V CONGRESO Galdosiano m
Carles Bastons i Vivanco
Hace exactamente catorce años
mi colega catalana la doctora M." Angeles Cardona de Gibert leia en el
II Congreso de Estudios Galdosianos, también en esta hospitalaria isla,
la comunicación Cataluña y Galdós l, y nos prometía un libro acerca
de la relación Galdós Cataluña. Como quiera que se ha impreso lo uno,
pero lo otro no ha llegado a ver la luz publica, me permito en este traba-jo
que ahora presento retomar el hilo y hacer unas calas más en esa re-lación
que, sin duda, existió entre el novelista canario y Cataluña. Bien
es cierto que uno está totalmente de acuerdo en la trifurcación esboza-da
por la profesora Cardona 7, aunque tal vez se podría reducir a bifurca-ción:
Cataluña en Cialdós y Galdós en Cataluña.
Ahora bien, no en balde han pasado catorce años. Entre otras cosas,
en un plano estrictamente literario, se han incrementado los estudios de
literatura comparada y se han publicado algunas cartas -aparecidas ya
con bastante anterioridad- cruzadas entre Narcís Oller3 y su primo Jo-sep
Yxart con GaldÓs4, a las que dedicaré una mención especial
más adelante. Sin embargo, sigue totalmente virgen el tema de las rela-ciones
de la prensa de Cataluña con Galdós a través de artículos suyos y
de opiniones de los distintos periódicos sobre la figura del escritor cana-rio
5. Y sigue, asimismo, inédito otro campo de investigación interesantí-simo:
el estudio del epistolario no sólo útil para conocer aspectos de la
biografía de Galdós como persona y como escritor y de sus corresponsa-l
Publicada en las Actas del II Congreso Internacional de Estudios Galdosianos. Ca-bildo
Insular, Las Palmas (1980), 11, págs. 151-153.
Cataluña en la obra de aaldós y en aaldús; Qaldús en Catalufia y las publicd~iu-nes
y ediciones de Qaldós en territorio catalán.
W. H. SHOEMA(K4JEnRa a, mistad literaria: la correspondencia epistolar entre Galdós y
Narcís Ollen3. Boletín Academia de Bones Lletres de Barcelona, XXX (1963-1964), 247-
315.
R. CABRÉ~, EpistolarBi enito Perez Cialdós-Josep Yxarh, Miscellania Pere Bohigas 1.
Pub. Abadia Montserrat, Barcelona (198 l ) , 187-2 18.
Véase nota (42).
m BIBLIOTECA Galdosiana
les, sino también de la vida española -incluida la catalana- en todas
sus facetas 6.
Sin embargo, permítaseme, antes de entrar en el desarrollo concreto
del tema, expresar el deseo de que de mi comunicación se sitúe en un
marco más general: el de las relaciones interculturales y el de la aproxi-mación
entre intelectuales de distintas áreas geográficas periféricas. Me
explicaré: quisiera que el tema se enmarcara en la línea de diálogo, de
intercabio, de cruce de ideas y opiniones -y también de informaciones
objetivas y datos histórico-literarios- entre escritores de habla castella-na
y de habla catalana. Y por encima de todo ello, un acercamiento en-tre
Canarias y Cataluña, pasando también por el Madrid Galdosiano. Y
más concretamente acaso entre la ciudad de Las Palmas, que vio nacer
a D. Benito y la ciudad de Girona, ciudad que inspiró uno de sus episo-dios
nacionales y uno de sus dramas, y provincia que me vio nacer.
Y también antes de entrar ya en el planteamiento y desarrollo, decir
una vez m& que las fuentes de consulta me han sido bastante limitadas
y se reducen como información bibliográfica al trabajo inicialmente cita-do
', a los epistolarios publicados y a la lectura atenta del Episodio Na-cional
y de las Memories literaries de N. Oller lo.
Dicho esto, de momento, mi comunicación, según el esquema ya
enviado, se moverá en los dos ejes que siempre actúan cuando se trata
de establecer puentes de diálogo: Qaldós en relación a Cataluña (sobre
todo, la visión Galdosiana de algunos aspectos de la cultura catalana) y
Cataluña en relación a Galdós (sobre todo la prensa y las cartas). Y como
estudio algo más monográfico que enlazaría estos dos binomios el análi-sis
de Gerona, como episodio nacional y como drama: en él coinci-den,
aproximAndose, la vlsi6n Galdosiana de Cterona como ciudad -en
resistencia- y la predisposición y transformación de esta como marco
histórico y material literario para elaborar una obra.
