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Vol. 5 Nº 1 págs. 1-16. 2007 www.pasosonline.org © PASOS. Revista de Turismo y Patrimonio Cultural. ISSN 1695-7121 Deseables y posibles: participación comunitaria, patrimonio histórico-cultural, calidad ambiental y desarrollo turístico sostenible. San Jerónimo de Moravia, Costa Rica. Juan A. Aguirre † Center for Sustainable Development (Costa Rica) Resumen: Combinar en forma sostenible el patrimonio histórico cultural, el desarrollo turístico y la calidad am-biental es sin duda alguna el reto que enfrentan muchas comunidades latinoamericanas que en años recientes han hecho toda clase de esfuerzos por atraer turistas. El estudio aquí reportado analizó las condiciones socio-económicas de tres comunidades vecinas al Parque Nacional Braulio Carrillo (PNBC), en Costa Rica, identificó los problemas ambientales de los residentes de las mismas que se podrían agravar por causa del desarrollo turístico y determinó cómo y bajo qué condiciones los habitantes de la zona querían que se realizara el desarrollo turístico de las comuni-dades. Se entrevistaron 123 de un total de un total de 155 casas en las tres comunidades, y se utilizó una combina-ción de componentes principales y análisis factorial para analizar los datos. Los resultados indican que los vecinos entrevistados desean que el desarrollo turístico sea hecho sosteniblemente, y que además, se planifique, se establez-can requisitos claros, que la comunidad sea periódicamente informada, que sus lideres comunales participen activa-mente en el proceso, se establezcan programas para ayudar al desarrollo de micro-empresas eco-turísticas, y que se les brinde asistencia técnica y capacite en el desarrollo de proyectos eco-turísticos. Los problemas eventuales aso-ciados a la calidad ambiental que habría que prestarles atención preferente son: ruido y tráfico excesivo, manejo de aguas negras y deforestación. El desarrollo turístico sostenible relacionado con el primer componente implicaría que este es un requisito básico de la calidad ambiental, la conservación y el uso sostenible del patrimonio histórico. Palabras clave: Patrimonio histórico cultural; Desarrollo turístico sostenible; Calidad ambiental; Participación; Componentes principales. Abstract: The sustainable combination, of the cultural-historic patrimony, sustainable tourist development and the environmental quality is without any doubt the challenge that are facing many Latin-American communities that in recent years have uses these types of efforts, for attracting tourist to their communities. The study carried analyze the socio economic conditions of three communities in Costa Rica, identify the environmental problems of the residents that would be aggravate by the development tourism and established the conditions that the inhabitants of the zone want tourist development to meet. A total of 123 interviews of a total of 155 houses in three neighboring communi-ties were conducted. A combination of principal components and factor analysis was utilized to analyze the data. The results indicate that the neighbors desire that the tourist development be sustainable, be properly planned, clear requirements be established, the communities be periodically informed, the communal leaders participated actively in it, programs be established to help communities members in businesses development, and that they be offered technical and financial aid for eco-tourism projects development The problems associated to environmental quality identify as crucial were: excessive noise and traffic, deforestation. And the improvement of the sewage capabilities of the communities The association of the concept of tourism development to the first principle component could mean that, sustainable tourism development is a pre-requisite of environmental quality and sustainable conservation and use of the cultural-historical patrimony of the area. Keywords: Cultural-historic patrimony; Ssustainable tourism development; Environmental quality; Participation; Principal components. † • Juan A Aguirre G.Ph.D. es economista ambiental y de la recreación, The School for Field Studies. Center for Sustainable Development. P.O.Box 150-4013, Atenas, Alajuela. Costa Rica. E mail: jaguirre@fieldstudies.org o jaguirre@racsa.co.cr. 2 Participación comunitaria, patrimonio histórico-cultural ... PASOS. Revista de Turismo y Patrimonio Cultural, 5(1). 2007 ISSN 1695-7121 Introducción. La posible reapertura de la puerta al Parque Nacional Braulio Carrillo del Bajo de la Hondura, situada en la comunidad de San Jerónimo de Moravia, es un ejemplo de los esfuerzos que hacen muchas comunida-des latinoamericanas, por atraer turistas como una forma de solventar la crisis eco-nómica, desempleo y bajos ingresos de sus moradores. Lo importante de la reapertura, no es la reapertura per-se, sino lo que la reapertura implica para que el desarrollo turístico del área se haga en una forma sostenible. Ello significaría encontrar un balance entre el desarrollo turístico, la sos-tenibilidad ambiental y el mantenimiento de la actual calidad ambiental que los “ve-cinos” de la zona disfrutan hoy, dentro de un “respeto” y aprecio real por el patrimo-nio histórico que el camino representa en el patrimonio histórico de la nación costarri-cense. La puerta, cerrada desde hace más de quince años, está sobre un camino que aún hoy después de casi doscientos años, man-tiene su empedrado original y ha sido de-clarado patrimonio histórico local, ya que por él salieron las primeras exportaciones de café hacia Europa, durante el siglo XIX y en el área sufrió “exilio”, por sus ideas libe-rales, el primer obispo de Costa Rica, Mon-señor Augusto Thiel. En otras palabras la combinación sostenible del patrimonio his-tórico cultural, la accesibilidad de los habi-tantes de la ciudad capital a bellísimos parajes de bosque tropical lluvioso y bosque tropical nublado y el desarrollo urbano y turístico de una zona rural, a menos de cuarenta minutos del centro de la ciudad capital de Costa Rica, San José, es el tema central. El problema, como lo señalaba Ascanio, es que el turismo siempre ha sido un fenó-meno social relacionado con la cultura y que muy a menudo contribuye a la rees-tructuración de esta (Ascanio, 2003). Don-de, el uso del material cultural simbólico requiere participación, respeto y estudio de la historia social de la comunidad (Barreto, 2003) como sería en nuestro caso el uso del camino y la puerta para lograr el desarrollo sostenible del turismo en la zona. Por otra parte, si la población local, los supuestos depositarios del patrimonio cul-tural, no viven el patrimonio cultural como algo propio y se hacen necesarias campañas promociónales del mismo, el patrimonio cultural será apropiado por la empresa privada y vendido como parte de los atrac-tivos turísticos de un destino. Es muy claro que el patrimonio cultural será más fácil de integrar a la oferta turística cuanto más separado esté de la población local (Santa-na, 2003). La historia de la región centroa-mericana es rica en casos donde, la lejanía local del patrimonio histórico y natural, no sólo ha producido la “venta indiscriminada de la cultura” sino lo que es peor la “extran-jerización” de la comunidad. En Costa Rica existen múltiples ejemplos de esto: Playa Jaco, Quepos-Manuel Antonio, La Fortuna de San Carlos, Monteverde-Santa Elena son algunos de los lugares, donde la “ex-tranjerización” de los patrimonios natura-les y culturales ha sido tal que, los “locales” cuesta que lleguen a esos lugares ya que no solo no los pueden pagar, sino que además dicen sentirse extranjeros en su propio país (Aguirre, 2006). No hay duda que cuando el patrimonio cultural-histórico, se une al desarrollo tu-rístico, el turismo puede hacer una contri-bución importante al desarrollo económico de los sitios de interés, el problema parece estar en las limitaciones reales que las co-munidades tienen para poder hacerse cargo del proceso, mantenerlo, gerenciarlo, y además que este se adapte al mercado, desarrolle los espacios lúdicos atractivos y en especial que todo lo anterior se logre dentro de un contexto de sostenibilidad ambiental y turística (Ascanio, 2006). Arrieta en un trabajo reciente en museos comunales en el país vasco, identifica cua-tro restricciones para que los museos-patrimonio- cultural de un sitio sean usados eficazmente como atractivo turístico, seña-lando que, la falta de recursos locales para asumir la responsabilidad de su desarrollo y posterior mantenimiento, la falta de im-plicación de los vecinos desde el inicio del proceso, la falta de un colectivo social local que se haga cargo del proceso y finalmente la “romanización” de la realidad rural (Arrieta, 2003) son las dificultades reales de la incorporación de esta clase de patri-monio a la oferta turística. El problema se agrava muchas veces, debido a que a causa Juan A Aguirre 3 PASOS. Revista de Turismo y Patrimonio Cultural, 5(1). 2007 ISSN 1695-7121 de la creciente demanda turística de su-puestas autenticidades, el patrimonio cul-tural, que sé esta ofertando, se presenta en no pocos casos como un pasado rural ideali-zado (Fernández de Paz, 2006), peligro muy real en nuestro caso. Por otra parte habría que preguntarse si vale la pena, el esfuerzo para aprovechar el patrimonio cultural de un sitio, para des-arrollar el turismo sostenible en un área cualquiera. Estudios recientes en Cuba, donde el turismo de sol y playa por décadas ha sido “el rey” muestran que la oferta de actividades culturales rurales tales como: visitas a lugares históricos, ferias, exposi-ciones y mercados conformaron el primer componente principal de un estudio sobre turistas internacionales, resultado que pa-rece indicar que si vale la pena, el esfuerzo (Camargo et al, 2005). Lo que no debe olvidarse es que el turis-ta, que busca el patrimonio cultural, su interés radica en ver lo que ellos han perdi-do, y descubrir lo que son o han sido las comunidades y su patrimonio, hoy conver-tidas en producto turístico. El patrimonio cultural es una utilización de la historia, un rescate de elementos del pasado, desde el presente y que tiene que ser entendido co-mo el conjunto de todos los elementos natu-rales y culturales tangibles o intangibles (materiales o inmateriales) que son here-dados o creados recientemente. Además esta creación hoy del pasado hay que hacer-la con calidad e información, donde la cali-dad de la información y de los servicios de interpretación son esenciales a la genera-ción de un valor agregado económico que retribuya el conocimiento local del patri-monio histórico, con el valor de mercado de un servicio personal “bien prestado”, donde el propósito final de los visitantes es repe-timos, conocer y comprender el tipo de pa-trimonio que sé este mostrando. Cuando esto no existe, se vuelve a la “foto” (Martí-nez de la Rosa, 2003; Castro de León, 2005) y se pierde la oportunidad de mercadear la cultura como valor agregado económico, que es donde usualmente están las mayores retribuciones económicas para la comuni-dad local. El desarrollo turístico sostenible por otra parte, se convierte en las actuales cir-cunstancias del desarrollo turístico que vive Costa Rica, en el tema de fondo, donde la pregunta clave es: ¿Puede una comunidad rural, pequeña, de escasos recursos y en la periferia rural de la capital del país, des-arrollar una zona turísticamente atractiva, sin ser arrollada, económica, social, cultu-ral y urbanísticamente por los desarrolla-dores urbanos? Hay que recordar que el desarrollo turístico sostenible apunta a minimizar los daños ambientales y cultura-les, optimizar la satisfacción del visitante y maximizar el desarrollo económico a largo plazo de la región en cuestión. Es por tanto una forma de obtener un balance entre el potencial de crecimiento del turismo y la necesidad de conservar el medio ambiente. (Krippendorf et al., 1988; Hawkes & Wi-lliams, 1993; Bramwell & Lane, 1993). Esto hace al concepto de desarrollo turístico sos-tenible de índole multi-propósito, que vaya mas allá de la conservación per-se e incluya al menos los siguientes elementos: a) soste-nimiento del carácter de la cultura y las comunidades, b) sostenimiento del paisaje y los “hábitat”, c) la promoción de exitosas y satisfactorias experiencias turísticas, y d) que sea capaz de desarrollar una visión, conocimiento y liderazgo entre quienes to-man decisiones sobre el tema, del peligro de la dependencia del turismo y motivarlos a buscar el balance entre las actividades pro-ductivas y el turismo para lograr un desa-rrollo local balanceado y estable en el largo plazo (Lane, 2005). El problema es que en la actualidad, el desarrollo turístico latino-americano y el costarricense en particular, están siendo cuestionados, ya que pareciera que a pesar de pregonar ambos la sostenibilidad, se estarían moviendo en dirección opuesta. En América Latina la crítica más realista ha sido la de Mader, quien señala que bajo el lema de proyectos eco-turísticos se merca-dea casi todo, desde desarrollo comunitario hasta “jet ski”, pero que, cuando se insiste en proyectos que cumplan con altos están-dares ambientales, los costos de estos pro-yectos se elevan en forma importante, lo cual ubica algunas actividades turísticas sostenibles en la categoría de “turismo de lujo”. Por otra parte, cuando al turista que puede pagar se le orienta hacia los proyec-tos comunitarios, un segundo conflicto aflo-ra entre lo que se proporciona, lo que se debe pagar y lo que se puede pagar por 4 Participación comunitaria, patrimonio histórico-cultural ... PASOS. Revista de Turismo y Patrimonio Cultural, 5(1). 