SURGIMIENTO DEL SINDICATO DE TRABAJADORES
DE LA ENSEÑANZA EN LA PROVINCIA
DE SANTA CRUZ DE TENERIFE
En el momento en que un colectivo de personas decide poner en
marcha una organización sindical, sea del sector que fuere, muchos han
tenido que ser los elementos a tener en cuenta para que este grupo de
presión, afin y solidario, intente debatir problemas comunes y a ellos se
les dé una resolución satisfactoria, como instancia mediadora, represen-tativa
y legitimadora, entre los propios afectados y las instituciones que
ejercen su hegemonía en ese sector determinado. En este sentido, el
surgimiento del primer sindicato de enseñantes de la provincia de Santa
Cruz de Tenerife no fue una excepción y muchos y variados fueron sus
avatares para constituirse como tal, debido, entre otras razones, a la
dispersión de intereses entre sus miembros, al caciquismo que los Ileva-ba
a la defensa de ideas e ideologías localistas sin conexión con otros
compañeros inmersos en la misma problemática y, sobre todo, a la
insoportable situación económica que les obligaba a dedicarse a otras
labores sociales con tal de poder sobrellevar algo más dignamente su
calamitosa vida familiar.
752 Manuel Ferraz Lorenzo
El despertar del sindicalismo en la enseñanza
Con el surgimiento del sindicalismo como bandera de lucha de los
trabajadores en el siglo XIX, con todo lo que ello conlleva de
concienciación, organización e intervención, comienza a reflejarse una
clara atracción por parte de los docentes españoles ya entrado el siglo
xx. En concreto, es a mediados de la década de 1910 cuando aparece el
primer sindicato de maestros en el Estado Español de manera formal y
legalmente aceptado, que recibina el nombre de Asociación General de
Maestros. Estaba integrado por los enseñantes más avanzados, que ape-nas
conformaban una organización estable dada su carencia teórica y
práctica en este tipo de asociaciones. En 1920 se adhiere a la redacción
Unitaria de la Enseñanza de Francia nacida el año 1919, y en 1922 nace
la Intemacional de la Enseñanza integrada por Francia, Italia, España y
Luxemburgo, que se amplía en el congreso de Bruselas de 1924 con la
entrada de Bélgica, Portugal, Bulgaria y la U.R.S.S., transformándose,
de este modo, en iTE (Intemacional de los trabajadores de la Enseñan-za).
A medida que avanzan los años se unen nuevos países y a finales
de la década de 1920 se celebran importantes congresos en Viena,
Leipzig, Aderes etc. dende se trtitaban temas de :unta pref~ndidud
como el papel de la religión en la escuela, la influencia del capitalismo,
el nacimiento del fascismo y la escuela, etc. A lo largo de este tiempo
la A.G.M. lleva una vida exangüe debido a dos motivos fundamentales:
a.- la presión de la dictadura con su defensa a ultranza de los hábitos
educativos restauracionista y b.- relacionado con lo anterior, el
reformismo y sometimiento de sus airigentes a ias directrices emanadas
por el conjunto de los poderes públicos, con carencia absoluta de pro-puestas
rupturistas.
Pero con la caída de Primo de Rivera se nutren las filas de la
Asociación revitalizando su existencia hasta el punto de que en febrero
de 193 1 aparece el primer número de Trabajadores de la Enseñanza , y
poco después es proclamada la República, la Asociación General de
Maestros se transforma en Federación Española de Trabajadores de la
Enseñanza. Con una conciencia más comprometida y con mayor liber-tad
de acción, pronto se pone en funcionamiento la presión para
desarticular las líneas de trabajo de los maestros españoles más progre-sistas,
Surgimiento del sindicato de trabajadores ... 75 3
Antecedentes en la Provincia Canarioccidental
La primera referencia que tenemos en la provincia de Santa Cruz de
Tenerife de una organización que velara por los intereses y problemas
del colectivo estrictamente docente, se remonta también a la época de
la monarquía de Alfonso XIII cuando se constituyó la Asociación Pro-vincial
del Magisterio de Primera Enseñanza. Su función consistía en
convocar asambleas más de carácter técnico-formalista (por llamarlo
de alguna manera), que reivindicativo-sindical, tal y como a principios
de siglo determinaban los avatares del poder político. Las reuniones
que se celebraban tenían la misión de informar de las existencias que
había en la Caja de Ahorros y Socorros Mutuos, ya que los Habilitados
de los Maestros, al ser accionistas de la Caja, debían dar puntual y
detallada información de las mismas. Una actividad, que evidentemente
no saciaba las demandas de los maestros, más centradas en problemas
de índole socio-pedagógicos que única y exclusivamente de gestión
financiera. Aparte de esta labor, sólo hemos encontrado una referencia
en la que la Asociación discute problemas netamente sindicales y es
con ocasión del proyecto de fusión de las tres sociedades de maestros
estatales: Asociación Nacional (a la cual pertenece la de Tenerife),
Española de Pedagogía y Liga Nacional de Maestros Rurales. Esta
iniciativa que partia de la Asociación Provinciai de Zamora era censu-rada
y tachada de inaceptable por la Asociación tinerfeña, que veía en
ella muestras de oportunismo e "intención de dividir al profesorado",
por parte de las otras dos sociedades escindidas de la primera sin moti-vos
fundados para ello. Los trescientos veintiséis componentes de la
Asociación en la isla se manifestaron, de este modo, votando en contra
de la fusión. Así se hacía constar en su órgano de expresión surgido en
torno a 190g3.