A la vista de estos enunciados y a modo de pautas, los núcleos temá-ticos
más importantes de esta comunicación serán: la correspondencia,
las amistades concretas con intelectuales catalanes -lease una vez más
N. Oller y J. Yxart- y la realidad histórico-literaria de Gerona como epi-sodio
nacional y como drama ' l .
Conservado en la Casa-Museo Pérez Qaldós de Las Palmas. Sena muy interesante
poder localizar el inverso para establecer y publicar correspondencias cruzadas comple-tas.
Véase nota ( 1 ) .
Véase notas (3) y (4).
Ed. Alianza-Librería Hernando, Madrid, 1976.
lo Ed. Aedos, Barcelona, 1962.
l ' Véase M. ALVAR , novela y teatro en Qaldós~~P,r ohemio, 1, 2 (septiembre 1970),
157-202, especialmente 176-180 y J. Domlriau~z Jl~énez, ~Cierona "Episodio Nacional" y
Qerona "drama",,, Actas del 1 Congreso Internacional de Estudios Galdosianos'. Ed. Na-cional,
Madrid ( 1977), 152-165. Por otro lado, reconozco a posteriori que este análisis
monográfico constituye ya per se una comunicación; sin embargo, he preferido reducir-lo
al máximo pero presentarlo como un aspecto mas de la relación Qaldós-Calaluña.
V CONGRESO Galdosiano m
Y por último en esta especie de presentación, una referencia obliga-da,
que aglutina y armoniza el binomio antes citado: la de los viajes. No
voy a entrar en el estudio de los viajes que D. Benito realizó a Cataluna,
sintetizados por Angeles Cardona y Rosa Cabré 12, pero que sería muy
positivo que tuvieran soporte e ilustración periodística y hemerográfica,
hecho que escapa, por supuesto, a los límites espacio-temporales de esta
comunicación. Sin embargo, en varios momentos de la comunicación se
aludirá a los mismos.
Para vertebrar la visión Galdosiana de Cataluña pero teniendo en cuen-ta
el coniplejo conjunto de factores que integran el concepto cultura, voy
a tomar en consideración sólo un par: el lingüístico y el político.
Me ha sido prácticamente imposible rastrear declaraciones de D. Be-nito
sobre el catalán pero en la obra ya citada de N. Oller se deslizan
unas palabras suficientemente elocuentes:
~~Ollesrc ribe sus novelas en catalán, privando así a la mayor parte de los
españoles del placer de leerlas. El catalán es más difícil de lo que parece
a primera vista, seduce poco y no es de las lenguas que se pegan. Cuan-do
la necesidad nos obliga a leerlo, rara vez permanecen en nuestra me-mona
sus giros, su vocabulario y si cuesta algún trabqjo aprenderlo, no
cuesta ninguno olvidarlo^^ 13.
Palabras que me atrevería a afirmar que responden acaso a cierta ac-titud
compartida por otros intelectuales - e l caso de Unamuno- de fina-les
de siglo que consideraban el espa~iolc omo única lengua de cultura
de todo el Estado y atribuían naturaleza dialectal o muy secundaria a las
otras, o bien juzgaban una tozudería emplearlo por motivos de patriotis-mo
regionalista. Textualmente dice al respecto Galdós:
((...entran por mucho en su catalanismo los sentimientos regionales algu-nos
no justificados), 14.
De todas maneras sería muy enriquecedor encontrar nuevos textos
Galdosianos sobre el tema.
Otro aspecto interesante es la visión Galdosiana de la política catala-na
y mas concretamente del movimiento regionalista inicial y del poste-rior
catalanismo nacionalista inspirado ya en unos principios autonomis-tas.
