ARTÍCULO
Empresas consignatarios y estibadoras en el Puerto de
la luz y de las Palmas: estrategia y organización
Miguel Suárez Bosa
Universidad de 'Las Palmas de Gran Canaria
I. INTRODUCCIÓN
Las características del tráfico marítimo
(imprevisibilidad de arribada de los barcos,
necesidad de rapidez en la ejecución de las
tareas para reducir la estancia en los puertos
por razones comerciales y económicas), da
lugar a una figura empresarial específica propia
de la actividad portuaria. Efectivamente, con la
introducción de la navegación a vapor a finales
del siglo XIX, ante la complicación progresiva
de los trámites burocráticos en los puertos y
como consecuencia de la intensa competencia
para obtener más carga y mejores fletes, los
armadores y navieros comenzaron a nombrar
personas físicas o jurídicas locales para llevar
acabo las funciones que antes cumplía el capitán.
Surge así la figura del agente marítimo o
consignatario de buques, definido como "la
persona jurídica que tiene a su cargo las gestiones
de carácter administrativo, de carácter técnico
y de carácter comercial relacionadas con
la entrada, la permanencia y la salida de un
buque en un puerto determinado, así como la
supervivencia o la realización de las operacio-
Parabiblos, n.7 7 (7998)
nes de recepción, carga, descarga y entrega de
las mercancías ..." (1).
En las investigaciones sobre el transporte
marítimo se ha profundizado sobre todo en las
facetas relacionadas con las compañías navieras,
especialmente las compañías de línea
desde un punto de vista descriptivo en el campo
de la historia empresarial (2\ pero son pocos los
trabajos realizados en España sobre la figura de
los consignatarios como empresarios. En el
caso de Canarias, contamos con la obra de
Quintana Navarro (1985) sobre los consignatarios
y su relación con la burguesía canaria en
los comienzos del Puerto de La Luz; las del historiador
inglés de la escuela de Liverpool P.
Davis (1980), cuya obra sobre la empresa Elder
Demspter, originaria de Liverpool pero radicada
largo tiempo en Canarias, está inspirada en
la cOlTiente llamada house history; y en la
misma línea se ubica el libro de Guimerá
Ravina (1989) sobre la casa Hamilton.
(1) Definición de Gonzá]ez Lebrero (1989, pág. ]2).
(2) Es abundante la bibliografía sobre empresas y empresarios
navieros, especialmente sobre empresas COllcretas. Desde el
campo de la historia económica han de señalarse los trabajos de
Torres Villanueva y Va]daliso Gago
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Miguel Suárez Basa
En torno al Puerto de La Luz y de Las
Palmas, que inicia su actividad como puerto
moderno a finales del siglo XIX (31, se asentó
desde esas fechas un grupo empresarial con
características propias, que tenía como eje central
de su actividad la estiba, desestiba y carga y
descarga de buques, pero que ejerció, también y
paralelamente, otras actividades. Son los conocidos
como consignatarios, agentes marítimos
encargados de efectuar todas las operaciones
que antes se han señalado y que, en el caso grancanario
frente a otros puertos españoles, ofrecen
la peculiaridad de englobar tanto la consignación
propiamente dicha como la carga y descarga,
hasta que recientemente se han disociado las
empresas que ejercen una u otra actividad.
A 10 largo de este dilatado período las
empresas consignatarias radicadas en el Puerto
de La Luz y de Las Palmas ensayaron diversos
tipos de acciones destinadas a adaptarse a los
cambios producidos en el entorno, bien fueran
éstos de naturaleza institucional o tecnológica;
por ello, el hilo conductor de esta exposición
está centrado en la estrategia empresarial (41. En
este trabajo, acorde con la anterior hipótesis,
nos proponemos describir, analizar y explicar
la evolución de las empresas consignatarias en
el Puerto de La Luz y de Las Palmas, insertadas
dentro del marco socio-económico donde operan,
para lo cual nos parecen adecuadas las formulaciones
teóricas de Nelson y Winter (1994)
o Sapelli (1996).
(3) Su construcción inicial (se realizaron sucesivas ampliaciones),
por la empresa de nacionalidad británica Swanston y Cía, duró
desde el inicio en 1883 hasta 1903. (Véase Quintana Navarro,
1985, p:ígs. 27-32).
(4) La literatura sobre la estrategill empresarial es ya abundante y ha
evolucionado desde la concepción de A. Chancller formulada en
los años sesenta, que se basaba en la determinación de los fines
y objetivos básicos a largo plazo y la adopción de líneas de
acción y de asignación de recursos necesaria para conseguir
estos objetivos; ha de incluirse, según proponen Porter y otros,
aspectos tales como la relación de la empresa con su medio
ambiente, la identificación de las oportunidades y de las amenazas
que éste ofrece, y la evalución de sus fuerzas y debilidades.
(Una valoración sobre el concepto de estrl\tegia puede verse en
Gnrcía Falcón, 1995, págs.. 192-194).
20
Estas empresas adquirieron su fisonomía
básica en las últimas décadas del siglo anterior
y las primeras del actual, etapa en la que predominan
las firmas extranjeras; en el período
de entreguerras formaron la Asociación
Patronal de Consignatarios de Buques de
Las Palmas (APCBLP) grupo de interés cahesionado,
que perdura en la actualidad, aunque
su incidencia en la vida empresarial tenga en la
actualidad diferente naturaleza y haya quedado
reducido a mera representación institucional.
La progresiva mecanización del Puerto desde
las décadas de 1950 y 60, con la containerización
del transporte de mercancías y el aumento
de rapidez y capacidad de los buques, hace que
cambie el entramado empresarial portuario,
produciéndose la concentración en el sector de
estibadoras, cuestión que sanciona la propia
legislación (creación de SESTIBA, 1989), si
bien la atomización permanece en el sector de
consignación propiamente dicho. Así pues, después
de la Introducción (1), tratamos de la configuración
histórica de las empresas consignatadas
(H); la formación de un grupo de interés
de carácter corporativista en torno a la
APCBLP en el período de entreguerras (III); el
comienzo de la mecanización del Puerto y su
incidencia en el entramado empresarial y , por
último, la estructura moderna de la actividad
empresarial en el puerto (IV).
11. LA CONFIGURACIÓNmSTÓRICADE
LAS COMPAÑÍAS CONSIGNATARIAS
Cuando el Puerto inicia su despegue, a
finales del siglo XIX, la actividad de las empresas
(bien fuera consignación, carboneo o de
servicios) estaba en manos de firmas extranjeras,
inglesas sobre todo; las autóctonas eran
pocas, pequeñas y su actividad iba a remolque
de las anteriores (5). El establecimiento de com-
(5) Tal es la opinión de Quintana NavaITo (1985), autor del estudio
más serio sobre el empresariado portuario en esta etapa y a
quien sigo en la exposición de este apartado.
Parabiblos, n.7 7 (1998)
Empresas Consignatarios yEstibadores en el Puerto de La Luz yde Las Palmas: estrategia yorganización
pañías extranjeras en el recinto grancanario se
inscribe en la dinámica expansiva del capitalismo
internacional durante el período que va de
1870 a 1914, en el que aumenta espectacularmente
la arribada de buques al Puerto de La
Luz para repostar carbón, cargar y descargar
mercancías y productos agrícolas de exportación.
En muchos casos, estos empresarios
recién llegados podían aprovechar la experiencia
de algún conciudadano que llevara tiempo
establecido en la isla. A lo largo de los primeros
años se establecieron siete importantes firmas
extranjeras con fuertes apoyos financieros,
que utilizaban el Puerto de La Luz como lugar
de aprovisionamiento y de repuesto (6); a su vez,
tenían los servicios de consignación como una
más entre la multiplicidad de tareas que realizaron
en el puerto, aunque tal vez fuera la principal.
