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ARCH. SOC. CANAR. OFTAL., 2011; 22: 34-38 ARTÍCULO ORIGINAL
Incidencia de la patología tumoral
orbitaria en nuestra área
Epidemiology of orbital tumors in our area
AFONSO RODRÍGUEZ A1, RODRÍGUEZ GIL R1, ACOSTA ACOSTA B1,
DELAGADO MIRANDA JL2
RESUMEN
Objetivo: Describir casuística de los tumores orbitarios que se han presentado en nuestra área
en el periodo comprendido entre enero 2008-diciembre 2010.
Material y Métodos: Revisión retrospectiva de 31 casos de pacientes diagnosticados en nues-tro
servicio durante el periodo comprendido entre enero 2008 y diciembre 2010 con el diag-nóstico
de tumoración orbitaria, excluyéndose aquellos que presentan patología orbitaria
relacionada con el tiroides, así como la patología infecciosa.
Resultados: Presentamos un total de 31 pacientes, 58% varones y 42% mujeres, no habiendo
grandes diferencias entre sexos. Los tumores más frecuente son los linfoproliferativos
representando 22,58% del total, seguido de los tumores vasculares, pseudotumor orbitario
y quiste dermoide, el 12,9 % respectivamente. A continuación por meningiomas de NO y
tumores de glándula lagrimal (6,45%) y un grupo variado de patología que representa 3,2%
por categoría (Meningioma fibroso, osteoma, schwanoma, dacrioadenitis y mucocele) con
una edad de presentación media de 39,65 años.
Conclusiones: Nuestros resultados son consecuentes con la literatura en algunos casos, espe-cialmente
en el grupo de edad infantil, donde el quiste dermoide representa la patología más
frecuente. Los procesos linfoproliferativos son en nuestro caso la patología mas frecuente,
siendo esto de gran importancia, ya que muchas veces es el oftalmólogo el primero en con-tactar
con el paciente que padece este tipo de patología.
Palabras clave: Tumor, órbita.
SUMMARY
Objective: To describe the casuistry of orbital tumors presented in our area in the period
January 2008-December 2010.
Servicio de Oftalmología. Hospital Universitario Nuestra Señora de Candelaria.
Licenciado en Medicina.
Doctor en Medicina.
Correspondencia:
Alberto Afonso Rodríguez
alberafonro@hotmail.com
Servicio de Oftalmología. Hospital Universitario Nuestra Señora de La Candelaria.
Carretera del Rosario N 145,
38010 Santa Cruz de Tenerife.
Incidencia de la patología tumoral orbitaria en nuestra área
INTRODUCCIÓN
La cavidad orbitaria es una estructura ana-tómica
que presenta una muy variable patolo-gía
debido a la gran cantidad de estructuras
anatómicas que la componen, y que derivan
de las tres hojas embrionarias. Pudiendo pre-sentar
patología en cualquier momento del
desarrollo, dando cuadros clínicos muy
diversos y en ocasiones difíciles de diferen-ciar.
Debemos tener en cuenta las estructuras
vecinas y su comunicación con la órbita, lo
que complica aún más la situación ya que
procesos en estas otras regiones pueden
extenderse a la órbita.
Es importante conocer la epidemiología de
la patología orbitaria, por sexo, grupos de
edad, localización, etc. Para un correcto diag-nóstico
y posterior manejo del paciente (1).
Por ello queremos presentar una casuística
de los tumores orbitarios que se han presen-tado
en nuestro servicio en el periodo enero
2008-diciembre 2010, efectuando una revi-sión
y comparación con la literatura.
MATERIAL Y MÉTODO
Hemos efectuado una revisión retrospecti-va
de 31 casos de pacientes diagnosticados en
nuestro servicio durante el periodo compren-dido
entre enero 2008 y diciembre 2010. Para
ello se ha efectuado una revisión sistemática
de las historias clínicas de 31 pacientes diag-nosticados
de tumoración orbitaria en nuestro
servicio. Se han incluido los pacientes que
han presentado una tumoración orbitaria a la
exploración física, así como aquellas eviden-ciadas
mediante diagnóstico por imagen o
por anatomía patológica.
Se han excluido todos los pacientes que
presentan patología orbitaria relacionada con
el tiroides, así como la patología infecciosa.
Se ha efectuado un análisis por grupos de
edad para hacerlos comparables con la litera-tura,
repartiéndolos en un grupo de menos de
20 años, otro entre los 20-60 años y por últi-mo
un grupo de mayores de 60 años y poste-riormente
se han clasificado por patologías.
