ARTíCULO
Fuentes Documentales para
el Estudio de la Población de Santa Brígida
M. Yazmina Lozano Más
Universidad de Las Palmas de Gi'an Canaria
RESUMEN:
En el presente estudio realizamos un análisis del contenido y estado actual de
conservación de los documentos existentes en diversos archivos para el estudio
de la población del pueblo de Santa Brígida en el siglo XIX. Además, compararemos
estas fuentes con otras similares consultadas en otros archivos.
- ESTADO DE CONSERVACION DE
LOS ARCHIVOS.
Las fuentes documentales para estudiar la
población satauteña son diversas. Nos centraremos
en aquellos documentos referidos a la primera
década de la segunda mitad del siglo XIX,
aunque muchos de ellos pueden ser consultados
para periodos anteriores y posteriores. En primer
lugar, el archivo que más información
puede ofrecer es el Archivo parroquial de Santa
Brígida, dirigido por el párroco que no es archivero,
ni tiene estudios de Historia. La reglamentación
para consultar los archivos era muy
estricta, lo que muchas veces dificultaba nuestra
labor, en el sentido de retrasarlo, pues si él
no podía estar en el archivo no podíamos traba-
Parabib/os, n.9 (1995-7997)
jar en él, y, por otra parte, el archivo sólo estaba
abierto una vez en semana, por un espacio
de cinco horas, y no siempre se cumplía el
horario.
En cuanto al estado de conservacion del
archivo desde, hace un par de años se encuentra
en obras, de modo que los libros, que deberían
estar guardados en armarios, están en su
mayoria apilados en un cuarto sobre una mesa.
Los documentos de este siglo se encuentran
dentro de un mueble al lado de la mesa del
párroco. El archivo tiene un índice, adjunto al
final del trabajo, que como se verá es poco preciso,
y nos atreveriamos a decir que incompletos,
pues ya habíamos trabajado en este archivo,
y por lo menos en cuanto a los libros de
33
M. Yazmína Lozano Más
casamientos y bodas, los registros se remontan
más en el tiempo de lo que el índice señala. El
estado de conservación de los libros que consultamos
es diverso según cuál miremos, y los
mayores problemas a la hora de consultar el
documento derivan de la forma de escribir del
pánoco que llevase los libros, y del tipo de
tinta, que a veces, parece que se ha traspasado,
y dificulta la lectura del folio. En definitiva, el
estado de cada libro es el siguiente:
• Libro siete de casamientos (1823-1851):
Encuadernado, su estado de conservación es
bueno, siendo la lectura de los años 1850-51,
cómoda salvo excepciones.
• Libro ocho de casamientos (1852-1866):
El estado de conservación es la misma que la
del libro anterior.
• Libro dieciséis de bautismos (18461851):
Está algo deteriorado; las pdmeras hojas
están arrugadas, algunas medio anancadas, y
en ocasiones parece que han sido quemadas. La
letra es clara.
• Libro diecisiete de bautismos (18521863):
Su estado es aceptable, aunque alguna
hoja está pegada con cinta de celo. La letra es
clara y bastante legible.
• Libro cinco de entienos (1835-1855): Se
encuentra en muy buen estado, con una letra
muy clara. No fue terminado, estando la mitad
del libro con las hojas en blanco. Termina en
1851.
Libro seis de entierros: Contiene los
libros seis, siete y ocho. Las plimerasdefunciones
pertenecen a 1823; se encuentran en mal
estado de conservación, siendo difícil su lectura,
y termina en 1834. Parece que han encuadernado
varios libros en uno solo, y el que
corresponde a 1852, es en realidad el libro siete
de defunciones.
34
En segundo lugar, también en Santa
Brígida, puede consultarse el Archivo municipal
del Ayuntamiento, gestionado por una concejala,
que como en el caso anterior no tiene
formación historiográfica. Debido a que se está
organizando, tiene los documentos repartidos
entre varios cuartos, siendo la consulta de algunos
de ellos imposible debido a su ubicación.