La casa matriz procuraba consignar sus
propios barcos para ahorro en costes de agencia,
es decir la compañía de origen (alemana o
inglesa, generalmente) establecía una sucursal
en el puerto grancanario (o tinerfeño, pues casi
todas tenían sucursal en el otro gran puerto
canario) que atendía las necesidades de los
navíos de su propiedad. Por poner algunos
ejemplos, no es extraño que, de seis líneas de
nacionalidad alemana que hacían escala en el
Puerto de La Luz con destino a África o
América, cinco (entre ellas la Woermann Linie
A.G.), fueran consignados por los Sres.
Woermann Linie Ltda. Por su parte, el mayoritario
tráfico de origen inglés era consignado de
la siguiente manera: Miller y Cía., tenía a su
cargo la atención de dos compañías; Richard
Yeoward consignaba a los barcos de Yeoward
Line; mientras que Elder Dempster hacía lo
mismo con seis, entre ellas la propia Elder
(6) Estas empresas fueron las de nacionalidad inglesa Elder
Oempster (1884), Blandy Brothers (1885), Wilson Sons (1889,
Cory Brothers (1904), Carbonera de Las Palmas (1909), Miller
y Cía y la alemana Woe1111ann Linie, (desde 1906). (Ver el
artículo "Las Casas carboneras en el Puerto de La Luz", pubUcado
en La España Nueva, abril de 1934, y también Quintana
Navarro (1985, págs. 51-68).
Parabiblos, n.7 7 (7998)
Dempster Lines Ltd. Otras compañías que utilizaban
el puerto grancanario como puerto de
escala, estuvieron también consignadas por
empresas inglesas o, en algunos casos, por
agencias de su propia nacionalidad, como la
sueca Rederiaktiebolget Bur atendida por la
Cía. Escandinava de las Islas Canarias. Por su
lado, las locales consignaban básicamente
compañías españolas: a nombre de los Sres.
Bautista y Martinón estaban los barcos de
Transmediterránea y Trasatlántica, aunque
también algunas extranjeras, como la norteamericana
American West African Line, de
Nueva York, amén de algunas más de otras
nacionalidades; Juan Bordes Claveríe, SL, en
fin, servía a los barcos de las compañías Ibarra
y Cía. y Sota y Aznarm.
Quedó dicho que la estrategia de las
empresas en esta etapa se fundamentó en la
diversificación de actividades, cuestión que
queda bien reflejada en el Cuadro 1.
Controlaban los servicios esenciales de todo
gran puerto de escala, es decir, aprovisionamiento
a los buques en tránsito (carboneo,
aguada y víveres); reparaban las averías ocasionales,
e incluso llegaron a construir embarcaciones
para el servicio interior para lo que
precisaban la instalación de astilleros y varaderos.
A partir del carboneo y las consignaciones
como funciones básicas, las compañías extendieron
sus actividades en la fase expansiva de
la economía canaria, entre 1890 y 1910, ramificaron
sus intereses insertándose en la casi totalidad
de los sectores económicos locales, a la
vez que pusieron los mecanismos para facilitar
las transacciones comerciales a larga distancia
a través de sucursales de bancos (el fundamental
fue el Bank ofBritish West Africa, gerenciado
por la compañía Elder Dempster), o actuando
como banqueros autónomos o casas bancarias;
se convirtieron en comisionistas, agentes o
delegados de prestigiosas compañías de seguros
internacionales como la Lloyd's; etc.
27
Miguel Suárez Basa
CUADRO 1
ACTIVIDADES DE LAS EMPRESAS CONSIGNATARIAS HASTA LA GUERRA CIVIL
NACIONALIDAD I 11 III IV V VI VII VIII IX X XI
BLANDY BROTHERS & BRITÁNICA X X X X X X X X X MAQUINARIA
CO. SHIPPING (S.L.) AGRÍCOLA,
EFECTOS
NAVALES.
BOSCH y SINTES (S.L.) ESPAÑOLA X X X X
CÍA. NACIONAL DE BRITÁNICA X X
CARBONES
MINERALES (S.L.)
CÍA. CARBONERA DE BRITÁNICA X X X
LAS PALMAS, LTDA.
CORY BROTHERS & BRITÁNICA X X
CO., S.A.
DE LA TORRE ESPAÑOLA X X X X
HERMANOS, LTDA.
ELDER DEMPSTER BRITÁNICA X X X X X X PESCA, MATERIAL
(G.C.), LTD. CONSTRUCCIÓN,
NAVIERA Y
COMESTIBLES.
GRAND CANARY BRITÁNICA X X X X X X EFECTOS
COALING COMPANY NAVALES
LTD.
JUAN BORDES ESPAÑOLA X
CLAVERÍE, S.L.
KHUNER HENDERSEN BRITÁNICA X X X FÁBRICA DE
&CO. ABONOS
MIGUEL CURBELO y ESPAÑOLA X X X X
CÍA, S.L.
MILLER & CO., S.L. BRITÁNICA X X X X X X X X X X NAVIERO,
COMESTIBLES Y
EFECTOS NAVALES
OTTO THORESEN NORUEGA X
RAFAEL GUTIÉRREZ ESPAÑOLA X
BRITO, S.L.
TIMOTEO CAHZAL, S.L. X COMISIONISTA
WILSON, SONS & CO., BRITÁNICA X X X X X
LTD.
WOERMANN LINNIE ALEMANA X X
YEOWARD BROTHERS, BRITÁNICA X X X ABONOS
S.L.
FUENTE: QUintana Navarro (1985) Pérez y Enríquez Padrón (1914) y Ramonel y Obrador (1917).
COLUMNAS; 1, consignatarios; JI. carbón; III. aguada; IV, víveres; V, mmadores; VI, astilleros; VII, banca; VIII, importación/exportación; IX, almacenista y comerciante;
X, seguros; XI, otros. Elaboración propia.
22 Parabiblos¡ n.11 (7998)
Empresas Consignatarios yEstibadores en el Puerto de La Luz yde Las Palmas: estrategia yorganización
Paralelamente, procuran expandirse a otros
sectores punta de la economía insular en busca
de rentas extras: así se aseguraban el control de
las exportaciones agrícolas; eran grandes almacenistas;
realizaban el transporte marítimo
entre islas o tenían empresas de captura y elaboración
de conservas de pescado. Elder
Dempster es el caso paradigmático de estas
empresas. Quedó constituida en Las Palmas
como sucursal de la casa matriz de Liverpool,
para servir a la escala de las líneas British and
African Steam Navigation Co. Ltd. y a la de la
Union-CastleMail Steamship Co. Ltd. La concesión
obtenida para establecer una estación
carbonera la cubre con su filial denominada
Gran Canary Coaling Co., que empieza a funcionar
dos años después y realizaba labores de
varadero y astillero. A partir de estos dos eslabones
vienen los negocios vinculados a las actividades
de la casa matriz: la exportación de
plátanos al mercado británico la ejercía a través
de Elder and Fy.tfes, Ltd. y de Fyffes Limited,
desde de 1908; fundó la CompaFíía de Correos
Interinsulares Canarios (1889), para atender el
tráfico interinsular en régimen de concesión;
mientras que la Compañía de Embarcaciones
Canarias (1908) cubría los servicios flotantes
en el interior del puerto (8). También ejercía de
almacenista y distribuidora de materiales para
la construcción (cementos, maderas, ladrillos,
etc.) o administraba hoteles, incluso regentaba
un establecimiento del tipo de "aceite y vinagre"
en la populosa calle Triana, amén de otras
actividades.