2007 ISSN 1695-7121 aquellos que se interesan en el turismo sostenible, conflicto que hace evidente lo que se recibe y lo que se espera. Donde sin el apoyo y los subsidios gubernamentales, aquellos que prestarían los servicios perso-nales en la forma más idónea y que podrían beneficiarse más de los dólares que los tu-ristas traen, brillarían por su ausencia (Mader, 2002). La contradicción es sutil e irónica: la ausencia de los actores locales traicionaría la esencia misma del turismo sostenible, la participación local. ¿Qué sucede en Costa Rica?, muchas son las evidencias y las críticas no escritas y escritas que los académicos, locales y ex-tranjeros, han hecho y hacen en relación a la poca participación de las comunidades en los llamados “emprendimientos eco-turísticos locales” y en el desarrollo turísti-co local. Stem et al., reportan algunos ele-mentos interesantes en lo que respecta al impacto del ecoturismo y la conservación, vista esta como la reducción de la defores-tación, y la caza ilegal, donde la percepción comunitaria registrada fue de que las me-didas legales y su aplicación tienen más impacto que cualquier otra cosa para lograr la conservación de la biodiversidad (Stem et al, 2002). Por otra parte, las evidencias recogidas han mostrado, el poco interés por la inver-sión en medidas conservacionista de parte de quienes invierten en los llamados pro-yectos eco-turísticos, donde la escala del emprendimiento, parece tener una influen-cia más importante en los beneficios am-bientales y económicos positivos y negati-vos de estas inversiones, lo cual plantea dos ideas centrales. Primero, el ecoturismo como única estrategia de desarrollo hará más vulnerable a la comunidad y segundo, si el desarrollo eco-turístico no es parte de una estrategia “mayor” en el largo plazo, será poco el impacto que tendrá este en el desarrollo del área (Stem et al, 2002). En Monteverde, el icono nacional del tu-rismo sostenible privado, dos estudios re-cientes señalan una larga lista de impactos negativos y la poca participación de los costarricenses en los “macro” beneficios del turismo (Aguirre, 2006; Duha, 2004). En Guayabo, parque nacional y sitio arqueoló-gico más importante del país, la queja de los habitantes locales por la marginación fue evidente, en las comunidades vecinas a este de Santa Cruz de Turrialba y Guayabo (Aguirre, 2004). En Cahuita, una comunidad de la zo-na atlántica del país, donde supuesta-mente existe y se publicita internacio-nalmente el programa de co-manejo del Parque Nacional Cahuita, los conflictos internos de la comunidad y entre la co-munidad y las autoridades administrati-vas del parque, no sólo fueron evidentes sino que afloraron, tanto en Cahuita centro como en los barrios de la periferia del pueblo, conflictos que se centraban en la participación de unos pocos, rela-cionados más que nada a las fuerzas po-líticas del momento dejando al resto de la población y sus grupos comunales, fuera de toda participación y posibilida-des (Aguirre, 2003). Lo mismo ocurrió en muchas otras áreas del país. En Quepos -Parque Nacio-nal Manuel Antonio el problema de la mar-ginación, es más complicado debido a los conflictos internos existentes entre los dife-rentes actores del desarrollo turístico local, por el deseo de todos de obtener algún be-neficio económico del parque nacional (Aguirre, 2000; Heiterkamp et al, 2001). En Gandoca-Manzanillo, los estudios muestran un conflicto entre el ecoturismo y sus prin-cipios y las políticas de desarrollo local, que buscan casi solamente beneficios económi-cos como meta principal (Gray, 2003). En la Playa de Ostional, se mostró claramente que sin el apoyo planificado y dirigido del gobierno, las oportunidades de los residen-tes locales son pocas, en relación con su posibilidad de participación en el desarrollo turístico del área (Campbell, 1999). En Tortuguero, se mostró que no existía una estrategia sistemática de parte de las auto-ridades del Sistema Nacional de Áreas de Conservación (SINAC) para promover el desarrollo sostenible del área y que la ma-yoría de los esfuerzos estaban en manos del sector empresarial turístico privado y algu-nas ONG, y que los residentes no asociaban en sus mentes el refugio de vida silvestre con los beneficios económicos que se deri-vaban de la presencia de los visitantes al lugar (Place, 1991). En Isla Venado, se en-contró que los mayores impactos al ecosis-tema provenían de los cambios en los pa-trones de consumo de los lugareños debido y potenciados estos por el efecto demostra- Juan A Aguirre 5 PASOS. Revista de Turismo y Patrimonio Cultural, 5(1). 2007 ISSN 1695-7121 tivo de los turistas (Beeker, 2000). Finalmente es importante entender que cualquier intento de apertura de una zona al desarrollo turístico sostenible, se hará mejor en la medida que se cumplan algunos requisitos previos que se han identificados como esenciales a lo largo de los años y que han sido resumidos en los trabajos de la Agencia Alemana de Cooperación (GTZ) entre los cuales se citan cinco: (a) Análisis de la situación, (b) diseñar una estrategia para el desarrollo turístico, (c) determinar roles y responsabilidades, (d) involucrar a la comunidad, y (e) garantizar la sostenibi-lidad diseñando e implementado indicado-res periódicos de la sostenibilidad del pro-ceso de desarrollo turístico que se está lle-vando ha cabo (Steck, 1999). Además de por Lane el cual hace más de una década seña-laba, como primer paso para lograr el desa-rrollo turístico de un sitio que era necesario hacer un análisis de las necesidades socia-les, económicas y ecológicas del sitio. Se-gundo, desarrollar una amplia consulta entre todos los grupos involucrados. Terce-ro, que era básico la transparencia en las acciones y, cuarto, que el proceso de desa-rrollo de la estrategia de desarrollo turísti-co debería ser un proceso continuo (Lane, 1994). Es importante resaltar que la realidad que se enfrentó al inicio del estudio tuvo características que combinaban, y combi-nan al día de hoy, varios elementos positi-vos para lograr un eventual desarrollo tu-rístico sostenible como producto de la re-apertura de la puerta en las tres comuni-dades involucradas entre las que se desta-can: (a) la municipalidad de Moravia acaba de aprobar el Plan Regulador de Uso de la Tierra del Cantón, (b) el alcalde y algunos ediles tienen interés en la apertura de la puerta, por lo que ello pueda significar en el desarrollo económico del este de la ciudad capital, (c) las dudas sobre la forma que otras zona situadas al oeste de la capital que se han urbanizado muchas veces, en contra de las medidas mas elementales de desarrollo urbanístico, (d) la existencia de un préstamo internacional del Banco Inter-americano de Desarrollo (BID), que facilita-ra la mejora y desarrollo de la infraestruc-tura en muchos parques nacionales del país, y (e) la entrega al Sistema Nacional de Áreas de Conservación del país, del Plan de Manejo del Parque Braulio Carrillo, en donde el camino y la reapertura de la puer-ta son una parte importante, y que además incluye las normas y estrategias de desa-rrollo turístico del parque y sus sitios. Lo antes discutido, ayudo a focalizar y dar un propósito útil a los esfuerzos de in-vestigación que se preveían convirtiendo al estudio en un mecanismo que daría a los que toman decisiones sobre el tema un me-jor entendimiento sobre lo que piensan los vecinos que serán impactados directamente por las acciones de reapertura, las preocu-paciones que la apertura les generaba, co-mo querían que la reapertura se llevase ha cabo y la clase de desarrollo turístico que querían para la zona, ya que la reapertura de la puerta y el desarrollo urbano subsi-guiente de la zona es hoy casi inminente y si no se planifica, se dirige e involucra a los vecinos de las tres comunidades directa-mente afectadas, muchos de los problemas experimentados en otros lugares del país, es casi seguro que se repetirán. En razón de lo anterior, los objetivos del estudio que se plantearon fueron cuatro: (a) hacer un análisis de la situación socio-económica del área, (b) identificar los pro-blemas comunales que los vecinos tienen hoy y que se podrían agravar debido a la apertura de la puerta, (c) determinar cómo y bajo qué condiciones los habitantes de la zona querían que se realice la apertura de la puerta y el desarrollo turístico del área y (d) la clase de intervención que esperaban de las autoridades municipales, en apoyo de ellos. Además, sobre la base de comentarios hechos al autor en una reunión prelimi-nar con los vecinos para discutir el tema, la hipótesis central que guió el estudio fue: los vecinos de las comunidades que-rrían que se abriera la puerta de nuevo, pero que esta reapertura se hiciera en una forma ordenada, participativa y pla-nificada, donde el desarrollo turístico fuese guiado y no dejado libremente a la iniciativa privada. Metodología de la Investigación Ubicación de la Zona de Estudio. El Parque Nacional Braulio Carrillo (PNBC) con 45 mil hectáreas, ubicadas una parte en la meseta central de Costa Rica y 6 Participación comunitaria, patrimonio histórico-cultural ... PASOS. Revista de Turismo y Patrimonio Cultural, 5(1). 2007 ISSN 1695-7121 la otra en el pie de monte de esta, es uno de los parques nacionales más grandes del país. EL PNBC protege gran parte de las cuencas y micro cuencas que surten de agua a la meseta central del país, área que alberga sobre el 65% de la población nacio-nal. En la actualidad, el PNBC posee tres entradas de acceso habilitadas y una cuarta que fue cerrada hace poco más o menos una década, ubicada en el Bajo de la Hondura sobre el antiguo camino al puerto fluvial de Matina, entrada que si se reabre finalmen-te, estaría ubicada a escasos 30 minutos del parque central de la ciudad de Moravia, y a 45 del parque central de la capital San Jo-sé, condición que convertiría a esta entra-da, en la de mayor potencial eco-turístico del país. Es importante entender además que los residentes de la capital del país, buscan desde hace tiempo un área verde donde pasear y recrearse y esta zona por su cercanía y acceso sería ideal para este pro-pósito. Etapas Metodológicas y Analíticas. Las etapas del estudio y los métodos apli-cados fueron las siguientes: 1.-Explicar a la comunidad de que se trata-ba el estudio y conseguir su colaboración plena, lo cual permitió que de las 155 casas ubicadas en los tres pueblos de acuerdo al último censo de población del año 2000, entrevistar a personas selec-cionadas aleatoriamente en 123 de es-tas. 2.- Diseñar el cuestionario con un total de 67 ítem valorados, repartidos en las si-guientes secciones: a) datos demográfi-cos, y opiniones sobre: b) el estado de las relaciones entre las comunidades y la administración del parque, c) sobre la eventual apertura de la puerta, d) im-portancia de los diferentes recursos na-turales del área, e) identificación de los problemas presentes y futuros del área si sé reabría la puerta y se daba el desa-rrollo turístico del área, f) condiciones de participación de ciudadana y g) grado de conocimiento sobre el plan regulador del uso de la tierra de la municipalidad. La versión inicial de la encuesta fue revisa-da y discutida con las autoridades muni-cipales y una pre-prueba de la boleta con diez vecinos permitió, elaborar una en-cuesta más corta y relevante y sobretodo que cubriese para los involucrados, todos los temas de interés. 3. - Establecer las dos variables dependien-tes del estudio donde: a) para el análisis de la idea sobre el tipo de desarrollo tu-rístico que se deseaba se incluyo la si-guiente pregunta: ¿Que el turismo que se promueva sea sostenible?, dándose 5 opciones i.e, 1) no estoy de acuerdo y 5) es una excelente idea y b) para manejar la idea de calidad ambiental se incluyo la siguiente pregunta: ¿Cómo califica us-ted la calidad ambiental del área?, dán-dose 5 opciones, 1) pobre y 5) excelente.. 4. - Se aplicó un análisis de componentes principales modificado, mediante un proceso de doble reducción, con el fin de facilitar la identificación del numero de variables claves asociadas a cada una de las dos dimensiones centrales pre-establecidas, el turismo sostenible y la calidad ambiental. Para ello se modificó el método propuesto por Bair et al., de-nominado “componentes principales su-pervisados” (Bair, et al, 2004). 5.-Las modificaciones al método de Bair et al, fueron las siguientes: a) se definieron los dos componentes a priori y no como resultado del proceso, b) se estandariza-ron las variables a promedio cero y va-rianza uno, c) se estimó una matriz de correlación en lugar de regresiones indi-viduales, ya que el propósito era identi-ficar las variables asociadas y relevantes a cada componente, para identificar las variables correlacionadas al 95% de pro-babilidad, con turismos sostenible y ca-lidad ambiental y d) se realizaron dos análisis de componentes principales re-ducidos y guiados, el primero con las va-riables que en la matriz de correlación presentaron coeficientes de correlación significativos al 95%, con cada una de las variables dependientes y un segundo análisis con las variables cuyos coefi-cientes, eran superiores a 0.25 con cada componente y e) finalmente se realizó un análisis factorial sobre las mismas va-riables identificadas en el segundo aná-lisis de componentes principales para verificar los resultado, mediante una ro-tación del tipo Varimax, que maximiza los coeficientes en las columnas pare ver cuánto nos podíamos acercar a una es-tructura simple como la sugerida por Juan A Aguirre 7 PASOS. Revista de Turismo y Patrimonio Cultural, 5(1). 