecinas y ulceración central con
infiltrado blanquecino de aspecto inflamatorio. Pese al tratamiento antibiótico su evolución
es muy desfavorable con riesgo importante de perforación ocular, por lo que se decide tomar
una muestra para realizar una reacción en cadena de la polimerasa (PCR) y cultivo de herpes
virus, siendo esta positiva y llegando al diagnóstico de queratitits estromal necrotizante.
Conclusión: La queratitis estromal necrotizante por virus herpes es una entidad poco frecuente
que se produce debido a reactivaciones recurrentes sobre el epitelio corneal hasta que llegan
a afectar el estroma. Se caracteriza por la presencia de infiltrados blanquecinos (que pueden
generar áreas de necrosis si evolucionan) acompañados de defectos epiteliales y neovas-cularización.
Es importante el diagnóstico precoz, el diagnóstico diferencial con un absce-so
corneal bacteriano a través de la historia clínica (entidad con la que frecuentemente se
confunde), así como la instauración de tratamiento tópico de manera inmediata para evitar
probables secuelas y complicaciones.
Palabras claves: Queratitis estromal, virus herpes simple, queratitis herpética.
SUMMARY
Case report: We present the clinical case of a 74-year-old woman with low visual acuity in
the right eye, in addition to an important corneal neovascularization (both deep and su-perficial),
conjunctival chemosis, whitish secretions and central ulceration with a whitish
infiltrated of inflammatory appearance. Despite the antibiotic treatment its evolution is very
unpromising as there is an important risk of ocular perforation, so a decision was made to
take a sample and to make a polymerase chain reaction and herpes virus culture, this being
positive, and arriving at a diagnosis of a necrotizing stromal keratitits.
Conclusions: The necrotizing stromal keratitis caused by herpes virus is a rare occurrence due
to recurrent reactivations on the corneal epithelium even affecting the stroma. It is charac-
Servicio de Oftalmología del Hospital Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín.
1 Licenciado en Medicina. Servicio de Oftalmología.
2 Doctor en Medicina. Jefe de Servicio de Oftalmología.
Correspondencia:
Glenda Espinosa Barberi
Calle Lucas Fernández Navarro, número 1, planta 4, piso ático
35007 Las Palmas de Gran Canaria, España
glenda_eb@hotmail.com
Queratitis estromal necrotizante por virus herpes simple: a propósito de un caso
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INTRODUCCIÓN
El virus herpes simple (VHS) es uno de
los virus adquiridos más frecuentes en los se-res
humanos (1). Al menos el 90% de la po-blación
adulta presenta anticuerpos positivos
para este (2). El VHS tipo 1 produce infeccio-nes
oculares con mayor frecuencia y su recu-rrencia
es una de las principales causas de ce-guera
en países industrializados (3), mientras
que las infecciones por el VHS tipo 2 suelen
ser menos frecuentes, pero más graves.
La queratitis estromal necrotizante se
produce, generalmente, en pacientes que han
sufrido afectación recurrente a nivel epitelial
por el VHS y en menor medida por una afec-tación
inicial. En ella se asocian una infec-ción
activa con la intensa respuesta inmune
tanto celular como humoral, que conducen a
la destrucción del estroma (4).
La activación de citoquinas proinflama-torias,
factores angiogénicos y colagenasas
originan un infiltrado inflamatorio a nivel del
estroma que puede establecerse localizado o
de manera difusa. Si estos infiltrados conflu-yen
se generarán amplias áreas de necrosis
que prosiguen hacia abscesos corneales. Este
cuadro suele acompañarse de neovasos que
invaden desde el limbo hasta confluir en la
zona de mayor proliferación antigénica (5,6).
Todos estos factores condicionan el pro-gresivo
reclutamiento de células y factores
inflamatorios que conducen a una mayor ex-tensión
del cuadro con la consecutiva recupe-ración
(dejando áreas de fibrosis cicatricial),
o en su peor pronóstico hacia la perforación
del globo.
CASO CLÍNICO
Mujer de 74 años de edad, con antece-dentes
personales de alergia a la penicilina,
paracetamol y sulpirida, asma, hipertensión
arterial y enfermedad cardiovascular esta-blecida.