Estas empresas extranjeras no dudaron en
concertarse cuando les fue preciso y establecer
(8) Para la Cía. de Correos Interinsulares, ver Díaz Lorenzo
(1989). Para el resto Quintana Navarro (1985), págs. 67-68) y
Rodríguez Díaz de Quintana (1989, pág. 105). En la escritura de
constitución de alguna de las empresas en las que Elder entró a
formar parte, se refleja esta variedad de actividades. (Ver la
documentación correspondiente a esta y otras empresas en el
Archivo de la Autoridad POI'utaria de Las Palmas (AAPLP).
Para Elder Demsptcr los legajos l y 4. Asimismo, en los
Anuarios Comerciales citados en la bibliografía queda rellejada
la actividad de las di ferentes empresas.
Parabiblos, n. 11 (1998)
acuerdos para repartirse el mercado: por ello
acordaron unas condiciones comunes para el
negocio de abastecimiento de carbón, mediante
el aneglo conocido como "Atlantic Islands
Depot Arrangement" (9\ que fijaba un precio
único para el carbón servido en el Puerto de La
Luz. Cada compañía tenía un porcentaje del
beneficio del total del negocio, y habían de
ingresar 3 chelines en un fondo común cuando
se sobrepasaba este cupo. Este depósito se distribuía
luego entre las casas que no llegasen a
cubrir la meta asignada.
En esta etapa impera la libertad de mercado
en la contratación, lo que permite a las
empresas, singularmente a las extranjeras,
maniobrar prácticamente sin restricciones en el
mercado de trabajo; no obstante, es cierto que
tuvieron que hacer frente a algunas huelgas
portuarias, como la de 1911, centrada en las
labores de carga y descarga de carbón, de notable
dureza, en demanda de aumentos salariales
(10). Pero la fuerza y el perfecto entendimiento
de las empresas en el mercado antes aludido,
les permitía hacer frente a estas demandas sin
mayor peljuicio para sus intereses.
Al asumir las compañías extranjeras la
principal función de atender los servicios del
Puerto, las empresas canarias (Salvador Cuyás,
Miguel Curbelo y Cía., o Juan Bordes Claveríe)
quedaron relegadas a desempeñar un papel de
segundo orden en el conjunto de las actividades
portuarias. No obstante, el Puerto sirvió de
palanca para el surgimiento de un importante
conjunto de empresas canarias, pues alguno de
los más destacados comerciantes de la ciudad
tenían la actividad portuaria como predominante
o como complementaria. La empresa más
significativa fue Miguel Curbelo y Cía. (el "rey
del puerto", como se le apodó), un self made
(9) El acuerdo se rompió entre 1910 Y 1912. Ver Quintana Navano
(1984, p. 57) Y Rodríguez y Díaz de Quintana (1989, págs.
110-]]4).
(JO) Véase Suárez Basa (1995, págs. 275-287 y 1997).
23
Miguel Suárez Bosa
man, que, con un capital ahonado en la emigración,
montó una poderosa empresa portuaria
destinada a jugar un importante papel en la economía
canaria (11). Llegó a cuestionar, desde sus
cargos en la Cámara de Comercio y la Junta de
Obras del Puerto de la que fue presidente, la
hegemonía de las empresas foráneas. Es así, a
través de la consignación, como los comerciantes
u otros modestos capitales isleños "entraron
en contacto con el mundo portuario, se relacionaron
con las firmas extranjeras, incidieron en
los servicios marítimos".
El interés de esta etapa para estas empresas
estriba en que fue un período de aprendizaje
para la posterior configuración de las empresas
consignatarias, que seguirán a lo largo de su
trayectoria estos métodos aprendidos. Sin
embargo, los consignatarios canarios no podían
equipararse a las compañías extranjeras, pues
"tenían cerrado el camino a la consignación de
las grandes líneas británicas, francesas o alemanas,
que aportaban el mayor volumen de tráfico
en un puerto de escala como el de La Luz",
por lo tanto, su campo de actuación quedaba
prácticamente reducido a la consignación de las
líneas de vapores nacionales, como se vio
antes.
111. LA CONSOLIDACIÓN DE LAS
EMPRESAS CONSIGNATARIAS y
LA ASOCIACIÓN DE INTERESES
El período de entreguerras, considerado
globalmente, es de crecimiento y modernización
de la economía canaria, con notable incremento
de la exportación y del tráfico portuario,
si bien en la década de 1930 el comercio exterior
se vio afectado por la crisis económica (12);
comienza la sustitución del carbón por el fuel
como combustible, lo cual obliga a una reorga-
(ll) Además de la consignación, tuvo intereses como almacenista,
armador de buques, importación y exportación y agente de
seguros. (Quintana Navarro, 1985, págs. 11 9-126).
(12) Este proceso ha sido analizado en Suárez Basa (1996).
24
nizaclOn en las actividades empresariales y a
una reubicación de la mano de obra, cuestión
que ocasionó notables conflictos laborales (13).
Las empresas extranjeras mantienen la iniciativa
en la actividad portuaria, se consolida alguna
de las bien acompañadas por una constelación
de pequeñas entidades de corta vida, fenómeno
que será habitual en años posteriores. Los
prósperos años veinte ven aparecer nuevas
empresas hasta ser 23 las registradas en la
Asociación Patronal de Consignatarios de
Buques de Las Palmas (APCBLP) en 1929, de
los cuales 14 eran extranjeras; en la década
siguiente ascendían a 34, con 1.612 obreros
empleados (14).
En estos años de febril actividad, la
creación de una organización patronal que acogió
a la mayoría de las empresas del sector sólo
alguna poco importante quedó fuera- fue
un hecho trascendente; es en su seno donde
se diseña la estrategia de las poderosas empresas
consignatarias. La constitución de la
APCLBP (15) supuso un elemento clave para el
desenvolvimiento de los negocios portuarios,
responde a la tendencia, observada en la mayoría
de las sociedades europeas desde finales del
siglo pasado, a configurar organizaciones de
intereses, que en el período de entreguen"as
alcanzan "un elevado nivel de integración organizativa,
con tendencias a consolidar posiciones
de monopolio'; (16). Se constata que la vitali-
(13) Suárez Bosa (1995, págs. 279-287).
(14) Los datos de asociados en 1929 en Memoria de la APCBLP
(1929); las empresas de 1933 en LiIJlv de registro de la
APCBLP; los de obreros en Ministerio de Trabajo y Seguridad
Sacial (1933).
(15) El acta fundacional es del 25 de enero de 1925, Libro de Actas
de Junta General de Asociación Patronal de Consignatarios de
Buques de Las Palmas (LAJG, en adelante), Tomo 1. (Archivo
de la APCLBLP).
(16) Se ha señalado por Cabrera y del Rey (1996, pág. 441) que el
sistema político de la Restauración estableció las bases legales
a través de las que se favoreció la expansión del corporativismo.
Hay diferencias semánticas entre términos como "grupos dc
interés", "grupos de presión" o, en fin, "lobbies", pero aquí se
utiliza el primero paTa expresar tanto la agrupación de intereses
como su acción colectva; asimismo, puede haber confusión conceptual
entre "organización patronal" y "organización empresarial",
según los autores señalados (1988, págs. 141-164). Para
Parabiblos, n.17 (1998)
Empresas Consignatarios yEstibadores en el Puerto de La Luz yde Las Palmas: estrategia yorganización
dad asociativa en el Puerto de La Luz es propia
de una progresiva instauración de un marco
corporatista, y la constitución de una asociación
patronal responde al deseo de las empresas
de coordinar sus estrategias, en aspectos relacionados
tanto con el control de la demanda de
mano de obra como con la fijación de tarifas de
los servicios prestados, por ejemplo, alas
comerciantes locales o a los exportadores (17).