2007 ISSN 1695-7121 Thurstone. (Thurstone, 1947) como re-sultado ultimo del análisis factorial. Participación, orden y desarrollo sostenible: resultados casi obvios El cuadro 1, muestra las variables cuyos coeficientes de correlación de Pearson, pre-sentaban una probabilidad de 95% o mayor, las cuales se utilizaron en el primer análi-sis de componentes principales que se pre-senta en el cuadro 2. Esta primera etapa permitió pasar de 67 a 22 ítem, aumentan-do favorablemente la relación sur-vey/ pregunta, para fortalecer la parsimonia de los resultados del análisis de componen-tes principales. Un elemento importante es el hecho de que el coeficiente de Pearson entre la variable S2Q18, que representa el concepto de turismo sostenible y CALAM que representa la valoración de la calidad ambiental percibida por el entrevistado fue de 0.021 con una p = 0.820, o sea que no hay correlación entre ambas variables de-pendientes. El cuadro 2, muestra siguiendo la regla del grafico de codo o quiebre de Cattel, dis-cernir como emergen finalmente del análi-sis dos componentes principales, un primer componente alrededor del concepto de tu-rismo sostenible y un segundo componente alrededor del concepto de calidad ambien-tal. El cuadro 2 muestra que de las 22 va-riables, en el primer análisis de componen-tes principales, se presentó una alineación de las variables, en dos dimensiones, un grupo de estas alrededor del primer compo-nente y otro grupo alrededor del segundo, resultados que sirvieron de base para de-terminar cuales variables integrarían el segundo análisis de componentes principa-les. Como se explicó en la metodología, el se-gundo análisis de componentes principales, se realizó sólo con aquellas variables que en el primer análisis presentaron una carga de factores (factor loadings), superior a 0.25, como sugiere la literatura, con el propósito de constatar si, la carga de cada variable en cada componente principal estimada se segregaba dando en uno de los componen-tes para ciertas variables una carga alta y en esa misma variable para el otro compo-nente una carga baja o muy baja como se sugiere en la literatura (Grimm y Yarnold, 2001), lo cual pudo ser verificado como se verá más adelante. SQ218 SCALAM SCALAM 0.021 1.000 p 0.820 SQ2 -0.221 -0.086 p 0.016 0.351 SQ4 0.158 0.249 p 0.085 0.006 SQ7 0.253 0.034 p 0.006 0.710 SQ9 0.180 -0.020 p 0.051 0.827 SQ11 -0.052 -0.296 p 0.576 0.001 SQ13 -0.227 -0.003 p 0.013 0.975 SQ217 0.281 0.222 p 0.002 0.015 SQ219 0.457 0.099 p 0.000 0.282 SQ220 0.482 0.026 p 0.000 0.781 SQ221 0.350 0.075 p 0.000 0.417 SQ222 0.486 0.026 p 0.000 0.778 SQ223 0.280 -0.035 p 0.002 0.703 SQ224 0.411 -0.013 p 0.000 0.886 SQ225 0.424 -0.062 p 0.000 0.500 SSAIRE 0.218 0.029 p 0.018 0.757 S1RUIDO -0.000 -0.229 p 0.997 0.012 S1TRAF 0.023 -0.228 p 0.804 0.012 S1AGUASN -0.131 -0.212 p 0.155 0.021 S1DEFOR -0.080 -0.221 p 0.388 0.016 SPLAN 0.185 -0.160 p 0.044 0.082 Nota: S2Q18. Pregunta sobre Turismo Sostenible y Calam. Pregunta Sobre Calidad Ambiental. Cuadro 1. Correlaciones (Pearson) entre Turismo Sostenible y Calidad Ambiental con Otras Variables 8 Participación comunitaria, patrimonio histórico-cultural ... PASOS. Revista de Turismo y Patrimonio Cultural, 5(1). 2007 ISSN 1695-7121 Cuadro 2. Análisis de Componentes Principales: Etapa 1. Eigenanalysis of the Correlation Matrix Eigenvalue 5.2662 2.4709 1.5991 1.4729 1.3762 1.2238 Proporción 0.239 0.112 0.073 0.067 0.063 0.056 Cumulativo 0.239 0.352 0.424 0.491 0.554 0.610 Eigenvalue 1.1643 0.9260 0.8726 0.7258 0.6625 0.6032 Proporción 0.053 0.042 0.040 0.033 0.030 0.027 Cumulativo 0.662 0.705 0.744 0.777 0.807 0.835 Eigenvalue 0.5828 0.5285 0.5032 0.4400 0.4120 0.3375 Proporción 0.026 0.024 0.023 0.020 0.019 0.015 Cumulativo 0.861 0.885 0.908 0.928 0.947 0.962 Eigenvalue 0.2927 0.2137 0.1963 0.1297 Proporción 0.013 0.010 0.009 0.006 Cumulativo 0.975 0.985 0.994 1.000 Variable PC1 PC2 SQ218 0.277 -0.028 SQ2 -0.023 -0.132 SQ7 0.151 -0.018 SQ9 0.145 -0.139 SQ13 -0.043 0.049 SQ217 0.192 0.200 SQ219 0.339 -0.045 SQ220 0.359 -0.034 SQ221 0.299 -0.055 SQ222 0.354 -0.084 SQ223 0.281 -0.088 SQ224 0.354 -0.050 SQ225 0.354 -0.034 SSAIRE 0.113 -0.018 SPLAN 0.003 -0.108 SCALAM 0.044 0.346 SQ4 0.147 0.092 SQ11 0.001 -0.080 S1RUIDO -0.073 -0.436 S1TRAF -0.044 -0.478 S1AGUASN -0.093 -0.368 S1DEFOR -0.014 -0.442 Nota: Coeficiente de Correlación Mínimo para un error del 5% fue de 0,18 (Kachigan, 1991: pag152) Juan A Aguirre 9 PASOS. Revista de Turismo y Patrimonio Cultural, 5(1). 2007 ISSN 1695-7121 Cuadro 3. Análisis de Componentes Principales: Etapa 2. Eigenanalysis de la Matriz de Correlación Eigenvalue 4.7402 2.3069 0.9275 0.8992 0.7625 0.6514 Proporción 0.365 0.177 0.071 0.069 0.059 0.050 Cumulativo 0.365 0.542 0.613 0.683 0.741 0.791 Eigenvalue 0.6300 0.5386 0.4243 0.3840 0.3001 0.2800 Proporción 0.048 0.041 0.033 0.030 0.023 0.022 Cumulativo 0.840 0.881 0.914 0.943 0.967 0.988 Eigenvalue 0.1554 Proporcion 0.012 Cumulativo 1.000 Variable PC1 PC2 SQ218 -0.383 0.019 SQ219 -0.357 0.053 SQ220 -0.381 0.000 SQ221 -0.329 0.030 SQ222 -0.383 0.049 SQ223 -0.295 0.069 SQ224 -0.378 0.055 SQ225 -0.382 0.021 SCALAM -0.023 -0.315 S1RUIDO 0.062 0.469 S1TRAF 0.045 0.515 S1AGUASN 0.103 0.433 S1DEFOR -0.004 0.463 Como se observará en el cuadro 3, to-das las cargas (loadings) del primero y segundo componente, superan el nivel de 0.25 o sea que tienen un nivel lo suficien-temente alto de correlación como para ser utilizados eficazmente en la interpreta-ción del significado del componente. El segundo análisis de componentes discriminó claramente un bloque de va-riables hacia el primer componente (SQ218,SQ219, SQ220, SQ221, SQ222, SQ223, SQ224, SQ225), las que identifi-can la idea de turismo sostenible y otro bloque que se agrupo alrededor del se-gundo componente (SCALAM, S1RUIDO, S1TRAFICO, S1AGUASNEGRAS, S1DEFORESTACION) las que identifican con la idea de calidad ambiental. Finalmente y con el fin de verificar los resultados del análisis por componentes se realizó un análisis adicional del tipo factorial, con rotación ortogonal del tipo Varimax que maximiza los coeficientes verticales en cada factor. Los resultados se presentan en el cuadro 4, en el cual los coeficientes de cada vector son todos su-periores a 0.60 con respecto a las varia-bles asociadas a cada uno de los dos facto-res, presentando en uno de los dos com-ponentes una carga muy alta y en el otro un coeficiente o carga muy baja o casi cero, lo cual estaría indicando que ten-dríamos una estructura simple (Thursto-ne, 1947), condición ideal para la inter-pretación de la dimensión subyacente en cada factor. Además las comunalidades en todas las variables podrían ser consi-deradas como aceptables, donde los dos factores explican el 54.2% de la variabili-dad. 10 Participación comunitaria, patrimonio histórico-cultural ... PASOS. Revista de Turismo y Patrimonio Cultural, 5(1). 2007 ISSN 1695-7121 Cuadro 4. Análisis Factorial Principal Component Factor Analysis of the Correlation Matrix Rotated Factor Loadings and Communalities Varimax Rotation Variable Factor1 Factor2 Communality SQ218 0.616 0.038 0.380 SQ219 0.781 0.005 0.609 SQ220 0.825 0.090 0.689 SQ221 0.716 0.034 0.514 SQ222 0.836 0.018 0.700 SQ223 0.650 -0.033 0.423 SQ224 0.827 0.007 0.685 SQ225 0.830 0.059 0.693 SCALAM -0.002 0.481 0.232 S1RUIDO -0.057 -0.722 0.525 S1TRAF -0.012 -0.788 0.621 S1AGUASN -0.151 -0.678 0.482 S1DEFOR 0.086 -0.698 0.494 Variance 4.7108 2.3362 7.0471 % Var 0.362 0.180 0.542 Factor Score Coefficients Variable Factor1 Factor2 SQ218 0.131 0.002 SQ219 0.167 -0.017 SQ220 0.174 0.019 SQ221 0.152 -0.003 SQ222 0.178 -0.013 SQ223 0.140 -0.030 SQ224 0.177 -0.017 SQ225 0.176 0.005 SCALAM -0.012 0.207 S1RUIDO 0.005 -0.310 S1TRAF 0.017 -0.339 S1AGUASN -0.016 -0.288 S1DEFOR 0.035 -0.303 El resultado de la verificación muestra claramente la existencia de dos dimensio-nes, una alrededor de la idea de turismo sostenible, compuesta por la respuesta a las preguntas: S2Q18. Que el turismo que se promueva sea sostenible S2Q19. Que se planifique bien la forma en que se hará la reapertura S2Q20. Que se establezcan requisitos claros para el desarrollo del turismo en el Distrito y Pueblo de San Jerónimo S2Q21. Que la comunidad periódicamente sea informada sobre como se desarro-llan las cosas S2Q22. Que los lideres comunales parti-cipen activamente en el proceso S2Q23 Que se establezcan programas para ayudar al desarrollo de micro-empresas eco turístico por la munici-palidad S2Q24. Que se le brinde asistencia técni-ca a los vecinos en el desarrollo de proyectos eco turísticos locales soste-nibles S2Q25. Que se le brinde capacitación a los vecinos en ecoturismo? Y una segunda dimensión alrededor del concepto de calidad ambiental, que se proyecta a través de la respuesta a cuatro variables/concepto: ruido excesivo, tráfico excesivo, problemas con el manejo de las aguas negras y deforestación, las cuales están todas relacionadas con en el mismo Juan A Aguirre 11 PASOS. Revista de Turismo y Patrimonio Cultural, 5(1). 2007 ISSN 1695-7121 componente y parecen definir la calidad ambiental (CALAM). El deseo de participar: ¿Será una discu-sión bizantina? El involucrar a la gente en el proceso de desarrollo turístico es, ha sido y será esencial si se desea tener éxito, en espe-cial cuando se trata de un desarrollo que contemplara la mezcla de la calidad am-biental, turismo sostenible y patrimonio cultural, como sería en nuestro caso la combinación de la reapertura de la puer-ta, el camino del café, el parque Braulio Carrillo y las hoy tranquilas comunidades de San Jerónimo de Moravia, Tornillal y Calle Méndez ubicadas a menos de tres kilómetros de la puerta Cuando se les preguntó a los vecinos de las tres comunidades, qué clase de turismo deseaban que se promoviese ante la reapertura de la puerta. La respuesta fue clara, en favor del desarrollo turístico sostenible en lugar del tradicional. En otras palabras, los vecinos de la zona no solo quieren que el desarrollo turístico que se promueva sea sostenible, sino que piden que sucedan cosas muy concretas para que el desarrollo turístico que se lleve ha cabo pueda ser tomado por ellos como sostenible. El primer elemento que resalta unido a la idea de sostenibilidad turística, es la respuesta a la pregunta, S2Q19, (Que se planifique bien la forma en que se hará la reapertura), o sea que no se deje a los desarrolladores hacer las cosas sin nin-gún tipo de ordenamiento. La planifica-ción del desarrollo turístico es la primera característica que se solicita. La necesi-dad y deseo de orden se refleja además, en la segunda variable incorporada al vector de turismo sostenible, S2Q20 (Que se establezcan requisitos claros para el desarrollo del turismo en el Distrito y Pueblo de San Jerónimo). La necesidad de que existan reglas claras, se hizo extensi-va no solo a la vecindad sino al distrito completo, dándosele una mini-regionalidad esencial al manejo de estos desarrollos. Fue muy interesante escuchar una y otra vez la preocupación de los vecinos sobre el peligro de las acciones unilatera-les- solo de las comunidades entrevista-das- reflejada en el comentario adicional, si los demás habitantes de todo el distrito no se involucran y hacen las cosas soste-niblemente, de nada servirá lo que noso-tros hagamos. Un comentario casi común en las 123 encuestas fue: “no lo dejemos todo para el final, cuando ya no hay arre-glo, anticipemos los problemas” El tercer elemento dentro del vector de turismo sostenible, fue la respuesta a las preguntas: S2Q21. (Que la comunidad periódicamente sea informada sobre como se desarrollan las cosas) y S2Q22. (Que los lideres comunales participen activa-mente en el proceso). Información y parti-cipación es el mensaje que parecen tras-mitir estas dos preguntas. Un dato inte-resante, fue que el Plan Regulador de Uso de la Tierra de recientemente aprobado por la municipalidad de Moravia a la cual pertenecen las tres comunidades estudia-das, menos del 30% de los entrevistados había oído del mismo y sólo 5 personas de las 123 entrevistadas, sabían con alguna precisión en que consistía. Lamentable-mente es común en América Latina, que las autoridades a nivel municipal, tomen decisiones que afectan a la gente, y que sean los afectados, los últimos que son informados. Pero además, pareciera que con la inclusión de la pregunta relaciona-da, con la participación del liderazgo co-munal, la intención sería: queremos que nuestros líderes locales participen ya que es a ellos, muy probablemente, a los que los vecinos de las comunidades les pueden pedir cuentas si algo sale mal. Es intere-sante y muy común en el país este senti-miento de lejanía del gobierno municipal ya no diremos el central, de la gente, cosa que ya se detectó en otras localidades del país (Aguirre, 2000; Heisterkamp et al 2001). El cuarto elemento dentro del vector de turismo sostenible refleja claramente el gran miedo de siempre de las pequeñas comunidades, el cual se resume como dice el costarricense del pueblo en un “dicho” muy común: “Que nos coman el mandado los extranjeros” (comer el mandado signi-fica robarse algo, en este caso los benefi-cios del desarrollo turístico producto de la reapertura de la puerta), definidos los extranjeros, como los no costarricenses, y 12 Participación comunitaria, patrimonio histórico-cultural ... PASOS. Revista de Turismo y Patrimonio Cultural, 5(1). 