RESULTADOS
Presentamos un total de 31 pacientes, 58%
varones y 42% mujeres, no habiendo grandes
diferencias entre sexos. El tumor más fre-cuente
es el linfoproliferativo representando
22,58% del total, seguido de los tumores vas-culares,
pseudotumor orbitario y quiste der-moide,
el 12,9% respectivamente. A conti-nuación
los meningiomas de NO y tumores de
glándula lagrimal (6,45%) y un grupo variado
Material and Methods: Retrospective review of 31 cases of patients diagnosed in our depart-ment
during the period between January 2008 and December 2010 with the diagnosis of
orbital tumor, excluding those with orbital diseases related to the thyroid and infectious
diseases.
Results:We present a total of 31 patients, 58% male and 42% female, no large differences bet-ween
gender were shown. Our most common tumor was lymphoproliferative diseases and
it represents 22.58% of the total, followed by vascular tumors, dermoid cyst and orbital
pseudotumor, 12.9%. ON Meningiomas and tumors of the lacrimal gland represent a 6.45%
and a diverse group of diseases which represent 3.2% by category (fibrous meningioma,
osteoma, schwannoma, dacryoadenitismucocele) with a mean age of presentation of 39.65
years old.
Conclusions: Our results are consistent with the literature in some cases, especially in the
infant age group, where the dermoid cyst is the most common case. Lymphoproliferative
processes are the most frequent pathology, this being of great importance, as it often hap-pens
that the ophtalmologist is the first practitioner who sees this kind of patients.
Key words: Tumor, orbit.
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de patología que representa 3,2% por catego-ría
(meningioma fibroso, osteoma, schwano-ma,
dacrioadenitis y mucocele)con una edad
de presentación media de 39,65 años.
En el grupo de menos de 20 años, el cual
representa el 26% del total de los pacientes,
encontramos un 62,5% de varones frente a un
37,5% de mujeres. Presentando una edad
media de 3,02 años. Encontramos que la
patología más frecuente en nuestra serie es el
quiste dermoide, presentándose en un 50% de
los casos, seguido por tumores vasculares y
quistes de glándula lagrimal siendo estos de
un 25% cada uno (tabla I).
Destacar que en este grupo de edad hemos
encontrado una afectación mayoritariamente
en varones.
Pasamos a analizar el grupo de adultos,
que serían aquellos mayores de 20 años, que
representan el 74% del total de pacientes. La
edad media de presentación en este grupo fue
de 49,13 años, siendo la patología predomi-nante
los síndromes linfoproliferativos.
Este grupo lo hemos subdivido en dos gru-pos:
– Edades entre 20-30 años.
– Edades por encima de 60 años.
En el grupo de 20-30 años, nos encontra-mos
que la patología más frecuente es el
pseudotumor orbitario, representando el
31,25 % de los casos, el segundo más fre-cuente
son las enfermedades linfoproliferati-vas
que ocupan 18,75% de los casos. El resto
de tumores son de diversa etiología y puede
observarse en la tabla de resultados (tabla II).
La edad media de presentación en este grupo
fue de 40,56 años.
Si desglosamos por sexo, en el grupo de
varones (62,5%) predomina el pseudotumor
orbitario como patología más frecuente
(40%) del total en este subgrupo, mientras
que en las mujeres (37,5%) presentan patolo-gía
muy diversa no destacándose ninguna
sobre otra.
Por último en el grupo de mayores de 60
años podemos destacar que la patología pre-dominante
en nuestra serie es la de procesos
linfoproliferativos (43% del total), siendo la
edad media de presentación de 68,71 años
(tabla III).
Desglosando por sexos, el grupo de varo-nes
(42,86%), presenta patología variada sin
destacarse ninguna sobre la otra, mientras
que el grupo de mujeres (57,14%), predomi-nan
las enfermedades linfoproliferativas,
encontrándose en el 50% de los casos.
DISCUSIÓN
Los tumores orbitarios pertenecen a un
grupo de patologías muy diverso, en los cua-les
el apoyo de las características de imagen,
así como la localización y la forma de presen-tación
nos van a ser de gran ayuda para el
diagnóstico.
En términos generales, la incidencia de
patología orbitaria es igual en ambos sexos
(1).
Clasificar la patología orbitaria es difícil y
complejo, siendo la clasificación histopatoló-gica
una de las más utilizadas. Actualmente
se organiza bajo diferentes conceptos clinico-
AFONSO RODRÍGUEZ A, et al.