La APCBLP nació bajo el control de las
empresas extranjeras, impulsoras iniciales del
proceso organizativo; sus directivos o personal
de confianza, de nacionalidad española o foránea,
controlaron los puestos clave de la Junta
Directiva (18). Sólo a partir de los años treinta,
cuando la legislación sobre asociaciones impedía
a los no nacionales ostentar cargos en las
juntas directivas de las asociaciones profesionales,
la dirección pasó a manos de empresarios
locales (19).
Es en el seno de la Asociación donde se
negocia el precio de los servicios prestados a
las empresas de comerciantes o exportadores,
éstos las organizaciones patronales son aquellas que han de relacionarse,
como elemento de su razón de ser, con los obreros;
mientras que las organizaciones empresariales acogen y sc definen
por aquellos hombres de negocios que las integran, tengan
o no asalariados a su cargo. No obstante, señalan los autores
citados, las organizaciones no marcaban tan nítidamente los
papeles, sino que Jos mezclaban, e illcluúm en su práctica tanto
la defensa de los intereses laborales como la de los puramente
económicos. Este repertorio lo podemos aplicar a la APCBLP.
(17) Los acuerdos conllevaban la fijación de tarifas por los servicios
prcstados, fundamental, pueden documcntarse en las Actas de la
Junta Directiva y de la Junta General de la APCBLP (LAGO
Tomo II y LAJG Tomo, 1I).
(18) El 29 de enero de 1925 fue elegida la primera Junta Directiva
dcfinitiva (antes hubo una provisional) compuesta de la siguiente
manera (entre paréntesis la casa a la que representa):
Presidente, Emilio Ley Arata (Elder Dempster Grand Canary
Ltd.); Vice-presidente, Carlos F. Shoop (Woermanll Linie Ltd);
Tesorero, Arturo Henderson Davies (Cía. General Canaria de
Combustibles, S,A,); Vocal 1°, Eduardo Fisher (Cía. Yeoward
Bros); Vocal 2°, Gerardo Miller (Miller y Cía.). Todos elegidos
por unanimidad, excepto el último que exigió votación. El resultado
nos puede dar idea de la correlación de fuerzas en el interior
de la APCBLP: el elegido, de nacionalidad inglesa, obtuvo
14 votos frente a 3(!) que fueron para el canario Camilo
Martinón NavaITo (de la empresa Bautista y Martinón), (Acta
del 20-1-1925, LAJG, Tomo I).
(19) El artículo 27 de Ley de Asociaciones Profesionales, de 8 de
abril de 1932, exigía ser español para poder formar parte de las
j~ntas directivas.
Parabiblos, n. 11 (1998)
los acuerdos con los trabajadores o, incluso,
aspectos burocráticos, como la gestión de la
cuota del retiro obrero. La estrategia de los consignataJios
era repercutir los aumentos de costes
en los precios que cobraban a comerciantes,
agricultores o industriales locales, lo cual se
veía facilitado por su situación de monopolio
. de abastecimiento de la isla, al no haber, en
aquellos años, sustituto para el transporte marÍtimo.
Téngase en cuenta que la entrada y salida
de todo tipo de mercancías había de hacerse por
el Puerto hasta la implantación de la navegación
aérea en los años treinta, y aún en la actualidad
la casi totalidad de la importación y
exportación se efectúa a través del Puerto.
De ahí también su estrategia de integrar a
todas las empresas en el seno de la APCBLP,
declarando la hostilidad a aquellas que permanecían
fuera o no respetaban los acuerdos y
decisiones de la Asociación (2[1). La actividad de
la Patronal de Consignatarios se orientó a controlar
las labores portuarias, principalmente en
dos aspectos: carga y descarga de mercancías y
abastecimiento de combustible. Por eso, para
su funcionamiento, define una cláusula de
"interés común", con la finalidad de clarificar
la actuación en las dos actividades básicas de
sus asociados ("consignatarios del carbón" y
"de carga blanca", es decir carga y descarga de
mercancías), "con el fin de (pudieran) desenvolverse
separadamente mientras los conflictos
de unos no invadan la esfera de acción propia
de los otros, y evitar dudas de lo que se (entendiera)
por interés común" (21), De hecho constituyeron
un pool de empresas que monopolizaron
el negocio, y ponían barreras de entrada a
las que no formaran parte de la Asociación, táctica
no alejada de otros ámbitos empresaria-
(20) LAJG, Tomo I y Libro de Actas de la JUllta Directiva de la
APCBLP (LAID, en adelante), T.!.
(21) Lo precisan acordando que no podían tener tal consideración y,
por tanto, no podían ser objeto de acuerdos o resoluciones que
obliguen a todos los asociados aquellos conflictos que afecten a
una sola de dichas clases de consignatarios. (Acta 25-1-1925,
LAJG, Tomo 1).
25
Miguel Suárez Basa
les 1m. Por ejemplo, cuando los exportadores de
plátanos quisieron crear su propia compañía
estibadora, desde la asociación se lanzó la consigna
de que, o bien entraban en la Asociación
y por tanto aceptando las reglas que ésta impusiera,
o bien se les declaraba el boicot (23), Ahora
bien, cuando el Gobierno de la Dictadura de
Primo de Rivera, alarmado por la carestía de
los servicios portuarios, muy en su línea política,
quiso crear un monopolio estatal en manos
de la Junta de Obras del Puerto (24\ los consignatarios
reaccionaron en defensa de la "libertad
de empresa" (sic).
Hemos de referirnos a otras prácticas llevadas
a cabo por las empresas en estos años.
Por ejemplo, es del mayor interés la unión de
empresas para utilizar menos trabajadores, propiciar
prácticas monopolísticas (25) y hacer frente
a la crisis sobrevenida en los años treinta, en
la que el descenso del tráfico marítimo se unió
a la progresiva sustitución del carbón por combustible
líquido, aspecto que tuvo honda repercusión
en la estrategia empresarial y del mercado
de trabajo, no exenta de conflictividad; o, en
fin, su predisposición a coludir para lograr con-
(22) Veáse Comín y Martfn Acelia (1 966b).
(23) Los exportadores de frutas, nucleados en torno al Silldicato
Agrícola del Norte de Grall Callaria, crearon su propia consignataria,
la Agellcia COllsignatal'ia y de Exportacicín. Inicialmente
ingresó en la Asociación pcro sc dio de baja el 10-8-1929.
(Acta del 10-08- l 929. LAJG, Tomo I1), En 1934. los exportadores
manifestaron su deseo de prescindir de los consignatarios
en las labores de llevar la carga hasta el costado de los buques,
en lo que encontraron el apoyo de algunos consignatarios
(Branko Sirola) que estaban en tmtos con aquéllos. Ello les
cost6 la sepamción de la Asociaci6n (Acta del 14-12-1934,
LAJG. Tomo 1I). También los comerciantes intentaron romper el
monopolio mediantc acuerdos directos con los trabajadores. En
ambos casos los consignatarios pudieron col1\rolar la situación.
(24) Lo impuso en el Puerto de Santa Cruz de Tenerife, cediendo a
las presiones de los exportadores. Para este asunto ver el Acta
de la Junta General del 20-2-1928. LAJG, T. 11.