2007 ISSN 1695-7121 los costarricenses de otras partes del país. Fue interesantísimo que casi en forma unánime, los vecinos de las tres comuni-dades pidieran: a) S2Q23 (Que se esta-blezcan programas para ayudar al desa-rrollo de micro-empresas eco turístico por la municipalidad), b) S2Q24. (Que se les brinde asistencia técnica a los vecinos en el desarrollo de proyectos eco turísticos locales sostenibles) y c) S2Q25. (Que se les brinde capacitación a los vecinos en ecoturismo). Parece haber una conciencia clara, de las limitaciones económicas y empresariales en la zona y a lo que la existencia de estas puede conducir, si el “gobierno municipal” y el nacional no los apoyan a establecerse como empresarios. Los “nuevos empresarios locales” algunos quizás serán de la vecindad pero la mayo-ría se corre el riesgo que sean de fuera de esta y al final los vecinos de la zona aca-baran vendiendo a los “extranjeros” na-cionales o de fuera del país, las propieda-des, como ha sucedido una y otra vez en el país en la ultima década quedando los locales en la categoría de “empleados” de los empresarios extranjeros, lo que quizás no sea malo, pero ciertamente no es muy justo. Es probable que los vecinos de San Je-rónimo, Tornillal y Calle Méndez, hoy no entiendan las sofisticaciones y sutilezas técnicas, que académicos y expertos han dado al concepto de desarrollo turístico sostenible en los últimos veinte o más año s, pero lo que pareciera que tienen muy claro es, que asocian a este, tres ideas muy claras: planifiquémoslo, participe-mos y ayúdennos a ser empresarios no empleados. Es curioso, como este senti-miento, multidimensional, lo que hace es recoger, el deseo de que se les incluya y no como siempre sucede, que quienes por acción u omisión han cuidado el recurso por décadas, quedan marginados empre-sarialmente del nuevo desarrollo turístico y al final el mundo sigue igual, solo que ahora, con una opción menos, para mejo-rar su calidad de vida. El segundo vector, el asociado a la ca-lidad ambiental, su conformación nos pareció interesante ya que todas las va-riables, apuntan a los problemas tradi-cionales que suelen acompañar el desa-rrollo turístico, especialmente en algunos de los lugares mas conocidos del país y de la región centroamericana. La calidad ambiental parece definirse en la mente de los vecinos a través de cuatro problemas: ruido excesivo, tráfico excesivo, problemas con el manejo de las aguas negras y defo-restación elementos que parecen definir la calidad ambiental en la mente de los vecinos. La pregunta que tendríamos que hacernos es: ¿es inusual que estas sean las preocupaciones?, En realidad, noso-tros creemos que no. Imaginemos tres pequeñas comunidades rurales que en la actualidad están alejadas del ruido, tráfi-co y contaminación, con un paisaje de ensueño y situadas a la entrada de uno de los parques nacionales más grandes del país, es tan raro que sea el ruido, trafico, aguas negras y deforestación sus preocu-paciones ante el posible desarrollo turísti-co de la zona. ¡Realmente No! En otras palabras, el temor parece ser, si no hacemos las cosas bien y en una forma ordenada, no participamos en el proceso desde el principio y no nos ayu-dan a ser parte del desarrollo turístico y habitacional que pueda generarse en la zona, si se abre la puerta, podemos aca-bar como comunidad, sin nada y con pro-blemas que ciertamente no tendremos como comunidad la capacidad de manejar y que deterioraran la calidad ambiental de que hoy disfrutamos. Es interesante que el segundo vector este relacionado con las eventuales repercusiones del turismo en términos de la calidad ambiental que la acción de los turistas puede generar. (Aguirre, 2006 a y b; Aguirre, 2000) Un elemento importante, que no se debe olvidar es que el hacer mal las cosas en este caso seria inexcusable, ya que el área en la actualidad esta semi-virgen, con la puerta cerrada hace mas de una década, con el camino casi como estaba en sus orígenes hace doscientos o más año s y que el precio de hacer las cosas mal, o diferente a como los vecinos de la zona quieren que se haga seria ambientalmen-te muy alto, y no solo perjudicaría al área y su desarrollo a largo plazo, sino también a uno de los patrimonios históricos cultu-rales más valiosos del país: El camino que ayudo a desarrollar la Costa Rica de hoy. Juan A Aguirre 13 PASOS. Revista de Turismo y Patrimonio Cultural, 5(1). 2007 ISSN 1695-7121 Cuatro lecciones: ¿nuevas o viejas ideas? La primera lección es que no fue la ca-lidad ambiental como todos supondrían sino el desarrollo turístico sostenible el primer componente. Dado que estas co-munidades, tienen hoy calidad ambiental, el primer paso para no perderla, es que el desarrollo turístico sea sostenible. La segunda lección, el desarrollo turís-tico sostenible, para estas tres pequeñas comunidades es lo deseable pero, además con gran claridad señalaron, como lograr-lo: planifiquémoslo, queremos participar, ayúdennos a convertirnos en empresarios y entrénennos en ecoturismo. De no lo-grarse este proceso, la frase de Santana será una vez más verdad. “El patrimonio cultural será más fácil de integrar a la oferta turística cuanto más separado este de la población local.” (Santana, 2003) y de entregar al “comercio” añadiríamos nosotros. La tercera lección, sobre la calidad ambiental, se refleja en lo que estas pe-queñas comunidades poseen, y no desean que se les deteriore. Para una “mente occidental civilizada”, tres de las cuatro cosas que ellos asociaban a la calidad ambiental, el ruido, el tráfico y la defores-tación, las pudimos entender y racionali-zar rápidamente, el problema se nos pre-sento con las aguas negras y servidas. La respuesta resulto muy lógica cuando un vecino nos lo aclaro, “Mire amigo, la elec-tricidad, el teléfono, el agua, la calle pa-vimentada ya lo tenemos. La basura la recogemos o la quemamos en el peor de los casos, pero las aguas negras no las podemos manejar por nuestros propios medios y si estas no se controlan adecua-damente nos enfermamos hay que señalar que hoy, ninguna de las tres comunidades posee alcantarillado sanitario. De repente esa respuesta nos hizo recrear mental-mente el caso de muchas comunidades rurales pobres de América Central, donde las aguas negras y servidas corren por la calle, gracias a la inexistencia de alcanta-rillado sanitario. El pueblo una vez mas nos daba una lección de lógica y realidad. Finalmente, la ultima lección, a veces la más difícil de aceptar fue, la necesidad de consultar a la gente. Hay que pregun-tarle a la gente, que problemas tienen y hacerlos participar de la solución. Pero podremos, hacer esto hoy en un mundo global, donde cada vez mas, vemos como la solidaridad se pierde y el autoritarismo gana una y otra vez la partida, en aras de la eficiencia económica. El que mejor co-noce la solución de un problema es el que lo sufre, el turismo sostenible, jamás se lograra por decreto, pero sí por participa-ción. La participación y la consulta son esenciales, cuando queremos mezclar el patrimonio histórico y la calidad ambien-tal. Conclusiones. El turismo sostenible es hoy una espe-cie de concepto mágico, todos lo buscan hablan del, opinan y discuten sobre este y sin embargo es una realidad que parece nos evita una y otra vez, ya que son miles los casos en América Latina, donde las cosas se hacen como no se debiera. Es importante señalar primero que nada, que el análisis de la situación socio económico del área, identifico, las dos grandes preocupaciones que los vecinos sienten debido a la eventual reapertura de la puerta. Primero, el deseo de que el desarrollo turístico que se implemente y promueva en la zona sea sostenible y se-gundo, que la calidad ambiental y de vida que hoy disfrutan los miembros de las comunidades, no se vea afectada por el desarrollo turístico que es casi inevitable que suceda en el área si la puerta se re-abre. Preocupaciones que fueron amplia-mente ratificadas por los análisis de com-ponentes principales realizados La segunda conclusión del estudio es que los vecinos tienen una idea muy clara de que requisitos debería cumplir el desa-rrollo turístico que se produzca en la zona producto de la reapertura de la puerta para que, ellos consideren este como sos-tenible y que se resumen en siete deseos concretos: 1- Que se planifique bien la forma en que se hará la reapertura 2- Que se establezcan requisitos claros para el desarrollo del turismo en el Dis-trito y Pueblo de San Jerónimo. 3- Que la comunidad periódicamente sea informada sobre como se desarrollan las cosas. 14 Participación comunitaria, patrimonio histórico-cultural ... PASOS. Revista de Turismo y Patrimonio Cultural, 5(1). 2007 ISSN 1695-7121 4- Que los lideres comunales partici-pen activamente en el proceso. 5- Que se establezcan programas para ayudar al desarrollo de micro-empresas eco turístico por la municipalidad. 6- Que se le brinde asistencia técnica a los vecinos en el desarrollo de proyectos eco turísticos locales sostenibles. 7- Que se le brinde capacitación a los vecinos en ecoturismo. Las condiciones del desarrollo turístico sostenible, subyacentes a las 7 condicio-nes o deseos antes expresadas, parecieran condiciones “perogrullescas” pero son esos siete puntos los que una y otra vez se olvidan, violan y tergiversan, cuando de repente se observa que el desarrollo turís-tico de un área no es lo que se esperaba que fuese y/o que esta deteriorando la fibra económica y moral de un área, en beneficio de unos pocos. Con respecto a la calidad ambiental, los cuatro elementos que se asociaron a esta: ruido excesivo, tráfico excesivo, pro-blemas con el manejo de las aguas negras y deforestación, confirman una vez mas, cuatro de las cosas, de que las comunida-des se quejan, que se presentan y que no están en condiciones económicas, organi-zativas e institucionales de manejar por si mismas, para mantener los niveles de calidad de vida, que se disfrutaban antes que llegara “el desarrollo económico” ha generarse por el turismo y los turistas y donde sino haya apoyo del gobierno cen-tral y municipal, los resultados serán deterioro ambiental y moral de la socie-dad. Un elemento que debe meditarse se-riamente es el miedo que parece haber de parte de los vecinos, de que se les margi-ne del proceso de toma de decisiones que decidirá sobre la calidad de vida futura de sus comunidades reflejado en la insisten-cia de que sus lideres comunales partici-pen activamente en la toma de decisiones que los afectaría de cara al futuro si se reabre la puerta. El mensaje es claro, el gobierno municipal esta un tanto lejos de sus vidas y problemas y es difícil pedirle cuentas. Este sentimiento es una queja común, en una sociedad que suele ser “muy piramidal” en la toma de decisiones, producto de su desarrollo socio-cultural e historia política. Empresarios no empleados es el otro mensaje. Los vecinos desean un apoyo claro de la municipalidad para convertirse en empresarios turisticos, y poder desarrollar proyectos, que les permitan el acceso ha finaciamiento y capacitacion en ecoturismo y practicas empresariales sostenibles, de otra forma muchos de ellos, ya se ven, como empleados de los empresarios que llegaran de fuera a desarrollar el area, como ha sucedido en muchas comunidades del pais. Pero podra y sobretodo querra el gobierno hacer esto, quien sabe. De lo que no cabe duda, es que el gobierno municipal les debe, a quienes han sido los guardianes de un patrimonio natural e historico por decadas este apoyo. Que se lo deban es una cosa, que lo paguen habra que verlo. Que lo pueden hacer, sin duda pueden que quieran hacerlo, habra que esperar. La duda que quedaría por elucidar como resultado del estudio y del análisis estadístico realizado es, si lo resultados obtenidos no son en realidad un vaticinio, de lo que ha sucedido una y otra vez en América Latina, cuando comunidades rurales pequeñas y apacibles enfrentan de pronto, la vorágine del desarrollo tu-rístico, desarrollo que las ahoga y avasa-lla y que son incapaces de manejar sin un apoyo externo real y focalizado. La res-puesta a esta duda, es un tanto “ilógica” si sabemos lo que tenemos que hacer y sobretodo las comunidades saben que quieren, porque usualmente no se hace lo que las comunidades solicitan. La lógica de los resultados es indiscutible, lo que desean los vecinos se sabe y las fallas del sistema se han documentado por antici-pado. Esperemos que no suceda, lo que los vecinos temen, y han pedido que se evite, mediante sus respuestas en este estudio Finalmente metodologicamente se cumplieron con los objetivos planteados y se probo la hipotesis planteada, lo cual sin duda muestra que, los analisis estadisticos pueden conducir a resultados utiles y practicos, si este proposito se plantea desde un principio como fin utilitario ultimo de las ciencias sociales. Juan A Aguirre 15 PASOS. Revista de Turismo y Patrimonio Cultural, 5(1). 2007 ISSN 1695-7121 Bibliografia Aguirre, Juan 2000 El Desarrollo de las comunidades alrededor de las areas protegidas: el caso del Parque Nacional Manuel An-tonio. Ministerio de Ambiente y Ener-gia .Camara de Comercio, Industria y Turismo de Aguirre. Seminario de Ce-lebración de los 28 Años del Parque Nacional Manuel Antonio. Vision del Desarrollo Turístico del Canton de Aguirre para el Año 2010. Hotel Para-dor .Manuel Antonio. 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Calificación | |
Título y subtítulo | Deseables y posibles: participación comunitaria, patrimonio histórico-cultural, calidad ambiental y desarrollo turístico sostenible. San Jerónimo de Moravia, Costa Rica |
Autor principal | Aguirre, Juan A. |
Publicación fuente | Pasos. Revista de turismo y patrimonio cultural |
Numeración | Volumen 05. Número 1 |
Sección | Artículos |
Tipo de documento | Artículo |