Como quiera que mi colega A. Cardona aludió a esta cuestión, remi-to
a sus propias palabras:
<<...elno tocante a la autonomía, Galdós jamás (la) comprendió. Don Beni-to
creía que si Cataluña obtenía un estatuto autonómico la primera perju-dicada
sería ella, porque tendría que salir de las fronteras hispanas para
vender sus producto s...^^ l5
j 2 Vease notas (1 ) y (4).
l3 Op. cit., pág. 62.
l4 Epistolari Pkrez Ciald6.s-Josep Yxart, op. cit., págs. 203-204
l 5 A. CARDONoAp, . cit., págs. 153-15 4.
m BIBLIOTECA Galdosiana
Vale la pena, aunque sea de pasada, aludir a otro hecho curioso -
tambien recogido por A. Cardona lo y por tanto no insisto- que se des-prende
de la lectura atenta de alguna carta: E1 interés por visitar y recor-dar
Barcelona, deseo compartido por otros intelectuales castellanos más
o menos de la época. Más allá de los textos reproducidos por A. Cardo-na,
vislumbró una hipótesis tan importante que trasciende para mí el he-cho
anecdótico. Dado que Unamuno, Baroja, R. Darío, entre otros, com-parten
este punto de vista y sienten admiración hacia Barcelona, ¿no será
que esta ofrece a los ojos del intelectual castellano un valor artístico, li-terario
y cultural de primer orden, superior incluso al de Madrid? 17.
Sin embargo, el binomío Galdós-Cataluña se centra y se humaniza con
la relación amistosa y epistolar entre D. Benito y Narcis Oller y Josep
Yxart. Esa relación adquiere una dimensión humana. Conocemos detalles
de la amistad Galdós Yxart y N. Oller gracias a la correspondencia publi-cada
la. Conviene detenerse un poco en ella para ahondar en algunas
cuestiones, como, por ejemplo, el de las posibles influencias literarias,
la relación más estrictamente personal y el intercambio de opiniones en
múltiples materias.
La correspondencia entre D. Benito y el tarraconense Yxart abarca
desde 1883 a 1895 y se compone de 3 cartas de Galdós a Yxart (entre
1883 y 1891) y cinco de Yxart a Galdós, a las que hay que anadir una
póstuma publicada en ((La Vanguardia)! a propósito del estreno de
Los Condenados en Barcelona. Parece ser que Yxart se interesó por Gal-d6s
cuando aquel era un joven de 22 años que leía la primera serie de
los Episodios Nacionales, y que la primera noticia le llegó en su estancia
en Madrid entre 1873 y 1874. La relación personal se inicia en 1883 a
través de la primera carta enviada desde Barcelona. Galdós pudo cono-cer
a Yxart a traves de la revista ((Arte y Letras)). Y el encuentro personal
probablemente fue en 1888 con motivo de la Exposición Universal de
Barcelona, a la que visito Galdós y fue recibido por N. Oller, primo de
Yxart. y se incrementó en otra estancia catalana de Galdós, la del ano
1893, poco antes de morir Yxart.
La relación Benito Pérez Galdós-Narcís Oller es extensa e intensa. Se
concreta en un rico epistolario integrado por 3 1 documentos epistolares
de N. Oller a aaldós y 23 de B. Pérez Galdós a N. Oller. Cubre más de
treinta anos -de 1884 a 19 15-; y son numerosas las referencias que
de Galdós da N. Oller en sus interesantes Memories ya citadas, muchas
de las cuales reproducen párrafos epistolares. En cuanto al primero,
poco hay que anadir al cuidadoso y documentado trabajo de W. S. Shoe-maker,
en cuyo párrafo inicial se afirma, entre otras cosas, a propósito
l6 Ibidem, págs. 156-157.
l7 Hay textos que aquí no vienen al caso reproducirlos. que lo demuestran. La cues-tión
es tan importante que puede llegar a superar y desmentir la teoría de P. Lain Entral-go
sobre la función ejercida por Madrid hacia los escritores penféricos, formulada en su
libro ya clásico La Generación del 98.
l8 Véase notas (4) y (3), respectivamente.
V CONGRESO Galdosiano m
de la relación: ida índole de las relaciones era sincera, cándida, cordial,
de una calurosa franqueza de amigos verdaderos y hasta íntimos)). Baste
decir que inicia el primer paso el novelista catalán -en carta del 20-V-
1884- apelando a Pereda, amigo común de ambos. Vale la pena, aun-que
sea rompiendo el esquema-enunciado, reproducir el párrafo en el
que Oller describe a Galdós, cuando lo conoció personalmente el ano
1888, al llegar a Barcelona:
14%al t com son conterrani Guimera, prim, desgalitxat. d'expressió dolca i
somniadora, pero de faccions i aspecte vulgars, color de suro. i no duu
sinó bigote negre-llis com son poc cabell. Vesteix pardessus i bolet tou.