Este archivo no tiene ningún tipo de índice,
aunque por lo que pudimos ver, el archivo
consta de las Actas del Ayuntamiento que
comienzan en 1835 y continúan hasta nuestros
días, los padrones municipales, documentos
relativos a proyectos del Ayuntamiento, y un
gran número de libros relativos al Derecho. No
obstante, estos datos son parciales, y para realizar
un índice detallado sería necesario un estudio
más profundo de los documentos. Nosotros
consultamos las Actas del Ayuntamiento, guardadas
en cajas dentro de un armario metálico.
Se encuentran en muy buen estado de conservación,
entre otras cosas, porque ha sido muy
poco consultado; tienen incluso papeles de anotaciones
tomadas por algunos de los asistentes.
Estas Actas son de carácter anual. Consultamos
las contenidas en las cajas que van de 1849 a
1854 y de 1855 a 1859.
En tercer lugar, el Archivo Diocesano,
donde se encuentran las dispensas matrimoniales.
Este archivo a diferencia de los anteriores
es llevado por una historiadora. Consta de un
archivo detallado de lo que existe en él. Los
documentos en el caso de que no estén encuadernados,
se encuentran guardados en papel
marrón, colocados en estantes, y clasificados
según el tipo de documento, procedencia etc.
En lo referente a su estado de conservación
varía según la fecha etc. Así, los documentos
que consultamos estaban en buen estado, pero
desordenados cronológicamente, y a una dispensa
de 1850 le podía seguir una de 1845, y
esto retrasa bastante el trabajo.
Parabíblos¡ n.9 (1995-1997)
Fuentes documentales para el estudio de la población de Santa Brígida
En estos dos últimos archivos los documentos
pueden ser consultados diariamente, y
en el Archivo panoquial y el A. Diocesano se
lleva un registro de las personas que acuden a
él, y los documentos que consultan.
Por último estuvimos en el Archivo
Provincial buscando las comendaticias y las
contratas, pero no los tenían de modo que no
pudimos consultarlo, igual que el Registro civil
de Santa Brígida, donde también pregunté por
los mismos documentos.
Aunque evidentemente el control de estos
archivos no es bueno, pues no es llevado en
muchos casos por expertos, como hemos
expuesto, al reflejarlo en este trabajo, nuestro
objetivo no es infravalorar a sus encargados,
sino poner de manifiesto la necesidad de que lo
asesoren personas competentes en la materia a
fin de un mayor conocimiento de sus posibilidades.
- COMPARACION DE LOS DATOS
CON LOS DE OTROS ARCHIVOS CONSULTADOS.
En primer lugar, comparemos los datos
que registran los libros de almas del Archivo
panoquial con los que, siguiendo el método de
reconstrucción de familias creado por L. Henry
y M. ~leury (1956), deben tener los libros de
este tipo, resumidos en el esquema siguiente:
Libros de Libros de Libros de
Bautizados Casados-Velados Difuntos
1
INFORMACiÓN
1
CRONOLÓGICA
1
I Día / Mes / Año I I Día I Mes/ Año I I Día / Mes / Año I
I I I
INFORMACiÓN CONCEPTUAL
I Bautismos, Óleos I I Desposorio, Velación I l Defunción, Entierro I
I ,1 I
INFORMACION NOMINAL
NOMINACIONES NOMINACIONES NOMINACIONES
Bautizados, Desposados, Difunto, Testamentarios,
Padre, Velados, Padres, Familiares,
Padrinos. Testigos, Padrinos. Escribanos.
1
INFORMACiÓN
1 I
PROFESIONAL
PROFESIONES PROFESIONES PROFESIONES
Bautizados (Adultos), Desposados, Difunto,
Padre, Padres, Testamentarios,
Padrinos. Testigos, Padrinos. Familiares.
1
INFORMACiÓN
I I
COMPLEMENTARIA
VECINDAD
VECINDAD VECINDAD
Pobres, Pobres, Edad,
Pobres,
Amonestaciones, Testamentos,
Ilegítimos.
Dispensas. Lugar entierro.