Lugar de publicación | El Sauzal, Tenerife |
Editorial | Universidad de La Laguna |
Fecha | 2007-01 |
Páginas | pp. 001-016 |
Materias | Turismo ; Patrimonio cultural ; Publicaciones periódicas |
Enlaces relacionados | Página web: http://todopatrimonio.com/revistas/101-pasos-revista-de-turismo-y-patrimonio-cultural |
Copyright | http://biblioteca.ulpgc.es/avisomdc |
Formato digital | |
Tamaño de archivo | 168033 Bytes |
Texto | Vol. 5 Nº 1 págs. 1-16. 2007 www.pasosonline.org © PASOS. Revista de Turismo y Patrimonio Cultural. ISSN 1695-7121 Deseables y posibles: participación comunitaria, patrimonio histórico-cultural, calidad ambiental y desarrollo turístico sostenible. San Jerónimo de Moravia, Costa Rica. Juan A. Aguirre † Center for Sustainable Development (Costa Rica) Resumen: Combinar en forma sostenible el patrimonio histórico cultural, el desarrollo turístico y la calidad am-biental es sin duda alguna el reto que enfrentan muchas comunidades latinoamericanas que en años recientes han hecho toda clase de esfuerzos por atraer turistas. El estudio aquí reportado analizó las condiciones socio-económicas de tres comunidades vecinas al Parque Nacional Braulio Carrillo (PNBC), en Costa Rica, identificó los problemas ambientales de los residentes de las mismas que se podrían agravar por causa del desarrollo turístico y determinó cómo y bajo qué condiciones los habitantes de la zona querían que se realizara el desarrollo turístico de las comuni-dades. Se entrevistaron 123 de un total de un total de 155 casas en las tres comunidades, y se utilizó una combina-ción de componentes principales y análisis factorial para analizar los datos. Los resultados indican que los vecinos entrevistados desean que el desarrollo turístico sea hecho sosteniblemente, y que además, se planifique, se establez-can requisitos claros, que la comunidad sea periódicamente informada, que sus lideres comunales participen activa-mente en el proceso, se establezcan programas para ayudar al desarrollo de micro-empresas eco-turísticas, y que se les brinde asistencia técnica y capacite en el desarrollo de proyectos eco-turísticos. Los problemas eventuales aso-ciados a la calidad ambiental que habría que prestarles atención preferente son: ruido y tráfico excesivo, manejo de aguas negras y deforestación. El desarrollo turístico sostenible relacionado con el primer componente implicaría que este es un requisito básico de la calidad ambiental, la conservación y el uso sostenible del patrimonio histórico. Palabras clave: Patrimonio histórico cultural; Desarrollo turístico sostenible; Calidad ambiental; Participación; Componentes principales. Abstract: The sustainable combination, of the cultural-historic patrimony, sustainable tourist development and the environmental quality is without any doubt the challenge that are facing many Latin-American communities that in recent years have uses these types of efforts, for attracting tourist to their communities. The study carried analyze the socio economic conditions of three communities in Costa Rica, identify the environmental problems of the residents that would be aggravate by the development tourism and established the conditions that the inhabitants of the zone want tourist development to meet. A total of 123 interviews of a total of 155 houses in three neighboring communi-ties were conducted. A combination of principal components and factor analysis was utilized to analyze the data. The results indicate that the neighbors desire that the tourist development be sustainable, be properly planned, clear requirements be established, the communities be periodically informed, the communal leaders participated actively in it, programs be established to help communities members in businesses development, and that they be offered technical and financial aid for eco-tourism projects development The problems associated to environmental quality identify as crucial were: excessive noise and traffic, deforestation. And the improvement of the sewage capabilities of the communities The association of the concept of tourism development to the first principle component could mean that, sustainable tourism development is a pre-requisite of environmental quality and sustainable conservation and use of the cultural-historical patrimony of the area. Keywords: Cultural-historic patrimony; Ssustainable tourism development; Environmental quality; Participation; Principal components. † • Juan A Aguirre G.Ph.D. es economista ambiental y de la recreación, The School for Field Studies. Center for Sustainable Development. P.O.Box 150-4013, Atenas, Alajuela. Costa Rica. E mail: jaguirre@fieldstudies.org o jaguirre@racsa.co.cr. 2 Participación comunitaria, patrimonio histórico-cultural ... PASOS. Revista de Turismo y Patrimonio Cultural, 5(1). 2007 ISSN 1695-7121 Introducción. La posible reapertura de la puerta al Parque Nacional Braulio Carrillo del Bajo de la Hondura, situada en la comunidad de San Jerónimo de Moravia, es un ejemplo de los esfuerzos que hacen muchas comunida-des latinoamericanas, por atraer turistas como una forma de solventar la crisis eco-nómica, desempleo y bajos ingresos de sus moradores. Lo importante de la reapertura, no es la reapertura per-se, sino lo que la reapertura implica para que el desarrollo turístico del área se haga en una forma sostenible. Ello significaría encontrar un balance entre el desarrollo turístico, la sos-tenibilidad ambiental y el mantenimiento de la actual calidad ambiental que los “ve-cinos” de la zona disfrutan hoy, dentro de un “respeto” y aprecio real por el patrimo-nio histórico que el camino representa en el patrimonio histórico de la nación costarri-cense. La puerta, cerrada desde hace más de quince años, está sobre un camino que aún hoy después de casi doscientos años, man-tiene su empedrado original y ha sido de-clarado patrimonio histórico local, ya que por él salieron las primeras exportaciones de café hacia Europa, durante el siglo XIX y en el área sufrió “exilio”, por sus ideas libe-rales, el primer obispo de Costa Rica, Mon-señor Augusto Thiel. En otras palabras la combinación sostenible del patrimonio his-tórico cultural, la accesibilidad de los habi-tantes de la ciudad capital a bellísimos parajes de bosque tropical lluvioso y bosque tropical nublado y el desarrollo urbano y turístico de una zona rural, a menos de cuarenta minutos del centro de la ciudad capital de Costa Rica, San José, es el tema central. El problema, como lo señalaba Ascanio, es que el turismo siempre ha sido un fenó-meno social relacionado con la cultura y que muy a menudo contribuye a la rees-tructuración de esta (Ascanio, 2003). Don-de, el uso del material cultural simbólico requiere participación, respeto y estudio de la historia social de la comunidad (Barreto, 2003) como sería en nuestro caso el uso del camino y la puerta para lograr el desarrollo sostenible del turismo en la zona. Por otra parte, si la población local, los supuestos depositarios del patrimonio cul-tural, no viven el patrimonio cultural como algo propio y se hacen necesarias campañas promociónales del mismo, el patrimonio cultural será apropiado por la empresa privada y vendido como parte de los atrac-tivos turísticos de un destino. Es muy claro que el patrimonio cultural será más fácil de integrar a la oferta turística cuanto más separado esté de la población local (Santa-na, 2003). La historia de la región centroa-mericana es rica en casos donde, la lejanía local del patrimonio histórico y natural, no sólo ha producido la “venta indiscriminada de la cultura” sino lo que es peor la “extran-jerización” de la comunidad. En Costa Rica existen múltiples ejemplos de esto: Playa Jaco, Quepos-Manuel Antonio, La Fortuna de San Carlos, Monteverde-Santa Elena son algunos de los lugares, donde la “ex-tranjerización” de los patrimonios natura-les y culturales ha sido tal que, los “locales” cuesta que lleguen a esos lugares ya que no solo no los pueden pagar, sino que además dicen sentirse extranjeros en su propio país (Aguirre, 2006). No hay duda que cuando el patrimonio cultural-histórico, se une al desarrollo tu-rístico, el turismo puede hacer una contri-bución importante al desarrollo económico de los sitios de interés, el problema parece estar en las limitaciones reales que las co-munidades tienen para poder hacerse cargo del proceso, mantenerlo, gerenciarlo, y además que este se adapte al mercado, desarrolle los espacios lúdicos atractivos y en especial que todo lo anterior se logre dentro de un contexto de sostenibilidad ambiental y turística (Ascanio, 2006). Arrieta en un trabajo reciente en museos comunales en el país vasco, identifica cua-tro restricciones para que los museos-patrimonio- cultural de un sitio sean usados eficazmente como atractivo turístico, seña-lando que, la falta de recursos locales para asumir la responsabilidad de su desarrollo y posterior mantenimiento, la falta de im-plicación de los vecinos desde el inicio del proceso, la falta de un colectivo social local que se haga cargo del proceso y finalmente la “romanización” de la realidad rural (Arrieta, 2003) son las dificultades reales de la incorporación de esta clase de patri-monio a la oferta turística. El problema se agrava muchas veces, debido a que a causa Juan A Aguirre 3 PASOS. Revista de Turismo y Patrimonio Cultural, 5(1). 2007 ISSN 1695-7121 de la creciente demanda turística de su-puestas autenticidades, el patrimonio cul-tural, que sé esta ofertando, se presenta en no pocos casos como un pasado rural ideali-zado (Fernández de Paz, 2006), peligro muy real en nuestro caso. Por otra parte habría que preguntarse si vale la pena, el esfuerzo para aprovechar el patrimonio cultural de un sitio, para des-arrollar el turismo sostenible en un área cualquiera. Estudios recientes en Cuba, donde el turismo de sol y playa por décadas ha sido “el rey” muestran que la oferta de actividades culturales rurales tales como: visitas a lugares históricos, ferias, exposi-ciones y mercados conformaron el primer componente principal de un estudio sobre turistas internacionales, resultado que pa-rece indicar que si vale la pena, el esfuerzo (Camargo et al, 2005). Lo que no debe olvidarse es que el turis-ta, que busca el patrimonio cultural, su interés radica en ver lo que ellos han perdi-do, y descubrir lo que son o han sido las comunidades y su patrimonio, hoy conver-tidas en producto turístico. El patrimonio cultural es una utilización de la historia, un rescate de elementos del pasado, desde el presente y que tiene que ser entendido co-mo el conjunto de todos los elementos natu-rales y culturales tangibles o intangibles (materiales o inmateriales) que son here-dados o creados recientemente. Además esta creación hoy del pasado hay que hacer-la con calidad e información, donde la cali-dad de la información y de los servicios de interpretación son esenciales a la genera-ción de un valor agregado económico que retribuya el conocimiento local del patri-monio histórico, con el valor de mercado de un servicio personal “bien prestado”, donde el propósito final de los visitantes es repe-timos, conocer y comprender el tipo de pa-trimonio que sé este mostrando. Cuando esto no existe, se vuelve a la “foto” (Martí-nez de la Rosa, 2003; Castro de León, 2005) y se pierde la oportunidad de mercadear la cultura como valor agregado económico, que es donde usualmente están las mayores retribuciones económicas para la comuni-dad local. El desarrollo turístico sostenible por otra parte, se convierte en las actuales cir-cunstancias del desarrollo turístico que vive Costa Rica, en el tema de fondo, donde la pregunta clave es: ¿Puede una comunidad rural, pequeña, de escasos recursos y en la periferia rural de la capital del país, des-arrollar una zona turísticamente atractiva, sin ser arrollada, económica, social, cultu-ral y urbanísticamente por los desarrolla-dores urbanos? Hay que recordar que el desarrollo turístico sostenible apunta a minimizar los daños ambientales y cultura-les, optimizar la satisfacción del visitante y maximizar el desarrollo económico a largo plazo de la región en cuestión. Es por tanto una forma de obtener un balance entre el potencial de crecimiento del turismo y la necesidad de conservar el medio ambiente. (Krippendorf et al., 1988; Hawkes & Wi-lliams, 1993; Bramwell & Lane, 1993). Esto hace al concepto de desarrollo turístico sos-tenible de índole multi-propósito, que vaya mas allá de la conservación per-se e incluya al menos los siguientes elementos: a) soste-nimiento del carácter de la cultura y las comunidades, b) sostenimiento del paisaje y los “hábitat”, c) la promoción de exitosas y satisfactorias experiencias turísticas, y d) que sea capaz de desarrollar una visión, conocimiento y liderazgo entre quienes to-man decisiones sobre el tema, del peligro de la dependencia del turismo y motivarlos a buscar el balance entre las actividades pro-ductivas y el turismo para lograr un desa-rrollo local balanceado y estable en el largo plazo (Lane, 2005). El problema es que en la actualidad, el desarrollo turístico latino-americano y el costarricense en particular, están siendo cuestionados, ya que pareciera que a pesar de pregonar ambos la sostenibilidad, se estarían moviendo en dirección opuesta. En América Latina la crítica más realista ha sido la de Mader, quien señala que bajo el lema de proyectos eco-turísticos se merca-dea casi todo, desde desarrollo comunitario hasta “jet ski”, pero que, cuando se insiste en proyectos que cumplan con altos están-dares ambientales, los costos de estos pro-yectos se elevan en forma importante, lo cual ubica algunas actividades turísticas sostenibles en la categoría de “turismo de lujo”. Por otra parte, cuando al turista que puede pagar se le orienta hacia los proyec-tos comunitarios, un segundo conflicto aflo-ra entre lo que se proporciona, lo que se debe pagar y lo que se puede pagar por 4 Participación comunitaria, patrimonio histórico-cultural ... PASOS. Revista de Turismo y Patrimonio Cultural, 5(1). 