Refiere como antecedentes oculares
cirugía de cataratas en el ojo izquierdo (OI),
OD ambliope, en exotropía y úlcera corneal
en OD hace 20 años.
Acude remitida por Urgencias debido a
dolor ocular, quemosis conjuntival y lagrimeo
de varios días de evolución. En la exploración
ocular se aprecia una AV de cuenta dedos (CD)
a 15 cm en OD y 0,6 en OI. La biomicrosco-pía
(BMC) evidencia pseudofaquia correcta
en el OI, mientras que en el OD se observa
leucoma corneal, quemosis conjuntival mo-derada,
úlcera corneal de localización central
con infiltrado de aspecto inflamatorio, no hi-popión,
vascularización profunda importante,
no tyndall y algunas secreciones blanquecinas
(figs. 1 y 2). Se inicia tratamiento tópico con
moxifloxacino, lubricantes oculares, ciclople-jía
y colocación de lente de contacto (LC).
A la semana de haberse instaurado el tra-tamiento
se produce empeoramiento del cua-dro
clínico, apareciendo además reacción en
cámara anterior, edema corneal intenso e hi-peremia
conjuntival importante (fig. 3); por
lo que se añaden colirios reforzados de van-comicina
y tobramicina, se retira la LC tera-péutica
y se procede a la recogida de mues-tras
para cultivo.
Debido al empeoramiento progresivo con
riesgo inminente de perforación, se decide la
retirada de tratamiento tópico, mantenimien-to
con lágrima artificial y se realiza OCT de
segmento anterior que muestra adelgaza-terized
by the presence of whitish infiltrated areas (which can turn necrotic if they evolve)
accompanied by epithelial defects and neovascularization. Early diagnosis is important, the
differential diagnosis with a bacterial corneal abscess based on the clinical history (entity
with which it is frequently confused) as well as the establishment of an immediate topical
treatment in order to avoid all probable sequels and complications.
Keywords: Stromal keratitis, herpes simplex virus, herpetic keratitis.
Fig. 1: BMC
inicial de la
paciente donde se
aprecia hiperemia
mixta, córnea
delustrada y
ulceración central
con infiltrado
blanquecino.
ESPINOSA BARBERI G, et al.
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miento corneal central importante con riesgo
de perforación (fig. 4).
A los 2 días de haber suspendido los coli-rios
antibióticos no hay empeoramiento clíni-co
por lo que se realiza una PCR y cultivo de
virus herpes, siendo el resultado de ambos po-sitivo,
por lo que se añaden colirios de moxi-floxacino,
dexametasona, ciclopléjico, doxi-ciclina
vía sistémica y valaciclovir 500 mg
c/12 horas. Después de una semana acude a
consultas donde se aprecia mejoría significa-tiva
del cuadro tanto en la clínica como en la
OCT de control (figs. 5 y 6), excepto de la AV
debido al antecedente previo de ambliopía.
Evoluciona hacia una córnea transparente,
sin tyndall y menor desepitelización (figs. 7 y
8). Continúa con el tratamiento pautado y se
añade colirio de suero autológo retirando los
lubricantes convencionales.
DISCUSIÓN
Las infecciones por VHS son frecuentes en
los seres humanos, el virus se suele adquirir
durante la infancia y/o la adolescencia, en un
primer momento pueden presentarse de mane-ra
asintomática o no. A nivel ocular se pueden
producir blefaritis, conjuntivitis y/o queratitis;
siendo esta última la más frecuente y represen-tativa.
De sus reactivaciones, la estructura que
con mayor frecuencia se afecta a nivel ocular es
la córnea y se genera tal respuesta inflamatoria
por la presencia de los antígenos virales que ac-tivan
principalmente a las células CD 4 +, pro-vocando
lesiones que afectan al estroma (5).
Las lesiones estromales se aprecian en el
30-40% de los pacientes afectos y de estas,
la más frecuente es la autoimune o no necro-tizante
cuya patogenia es debida a una reac-ción
de hipersensibilidad de tipo IV o celular
(3,5,6). En ella, la clínica es muy inespecífica
ya que se suele iniciar con fotofobia, hipere-mia
conjuntival, infiltrado blanquecino estro-mal
con epitelio intacto y a veces endotelitis.