(25) En 1930 las empresas extranjeras se unieron en el conocido
como "1i'lw de La Unión". Formaban parte de él Miller y Cía..
Grand Canary Coaling Cfa. de Carbones Minerales (Wilson,
S.A.). Cfa. Carbonera de Las Palm:¡s, Cía. General ele Canarias
de Combustibles, S.A.. Cfa. de Combustibles Oceánica. Blandy
Bros Coaling & Shipping. S.A. (Ver el articulo "Las Carboneras
establecidas en el Puerto de La Luz", en E.I'plllia Nuevll, abril de
1934, págs, .14-15: el acuerdo en Miguel Rodríguez Díaz De
Quintana (1989. pág. 13 J),
26
cesiones portuarias (26).
Varias empresas se transformaron en
sociedades anónimas (compárese los Cuadros 1
y II), signo de modernización en la estructura
de las entidades; sin embargo, la fácil constitución
y rápida desaparición de pequeñas sociedades,
nos muestra la fugacidad y debilidad del
tejido empresarial (27). Hay que tener en cuenta
que una empresa consignataria necesita de
escasa infraestructura para su funcionamiento,
por eso predomina la pequeña empresa familiar
entre las locales, aunque no se puede ser rotundo
en afirmaciones en este sentido dada la
ausencia de datos, si bien el Cuadro II nos
demuestra la mayor dimensión y cuota de mercado
de las empresas foráneas (28).
Sí es cierto que progresivamente se impone
la condición de Sociedades Anónimas, frente
a las regulares colectivas o familiares. En el
aspecto organizativo, también las extranjeras
son aventajadas frente a las canarias: elorganigrama
organizativo de una empresa portuaria,
preferentemente extranjera, solía tener una
mayor complejidad y modernidad, lo cual deríva
tanto de su tamaño como de su predominante
carácter de Sociedad Anónima (291.
(26) Pautas, por otro lado, t1'ecuentes entre las empresas españolas en
esos años (Ver Comín y Martín Aceña, 1996a y 1996b).
(27) Entrc 1914 Y1935 se crearon 11 empresas, pero desaparecieron
10. de las cuales 6 eran empresas constituidas en esos años con
lo que se demuestra que muchas de las que venfan funcionando
antes de la primera fecha dejaron de hacerlo; la incidencia ele la
crisis en la década de 1930 afectó n 7 empresas que causaron
baja en los negocios portuarios, (Ver Cuadro IV).
(28) Disponemos elel capítal social y algunos datos indirectos como los
votos asignados a cada empresa. que estaban en función de las
mercanCÍas movidas según una escala elaborada a tal fin que nos
puede acercar a la cuo!ll de mercado de cada una aunque no sea con
datos de buena calidad. (Ver Acta del 20-1-1925, en LAJG, T. I).
(29) Es significativo que de 15 empresas extranjeras radicadas en el
Puerto de La Luz, 7 fueran Sociedades Anónimas; mientras que
el total de las 11 cannrias eran Sociedades individuales. limitadas
o regulares colectivas. El organigrama puede resumirse de
la siguiente manera: Si es extranjera. generalmente Sociedad
Anónima. tiene en la cúpula al Presidente; luego un Director
Gerente, en muchos casos de la misma nacionalidad que el
empresario; a continuación venían los directores de los diversos
departamentos (Contabilidad, Departamento de Carga.
Visitadores de barcos, etc); y terminaba en el Encargado de
Muelle, que dirigfa el trabajo; mientras que las aut6ctonas, con
un gran componente familiar. se limitaban al Director (generalmente
el propietario) y los encargados.
Parabiblos¡ n.7 7 (7998)
Empresas Consignatarias yEstibadores en el Puerto de La Luz yde Las Palmas: estrategia yorganización
CUADRO 11
DATOS DE LAS EMPRESAS FUNDADORAS DE APCBLP. 1925
VOTOS EN LA APCBLP
CAPITAL SOCIAL REPRESENTANTE
1925 1930
ÁLVARO RODRÍGUEZ LÓPEZ, S.L. 4 3 G.C. Staib
BAUTISTA y MARTINÓN 3 4 1.087.975 Camilo Martinán y Dionisio Bautista Martín
CONSIGNATARIOS, S.L.
BERNARDO DE LA TORRE 1
COMINGES, S.L.
BLANDY BROTHERS & CO. 3 2 1.300.000 Gerardo MilJer y Parry y Ernesto Wootton
(GRAND CANARY) COAL & Summerlin
SHIPPING, S.A.
cíA. GENERAL CANARIA DE 1 5.000.000 Gerardo Miller y Parry y Ernesto Wootton
COMBUSTIBLES, S.A. Summerlin
CÍA. CARBONERA DE LAS 4 1 1.004.500 Gerardo Miller y Parry y Ernesto Wootton
PALMAS, LTDA. Summerlin
CÍA. NACIONAL DE CARBONES 2 1.725.000 Gerardo Miller y Parry y Ernesto Wootton
MINERALES, S.A. Summerlin
CÍA. DE COMBUSTIBLES 4 2 100.000 J.v. Bevad
"OCEÁNICA", LTDA.
CORY HERMANOS & CO. 4 2 N.L.R. WilIys
ELDER DEMPSTER (G.c.), LTD. 4 3 & 75.000 D. Víctor E. Pavillard
FERNANDO CAMBRELENG 1 Fernando Cambreleng
FRANCISCO CABALLERO 1
RODRÍGUEZ
GRAND CANARY COALING 4 1 2.240.000 Ernesto Wootton Surnmerlin y Gerardo MiIler
COMPANY, S.A. y Parry
JOSÉ CURBELO SANTOS 1
JOSÉ HERNÁNDEZ SÁNCHEZ 1 José Hernández Sánchez
JUAN BORDES CLAVERÍE 1 1
JUAN KRUZIC TURINA 1 2
JUAN RODRÍGUEZ TORRES 1
MIGUEL CURBELO y CÍA. 2 l 1.397.629 Miguel Curbelo Espino y Miguel Curbelo
Grondonsa
MILLER & CO., S.A. 4 3 2.000.000 Gerardo Miller y PmTY y Ernesto Wootton
Sumrnerlin
RICHARD J. YEOWARD 4 3 R.W. Humphreys
RAFAEL ALZOLA APOLINARIO 1
W0ERMANN LINNIE LTDA. 4 3 75.000 Walter Vogel
FUENTE: Acta n° 4, LAJG, Tomo 1; y Libro de Registro de Socios de la Asociación Patrollal de COllsignatarios de Buques de Las Palmas, (Archivo de APCBLP).
Elaboración propia
Parabiblos, n.1] (7998) 27
Miguel Suárez Basa
CUADROIII
CUOTA DE MERCADO DE LAS ESTIBADORAS EN EL PUERTO DE LA LUZ Y DE
LAS PALMAS. MANIPULACIÓN DE MERCANCÍA GENERAL, 1992-1995 EN TM.