2007 ISSN 1695-7121 aquellos que se interesan en el turismo sostenible, conflicto que hace evidente lo que se recibe y lo que se espera. Donde sin el apoyo y los subsidios gubernamentales, aquellos que prestarían los servicios perso-nales en la forma más idónea y que podrían beneficiarse más de los dólares que los tu-ristas traen, brillarían por su ausencia (Mader, 2002). La contradicción es sutil e irónica: la ausencia de los actores locales traicionaría la esencia misma del turismo sostenible, la participación local. ¿Qué sucede en Costa Rica?, muchas son las evidencias y las críticas no escritas y escritas que los académicos, locales y ex-tranjeros, han hecho y hacen en relación a la poca participación de las comunidades en los llamados “emprendimientos eco-turísticos locales” y en el desarrollo turísti-co local. Stem et al., reportan algunos ele-mentos interesantes en lo que respecta al impacto del ecoturismo y la conservación, vista esta como la reducción de la defores-tación, y la caza ilegal, donde la percepción comunitaria registrada fue de que las me-didas legales y su aplicación tienen más impacto que cualquier otra cosa para lograr la conservación de la biodiversidad (Stem et al, 2002). Por otra parte, las evidencias recogidas han mostrado, el poco interés por la inver-sión en medidas conservacionista de parte de quienes invierten en los llamados pro-yectos eco-turísticos, donde la escala del emprendimiento, parece tener una influen-cia más importante en los beneficios am-bientales y económicos positivos y negati-vos de estas inversiones, lo cual plantea dos ideas centrales. Primero, el ecoturismo como única estrategia de desarrollo hará más vulnerable a la comunidad y segundo, si el desarrollo eco-turístico no es parte de una estrategia “mayor” en el largo plazo, será poco el impacto que tendrá este en el desarrollo del área (Stem et al, 2002). En Monteverde, el icono nacional del tu-rismo sostenible privado, dos estudios re-cientes señalan una larga lista de impactos negativos y la poca participación de los costarricenses en los “macro” beneficios del turismo (Aguirre, 2006; Duha, 2004). En Guayabo, parque nacional y sitio arqueoló-gico más importante del país, la queja de los habitantes locales por la marginación fue evidente, en las comunidades vecinas a este de Santa Cruz de Turrialba y Guayabo (Aguirre, 2004). En Cahuita, una comunidad de la zo-na atlántica del país, donde supuesta-mente existe y se publicita internacio-nalmente el programa de co-manejo del Parque Nacional Cahuita, los conflictos internos de la comunidad y entre la co-munidad y las autoridades administrati-vas del parque, no sólo fueron evidentes sino que afloraron, tanto en Cahuita centro como en los barrios de la periferia del pueblo, conflictos que se centraban en la participación de unos pocos, rela-cionados más que nada a las fuerzas po-líticas del momento dejando al resto de la población y sus grupos comunales, fuera de toda participación y posibilida-des (Aguirre, 2003). Lo mismo ocurrió en muchas otras áreas del país. En Quepos -Parque Nacio-nal Manuel Antonio el problema de la mar-ginación, es más complicado debido a los conflictos internos existentes entre los dife-rentes actores del desarrollo turístico local, por el deseo de todos de obtener algún be-neficio económico del parque nacional (Aguirre, 2000; Heiterkamp et al, 2001). En Gandoca-Manzanillo, los estudios muestran un conflicto entre el ecoturismo y sus prin-cipios y las políticas de desarrollo local, que buscan casi solamente beneficios económi-cos como meta principal (Gray, 2003). En la Playa de Ostional, se mostró claramente que sin el apoyo planificado y dirigido del gobierno, las oportunidades de los residen-tes locales son pocas, en relación con su posibilidad de participación en el desarrollo turístico del área (Campbell, 1999). En Tortuguero, se mostró que no existía una estrategia sistemática de parte de las auto-ridades del Sistema Nacional de Áreas de Conservación (SINAC) para promover el desarrollo sostenible del área y que la ma-yoría de los esfuerzos estaban en manos del sector empresarial turístico privado y algu-nas ONG, y que los residentes no asociaban en sus mentes el refugio de vida silvestre con los beneficios económicos que se deri-vaban de la presencia de los visitantes al lugar (Place, 1991). En Isla Venado, se en-contró que los mayores impactos al ecosis-tema provenían de los cambios en los pa-trones de consumo de los lugareños debido y potenciados estos por el efecto demostra- Juan A Aguirre 5 PASOS. Revista de Turismo y Patrimonio Cultural, 5(1). 2007 ISSN 1695-7121 tivo de los turistas (Beeker, 2000). Finalmente es importante entender que cualquier intento de apertura de una zona al desarrollo turístico sostenible, se hará mejor en la medida que se cumplan algunos requisitos previos que se han identificados como esenciales a lo largo de los años y que han sido resumidos en los trabajos de la Agencia Alemana de Cooperación (GTZ) entre los cuales se citan cinco: (a) Análisis de la situación, (b) diseñar una estrategia para el desarrollo turístico, (c) determinar roles y responsabilidades, (d) involucrar a la comunidad, y (e) garantizar la sostenibi-lidad diseñando e implementado indicado-res periódicos de la sostenibilidad del pro-ceso de desarrollo turístico que se está lle-vando ha cabo (Steck, 1999). Además de por Lane el cual hace más de una década seña-laba, como primer paso para lograr el desa-rrollo turístico de un sitio que era necesario hacer un análisis de las necesidades socia-les, económicas y ecológicas del sitio. Se-gundo, desarrollar una amplia consulta entre todos los grupos involucrados. Terce-ro, que era básico la transparencia en las acciones y, cuarto, que el proceso de desa-rrollo de la estrategia de desarrollo turísti-co debería ser un proceso continuo (Lane, 1994). Es importante resaltar que la realidad que se enfrentó al inicio del estudio tuvo características que combinaban, y combi-nan al día de hoy, varios elementos positi-vos para lograr un eventual desarrollo tu-rístico sostenible como producto de la re-apertura de la puerta en las tres comuni-dades involucradas entre las que se desta-can: (a) la municipalidad de Moravia acaba de aprobar el Plan Regulador de Uso de la Tierra del Cantón, (b) el alcalde y algunos ediles tienen interés en la apertura de la puerta, por lo que ello pueda significar en el desarrollo económico del este de la ciudad capital, (c) las dudas sobre la forma que otras zona situadas al oeste de la capital que se han urbanizado muchas veces, en contra de las medidas mas elementales de desarrollo urbanístico, (d) la existencia de un préstamo internacional del Banco Inter-americano de Desarrollo (BID), que facilita-ra la mejora y desarrollo de la infraestruc-tura en muchos parques nacionales del país, y (e) la entrega al Sistema Nacional de Áreas de Conservación del país, del Plan de Manejo del Parque Braulio Carrillo, en donde el camino y la reapertura de la puer-ta son una parte importante, y que además incluye las normas y estrategias de desa-rrollo turístico del parque y sus sitios. Lo antes discutido, ayudo a focalizar y dar un propósito útil a los esfuerzos de in-vestigación que se preveían convirtiendo al estudio en un mecanismo que daría a los que toman decisiones sobre el tema un me-jor entendimiento sobre lo que piensan los vecinos que serán impactados directamente por las acciones de reapertura, las preocu-paciones que la apertura les generaba, co-mo querían que la reapertura se llevase ha cabo y la clase de desarrollo turístico que querían para la zona, ya que la reapertura de la puerta y el desarrollo urbano subsi-guiente de la zona es hoy casi inminente y si no se planifica, se dirige e involucra a los vecinos de las tres comunidades directa-mente afectadas, muchos de los problemas experimentados en otros lugares del país, es casi seguro que se repetirán. En razón de lo anterior, los objetivos del estudio que se plantearon fueron cuatro: (a) hacer un análisis de la situación socio-económica del área, (b) identificar los pro-blemas comunales que los vecinos tienen hoy y que se podrían agravar debido a la apertura de la puerta, (c) determinar cómo y bajo qué condiciones los habitantes de la zona querían que se realice la apertura de la puerta y el desarrollo turístico del área y (d) la clase de intervención que esperaban de las autoridades municipales, en apoyo de ellos. Además, sobre la base de comentarios hechos al autor en una reunión prelimi-nar con los vecinos para discutir el tema, la hipótesis central que guió el estudio fue: los vecinos de las comunidades que-rrían que se abriera la puerta de nuevo, pero que esta reapertura se hiciera en una forma ordenada, participativa y pla-nificada, donde el desarrollo turístico fuese guiado y no dejado libremente a la iniciativa privada. Metodología de la Investigación Ubicación de la Zona de Estudio. El Parque Nacional Braulio Carrillo (PNBC) con 45 mil hectáreas, ubicadas una parte en la meseta central de Costa Rica y 6 Participación comunitaria, patrimonio histórico-cultural ... PASOS. Revista de Turismo y Patrimonio Cultural, 5(1). 2007 ISSN 1695-7121 la otra en el pie de monte de esta, es uno de los parques nacionales más grandes del país. EL PNBC protege gran parte de las cuencas y micro cuencas que surten de agua a la meseta central del país, área que alberga sobre el 65% de la población nacio-nal. En la actualidad, el PNBC posee tres entradas de acceso habilitadas y una cuarta que fue cerrada hace poco más o menos una década, ubicada en el Bajo de la Hondura sobre el antiguo camino al puerto fluvial de Matina, entrada que si se reabre finalmen-te, estaría ubicada a escasos 30 minutos del parque central de la ciudad de Moravia, y a 45 del parque central de la capital San Jo-sé, condición que convertiría a esta entra-da, en la de mayor potencial eco-turístico del país. Es importante entender además que los residentes de la capital del país, buscan desde hace tiempo un área verde donde pasear y recrearse y esta zona por su cercanía y acceso sería ideal para este pro-pósito. Etapas Metodológicas y Analíticas. Las etapas del estudio y los métodos apli-cados fueron las siguientes: 1.-Explicar a la comunidad de que se trata-ba el estudio y conseguir su colaboración plena, lo cual permitió que de las 155 casas ubicadas en los tres pueblos de acuerdo al último censo de población del año 2000, entrevistar a personas selec-cionadas aleatoriamente en 123 de es-tas. 2.- Diseñar el cuestionario con un total de 67 ítem valorados, repartidos en las si-guientes secciones: a) datos demográfi-cos, y opiniones sobre: b) el estado de las relaciones entre las comunidades y la administración del parque, c) sobre la eventual apertura de la puerta, d) im-portancia de los diferentes recursos na-turales del área, e) identificación de los problemas presentes y futuros del área si sé reabría la puerta y se daba el desa-rrollo turístico del área, f) condiciones de participación de ciudadana y g) grado de conocimiento sobre el plan regulador del uso de la tierra de la municipalidad. La versión inicial de la encuesta fue revisa-da y discutida con las autoridades muni-cipales y una pre-prueba de la boleta con diez vecinos permitió, elaborar una en-cuesta más corta y relevante y sobretodo que cubriese para los involucrados, todos los temas de interés. 3. - Establecer las dos variables dependien-tes del estudio donde: a) para el análisis de la idea sobre el tipo de desarrollo tu-rístico que se deseaba se incluyo la si-guiente pregunta: ¿Que el turismo que se promueva sea sostenible?, dándose 5 opciones i.e, 1) no estoy de acuerdo y 5) es una excelente idea y b) para manejar la idea de calidad ambiental se incluyo la siguiente pregunta: ¿Cómo califica us-ted la calidad ambiental del área?, dán-dose 5 opciones, 1) pobre y 5) excelente.. 4. - Se aplicó un análisis de componentes principales modificado, mediante un proceso de doble reducción, con el fin de facilitar la identificación del numero de variables claves asociadas a cada una de las dos dimensiones centrales pre-establecidas, el turismo sostenible y la calidad ambiental. Para ello se modificó el método propuesto por Bair et al., de-nominado “componentes principales su-pervisados” (Bair, et al, 2004). 5.-Las modificaciones al método de Bair et al, fueron las siguientes: a) se definieron los dos componentes a priori y no como resultado del proceso, b) se estandariza-ron las variables a promedio cero y va-rianza uno, c) se estimó una matriz de correlación en lugar de regresiones indi-viduales, ya que el propósito era identi-ficar las variables asociadas y relevantes a cada componente, para identificar las variables correlacionadas al 95% de pro-babilidad, con turismos sostenible y ca-lidad ambiental y d) se realizaron dos análisis de componentes principales re-ducidos y guiados, el primero con las va-riables que en la matriz de correlación presentaron coeficientes de correlación significativos al 95%, con cada una de las variables dependientes y un segundo análisis con las variables cuyos coefi-cientes, eran superiores a 0.25 con cada componente y e) finalmente se realizó un análisis factorial sobre las mismas va-riables identificadas en el segundo aná-lisis de componentes principales para verificar los resultado, mediante una ro-tación del tipo Varimax, que maximiza los coeficientes en las columnas pare ver cuánto nos podíamos acercar a una es-tructura simple como la sugerida por Juan A Aguirre 7 PASOS. Revista de Turismo y Patrimonio Cultural, 5(1). 