.; ¡¡
I..o
@
Parabiblos, n.9 (1995-1997) 35
M. Yazmina Lozano Más
Si seguimos el esquema, veremos que
según estos autores, todo libro parroquial debe
constar de cinco clases de información: nominal,
cronológica, profesional, conceptual, y de
otro tipo. Un estudio de los archivos nos permitirá
comprobar ,que si bien, esto es lo ideal,
no es lo que ocurre, y la información con que se
cuenta es la cronológica, conceptual, nominal,
y profesional, pero no de forma completa, en
ninguno de estos dos últimos casos, como se ve
en el esquema anterior en que resaltamos aquella
información que sí poseen los libros consultados.
En cualquier caso hay que teneren cuenta
varias cosas: primeramente, que los datos
registrados varían según el encargado de realizar
el registro, y así, hay párrocos que fueron
más minuciosos, y los datos que recoge son
más claros, o más abundantes, y esto se comprueba
perfectamente en este Archivo (L). La
poca claridad en la forma de registrar los datos
nos ha llevado, en algunos casos, a elaborar las
gráficas, y por consiguiente mis conclusiones,
en base a premisas debidamente especificadas
en cada caso.
Además, pudimos observar que la calidad
de la infonnación varía según la clase social a
la que pertenezca la persona registrada, y así, la
información relativa a los sectores elevados de
la sociedad es más abundante y de mayor claridad.
Para comparar, hemos consultado otros
archivos en ocasiones anteriores, concretamente
el de la Pan'oquia de San Mateo, y el de la
Parroquia de S. Agustín; en el primer caso, los
libros de casamientos y bautismos, y en el
segundo los de bautismo, y el más completo es
el de S. Mateo, donde se llega a registrar siem-
(1) Para el caso de Santa Brígida hallamos más sirnílítudes
que con Francía, con América Latina, tal como comentan
Cardoso, C.ES., y Pérez BrignoH, H., Los métodos de la
Historia, Crítica, Barcelona, 1984.
36
pre la profesión, en tanto que en el de Santa
Brígida sólo se hace si es un cargo militar
importante, o tiene un puesto en alguna
Institución importante. En ninguno de los otros
casos ni en otro archivo se registran las profesiones.
Sin embargo, resulta curioso consultar
los libros de casamientos del siglo XVII de la
Parroquia de Santa Brígida, pues en ellos se
registran profesiones como zapatero, herrero
etc, e incluso especifican quienes son esclavos,
y de quién, y su raza si ésta no es la blanca.
En segundo lugar, hay que tener en cuenta
la edad del documento, y así, en ocasiones, los
datos no son quizás más numerosos, pero sí son
más precisos. Por ejemplo, la consulta de un
archivo si se quiere seguir los datos de una
familia sí se pueden ver dificultados por el
hecho de que antes de 1871 en que comienza a
realizarse el Registro civil en España, no había
obligación de registrar como primer apellido el
del padre y como segundo apellido el de la
madre, de modo que este orden podía alterarse,
e incluso se podían poner los apellidos de los
abuelos, padrinos etc, sin especificarlo, problema
tratado por Antonio M. Macias Hemández
(2). Esto aunque está vigente hasta 1871, como
acabamos de decir, es menos frecuente según
avanza el tiempo, y así, mientras pasa usualmente
a principios del siglo XIX, como pudimos
comprobar al consultar los libros de Santa
Brígida, en la década de los 50 era poco frecuente.
Los libros más curiosos de consultar son los
de nacimientos pues se registraban datos anecdóticos,
como si el parto se había producido en
algún lugar accidentalmente, apodo de los progenitores,
en el caso de que 10 tuviesen, etc. Los
(2) Macias Hernández, A.M.,"Problemas metodólogicos de la
demografía histórica de Canarias" en Anuario de estudios
atlánticos, n° 34 (1988), Madrid-Las Palmas, 1989, pp 109
Ysigs.
Parabiblos, n.9 (7995-"7997)
Fuentes documentales para el estudio de la población de Santa Brígida
que menos datos recogían eran los de defunciones,
en los que, salvo algunas ocasiones, no se
registraba la causa de muerte.
