Tomo IV. Aflo V.V
HEMEROTECA P. MUNICIPAL
Santi Cfu; <e Tenarife Enero-Marso 1930*
REVISTA DE HISTORIA
Directoí-Propiotarlo:
UR. tlOSÉ PERAZA DE AYAbA R. VAbbABRlGA
Individuo correspondiente de la Real Academia de la Historia
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¡ej |®| y@j LA LAQUNA DE TENERIFE (iSLAS CANARiXS) 1^ ^ ^
TÍUeSJRñ OBRA
-CoSa»-
'iguiendo el desinteresado y patriótico fin que nos hemos Impuesto, damos
hoy principio a un nuevo tomo de REVISTA DE HISTORIA.
El firme propósito de continuar el camino trazado nos hace olvidar los
improbos trabajos que la REVISTA representa y aun los sacrificios económicos
que lógicamente llevan consigo las obras científicas cuando son editadas
en reducido ambiente, por eso, con el mismo romántico entusiasmo que fui
dada a luz en 1924 entra ahora en el séptimo año de su publicación, siemprt
ajena a toda tendencia o movimiento político, por mas que sean los presentes
instantes de profunda renovación en los ideales sociales y se agite desorientado
el secular y vigoroso espirita nacional.
Ella ha lucliado con la fría indiferencia de nuestras paisanos, defendiendo
el cultivo de las ciencias históricas aun en sus ramas mas injustamente olvidadas:
la Genealogía, la Biografía y la Heráldica y ha procurado en sut
modestas fuerzas poner de relieve el inmenso valor de las monografías, tar
necesarias en nuestra amada región para ir reconstruyendo su auténtico pasado.
Bien sabemos que los estudios heráldico-geneatógicos han sido mucha:
veces mirados con recelo por algunos demócratas y que el tema desarrolladt
en las monografías suele ser con frecuencia árido y de lectura fatigosa, perc
la Historia no se escribe para gente frivola, ni para halagar una clase o partido
político.
Tampoco se nos oculta que la REVISTA debía de consagrar mas espacie
a tanta materia inédita de nuestro ayer, pero ¿donde se halla la protección di
los organismos oficiales o esa suscripción abundante que le permitan ampliai
su contenido? No depende pues, solo de sus inspiradores, corresponde también
al País contribuir a su difusión y engrandecimiento. Por nuestra partt
cábenos la satisfacción de que si los trabajos publicados no son tantos comí
nuestro ardor patriótico deseara, ellos son absolutamente inéditos y muchO;
llevan al pié prestigiosas firmas y eso ^debe bastarnos para recomendar núes
tra obra a todo buen canario de espíritu amplio y desapasionado.
REVISTA DE HISTORIA
En el tomo que acabamog de cerrar habrán visto nuestros lectores la asiduidad
con que han colaborado los cronistas oficiales Gutiérrez López y Fernández
Pérez, el académico Ossuna, el profesor Bonnet, el doctor Tobares de
Nava y el catedrático Serra, los cuales han prometido para el presente año
nuevos y valiosos trabajos.
Nuestro querido compañero Darlas y Padrón a quien no hemos podido
disuadir de rvmnclar el cargo de Director de la REVISTA, que tan dignamente
venía desempeñando, seguirá como siempre enviando sus numerosas y
documentadas monografías.
El Joven escritor Peraza de Ayala, verdadera alma de nuestra obra y su
actual Director, continuará asimismo remitiendo su extensa labor histórlco-re-gtonal,
a cuyo orden de estudios se halla consagrado con singular vocación
desde sus primeros pasos en el periodismo y cuando aun colaboraba bajo el
pseudónimo de Barón de Ayala.
En fin, la tarea realizada no hemos de encarecerla mas, ya que es bien
notoria pero si queremos advertir que si a pesar de nuestra constante diligencia
y especial escrupulosidad en la busca de datos, ha podido deslizarse, como
en toda obra humana, algún error, justo es hacer constar en favor nuestro,
que tal vez ninguno sea de sucesos antiguos, ya que para el estudio de estos,
turnea nos llevamos por referencias, sino acudiendo directamente a los documentos
o Compulsando las primitivas fuentes.
Por último, no podemos terminar estas líneas sin dar público testimonio
de nuestra gratitud a los cultos colaboradores y distinguidos abonados de
REVISTA DE HISTORIA, sin cuya generosa ayuda no hubiera sido posible
proseguir la ardua empresa y de una manera muy especial a los eminentes
escritores nacionales y sabios extranjeros que con sus cartas de féllctta-tíón
y encomiásticos trabajos nos alientan a no desmayar en el noble Ideal
Í ue nos guía, nacido del purísimo amor que profesamos a la Historia y ala
'atrla.
LA REDACCIÓN.