1992 1993 1994 1995 1996
TOTALES % TOTALES % TOTALES % TOTALES % TOTALES %
OPERACIONES PORTUARIAS CANARIAS, S.A. (OPCSA) 867.534 23,87 873.329 24,06 962.375 28,75 1.107.355 27,35 1.124.814 26,45
A. ARMAS ClJRBELO 826.417 22,74 869.861 23,98 746.079 22,29 678.285 16,75 731.101 17,19
TERMINAL DE CARGA RODADA 422.624 11,63 747.934 18,47 734.747 17,28
LÍNEAS MARÍTIMAS CANARIAS, S.L. (CONTENEMAR) 532.4eí6 14,65 602.620 16,60 649.391 16,04 670.462 15,76
CiA. TRANSMEDITERRÁNEA 431.256 11,89 708.367 21,16
LA LUZ. S.A. 407.689 11,22 408.331 11,25 476.616 14,24 476.865 11,77 540.050 12,70
GUILLERMO SINTES REYES 24.493 00,67 2.548 00,07 12.557 00,37 2.062 00,04
CÍA. CANARIA DE CARGA YDESCARGA 201.793 05,55 73.520 02,02
ASOCIACiÓN DE ESTIBADORES CANARIOS, S.A. (ASESCAI 154.887 04,26 224.235 06,17 269.272 08,04 253.465 06,60 264.373 06,21
CELPASA 94.007 02,58
SERVICIOS YMEDIOS PORTUARIOS, S.A. (SEMPSAj 79.312 02,18 121.762 03,35 171.403 05,12 135.242 03,34 184.161 04,33
IBÉRICA CANARIAS 22.085 00,60 21.237 00,58
TOTAL 3.633.307 3.628.699 3.346.669 4.048.537 4.251.770
FUENTE: Autoridad POrlllaria de LIs Palmas. Elaboraci"ll pl'llpia.
Observamos la continuidad en su estrategia,
la rutina se constata una vez más: siguen
apostando por diversificar sus actividades (consignatarias,
armadores, tenían negocios de
pesca, varaderos para reparar pequeñas averías,
efectos navales, comercio, etc.), aunque las
canarias tienden a especializarse en las actividades
de consignación, estiba y desestiba o
carga y descarga de mercancías.
En las décadas de 1920 y 1930 asistimos
en el Puerto de La Luz a una lucha celTada
entre empresarios y obreros por controlar el
mercado de trabajo y la propia organización del
trabajo. Mientras los primeros intentan mantener
la libeltad de contratación, para 10 que crearon
una Central de Trabajo gestionada por los
propios empresarios (301, donde los obreros
(30) Su creación se efectuó a raíz de la huelga de 1925 y el control
lo mantuvo la Asociación Patronal hasta 1929, año en que p<lSÓ
<1 ser gestionada por cl Comité Paritario de Transportes
Marítimos. (Ver las Actas del 12 de marzo y del 12 de mayo de
1925 para la creación; y 5 de noviembre de 1929 para la desaparación.
En LAJG, Tomo 1).
28
debían apuntarse individualmente, los segundos
pretendían controlar el proceso a través de
los Comités Paritarios p11mero y, luego, en la
Segunda República, de los Jurados Mixtos.
Asimismo, los empresarios pretendían ostentar
la exclusiva responsabilidad en la organización
del trabajo, mientras que los trabajadores
luchan por intervenir en la formación de las
cuadrillas, horarios, misión de los capataces,
etc,
Podemos hablar del Puerto de La Luz y de
Las Palmas como un puerto sindicado a lo
largo de varias etapas de la historia; con ello
nos referimos a que los sindicatos tenían el
control en la oferta de mano de obra, especialmente
en los años treinta (31). Los empresarios,
(31) Desde el punto de vista empresari<ll, la perspectiva de un sindicalismo
bien estructurado y fuerte en el Puerto no tenía por qué
ser, cn temía, inuceptable, pero siempre y cuundo fuera un sindicalismo
"sensible" o "razonable" (a los "intereses generales"
y/o "empresariales", quierc decirse) y no pretendiera elevar de
forma incontrolada los costes de la mano de obra. Es en esa
perspectiva donde habría que interpretar que, después de combatirlo
blYO la Dictadura de Primo de Rivera, termine por acep-
Parabiblos, n.7 7 (1998)
Empresas Consignatarias yEstibadores en el Puerto de La Luz yde Las Palmas: estrategia yorganización
se mostraron inicialmente reticentes ante la
creación de unos entes que canalizaran la negociación
colectiva, por temor y desconfianza en
unos organismos que venían a perturbar la
ancestral libertad absoluta de que disfrutaban
en el mercado laboral canario y que tan buenos
resul tados les dio (32), más tarde, una vez que el
régimen republicano impone un marco regulado
de negociación colectiva con los Jurados
Mixtos, la participación en ellos de los empresarios
portuarios será plena.
IV. LAMODERNIZACIÓNTÉCNICAYLA
CONCENTRACIÓN EMPRESARIAL
Con el inicio de la Guerra Civil (Canarias
queda desde el pdmer momento del lado del
llamado Bando Nacional) yen la posguerra que
se une a la Guerra Mundial, la actividad de las
empresas portuarias entra en una etapa de recesión,
puesto que se colapsa el tráfico del que se
nutría el Puerto de La Luz: el de los buques
extranjeros de líneas intercontinentales.
Efectivamente, la atonía del comercio mundial
fue un duro golpe para la actividad portuaria.
Algunas empresas extranjeras cesan sus actividades
y liquidan sus propiedades, hasta el
punto de que en 1952 sólo eran 191as empresas
del sector (3]). La Patronal de Consignatarios se
hizo cargo del control de la lista de trabajado-tal'
su presencia en la Segunda República, aunque no sin reticencia.
Y es que un sindicalismo fuerte bien podía simplificar y unificar
el complejo mundo laboral portuario; por eso, las relaciones
entre sindicatos y empresarios fueron en el Puerto una historia
de encuentros y desencuentros, en los que se alternaban fases
de presión y de negociación. (Para el concepto de monopolio en
la oferta de trabajo ver Williarnson, 1989, págs. 211-276).
(32) Y así lo dejan patente: "Las relaciones pacíficas mantenidas con
los obreros durante cinco años, (... ) se vieron de pronto interrumpidas
al siguiente día de la creación de dicho organismo"
(en 1925). El párrafo procede de las Memorias de la Patrollal de
COllsignatarios (1929, pág. 259).
(33) El censo de empresas en los a110s del conmcto era el siguiente
(entre paréntesis el número de trabajadores empleados a lo largo
de un mes febrero de 1937): Camilo Martín (904), Juan Bordes
(66), Álvaro Rodríguez López (2,855), Elder Dempster (1,525),
Bruno Meyer (118), Wiiermann Linie (1.551), R. Yeoward
(1.896), Miller y Cía. (908), Treansmediterránea (1.164),
Antonio Acosta (213), Guillermo Sintes (188) y Vacuunn Oil
(2). Acta del 24-3-1937, Libro de Actas de la Junta General,
Tomo IV).
Parabiblos, n. 77 (1998)
res desde 1937, aunque acepta la intermediación
del Sindicato Nacional de Transportes
Marítimos, si bien, y al contrario que otras
patronales, no se integró en la CNS (34). En los
años del Mando Económico (peculiar forma de
intervención que el Régimen de Franco ideó
para Canarias), los empresarios consignatarios
se esforzaron por restaurar las tradicionales
libertades económicas de que habían disfrutados
desde mediados del siglo y que, acertadamente,
consideraban el origen del crecimiento
de la economía canaria. Ese régimen conllevaba
la liberalización en la adquisición de divisas,
fomento de la escala de los barcos que acercaban
el Atlántico y dotar al Puerto de los medios
mecánicos necesarios (35).
Dos hechos vienen a alterar las estrategia
de las empresas portuarias y la configuración
empresarial en el sector: la progresiva introduc~
ión de medios mecánicos y la definitiva
sustitución del carbón por combustible líquido,
que hace a muchas compañías tradicionales
reconvertir su actividad y finalmente desaparecer.