Em diu que ve invitat per I'alcalde com a diputat: que no sap on po-sara...~
l 9)
o este otro, que conectaría con mi última cala 20, en el que Oller aconse-ja
a Galdós sobre la viabilidad de emprender la redacción de la ultima
serie de los Episodios Nacionales en un encuentro en Madrid el año
1900. reproduzco sólo parte de la entrevista, toda ella muy franca y casi
confidencial. dice así:
-No amigo Cialdós yo no haría eso jamás. Escribir la historia de los con-temporáneos
es empresa ocasionada a cosechar graves disgustos. Los
parientes aún vivos de los personajes cuyos hechos habrá usted de na-rrar
y comentar segun su modo personal de ver, que jamás será el de
aquellos, van a motejarle a usted de falsario, de panfletista o cosa aún
peor. Esto, a parte de que, querido aaidós, yo creo que en estos momen-tos
le convendna a usted descansar y dejar descansar al público. Hace ya
tiempo que viene usted publicando dos tomos cada ano y al público, o a
la mayor parte de él cuando menos, obrando así, le fatiga ..., 1 21
Mal consejo el de Oller y buena decisión de Cialdós. Ahora bien, y
como pequeña recopilación de la relación de Galdós con los dos intelec-tuales
catalanes -recuérdese que en este caso concreto seria al revés,
ya que la iniciativa parte de Cataluña 22-. me atrevería a decir que
por encima del comienzo epistolar puntual y casi anecdótico -una re-vista
en el primer caso 23 y un escritor, Pereda, en el segundo 24- habría
acaso la conciencia muy de la época de conectar desde Cataluna con
figuras de las artes, de las letras de fuera en una actitud de admiración e
importación de ideas -como fue el caso un poco más tardío de Una-
'' N. OLLERo,p . cit., pág. 106.
20 Brevísima ojeada al elemento catalán de Gerona.
" N. OLLERo, p. cit., pág. 202.
22 Es muy dificil en muchas ocasiones establecer el punto de partida de la relación
entre intelectuales, escritores, artistas, etc. A veces razones de estructuración y de ex-posición
obligan a alterar la coherencia o la lógica.
Arte y Letras. Así se recoge en la primera carta de J. Yxart a B. Pérez Galdós, de
fecha 4-VI-1 883.
24 Así se recoge en la primera carta de N. Oller a B. Pérez Galdós, de fecha 20-V-
1884.
m BIBLIOTECA Galdosiana
muno. Quede también como simple hipótesis convertible en tesis o en
Leoría.
Entrando ya de lleno en la segunda cala -Cataluña-Galdós- hay que
detenerse, aunque sea brevemente en la interesante correspondencia
cursada desde Catalufia, y en la prensa.
En efecto, en la Casa Museo B. Pérez Cialdós de Las Palmas se conser-va
un número considerable de documentos epistolares, todavía hoy por
clasificar cronológicamente, por transcribir y por anotar. Algunas, muy
pocas, se incluyen o se resenan en la obra de S. de la Nuez y J. Schraub-man
25, otra de las fuentes consultadas, pero no excesivamente fiable. Se
encuentran cartas de ideólogos, artistas, actrices, escritores y políticos,
entre otros. Abarcan una cronología considerable - d e 1882 a 19 18- 26
y aluden a múltiples temas. Como punto de partida el investigador
dispone, pues, de un paquete de cartas que en la mayoría de los casos
todavía no se conoce la reciprocidad y en otros plantean serios pro-blemas
de datación. La primera fechada es del ano 1882 y corresponde
a Apel-les Mestres y la última de 19 18 de Santiago Rusinol. Hasta la
fecha dispongo, gracias a la amabilidad del personal de la Casa Museo.
de unas cien fotocopias 27 pertenecientes a unos veinte corresponsales.
Por el número y por el interés vale la pena detenerse brevemente en
las cartas de la actriz Margarita Xirgu y en las del polifacético Apelales
Mestres.
Margarita Xirgu 28 envió, que sepamos, diez cartas a Galdós en una
cronología bastante compacta, entre los años 19 16 y 19 18. Obviamente
los lazos fueron por vía literaria y más concretamente gracias a la obra
teatral de D. Benito, o a la adaptación de sus novelas, como es el caso
de Mananela. La relación fue de amistad y admiración recíprocas.
Apelales Mestres 29 fue el catalán más prolijo en mandar cartas a
D. Benito. Este recibió 16 misivas que oscilan entre 1882 y 1905. Todas
giran en torno a las ilustraciones que el polígrafo catalán ponía a las
obras Galdosianas y al tema económico.