2007 ISSN 1695-7121 Thurstone. (Thurstone, 1947) como re-sultado ultimo del análisis factorial. Participación, orden y desarrollo sostenible: resultados casi obvios El cuadro 1, muestra las variables cuyos coeficientes de correlación de Pearson, pre-sentaban una probabilidad de 95% o mayor, las cuales se utilizaron en el primer análi-sis de componentes principales que se pre-senta en el cuadro 2. Esta primera etapa permitió pasar de 67 a 22 ítem, aumentan-do favorablemente la relación sur-vey/ pregunta, para fortalecer la parsimonia de los resultados del análisis de componen-tes principales. Un elemento importante es el hecho de que el coeficiente de Pearson entre la variable S2Q18, que representa el concepto de turismo sostenible y CALAM que representa la valoración de la calidad ambiental percibida por el entrevistado fue de 0.021 con una p = 0.820, o sea que no hay correlación entre ambas variables de-pendientes. El cuadro 2, muestra siguiendo la regla del grafico de codo o quiebre de Cattel, dis-cernir como emergen finalmente del análi-sis dos componentes principales, un primer componente alrededor del concepto de tu-rismo sostenible y un segundo componente alrededor del concepto de calidad ambien-tal. El cuadro 2 muestra que de las 22 va-riables, en el primer análisis de componen-tes principales, se presentó una alineación de las variables, en dos dimensiones, un grupo de estas alrededor del primer compo-nente y otro grupo alrededor del segundo, resultados que sirvieron de base para de-terminar cuales variables integrarían el segundo análisis de componentes principa-les. Como se explicó en la metodología, el se-gundo análisis de componentes principales, se realizó sólo con aquellas variables que en el primer análisis presentaron una carga de factores (factor loadings), superior a 0.25, como sugiere la literatura, con el propósito de constatar si, la carga de cada variable en cada componente principal estimada se segregaba dando en uno de los componen-tes para ciertas variables una carga alta y en esa misma variable para el otro compo-nente una carga baja o muy baja como se sugiere en la literatura (Grimm y Yarnold, 2001), lo cual pudo ser verificado como se verá más adelante. SQ218 SCALAM SCALAM 0.021 1.000 p 0.820 SQ2 -0.221 -0.086 p 0.016 0.351 SQ4 0.158 0.249 p 0.085 0.006 SQ7 0.253 0.034 p 0.006 0.710 SQ9 0.180 -0.020 p 0.051 0.827 SQ11 -0.052 -0.296 p 0.576 0.001 SQ13 -0.227 -0.003 p 0.013 0.975 SQ217 0.281 0.222 p 0.002 0.015 SQ219 0.457 0.099 p 0.000 0.282 SQ220 0.482 0.026 p 0.000 0.781 SQ221 0.350 0.075 p 0.000 0.417 SQ222 0.486 0.026 p 0.000 0.778 SQ223 0.280 -0.035 p 0.002 0.703 SQ224 0.411 -0.013 p 0.000 0.886 SQ225 0.424 -0.062 p 0.000 0.500 SSAIRE 0.218 0.029 p 0.018 0.757 S1RUIDO -0.000 -0.229 p 0.997 0.012 S1TRAF 0.023 -0.228 p 0.804 0.012 S1AGUASN -0.131 -0.212 p 0.155 0.021 S1DEFOR -0.080 -0.221 p 0.388 0.016 SPLAN 0.185 -0.160 p 0.044 0.082 Nota: S2Q18. Pregunta sobre Turismo Sostenible y Calam. Pregunta Sobre Calidad Ambiental. Cuadro 1. Correlaciones (Pearson) entre Turismo Sostenible y Calidad Ambiental con Otras Variables 8 Participación comunitaria, patrimonio histórico-cultural ... PASOS. Revista de Turismo y Patrimonio Cultural, 5(1). 2007 ISSN 1695-7121 Cuadro 2. Análisis de Componentes Principales: Etapa 1. Eigenanalysis of the Correlation Matrix Eigenvalue 5.2662 2.4709 1.5991 1.4729 1.3762 1.2238 Proporción 0.239 0.112 0.073 0.067 0.063 0.056 Cumulativo 0.239 0.352 0.424 0.491 0.554 0.610 Eigenvalue 1.1643 0.9260 0.8726 0.7258 0.6625 0.6032 Proporción 0.053 0.042 0.040 0.033 0.030 0.027 Cumulativo 0.662 0.705 0.744 0.777 0.807 0.835 Eigenvalue 0.5828 0.5285 0.5032 0.4400 0.4120 0.3375 Proporción 0.026 0.024 0.023 0.020 0.019 0.015 Cumulativo 0.861 0.885 0.908 0.928 0.947 0.962 Eigenvalue 0.2927 0.2137 0.1963 0.1297 Proporción 0.013 0.010 0.009 0.006 Cumulativo 0.975 0.985 0.994 1.000 Variable PC1 PC2 SQ218 0.277 -0.028 SQ2 -0.023 -0.132 SQ7 0.151 -0.018 SQ9 0.145 -0.139 SQ13 -0.043 0.049 SQ217 0.192 0.200 SQ219 0.339 -0.045 SQ220 0.359 -0.034 SQ221 0.299 -0.055 SQ222 0.354 -0.084 SQ223 0.281 -0.088 SQ224 0.354 -0.050 SQ225 0.354 -0.034 SSAIRE 0.113 -0.018 SPLAN 0.003 -0.108 SCALAM 0.044 0.346 SQ4 0.147 0.092 SQ11 0.001 -0.080 S1RUIDO -0.073 -0.436 S1TRAF -0.044 -0.478 S1AGUASN -0.093 -0.368 S1DEFOR -0.014 -0.442 Nota: Coeficiente de Correlación Mínimo para un error del 5% fue de 0,18 (Kachigan, 1991: pag152) Juan A Aguirre 9 PASOS. Revista de Turismo y Patrimonio Cultural, 5(1). 2007 ISSN 1695-7121 Cuadro 3. Análisis de Componentes Principales: Etapa 2. Eigenanalysis de la Matriz de Correlación Eigenvalue 4.7402 2.3069 0.9275 0.8992 0.7625 0.6514 Proporción 0.365 0.177 0.071 0.069 0.059 0.050 Cumulativo 0.365 0.542 0.613 0.683 0.741 0.791 Eigenvalue 0.6300 0.5386 0.4243 0.3840 0.3001 0.2800 Proporción 0.048 0.041 0.033 0.030 0.023 0.022 Cumulativo 0.840 0.881 0.914 0.943 0.967 0.988 Eigenvalue 0.1554 Proporcion 0.012 Cumulativo 1.000 Variable PC1 PC2 SQ218 -0.383 0.019 SQ219 -0.357 0.053 SQ220 -0.381 0.000 SQ221 -0.329 0.030 SQ222 -0.383 0.049 SQ223 -0.295 0.069 SQ224 -0.378 0.055 SQ225 -0.382 0.021 SCALAM -0.023 -0.315 S1RUIDO 0.062 0.469 S1TRAF 0.045 0.515 S1AGUASN 0.103 0.433 S1DEFOR -0.004 0.463 Como se observará en el cuadro 3, to-das las cargas (loadings) del primero y segundo componente, superan el nivel de 0.25 o sea que tienen un nivel lo suficien-temente alto de correlación como para ser utilizados eficazmente en la interpreta-ción del significado del componente. El segundo análisis de componentes discriminó claramente un bloque de va-riables hacia el primer componente (SQ218,SQ219, SQ220, SQ221, SQ222, SQ223, SQ224, SQ225), las que identifi-can la idea de turismo sostenible y otro bloque que se agrupo alrededor del se-gundo componente (SCALAM, S1RUIDO, S1TRAFICO, S1AGUASNEGRAS, S1DEFORESTACION) las que identifican con la idea de calidad ambiental. Finalmente y con el fin de verificar los resultados del análisis por componentes se realizó un análisis adicional del tipo factorial, con rotación ortogonal del tipo Varimax que maximiza los coeficientes verticales en cada factor. Los resultados se presentan en el cuadro 4, en el cual los coeficientes de cada vector son todos su-periores a 0.60 con respecto a las varia-bles asociadas a cada uno de los dos facto-res, presentando en uno de los dos com-ponentes una carga muy alta y en el otro un coeficiente o carga muy baja o casi cero, lo cual estaría indicando que ten-dríamos una estructura simple (Thursto-ne, 1947), condición ideal para la inter-pretación de la dimensión subyacente en cada factor. Además las comunalidades en todas las variables podrían ser consi-deradas como aceptables, donde los dos factores explican el 54.2% de la variabili-dad. 10 Participación comunitaria, patrimonio histórico-cultural ... PASOS. Revista de Turismo y Patrimonio Cultural, 5(1). 2007 ISSN 1695-7121 Cuadro 4. Análisis Factorial Principal Component Factor Analysis of the Correlation Matrix Rotated Factor Loadings and Communalities Varimax Rotation Variable Factor1 Factor2 Communality SQ218 0.616 0.038 0.380 SQ219 0.781 0.005 0.609 SQ220 0.825 0.090 0.689 SQ221 0.716 0.034 0.514 SQ222 0.836 0.018 0.700 SQ223 0.650 -0.033 0.423 SQ224 0.827 0.007 0.685 SQ225 0.830 0.059 0.693 SCALAM -0.002 0.481 0.232 S1RUIDO -0.057 -0.722 0.525 S1TRAF -0.012 -0.788 0.621 S1AGUASN -0.151 -0.678 0.482 S1DEFOR 0.086 -0.698 0.494 Variance 4.7108 2.3362 7.0471 % Var 0.362 0.180 0.542 Factor Score Coefficients Variable Factor1 Factor2 SQ218 0.131 0.002 SQ219 0.167 -0.017 SQ220 0.174 0.019 SQ221 0.152 -0.003 SQ222 0.178 -0.013 SQ223 0.140 -0.030 SQ224 0.177 -0.017 SQ225 0.176 0.005 SCALAM -0.012 0.207 S1RUIDO 0.005 -0.310 S1TRAF 0.017 -0.339 S1AGUASN -0.016 -0.288 S1DEFOR 0.035 -0.303 El resultado de la verificación muestra claramente la existencia de dos dimensio-nes, una alrededor de la idea de turismo sostenible, compuesta por la respuesta a las preguntas: S2Q18. Que el turismo que se promueva sea sostenible S2Q19. Que se planifique bien la forma en que se hará la reapertura S2Q20. Que se establezcan requisitos claros para el desarrollo del turismo en el Distrito y Pueblo de San Jerónimo S2Q21. Que la comunidad periódicamente sea informada sobre como se desarro-llan las cosas S2Q22. Que los lideres comunales parti-cipen activamente en el proceso S2Q23 Que se establezcan programas para ayudar al desarrollo de micro-empresas eco turístico por la munici-palidad S2Q24. Que se le brinde asistencia técni-ca a los vecinos en el desarrollo de proyectos eco turísticos locales soste-nibles S2Q25. Que se le brinde capacitación a los vecinos en ecoturismo? Y una segunda dimensión alrededor del concepto de calidad ambiental, que se proyecta a través de la respuesta a cuatro variables/concepto: ruido excesivo, tráfico excesivo, problemas con el manejo de las aguas negras y deforestación, las cuales están todas relacionadas con en el mismo Juan A Aguirre 11 PASOS. Revista de Turismo y Patrimonio Cultural, 5(1). 2007 ISSN 1695-7121 componente y parecen definir la calidad ambiental (CALAM). El deseo de participar: ¿Será una discu-sión bizantina? El involucrar a la gente en el proceso de desarrollo turístico es, ha sido y será esencial si se desea tener éxito, en espe-cial cuando se trata de un desarrollo que contemplara la mezcla de la calidad am-biental, turismo sostenible y patrimonio cultural, como sería en nuestro caso la combinación de la reapertura de la puer-ta, el camino del café, el parque Braulio Carrillo y las hoy tranquilas comunidades de San Jerónimo de Moravia, Tornillal y Calle Méndez ubicadas a menos de tres kilómetros de la puerta Cuando se les preguntó a los vecinos de las tres comunidades, qué clase de turismo deseaban que se promoviese ante la reapertura de la puerta. La respuesta fue clara, en favor del desarrollo turístico sostenible en lugar del tradicional. En otras palabras, los vecinos de la zona no solo quieren que el desarrollo turístico que se promueva sea sostenible, sino que piden que sucedan cosas muy concretas para que el desarrollo turístico que se lleve ha cabo pueda ser tomado por ellos como sostenible. El primer elemento que resalta unido a la idea de sostenibilidad turística, es la respuesta a la pregunta, S2Q19, (Que se planifique bien la forma en que se hará la reapertura), o sea que no se deje a los desarrolladores hacer las cosas sin nin-gún tipo de ordenamiento. La planifica-ción del desarrollo turístico es la primera característica que se solicita. La necesi-dad y deseo de orden se refleja además, en la segunda variable incorporada al vector de turismo sostenible, S2Q20 (Que se establezcan requisitos claros para el desarrollo del turismo en el Distrito y Pueblo de San Jerónimo). La necesidad de que existan reglas claras, se hizo extensi-va no solo a la vecindad sino al distrito completo, dándosele una mini-regionalidad esencial al manejo de estos desarrollos. Fue muy interesante escuchar una y otra vez la preocupación de los vecinos sobre el peligro de las acciones unilatera-les- solo de las comunidades entrevista-das- reflejada en el comentario adicional, si los demás habitantes de todo el distrito no se involucran y hacen las cosas soste-niblemente, de nada servirá lo que noso-tros hagamos. Un comentario casi común en las 123 encuestas fue: “no lo dejemos todo para el final, cuando ya no hay arre-glo, anticipemos los problemas” El tercer elemento dentro del vector de turismo sostenible, fue la respuesta a las preguntas: S2Q21. (Que la comunidad periódicamente sea informada sobre como se desarrollan las cosas) y S2Q22. (Que los lideres comunales participen activa-mente en el proceso). Información y parti-cipación es el mensaje que parecen tras-mitir estas dos preguntas. Un dato inte-resante, fue que el Plan Regulador de Uso de la Tierra de recientemente aprobado por la municipalidad de Moravia a la cual pertenecen las tres comunidades estudia-das, menos del 30% de los entrevistados había oído del mismo y sólo 5 personas de las 123 entrevistadas, sabían con alguna precisión en que consistía. Lamentable-mente es común en América Latina, que las autoridades a nivel municipal, tomen decisiones que afectan a la gente, y que sean los afectados, los últimos que son informados. Pero además, pareciera que con la inclusión de la pregunta relaciona-da, con la participación del liderazgo co-munal, la intención sería: queremos que nuestros líderes locales participen ya que es a ellos, muy probablemente, a los que los vecinos de las comunidades les pueden pedir cuentas si algo sale mal. Es intere-sante y muy común en el país este senti-miento de lejanía del gobierno municipal ya no diremos el central, de la gente, cosa que ya se detectó en otras localidades del país (Aguirre, 2000; Heisterkamp et al 2001). El cuarto elemento dentro del vector de turismo sostenible refleja claramente el gran miedo de siempre de las pequeñas comunidades, el cual se resume como dice el costarricense del pueblo en un “dicho” muy común: “Que nos coman el mandado los extranjeros” (comer el mandado signi-fica robarse algo, en este caso los benefi-cios del desarrollo turístico producto de la reapertura de la puerta), definidos los extranjeros, como los no costarricenses, y 12 Participación comunitaria, patrimonio histórico-cultural ... PASOS. Revista de Turismo y Patrimonio Cultural, 5(1). 