Parece ser cierto que el Puerto de La Luz se
retrasó en introducir medios mecánicos, y sólo
en la década de 1940 se inicia un tímido intento,
por medio de la .Tunta de Obras del Puerto de
adquirir grúas (tipo cabriola flotante), remolcadores
y básculas (36). Será en la siguiente cuando
se imponga la mecanización con la introducción
de carretillas mecánicas, ahora con la
intervención de la iniciativa privada (37).
(34) La evasiva fue la actitud de los escritos de contestación a estos
requerimientos. Puede verse la COITespondencia en torno a este
asunto en el Archivo de la APCBLP, carpeta "Personal laboral
1936-1939".
(35) Así lo hará saber a las autoridades loc<lles en un documento que
les envía en octubre de 1934. (Archivo de APCBLP. Papeles
sueltos).
(36) Los problemas del concurso ocasionó retrasos de casi una década.
(Ver Martín del Castillo 1984, pág. 226).
(37) Interesa referirse a los medios que antes se venían utilizando y
que son signo de esa evolución. En los años treinta se h<lbía
introducido la carretilla a mano, primero con rueda de hierro
(empresa Fred 01sen) que la hacía muy incómoda y luego con
rueda de goma, más manejeble. El siguiente paso fue la utilización
de la carretilla mecánica y un sistema modernizado de
grúas a raíz de la creación de MACBSA (entrevista personal a
Armando Bordes).
29
Miguel 5uárez Bosa
Efectivamente, los consignatarios constituyeran
una empresa, impulsada por la mayoría de
los socios de la APCBLP, que responde al acrónico
MACB5A (Material Auxiliar de Consignatarios
de Buques), registrada en 1952 y participada
por un total de 31 empresas que se
repartían sus acciones 1381. MACBSA dedicó
gran parte de su patrimonio y función a dotar a
los consignatarios de un parque móvil de grúas
y material de carga y descarga. Fue un elemento
de control y presión hacia el conjunto de las
empresas estibadoras. pues si cortaba el suministro
de material éstas se veían imposibilitadas
de realizar sus trabajos (39); por esta vía, la
APCBLP logró e impuso una banera tecnológica
a la entrada de empresas en el negocio de
carga y descarga.
Paralelamente, para entender la estrategia
de las empresas en este largo período, hay que
referirse a que en el puerto se había creado un
peculiar marco de relaciones laborales en el
que los trabajadores se asociaban a través de la
corporativista Organización de Trabajos
Portuarios (OTP), que. gracias a la monopolización
de la oferta de trabajadores, imponía
unas condiciones laborales que conllevaban
altos salarios pero bajos rendimientos (40).
Asimismo. la recuperación económica iniciada
en los años sesenta. unida a algunos acontecimientos
internacionales como el cierre del
(38) Estos datos se han recabados de dos entrevistas efectuadas a
dirigentes empresariales del Puerto de La Luz, Armando Bordes
Martin, presidente de la APCBLP, desde 1971 a 1992; y a
Manuel Toledo (empresario y Director Gerente de MABCSA,
también vocal de la APCBLP. y, como representante de ésta,
participe de la organización de la patronal española de consignatarios
ANESCO (Asociación Nacional Estibadores y
Consignataras). Asimismo, el accionariado, la constítución y el
material y el valor MACB5A puede comprobarse en la escritura
de constitución de esta empresa en Registro Mercantil de Las
Palmas, 'fomo 58 de "Sociedades", escritura pública n° 4.071
(14-7-1966). Sobre la empresa hay documentación en la
AAPLP. carpeta nO lO (bajas).
(39) Así lo expresa, por ejemplo, el empresario Guillermo Sintes
Reyes en entrevista personal y los hechos parecen confimarlo.
(40) La puesta en funcionamiento qel Servicio de Trabajadores
Portuarios (1939), el Reglamento Nacional de Trabajos
Ponuado> y la creación de la Organización de Trabajadores
Portuarios (1968) son los hitos fundamentales de la reglamenta-
. ción de las relaciones laborales en el sector.
30
Canal de Suez (1956 y 1970) o los conflictos en
Oriente Medio (guerra del Yon-Kippur, 1973),
supuso un aumento espectacular del tráfico en
el Puerto de La Luz y con ello los negocios de
consignación. En esta fase el número de empresas
crece de manera notable, hasta un total de
30 en 1965 y sumar 41 en 1977 (41).
En los años setenta y ochenta. dos elementos
vienen a incidir directamente en la estrategia
de las empresas: la mayor rapidez de las modernas
embarcaciones y la containerización de las
mercancías: en 1973, 1.000.854 Tm., fueron
movidas por otros medios en el puerto y sólo
101.000 por contenedores (el 5,48%); en 1982
la proporción se acerca, aunque las movidas por
contenedores siguen siendo menos: 937.000
Tm., en contenedores (un 36, 94%) frente a
2.538.966); en 1992 las contáinerizadas suponen
ya más de la mitad del total: 1.996.811 frente
a 3.500.428.(57,04) (42). Al mismo tiempo, la
Administración se hace eco de la baja productividad
de la mano de obra y, al calor de la nueva
situación política que camina en contra del
poder de los grupos corporativistas, presiona
para acabar con el monopolio que ejercía la
OTP en la provisión de mano de obra.
Se tomarán un conjunto de medidas para
ordenar las actividades portuarias, que van a
redundar espectacularmente en la actividad
empresarial (43). Comienza con un intento de
(41) Según la relación de empresas procedente del Archivo de
APCBLP. (Papeles sueltos).
(42) Los datos han sido tomados de De Rus et alii (1994, pág. 62).
(43) La legislación básica reciente que regula la actividad en el
Puerto de La Luz es la siguiente: Real Decreto 230211980, de 24
de octubre, "sobre Estructura adminstrativa de actividades laborales
y empresariales en los puertos de interés general" (BOE de
29 de octubre de 1980), que regula la actividael de las empresas
eonsignatarias: las personas físicas y jurídicas que venían realizando
actividades en el Puerto debían solicitar inscribirse en
un censo. Las empresas prestatarias de servicios (no consignatarias)
debían acogerse a las "Normas para el ejercicio ele actividades
en el Puerto ele La Luz y Las Palmas. Prestatarias ele
Servicios, excepto Estibadoras", publicado en el Boletín Oficial
de la Provincia, el 29 de noviembre de 1983. Para las empresas
estibadoras la llonnativa se recoge en el "Pliego de cláusulas de
explotación del Servicio Público de Estiba y Desestiba de
Buque", publicado en el Boletín Oficial de la Provincia el 2 de
Parabiblos¡ n.7 7 (7998)
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Empresas Consignatarios yEstibadores en el Puerto de La Luz yde Las Palmas: estrategia yorganización
establecer una normas para el ejercicio de las
actividades portuarias en 1980 y culmina con la
ordenación en la oferta de la mano de obra con
la constitución de SESTIBA, sociedad estatal
participada por los empresarios.
El sector de estibadoras, muy atomizado
hasta ese momento, sufría de una crónica falta
de organizaciones empresariales con la dimensión
y capacidad financiera e inversora necesaria,
lo que ocasiona notables distorsiones: excesiva
pequeñez empresarial con las consecuencias
de fugacidad de las empresas, muchas de
corta vida (44); la imposibilidad de disponer sie
sólidas estructuras que permitiesen la inversión
en bienes de equipo y consecuente atomización;
un exceso de estibadoras -cualquiera
con un equipamiento mínimo podía ser1o-,
que se traducía en una desordenada competencia
que incidía negativamente en la eficacia del
trabajo portuario (45).