0trÓs corresponsales catalanes que se pueden citar por un motivo u
otro son el periodista S. Canals Vilaró 30, el músico Joaquim Malalts 3', el
artista Santiago Rusinol 32 y el escritor Josep Pin y Soler 33.
25 Cartas del archivo de íialdós. Ed. Taurus, M., 1967.
26 Franja no definitiva, pues existen muchas cartas sin fecha. Ello puede modificar
el periodo de recepción de cartas.
27 Algunas con senos problemas de fecha y de caligrafía.
2B (Molins de Rei 1888-Montevideo 1969). Prestigiosa actriz de teatro, interprete de
muchas obras de Qaldós.
29 (Barcelona 1854-1936). Dibujante, músico, poeta, ilustrador. En una palabra, po-lígrafo
artista catalán modernista.
30 Periodista catalán afincado en Madrid del cual apenas he podido conseguir datos.
fue director de la revista madrilena finisecular Nuestro Tiempo.
31 (Barcelona 1872-1 9 12).
32 (Barcelona 186 1 -Aranjuez 193 1 ).
(Tarragona 1842-1 927).
V CONGRESO Galdosiano 13E8
Salvador Canals i Vilaró envió ocho cartas entre 1895 y 1902 sobre
temas periodísticos y literarios.
Joaquim Malats mandó también ocho cartas a D. Benito, incluso algu-na
partitura.
De Santiago Rusinol, uno de los abanderados del Modernismo catalán,
a la vez escritor y pintor, recibió cinco cartas. En conjunto ofrecen cier-to
problema de datación y en ellas se habla tanto del interés de Rusiñol
por El abuelo como de la adquisición de dos Qrecos para el Cau Ferrat
de Sitges en plena euforia estética modernista.
De Josep Pin y Soler le llegaron diez cartas que cubren una cronología
de unos catorce anos (1892 a 1906) en las que también se habla de te-mas
literarios y personales y, sobre todo, rezuman una admiración hacia
el escritor canario, lejos de cualquier duda y la existencia de correspon-dencia
procedente de Canarias que aún no he podido localizar a pesar de
mis esfuerzos iniciales y que sería bueno encontrar cuanto antes.
Completan el epistolario, en el que he empezado a investigar, las car-tas,
entre otros, de Pere Coromines 34, Ángel Quimera 35, Eduardo Marqui-na
36, M. dels S. Oliver 37, Miguel Utril10~y~ L uis de Zulueta 39. Sin embar-go,
queda abierto a nuevos documentos y textos epistolares y a otros co-rresponsales
que en este mi vide intentaré encontrar y estudiar.
Respecto al otrn pilar sobre el que se basa la relación Cataluna-Cial-dós,
el eje periodístico-hemerográfico, también aludido por A. Cardona 40,
se puede decir que aún hoy esta bastante virgen, salvo honrosas ex-cepciones
y urge entrar en él, dadas las múltiples posibilidades, mas arn-ba
apuntadas 4'. Aparte de A. Cardona, el profesor L. Bonet dice lo si-guiente:
<<Enlo mbre de Galdós salpica una y otra vez la prensa barcelonesa d e la
Restauración. síntoma de aue era novelista ~rofundamente leído en
la Cataluña de aquellos tiemios: artículos de JO&¡ Sarda y JOSep Yxart en
La Vanguardia; reproducciones, finamente ilustradas, de algunas páginas
'" (Barcelona 1870-üuerios Aires 1939). Politico y escrilor, padre del filósofo Joan
Coromines. Envió una carta a Galdós, de fecha 13-VI-19 10 de carácter político.
35 (Sta. Cruz de Tenerife 1845-Barcelona 1924). Dramaturgo. Mandó cinco cartas a
Cialdós en torno a los años 19 12-1 9 13 y lo trata de paisano.
36 (Barcelona 1879-Nueva York 1946). Escritor catalán en lengua castellana. Se con-servan
5 cartas, casi todas del ano 1902. Abundan obviamente los temas literarios y
demuestran que el carteo fue recíproco, aunque de momento no he podido localizar ese
segundo bloque de cartas.
37 (Campanet 1864-Barcelona 1920). Ideólogo, periodista y escntor mallorquín. Se-gun
parece escribió en una sola ocasión a Galdós.
