TENlENDO TANTA VIDA POR DELANTE
(Requietn por cl obrero Víctor Ramírez
Brito, muerto al caer de un andamio
cuando trabajaba.)
1
No s6 por qué esos ojos me parecen
clientes
habituales
de la muerte,
teniendo tanta vida por delante.
Se abren
como ausentes,
sin que miren a nadie
ni hacia ninguna parte.
Compruebo que no mueven,
como el aire,
las ramas de los árboles,
y que no anuncian nada diferente
en los distintos cauces
de la calle.
Algo deben
tener para que acaben
cerrándose,
y que en la noche, con la luz, se entierren
teniendo tanta vida por delante.
II
La vida crece y crece,
tiende a desarrollarse,
aunque en un punto la sorprenda siempre
la muerte
inevitable.
353
Yo dirfa -temiendo hacer el viaje
que nos borra del mundo en un instante-que
si es perro nos muerde.
(La muerte estA en el aire
del día que nos muele
I’as costilltis con 18tigos de sangre.)
La vida crece y crece
sin que lo impida nadie..
Solamente le Puede
parar los pies la llave
que, de repente,
sin avisar le abre
una puerta al abismo de la muerte.
III
El mismo pIato siempre
para que te lo tragues
una y ciento de veces:
iReqztiescat in pace!
Es un ruido de llave
que retuerce
el pescuezo del aire,
0 un sol que se va en sangre
de repente.
Quieras o no, por fuerza has de tragarte
el mismo plato siempre:
iReq~~iescnt i?a pace!
Una cuenta corriente
ignora la existencia de una madre.
En el amor no cree
sea de fa clase
que sea, y no mueve
una cifra. ni. un dedo por nadie
si la cifra no asciende
y se hace considerable,
El mismo plato siempre
para que te lo tragues
una y ciento de veces:
iRequiescat in pace!
Ved lo que le sucede
al obrero que cae,
por un jornal de hambre,
de un andamio y perece
teniendo tanta vida. por delante.
El frio responsable
de esta muerte
sabe como ocultarse:
Le llama mala suerte
o accidente
de trabajo, o tambien -todo vale-que
estaba escrito en clave
por dios en las paredes.
Quieras o no, por fuerza has de tragarte
el mismo plato siempre:
jl?equiescnt in pace!
Plato único, en vías de que alguien
lo rompa en mil pedazos y lo cambie
en algo diferente.
Y entonces, de una vez y para siempre,
incuestionable-mente,
-nadie quiere
morir, así en la cruz como en la calle,
teniendo tanta vida por delante-la
muerte de la muerte
dará curso a la vida en todas partes.
&xrsTfN MILLARES SALL.
355