Como consecuencia de lo expuesto y a raíz
de la promulgación del mencionado Decreto da
marzo de 1988, de acuerdo con la Real Orden de 30 de julio de
1987 "para la Autorización de Constitución de sociedades de
Estiba y Desestiba en los Puertos de Interés General" (ROE de
31 de julio de 1987). Un compendio de las leyes que regula la
actividad portuaria puede verse en Puertos del Estados (1996).
(44) Entre 1981 y 1997 causan baja 83 empresas consignatarias
(Datos del Censo de Empresas de la Autoridad Portuaria de Las
Palmas), si bien es cierto que muchas reaparecían en años posteriores
a su deceso.
(45) Amedidos de la década de los ochcnta cl Gobierno de la Nación
decide la reordenación del sector de Estibadoras con los siguientes
objetivos de: 1). Responsabilizar a las empresas de su propia
gestión por la vía de hacerles soportar el coste de inactividad de
los trabajadores portuarios no utilizados, que hasta ese momento
recaía en el Estado a través de la OTP. Para ello se crean las
Sociedades de Estiba y Desestiba (SESTIBA), en las que las
empresas privadas participan con el 49% del capital (el restante
51% le corresponde al Estado); por tanto se le puede catalogar
como una forma de empresa de trabajo temporal; 2). Disponer
de un tejido empresarial denso y con la solvencia financiera que
permitiese la necesaria inversión de bienes de equipo, al objeto
de automatizar y modernizar las operaciones portuatias; 3).
Instaurar un control sobre la vida de estas empresas por la vía de
exigirles adhesión a un contrato modelo (Pliego de
Condiciones) que, entre otros requisitos, exige para poder ejercer
la actividad de Estibadoras disponer de medios materiales
adecuados y la manipulación de un mínimo de toneladas dc
carga anual, cn función de los totales manipulados en cada
Puerto. (Ver el Real Decreto Ley 211986 que regula y ordena la
actividad del sector).
Parabiblos, n.7 7 (7998)
comienzo un proceso de concentración empresarial
en las labores de carga y descarga, de tal
manera que en el Puerto de La Luz y de Las
Palmas de treinta y tres empresas estibadoras,
que existían a finales de los años ochenta, se
reducen a las 8 actuales. La respuesta de las
empresas fue unirse para poder acceder al mercado
de carga y descarga, mientras permanecen
separadas en lo tocante a consignación propiamente
dicha.
Las razones de esta concentración son
fáciles de comprender: la cuantía de las inversiones
realizadas, la obligatoriedad de la inclusión
de personal portuario en régimen laboral
común que cubra, al menos, el 25% del total
del trabajo realizado por la empresa; el costoso
mantenimiento del total de gastos de la SESTIBA,
incluido el de la relación laboral especial
(con una inactividad estructural que fluctúa
entre el15 y 20 por ciento de los turnos al año);
las especiales características que rodean a dicha
sociedad estatal, cuyo 51% del capital público
no participa, por estatutos, en sus costes de
mantenimiento, y que no puede tener ni beneficios
ni pérdidas, mientras el 49% del capital
privado está obligado a absorber sus pérdidas o
desfases; y, sobre todo, la necesidad de manipular
cantidades de carga por encima de un
tope mínimo anual, obligaron y obligan a la
concentración a la que se alude. Estas medidas
benefician especialmente a las entidades más
poderosas: Operaciones Portuarias Canarias,
S.A. (OPCSA) (46\, Líneas Marítimas Canarias
(en la que otra empresa, Canaria Marítima de
Consignaciones, S.A., CONTENEMAR s.A., es
mayoritaria) (47) y La Luz Terminal de
Contenedores, S.A. (48). Estas empresas, con
(46) Empresa participada por Naviera Pinillos y Odiel Canarias, S.A.
(AALP, Carpeta 16, en vigor). En los archivos de la Autoridad
Portuatia se guardan las escrituras de constitución y otra documentación
relativa a las empresas portumias.
(47) fdern., Carpetas números 12 y 13.
(48) En ésta participa a su vez, CONTENEMAR y otras como
TRAESA y Líneas Marítimas Hespérides, S.A. (Idem., carpeta
n° 16).
37
Miguel Suárez Bosa
conexiones entre sí, mueven en la actualidad
cada vez más del 50% de las mercancías que
pasan por el Puerto, y con tendencia a acaparar
cada vez más cuota de mercado. La respuesta
de las pequeñas y medianas empresas consignatarias
ha sido unirse para poder participar en
el negocio y competir con las mayores: así se
formaron Asociación de Estibadores Canarios,
S.A. (ASESCA) (4')), Compañía Estibadora de
Las Palmas, S.A. (CELPASA) (50) y Compañía
Canaria de Carga y Descarga, S.A, (CONCARGA)
(511, las dos últimos hoy desaparecidas;
muchas de las integradas son empresas con
gran resonancia histórica en el Puerto (Miller,
Hamilton). El resultado es el que se observa en
Cuadro I1I, con un sector de estibadoras muy
concentrado (sólo la empresa Guillermo Sintes,
S.A. desafía este proceso de concentración)52,
con una cuota de mercado que oscila alrededor
del 4 y el 30%. Estas empresas pueden consignar
unidades propias (caso de Antonio Armas
Curbelo, Transmediterránea o Líneas Marítimas
Canarias) y no propias simultáneamente.
Mientras, en el sector de consignación propiamente
dicho se mantiene la atomización, según
vemos en el Cuadro IV, con un número mucho
mayor de entidades.
(49) Participada por las siguientes empresas: OIsen y Cía., S.A.,
Hamillon y Cía. Las Palmas, S.A., Consignaciones Cuyás, S.A.,
NAVIMPORT, S.A., MilIer y Cía., S.A., Compañía Mercantil
Hispano NOluega, S.A. y Agencia Marítima Agmar Ltda.
(50) En cuya constitución participan las siguientes empresas: A.
Paukncr, G. Brito Almeida, S.L., Manuel Toledo, S.L., Andrés
Perdomo, S.L. y Polameryka Vasuardiaz.
(51) Que absorbe a ECOPESA, S.A., Pérez y Cía. (CanUlias), S.A. y
Juan Bordes Claveríe, S.L.
(52) Fue suspendida por la Autoridad Portuaria porque incumplía el
Pliego de Condiciones. Entablado el proceso fue ganado por la
empresa, por lo cual ha tenido que ser readmitida e indemnizada.
(Ver AAPLP, carpetas 4, 5 Y6 de empresas en vigor).
32
CUADRO IV
CREACIÓN DE EMPRESAS cONSIGNATARIAS
EN ELPUERTO DE LA LUZ Y DE LAS PALMAS,
POR PERíODOS
EXISTENTES EN
EMPRESAS DESAPARECIDAS
EL ÚLTIMO AÑO
CREADAS EN
EL PERÍODO SOBRE EL DE LAS CREADAS
DEL PERíODO TOTAL EN EL PERÍODO
1092-1914 16 9 6 2
1914-1936 24 17 10 6
1936-1945 22 7 8 15
1945-1952 19 13 12 11
1952-1960 38 19 23 5
1960-1977 45 23 22 12
1977-1986 33 12 15 8
1986-1997 67 42
FUENTE: AnuarioS comerciales de los años: 1902, 1905, 19üH, 1911, 1914.
1927. 1935 Y 1952; Matrícula de Contribución Industrial (Archivo de
la Cámara de Comercio Industria y Navegación de Las Palmas);
Censo de Empresas del Puerto de Las Palmas (Archivo de la AAPLP).
Elaboración propia.
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