2007 ISSN 1695-7121 los costarricenses de otras partes del país. Fue interesantísimo que casi en forma unánime, los vecinos de las tres comuni-dades pidieran: a) S2Q23 (Que se esta-blezcan programas para ayudar al desa-rrollo de micro-empresas eco turístico por la municipalidad), b) S2Q24. (Que se les brinde asistencia técnica a los vecinos en el desarrollo de proyectos eco turísticos locales sostenibles) y c) S2Q25. (Que se les brinde capacitación a los vecinos en ecoturismo). Parece haber una conciencia clara, de las limitaciones económicas y empresariales en la zona y a lo que la existencia de estas puede conducir, si el “gobierno municipal” y el nacional no los apoyan a establecerse como empresarios. Los “nuevos empresarios locales” algunos quizás serán de la vecindad pero la mayo-ría se corre el riesgo que sean de fuera de esta y al final los vecinos de la zona aca-baran vendiendo a los “extranjeros” na-cionales o de fuera del país, las propieda-des, como ha sucedido una y otra vez en el país en la ultima década quedando los locales en la categoría de “empleados” de los empresarios extranjeros, lo que quizás no sea malo, pero ciertamente no es muy justo. Es probable que los vecinos de San Je-rónimo, Tornillal y Calle Méndez, hoy no entiendan las sofisticaciones y sutilezas técnicas, que académicos y expertos han dado al concepto de desarrollo turístico sostenible en los últimos veinte o más año s, pero lo que pareciera que tienen muy claro es, que asocian a este, tres ideas muy claras: planifiquémoslo, participe-mos y ayúdennos a ser empresarios no empleados. Es curioso, como este senti-miento, multidimensional, lo que hace es recoger, el deseo de que se les incluya y no como siempre sucede, que quienes por acción u omisión han cuidado el recurso por décadas, quedan marginados empre-sarialmente del nuevo desarrollo turístico y al final el mundo sigue igual, solo que ahora, con una opción menos, para mejo-rar su calidad de vida. El segundo vector, el asociado a la ca-lidad ambiental, su conformación nos pareció interesante ya que todas las va-riables, apuntan a los problemas tradi-cionales que suelen acompañar el desa-rrollo turístico, especialmente en algunos de los lugares mas conocidos del país y de la región centroamericana. La calidad ambiental parece definirse en la mente de los vecinos a través de cuatro problemas: ruido excesivo, tráfico excesivo, problemas con el manejo de las aguas negras y defo-restación elementos que parecen definir la calidad ambiental en la mente de los vecinos. La pregunta que tendríamos que hacernos es: ¿es inusual que estas sean las preocupaciones?, En realidad, noso-tros creemos que no. Imaginemos tres pequeñas comunidades rurales que en la actualidad están alejadas del ruido, tráfi-co y contaminación, con un paisaje de ensueño y situadas a la entrada de uno de los parques nacionales más grandes del país, es tan raro que sea el ruido, trafico, aguas negras y deforestación sus preocu-paciones ante el posible desarrollo turísti-co de la zona. ¡Realmente No! En otras palabras, el temor parece ser, si no hacemos las cosas bien y en una forma ordenada, no participamos en el proceso desde el principio y no nos ayu-dan a ser parte del desarrollo turístico y habitacional que pueda generarse en la zona, si se abre la puerta, podemos aca-bar como comunidad, sin nada y con pro-blemas que ciertamente no tendremos como comunidad la capacidad de manejar y que deterioraran la calidad ambiental de que hoy disfrutamos. Es interesante que el segundo vector este relacionado con las eventuales repercusiones del turismo en términos de la calidad ambiental que la acción de los turistas puede generar. (Aguirre, 2006 a y b; Aguirre, 2000) Un elemento importante, que no se debe olvidar es que el hacer mal las cosas en este caso seria inexcusable, ya que el área en la actualidad esta semi-virgen, con la puerta cerrada hace mas de una década, con el camino casi como estaba en sus orígenes hace doscientos o más año s y que el precio de hacer las cosas mal, o diferente a como los vecinos de la zona quieren que se haga seria ambientalmen-te muy alto, y no solo perjudicaría al área y su desarrollo a largo plazo, sino también a uno de los patrimonios históricos cultu-rales más valiosos del país: El camino que ayudo a desarrollar la Costa Rica de hoy. Juan A Aguirre 13 PASOS. Revista de Turismo y Patrimonio Cultural, 5(1). 2007 ISSN 1695-7121 Cuatro lecciones: ¿nuevas o viejas ideas? La primera lección es que no fue la ca-lidad ambiental como todos supondrían sino el desarrollo turístico sostenible el primer componente. Dado que estas co-munidades, tienen hoy calidad ambiental, el primer paso para no perderla, es que el desarrollo turístico sea sostenible. La segunda lección, el desarrollo turís-tico sostenible, para estas tres pequeñas comunidades es lo deseable pero, además con gran claridad señalaron, como lograr-lo: planifiquémoslo, queremos participar, ayúdennos a convertirnos en empresarios y entrénennos en ecoturismo. De no lo-grarse este proceso, la frase de Santana será una vez más verdad. “El patrimonio cultural será más fácil de integrar a la oferta turística cuanto más separado este de la población local.” (Santana, 2003) y de entregar al “comercio” añadiríamos nosotros. La tercera lección, sobre la calidad ambiental, se refleja en lo que estas pe-queñas comunidades poseen, y no desean que se les deteriore. Para una “mente occidental civilizada”, tres de las cuatro cosas que ellos asociaban a la calidad ambiental, el ruido, el tráfico y la defores-tación, las pudimos entender y racionali-zar rápidamente, el problema se nos pre-sento con las aguas negras y servidas. La respuesta resulto muy lógica cuando un vecino nos lo aclaro, “Mire amigo, la elec-tricidad, el teléfono, el agua, la calle pa-vimentada ya lo tenemos. La basura la recogemos o la quemamos en el peor de los casos, pero las aguas negras no las podemos manejar por nuestros propios medios y si estas no se controlan adecua-damente nos enfermamos hay que señalar que hoy, ninguna de las tres comunidades posee alcantarillado sanitario. De repente esa respuesta nos hizo recrear mental-mente el caso de muchas comunidades rurales pobres de América Central, donde las aguas negras y servidas corren por la calle, gracias a la inexistencia de alcanta-rillado sanitario. El pueblo una vez mas nos daba una lección de lógica y realidad. Finalmente, la ultima lección, a veces la más difícil de aceptar fue, la necesidad de consultar a la gente. Hay que pregun-tarle a la gente, que problemas tienen y hacerlos participar de la solución. Pero podremos, hacer esto hoy en un mundo global, donde cada vez mas, vemos como la solidaridad se pierde y el autoritarismo gana una y otra vez la partida, en aras de la eficiencia económica. El que mejor co-noce la solución de un problema es el que lo sufre, el turismo sostenible, jamás se lograra por decreto, pero sí por participa-ción. La participación y la consulta son esenciales, cuando queremos mezclar el patrimonio histórico y la calidad ambien-tal. Conclusiones. El turismo sostenible es hoy una espe-cie de concepto mágico, todos lo buscan hablan del, opinan y discuten sobre este y sin embargo es una realidad que parece nos evita una y otra vez, ya que son miles los casos en América Latina, donde las cosas se hacen como no se debiera. Es importante señalar primero que nada, que el análisis de la situación socio económico del área, identifico, las dos grandes preocupaciones que los vecinos sienten debido a la eventual reapertura de la puerta. Primero, el deseo de que el desarrollo turístico que se implemente y promueva en la zona sea sostenible y se-gundo, que la calidad ambiental y de vida que hoy disfrutan los miembros de las comunidades, no se vea afectada por el desarrollo turístico que es casi inevitable que suceda en el área si la puerta se re-abre. Preocupaciones que fueron amplia-mente ratificadas por los análisis de com-ponentes principales realizados La segunda conclusión del estudio es que los vecinos tienen una idea muy clara de que requisitos debería cumplir el desa-rrollo turístico que se produzca en la zona producto de la reapertura de la puerta para que, ellos consideren este como sos-tenible y que se resumen en siete deseos concretos: 1- Que se planifique bien la forma en que se hará la reapertura 2- Que se establezcan requisitos claros para el desarrollo del turismo en el Dis-trito y Pueblo de San Jerónimo. 3- Que la comunidad periódicamente sea informada sobre como se desarrollan las cosas. 14 Participación comunitaria, patrimonio histórico-cultural ... PASOS. Revista de Turismo y Patrimonio Cultural, 5(1). 2007 ISSN 1695-7121 4- Que los lideres comunales partici-pen activamente en el proceso. 5- Que se establezcan programas para ayudar al desarrollo de micro-empresas eco turístico por la municipalidad. 6- Que se le brinde asistencia técnica a los vecinos en el desarrollo de proyectos eco turísticos locales sostenibles. 7- Que se le brinde capacitación a los vecinos en ecoturismo. Las condiciones del desarrollo turístico sostenible, subyacentes a las 7 condicio-nes o deseos antes expresadas, parecieran condiciones “perogrullescas” pero son esos siete puntos los que una y otra vez se olvidan, violan y tergiversan, cuando de repente se observa que el desarrollo turís-tico de un área no es lo que se esperaba que fuese y/o que esta deteriorando la fibra económica y moral de un área, en beneficio de unos pocos. Con respecto a la calidad ambiental, los cuatro elementos que se asociaron a esta: ruido excesivo, tráfico excesivo, pro-blemas con el manejo de las aguas negras y deforestación, confirman una vez mas, cuatro de las cosas, de que las comunida-des se quejan, que se presentan y que no están en condiciones económicas, organi-zativas e institucionales de manejar por si mismas, para mantener los niveles de calidad de vida, que se disfrutaban antes que llegara “el desarrollo económico” ha generarse por el turismo y los turistas y donde sino haya apoyo del gobierno cen-tral y municipal, los resultados serán deterioro ambiental y moral de la socie-dad. Un elemento que debe meditarse se-riamente es el miedo que parece haber de parte de los vecinos, de que se les margi-ne del proceso de toma de decisiones que decidirá sobre la calidad de vida futura de sus comunidades reflejado en la insisten-cia de que sus lideres comunales partici-pen activamente en la toma de decisiones que los afectaría de cara al futuro si se reabre la puerta. El mensaje es claro, el gobierno municipal esta un tanto lejos de sus vidas y problemas y es difícil pedirle cuentas. Este sentimiento es una queja común, en una sociedad que suele ser “muy piramidal” en la toma de decisiones, producto de su desarrollo socio-cultural e historia política. Empresarios no empleados es el otro mensaje. Los vecinos desean un apoyo claro de la municipalidad para convertirse en empresarios turisticos, y poder desarrollar proyectos, que les permitan el acceso ha finaciamiento y capacitacion en ecoturismo y practicas empresariales sostenibles, de otra forma muchos de ellos, ya se ven, como empleados de los empresarios que llegaran de fuera a desarrollar el area, como ha sucedido en muchas comunidades del pais. Pero podra y sobretodo querra el gobierno hacer esto, quien sabe. De lo que no cabe duda, es que el gobierno municipal les debe, a quienes han sido los guardianes de un patrimonio natural e historico por decadas este apoyo. Que se lo deban es una cosa, que lo paguen habra que verlo. Que lo pueden hacer, sin duda pueden que quieran hacerlo, habra que esperar. La duda que quedaría por elucidar como resultado del estudio y del análisis estadístico realizado es, si lo resultados obtenidos no son en realidad un vaticinio, de lo que ha sucedido una y otra vez en América Latina, cuando comunidades rurales pequeñas y apacibles enfrentan de pronto, la vorágine del desarrollo tu-rístico, desarrollo que las ahoga y avasa-lla y que son incapaces de manejar sin un apoyo externo real y focalizado. La res-puesta a esta duda, es un tanto “ilógica” si sabemos lo que tenemos que hacer y sobretodo las comunidades saben que quieren, porque usualmente no se hace lo que las comunidades solicitan. La lógica de los resultados es indiscutible, lo que desean los vecinos se sabe y las fallas del sistema se han documentado por antici-pado. Esperemos que no suceda, lo que los vecinos temen, y han pedido que se evite, mediante sus respuestas en este estudio Finalmente metodologicamente se cumplieron con los objetivos planteados y se probo la hipotesis planteada, lo cual sin duda muestra que, los analisis estadisticos pueden conducir a resultados utiles y practicos, si este proposito se plantea desde un principio como fin utilitario ultimo de las ciencias sociales. Juan A Aguirre 15 PASOS. Revista de Turismo y Patrimonio Cultural, 5(1). 2007 ISSN 1695-7121 Bibliografia Aguirre, Juan 2000 El Desarrollo de las comunidades alrededor de las areas protegidas: el caso del Parque Nacional Manuel An-tonio. Ministerio de Ambiente y Ener-gia .Camara de Comercio, Industria y Turismo de Aguirre. Seminario de Ce-lebración de los 28 Años del Parque Nacional Manuel Antonio. Vision del Desarrollo Turístico del Canton de Aguirre para el Año 2010. Hotel Para-dor .Manuel Antonio. 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