En cuanto a las dispensas matrimoniales,
todas están en el mismo archivo. Hemos consultado
con anterioridad a este trabajo la de
Santa Brígida y las de San Mateo, y en ambos
casos, y en cualquier época los datos son los
mismos, pues eran todas llevadas por el
Obispado: se registraba el nombre, naturaleza y
vecindad de los contrayentes, así como el motivo
que los llevaba ante el Obispado, la declaración
<;le varios testigos, un pequeño árbol genealógico
en el que gráficamente se expresaba lo
que habían declarado los testigos y los contrayentes,
las partidas de bautismo de ambos contrayentes,
con lo que podemos saber su edad,
algo que la consulta de los libros parroquiales
no nos permitió, y en caso de viudez, la partida
de defunción. Estos documentos nos permiten
saber, además, el grado de instrucción mínimo,
pues debían ser firmados, algo que no suele
oCUlTÍr, lo que nos demuestra que la mayor
parte de la población debía ser analfabeta, y
que se ven corroborados por Pedro de Olive
que para el quinquenio 1857-61 nos habla de
120 personas que no saben ni leer ni escribir,
283 que saben leer, y tan sólo 178 personas que
saben leer y escribir en una población que tenía
313Ohabitantes (3).
Sobre las Actas de los plenos del
Ayuntamiento no tenemos elementos de comparación,
pues nunca antes habíamos trabajado
con este tipo de documentos, realmente interesantes,
pues se registraba todo lo que afectaba
al pueblo desde la llegada de un nuevo maestro
o los motivos que ocasionaban la suspensión de
(3) Olive, Pedro de., Diccionario estadístico-administrativo.,
Ed Establecimiento tipográfico de Jaime Jepús, Barcelona,
1885, pág 962.
Parabiblos, n.9 (7995-1997)
una reunión (4), pasando por la elaboración del
Padrón municipal para las levas, los sorteos de
los mozos, y su presentación, con lo que sabemos
si podían o no hacer el Servicio, y en este
último caso cual era el motivo, pues se especificaba,
la edad de los mozos, su talla, en enfermedades
etc, llegándose a registrar litigios y su
desarrollo, dificultades en las cosechas etc.
Aparte de estos datos referentes a la vida diaria
del pueblo, se registraban datos de mayor
alcance, como la elaboración del primer censo
en España(5), la declaración del Puerto de La luz
como Puerto Franco (6), datos referentes al
Cólera Morbo o la separación administrativa de
las provincias (1). Además hemos podido comprobar
algunos de los fallos que generalemte se
mencionan al hablar de las formas de administración:
poca rigurosodad, escaso control, tardanza
en llegar comunicados (algunos tardan
meses en llegar), etc.
Un dato muy interesante que registran las
Actas del Ayuntamiento, es el sistema de ami-
(4) A.M.S.B.: En el Libro capitular en que se asientan las Actas
de 1852 con fecha del 17 de Febrero se dice: "El tiempolluvioso
impide a todos asistir a la reunión, fol 9 vto 10
recto. Ayuntamiento de Santa Brígida, Actas del
Ayuntamiento (1848-1854), Caja 2, Sección-B, ayuntamiento.
(5) A.M.S.B.: En varias actas cOITespondientes al mes de
Mayo de 1857 se recogen diversos preparativos encaminados
a la claboración del censo, y en el Acta correspondiente
ala sesión del día 15 de Julio de 1857 se expone que
debe redactarse una circular para que: "Se publique el contenido
del censo a fin de que todos los vecinos se enteren
y den parte de cualquier omisión que hubiese habido en la
formación del censo." Igualmente se llama la atención
sobre aquellos pueblos en los que el censo no ha sido aún
remitido, fol 91 vto Ayuntamiento de Santa Brígida, Actas
del Ayuntamiento (1855-1857), Caja 3, Sección-B, ayuntamientos.
(6) A.M.S.B.: Acta sobre la sesión del día 27 de Julio de 1852,
fol 39 recto. Ayuntamiento de Santa Brígida, Actas del
Ayuntamiento (1848-1854), Caja 2, Sección-B, ayuntamientos.