La forma estromal necrotizante, como
ocurre en nuestro caso, se genera por acción
antigénica del virus «per se» que ocasionará
infiltrados blanquecinos, generalmente acom-pañados
de ulceraciones epiteliales (3,6).
Estas lesiones generan una respuesta infla-matoria
a nivel del estroma que favorece la
aparición de vasculitis limbares y neovascu-larizacion
corneal.
El diagnóstico del virus suele realizarse
en base a la clínica, pero para demostrar su
presencia de manera definitiva se requiere
su cultivo, que no suele realizarse frecuente-mente
debido a su complejidad. Otro método
más sencillo y que aporta abundante informa-ción
es la PCR, de hecho, actualmente y en
tiempo real es el mejor método para detectar
el genoma viral en los tejidos oculares (6,7).
El pilar terapéutico se apoyaría en los an-tivirales,
la cicloplejía para reducir el dolor y
posibles reacciones en cámara anterior e hi-
Fig. 2: Invasión
vascular de la
córnea tanto en
superficie como en
profundidad.
Fig. 3:
Empeoramiento
del cuadro pese al
tratamiento tópico
presentando
intensa hiperemia
mixta, edema
corneal,
progresión de
la ulceración
y aumento
del infiltrado
inflamatorio.
Fig. 4: OCT
(Lente segmento
anterior
Heidelberg
Spectralis) al
inicio del cuadro
donde se aprecia
adelgazamiento
del espesor
corneal (208
micras).
Fig. 5:
Mejoría clínica
considerable
tras una semana
de tratamiento
sistémico para
VHS y corticoides
tópicos, mínima
úlcera y
transparencia
corneal que
ya deja ver
con detalle las
estructuras.
Queratitis estromal necrotizante por virus herpes simple: a propósito de un caso
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dratación ocular. Se puede añadir un antibió-tico
tópico para cubrir posibles sobreinfeccio-nes
bacterianas (2). Como en el caso clínico
previamente descrito, las queratitis estromales
requieren además para su control de esteroi-des
tópicos (siendo de elección la dexameta-sona
en caso de afectaciones más profundas)
y, si se ha producido colagenólisis, se añadi-rán
por vía sistémica o tópica tetraciclinas o/y
metilprogesterona sistémica (8).
Debido a la gravedad del cuadro, las revi-siones
han de realizarse de manera periódica
con el fin de poder descartar posibles com-plicaciones
como son el aumento de la PIO,
cataratas, sinequias, entre otros.
Como conclusión, se puede decir que la
infección ocular herpética resulta ser una
entidad compleja debido a su difícil patoge-nia,
diversas formas de manifestación ocular,
creciente incidencia y dificultad a la hora de
plantear un protocolo terapéutico.
La ausencia de una correcta anamnesis
que no recoja el antecedente de ulceración
previa (hacía 20 años, aunque la paciente no
lo comentó hasta la tercera semana de trata-miento)
y el gran grado de hiperemia mixta
e inflamación ocular asociados además de la
presencia de una úlcera con «melting» corneal
hacen frecuente la confusión de esta entidad
con un absceso corneal bacteriano. El hallaz-go
de los neovasos, la ausencia de respuesta
al tratamiento antibiótico, la mejoría tras la
retirada de los mismos y la instauración de
los corticoides, además de la positividad de la
PCR herpética, fueron las claves diagnósticas
que permitieron sacar adelante el caso.
A pesar de la poca frecuencia con la que
sucede esta manifestación herpética, el hecho
de no diagnosticarla nos conduciría irreme-diablemente
a la perforación ocular y a una
probable «queratoplastia en caliente» con las
conocidas tasas de fracaso que ello conlleva.
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Fig. 6: OCT
(Spectralis-
Heidelberg) de
seguimiento, se
observa mejoría
significativa del
espesor corneal
(250 micras).
Fig. 7: BMC
actual con
presencia de
leucoma y
ausencia de úlcera
corneal.
Fig 8: OCT
(Zeiss) actual con
grosor corneal en
torno a la antigua
ulceración de 292
micras.