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Tabla I. Tumores orbitarios en menores de 20 años
Patología Porcentaje
Quistes dermoides (4/8) 50%
Vasculares (2/8) 25%
– Angiomas palpebrales (1/2) 50%
– Hemangioma cavernoso (1/2) 50%
Quistes de la Glándula Lagrimal (2/8) 25%
Tabla II. Tumores orbitarios entre 20 y 60 años
Patología Porcentaje
Pseudotumor (5/16) 31,25%
Linfoproliferativos (3/16) 18,75%
Hemangiomas cavernosos (2/16) 12,5%
Meningiomas del NO (2/16) 12,5%
Otros
– Meningiomafibroblastico (1/16) 6,25%
– Osteoma (1/16) 6,25%
– Mucocele (1/16) 6,25%
– Tumor Glándula Lagrimal (1/16) 6,25%
Tabla III. Tumores orbitarios en mayores de 60 años
Patología Porcentaje
Linfoproliferativos (1/16) 43%
Hemangiomas cavernosos (1/16) 14,25%
Schwanoma de células pigmentadas (1/16) 14,25%
Mucocele (1/16) 14,25%
Dacrioadenitis (1/16) 14,25%
patológicos, clasificándose de la siguiente
manera en 5 grandes categorías:
– Patología infecciosa.
– Patología inflamatoria.
– Patología vascular.
– Patología quística.
– Patología tumoral.
A su vez es importante desglosar la patolo-gía
orbitaria en dos etapas según la edad de
presentación, de esta manera se puede facili-tar
el estudio epidemiológico y podemos
compararlos con las diversas series existentes
(1).
La incidencia de los tumores es muy varia-ble
y depende de la fuente de material revisa-do,
ya que algunos estudios sólo incluyen
casos a partir de estudios anatomopatológi-cos.
Otras revisiones sólo incluyen pacientes
jóvenes, o de ciertas áreas geográficas, los
cuales no representan la globalidad (2).
Asimismo debemos tener en consideración
el área específica de trabajo del autor, ya que
normalmente se incluyen más casos de su
especialidad en detrimento de otros. Por
ejemplo, se espera que los casos derivados de
un servicio neuroquirúrgico incluya un
número mayor de tumores neurológicos,
como gliomas o meningiomas (2).
Con respecto a nuestros resultados, en la
edad infantil, la mayoría de series, Shields JA
et al (3) (40%), Ohtsuka K et al (4) (26%), De
Concilis (5) (20,6%), coinciden con nuestra
casuística en que el tumor más frecuente en la
infancia es el quiste dermoide, si bien no
todas las series lo afirman. Nuestro segundo
tumor en frecuencia en edad infantil es el
quiste de glándula lagrimal, no coincidiendo
con la literatura, ya que en la mayoría de
series se describe a los angiomas como la
segunda en frecuencia, si quitamos alteracio-nes
infecciosas o patología tiroidea, siendo
éste el caso de Rootman et al. Para Pérez
Moreiras et al. los angiomas son la patología
más frecuente (1).
Con respecto a la edad comprendida entre
los 20 y 60 años, la literaura es muy variable,
De Concilis et al.(5) propone el pseudotumor,
tras la orbitopatia tiroidea y traumatismos,
como la patología más frecuente (12,6%),
coincidiendo con nuestra serie, no siendo
igual para otros autores, como Pérez Morei-ras
et al. El cual incluye en su serie las neo-plasias
de la región paranasal como la patolo-gía
más frecuente (15,8%).
En el grupo de mayores de 60 años nos
encontramos la patología linfoproliferativa,
como aquella más frecuente, no coincidiendo
con la literatura en la mayoría de las series
(1,2,4 y 5), OhtsukaK et al. en su serie de 224
tumores orbitarios encuentran esta patología
como el tumor principal en mayores de 40
años, asociado a las características raciales
(4) siendo algo concordantes con la nuestra.
Para el grupo de Pérez Moreiras et al, el cán-cer
de región paranasal es el más frecuente
(23,4%), mientras que para De Concilis (5)
et al (21%), son las neoplasias secundarias,
así como para la serie de Rootman et al
(23,1%) (6).
Sin embargo debemos señalar que es en
este grupo de edad donde se presenta esta
patología con mayor incidencia (7).
CONCLUSIÓN
Como podemos observar la patología orbi-taria
se compone de una muy variable patolo-gía,
lo que hace complicada su clasificación.
Nuestros resultados son consecuentes con
la literatura en algunos casos, especialmente
en el grupo de edad infantil, donde el quiste
dermoide representa la patología más frecuen-te
para la mayoría de las series [Shields JA et
al (3), Ohtsuka K et al (4), De Concilis (5)].
En referencia al resto de los resultados
debemos comentar la gran heterogenicidad
de las diferentes series publicadas, sesgadas
por situación geográfica, especialidad de los
autores, etc. (2) así como nuestro bajo tama-ño
muestral, que tampoco es comparable con
las grandes series, aunque nos puede orientar
a como se distribuye esta patología a nivel
local.
Para acabar comentar que los procesos lin-foproliferativos
son en nuestro caso la patolo-gía
mas frecuente, siendo esto muy importan-te
ya que muchas veces es el oftalmólogo el
primero en contactar con el paciente que
padece este tipo de patología. Su detección
precoz es muy importante, ya que se trata de
una enfermedad potencialmente curable (7).
Incidencia de la patología tumoral orbitaria en nuestra área
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