(7) A.M.S.B.: En el Acta del día 13 de Julio de 1852 se habla
de la llegada de los Reales Decretos sobre la división en dos
estatutos administrativos y diferentes entre sí. Ayuntamiento
de Santa Brígida, Actas del Ayuntamiento (1848-1854),
Caja 2, Sección-B, ayuntamiento, fol 38 recto.
37
M. Yazmina Lozano Más
llaramiento, consistente en la asignación de una
cuota a cada municipio, que calculaba a su vez
la cantidad debida por cada propietario sobre la
base de sus declaraciones (8). Tal y como E.
Malefakis estudió (9), vemos como era muy fácil
engañar a las autoridades, pues éstas no se preocupaban
por comprobar si las quejas que
sobre la cuota que cada propietario debía pagar
eran ciertas, y le daban respuesta en el mismo
día. Las reclamaciones solían ser sobre "excesos"
en la cuota a pagar, y la contribución solía
bajarse. Estas reclamaciones nos permiten
conocer además qué se cultivaba, y comprobar
que muchos propi'etarios no eran de Santa
Brígida, sino que tenían en ella las fincas,
viviendo en otro pueblo (Telde, Agüimes, etc.).
Se habla de ellos como contribuyentes, pero no
siempre se quejan los dueños de la tierra, sino
otros llamados propietarios colonos.
Uno de los objetivos era la consulta de las
comendaticias y las contratas para la emigración,
que según J. Hernández Garda debían
estar en los Ayuntamientos de cada pueblo (10).
Sin embargo, no las encontramos, ni en el
Ayuntamiento, ni en el Registro Civil, ni en el
Archivo Provincial. Los únicos datos sobre
sobre la emigración a America que encontramos,
exceptuando los de personas que regresan
y se bautizan "sub conditione", o los que
desde América solicitan dispensas (ambos
(8) Malefakis, E., Reforma agraria y revolución campesina en
la España del sigló XIX., Ariel, Barcelona, 1980.
(9) Malefakis, E., Opus cil pg 457.
(10) Hemández García, J., La emigración de las Islas Canarias en
el siglo XIX., Cabildo Insular de Gran Canaria, Las Palmas
de Gran Canaria, 1981, pag 175.
38
casos registrados en sólo una ocasión), son los
referidos en los libros de casamientos, en los
que se suele hablar, siempre en el caso del
padre de uno de los contrayentes, de "ausente",
y en los mozos sorteados que no se presentan
por estar en América, explicitándose a
veces dónde está, su profesión, y los años que
hace que se marchó (11). Pero esto sucede en
muy pocos casos, y al ser parcial pues no están
todos los individuos registrados (sólo los llamados
a filas), no nos sirve para hacer un
estudio. No obstante, a través de la lectura en
varios libros (12), y estas consultas en los archivos
hemos hallado sabemos que hubo emigrados.
En cualquier caso el que los llamados a
filas no acudan por estar en América nos da a
entender la importancia de la emigración ilegal,
pues uno de los requisitos para emigrar
legalmente era hallarse libre de toda responsabilidad
de quintas (13).
Un último dato que hay que tener en cuenta
con respecto a los libros parroquiales es, que
aunque nosotros los empleamos para el estudio
demográfico, no era éste el fin con el que fueron
creadas (4). El registro de los bautismos y
matrimonios era obligatorio desde el Concilio
de Trento (1563), y el de defunciones desde
1614, aunque ya existían con anterioridad a
esas fechas. O
(11) A.M.S.B.: En una de las Actas del mes de Mayo se recoge:
"Su padre declaró que -su hijo Francisco Gareía se
hallaba ausente en la isla de Cuba (en Cienfucgos), de oficio
labrador. Se fue hace cuatro años", fol 88 vto.
Ayuntamiento de Santa Brígida, 'Actas del Ayuntamiento
(1855-1857), Caja 3, Sección-B, ayuntamientos.
(12) Olive P. de, Opus cit, pag 962.
(13) Hemández García, J.• Opus cit, pag 80.
(14) Maeías Hemández. A.M., Opus cit, pag 90 y sigs.