(Barcelona 1862-Sityas 1934). Artista modernista catalhn. Se conserva en la Casa
Museo Benito Pérez Galdós -archivo, dicho sea de paso, depositario de la co-rrespondencia
recibida por Galdós- una sola carta del año 1904.
39 (Barcelona 1878-Nueva York 1964). Político, pedagogo, escntor y periodista. Se
conservan cuatro cartas que van desde 19 1 1 a 19 16.
40 0. cit., pág. 151.
Informaciones, noticias, artículos, criticas sobre Galdós y colaboraciones de este
en la prensa de Cataluña.
BIBLIOTECA Galdosiana
de sus novelas en este mismo periódico; comentarios críticos de Francis-co
Miquel y Badia en Diario de Barcelona, que reflejan nítidamente la ima-gen
Galdosiana elaborada en la clase media del Principado: presencia del
escritor en la nómina de redactores de revistas culturales tan importantes
como Arte y Letras o La Ilustración Ibérica; considerable eco -con la
transcripción de algún articulo propio- en el diario republicano La Publi-cidad..
. '11 42
Cita excesivamente larga que aun sigue para acabar el párrafo apun-tando
otro hecho importante sobre el que todavía no he podido investi-gar
nada: la relación entre R. D. Perés 43 y Galdós.
Y finalmente, en el poco espacio y tiempo que me queda, voy a apun-tar
más que exponer, algunos aspectos que me parecen importantes de
Gerona visto desde una perspectiva catalana y más si se permite visto "7
desde la perspectiva de un gerundense. No voy a entrar en su bivalencia E
literaria 44, ni en su estructura ni en su temática ni en el estilo 45, sino O
simplemente en lo que hay de elemento catalán -urbanismo, toponimia, n
m
antroponimia- en Gerona. O E
En Gerona s e citan muchos lugares de la ciudad: calles emblemáticas, 2E Lodavía huy así llamadas (c/ Argerileria, Ciudadanos, ForGa, Ballesteria,
Cort-Real); plazas (del Vino, del Aceite, de las Coles), barrios existentes
en la actualidad (Pedret, Montjuich, Montelibi); murallas (de los Alema- 3
nes, S. Cristóbal) y torres de defensa (Gironella, S. Félix, S. Narciso); ríos O-
(Ter, Oñar), puentes (el de Piedra), barrancos (Qalligans), y otros puntos m
E
de referencia importantes como el Mercadal, S. Félix 46, lo cual dernues- O
tra que Qaldós se la conocía personalmente, ya que estuvo el ano 1867 g
y que probablemente se informó y se documentó, ya que todo lo cita n a
con una gran precisión 47.
Hay también referencias a poblaciones de la provincia como La Jun- n
quera, Figueras, Olot, Sta. Coloma de farners, Bruñola, ermitas como Els n
Ángels, mencionadas muchas veces escuetamente, s610 como obligados 5
puntos de referencia. O
42 L. BONETL, iteratura, regionalismo y lucha de clases (Galdós, Pereda, Narcís Oller y
Ramón D. Perés). Pub. Universidad de Barcelona (1983). 10.
43 (1863-Barcelona 1956). Poeta, prosista, periodista y crítico literano nacido en Cuba.
44 Episodio nacional y drama. Para ello, véanse los articulas citados en la nota (1 1 ).
Aparte de las obras ya citadas, es clásjco el ljbro de H. HJ ~TEJ ~ ~LLJoSsE ERp, jsodios
Nacionales de Benito Pérez Ualdós. ed. Gredos, Madrid, 1963.
'" T~anscribo los nombres fielmente del texto Galdosiano. Por razones obvias todos
están catalanizados hoy en el callejero (plaza de I'Oli, del Vi, de les Cols; calle Balleste-ries,
Ciutadans, Cort-Reial; barrio de Montlivi, Montjuic; pont de Pedra, etc. Es de notar
también romo Galdós ewribe Ofia. como nombre del no Onyar. Escapa de este trabajo
comprobar si en la época de Galdós los nombres oficiales de las calles se escribían en
catalán o en castellano.
'' Sena muy interesante rastrear en la prensa de Gerona, de la época -véase
L1. COSTAH, istoria de la premsa a la ciutat de Qirona ( 1 787-1939).C oedicion Ayuntamien-to.
Diputación de Girona e Institut Estudis Gironins, Girona, 1987- tanto para obtener
informaciones de la ciudad como de Galdós si las hubiera. dado que cuando estuvo sólo
tenia 25 años y no debía ser aún muy conocido.