Parabiblos, n.9 (7995-7997)
Fuentes documenta/es para el estudio de /0 población de Santa Brígida
APENDICE:
DOCUMENTOS EXISTENTES EN EL
ARCHIVO PARROQUIAL DE SANTA BRIGIDA.
(Revisión rápida y parcial realizada el
17 de febrero de 1993).,
- CAJA NUMERADA COMO N° 1.
e Legajo de la Cofradía de los Padres de
Nuestro...
1598-17877
e Hermandad del Santísimo Sacramento.
l) 1664-1880
2) 1624?-1658?
e Cofradía del Santísimo Cristo.
l) 1673-1821
2) 1752.
e Cofradía de las Animas.
1709-1793? Libro de cuentas.
e Libro de cuentas de la mayordomía del
Santísimo Sacramento.
1773-1829.
- CAJA NUMERADA COMO N° 2.
e Libro de la Capellanía de la Parroquia de
Santa Brígida.
1752?-1784
e Libro de Fábrica.
1661-1754
e Protocolos.
1632?-1829
e Protocolos.
1704-1839
e Protocolos.
1754-1768
- CAJA NUMERADA COMO N° 3.
e Varios
l) 1674-1731
2) 1823-1851
e Cuadrantes
1) 1841-1874
2) 1875-1879?
Parabiblos, n.9 (7995-7997)
e Libros de cuentas
Son tres tomos de documentos sueltos,
algunos pertenecen a las Cofradías en el
siglo XVIII, el resto son del siglo XIX, y
mayormente del XX.
- CAJA NUMERADA COMO N° 4.
e Confirmaciones.
1) 1664-1871?
2) 1732-1808
e Casamientos.
1) 1662?-1679?, (contiene algunas confirmaciones
al comienzo del legajo).
2) 1718-1773
3) 1773-1792
4) 1792-1826
e Defunciones y entierros.
l) 1688?-1722
2) 1722-1754
3) 1755-1785
4) 1785-1822
5) 1835-1855
6) 1823-1866
- CAJA NUMERADA COMO N° 5.
e Dos legajos de testamentos. Siglos XVllI-XIX.
- CAJA NUMERADA COMO N° 6.
e Numerosos libros de bautismo desde 17...
- CAJA NUMERADA COMO N° 7.
e Numerosos libros de bautismo desde 18...
e Varios documentos:
- de la ermita ¿16...? ¿18...?
- padrones parroquiales.
- edificación de la Iglesia.
- otros documentos sin catalogar.
- RESTO DOCUMENTOS.
e Numerosas actas de matrimonio, siglos
XIX y XX.
e Libros de Bautismo, matrimonio y entierros
del siglo XX.
e Padrón del siglo Xx.
e Libros de cuenta del siglo Xx.
39
M. Yozm/na Lozano Más
BIBLIOGRAFIA:
• Cardoso, C.ES., y Pérez Brignoli, H., Los
métodos de la Historia, Crítica, Barcelona, 1984.
• Hemández García, 1., La emigración de
las Islas Canarias en el siglo XIX., Cabildo
Insular de Gran Canaria, Las Palmas de Gran
Canaria, 1981.
• Macfas Hernández, A.M., "Fuentes y
problemas metodológicos de la demografía histórica
de Canarias", en Anuario de estudios
atlánticos, (nO 34), Madrid, 1988.
• Madoz, P, Diccionario estadístico-histórico.,
(edición facsímil), Ambito, Valladolid, 1986.
40
• Malefakis, E., Reforma agraria y revolución
campesina en la Espafla del siglo XX., pag
457, Ariel, Barcelona, 1980.
• Millares Torres, A., Historia general de
las Islas Canarias., (Tomo V), Edirca, Las
Palmas de G.Canaria, 1977.
• Olive, P. de., Diccionario estadísticoadministrativo.,
Barcelona, Ed Establecimiento
tipográfico de Jaime Jepús, 1885.
• Rodríguez Sánchez, A., Cáceres: población
y comportamientos demogr4ficos en el
siglo XVI, Cáceres, 1977, pp 31-39.
Parabiblos, n.9 (1995·1997)