V CONGRESO Galdosiano m
Dos elementos importantes que trascienden de lo local son la antro-ponimia
y las alusiones a otras relaciones catalanas. En el primer caso,
en la obra aparecen diminutivos -Badoret 48, Gasparó 49, Manalet 50, Pe-pet
51, Siseta 52-, apellidos muy catalanes -Ferragut ", Mongat 54,
Nomdedeu 55, Ru11 56, F. Satué 57- y otros no identificados, como Lucia-no
Aució, F. Jupeu, <~nostrarnoM~a>n sió, A. Quixols. En cuanto a lo segun-do,
se menciona, en la obra la sardana, el fluviol y la tenora 58. Y muchos
más nombres referidos a poblaciones, comarcas, calles, barrios y otros
términos geográficos, orográficos y toponimicos.
Sin embargo, el rriáxinio valor lo tiene la propia ciudad de aerona
invocada por boca de Nomdedeu de la siguiente manera en el drama:
Gerona, ciudad mía, mártir de la fe patria, baluarte del honor, en ti viví
muriendo; en tu recinto glorioso tuve mi Calvario; para cuantos en vivie-ron
calvario fuiste, y trono de inmortalidad para tus heroicos defensores 59.
Y a partir de ahí pueden nacer muchas comunicaciones o trabajos:
función, valor y frecuencia de cada uno de los nombres; vaciado com-pleto
de nombres y elaboraci6n de unos indices; diferencias entre. la
presencia y ausencia de elemento catalán en el drama y en el episodio;
fuentes de Galdós; la ciudad de Girona como marco histórico y como
material literario; relación entre ficción, literatura y dato histórico y geo-gráfico.
etc.
Estas han sido, pues, mis tres calas. Obviamente en las dos primeras
han entrado en juego dos de los ejes que vertebran toda relación entre
un intelectual, un escritor, un artista y/o un científico con culturas o te-rritorios
ajenos: me refiero a la visión de Galdós sobre Cataluña, y tam-bién
ha sido obligada la alusión a una posible recepción Galdosiana en
tierras catalanas a través de la prensa, del mundo editorial o también
-y ello es primordial- a través de la correspondencia enviada y recibi-
48 De Salvador.
49 De Ciaspar.
50 De Manuel.
De Pepe.
52 De Mar~isa. Era hermana de Badorel, Ciasparu i Manalet.
53 Joan Ferragut. Canónigo. El apellido se localiza en Barcelona, en Vilanova y la
Cieltrú, en FIix (Tarragona), en Menorca y en Madremanya, un pueblecito de la provincia
de Gerona, no lejos de la capital.
54 Cristoful (Cristóbal) Mongat, padre de las cuatro personas citadas en la nota (52).
55 Apellido existente, según el Diccionari Catala-Valencia-Balear, en Monistrol (Barce-lona),
Jijona, Altea. cuya grafia procede la aglutinación de Nom de Deu (Nombre de
Dios). En la obra es el apellido de un médico.
56 Eclesiástico. Apellido frecuente en Olot y Campelles (Cierona): en Qava, Manlleu y
Manresa (Barcelona): en Tarragona, Falset, Reus y Valls (Tarragona).
57 Edecán del gobernador. Este apellido se localiza en Barcelona; Ciirona; en Blanes
y Port-Bou (Cierona): en Batea (Tarragona) y en Solsona (Lleida).
58 Págs. 63-65. ES de destacar que Cialdós escriba danora" cuando en los dos idio-mas
es tenora.
59 Cito por el articulo de la revista Prohemio, pág. 177.
BIBLIOTECA Galdosiana
da, a través de su obra y ya más concretamente a través de su teatro,
segun observa también A. Cardona 60.
Por todo ello, queda mucho campo por explorar y ojalá en próximos
Congresos se haya avanzado ya por esa senda y pueda aparecer mien-tras
tanto un trabqjo definitivo, seno, riguroso y completo sobre la rela-ción
Galdós-Cataluña que sin duda fue o debió ser intensa y extensa por
lo que de momento se lleva investigado. Y con ello se haya podido dar
-o se pueda dar- un paso más en la aproximación cultural Canarias-
Cataluña, de la que ya dieron fe, entre otros, Benito Pérez Qaldós y Án-gel
Quimera.
"O Op. cit., págs. 160-1 6 1.