A lo largo de los años no surgiría ninguna otra organización que
nuevos problemas o que tratara de representar a aquellos sectores
desvinculados de la Asociación. Las razones más probables que aduci-mos
son tres: a.- El relativamente escaso incremento del número de
maestros con preocupaciones por afiliarse, o simplemente por coordi-narse,
b.- La presión ejercida por los poderes fácticos (Iglesia y Estado
fundamentalmente), para seguir defendiendo la educación decimonónica
754 Manuel Ferraz Lorenzo
nueva Directiva presidida por segunda vez por Pedro G. Sánchez, sino
también, por unanimidad de los presentes y los votos por representa-ción
de la mayoría, el ingreso en la Federación de Trabajadores de la
Enseñanza, afecta a la Unión General de Trabajadores4. Un primer paso
que hubo de agradecer al mencionado Pedro G. Sánchez que desde las
páginas de El socialista y El Eco del Magisterio Canario , había hecho
una apología acérrima de la Escuela Unica, "enganchando", de esta
manera, al grueso del magisterio provincial a las tesis defendidas por el
Partido Socialista y sustentadas, además, por el Director General de
Primera Enseñanza Rodolfo Llopis y el ex-Ministro de Instrucción Pú-blica
Marcelino Domingo. Del siguiente modo expresaba los objetivos
a conseguir: ,, -
E
La Asociación que por segunda vez presido, no es catapulta O
guerrera, sino castillo amurallado; no es arma ofensiva, como n -
=
algunos suponen, sino defensiva. (Su misión es) Recoger las m
O
E palpitaciones de la vida moderna en materia de enseñanza, con- £
tnbuir a su difusión y conocimiento, laborar por su engrandeci- 2
E
miento y dignificación, evitar persecuciones y abusos caciquiles, =
en una palabra, vivir para la escuela y el maestros. 3
- -
0m
E Creación real de la Federación TinerjGeña de Trabajadores O
de la Enseñanza
n
E Sentida la necesidad de pertenecer, por tanto, a la organización -
a
estatal, en julio de 1933, quedaba constituida la Federación Tinerfeña nl
de Trabajadores de la Enseñanza después de diez meses de trámites n
0
para su formación. Asimismo, comenzaba su andadura el que iba a ser 3 su órgano de difusión Obreros de la Cultura que publicaría su primer O
número el 1 de julio de aquel año, y que tendría vigencia hasta el 15 de
octubre de 1934, fecha en que la fuerte censura del gobierno de dere-chas
lo clausuró, volviendo de nuevo a la calle a partir de 1935 con el
nuevo título de Trabajadores de la Enseñanza. La comisión ejecutiva
estaba formada por Roque Quirós Cova como Presidente, Edrnundo
García Perdomo Secretario General, Francisco Delgado Herrera
Surgimiento del sindicato de trabajadores ... 75 5
Presidente del Consejo Provincial de Primera Enseñanza de febrero de
1934. Dado que fue apoyado en su candidatura por electores de carác-ter
liberal y de izquierda, pronto se trató de involucrar a miembros de la
Federación en tan contradictoria votación. Ante ello la comisión ejecu-tiva
emite un comunicado en el que dejaba claro que en el momento de
constituirse el Consejo Provincial, aún no existía esta organización de
trabajadores. Y siendo esto así -se preguntaban- jcon qué razón se
pretende ahora que la F.T.T.E. se encuentre respaldando actitudes y
criterios de representantes que no tiene?'. Todo había sido una manio-bra
para demostrar que Francisco Delgado miembro de la F.T.T.E.
había apoyado a elementos que no eran de izquierda, ante lo cual éste
afirmó: 1.- que él no era, dentro del Consejo Provincial de Primera
Enseñanza, representante de ninguna Asociación, sino del Magisterio
Provincial, por lo que su voto no estaba adscrito a la F.T.T.E.; 2.- que
dentro de la general tendencia reaccionaria del Consejo Provincial ha-bía
votado al de mayor independencia y 3.- que con posterioridad al
nombramiento se había enterado de que eran varios los escritos del Sr.
Gaviño atacando la Escuela Nacional y el Magisterio. Finalizaba el
comunicado, que firmaba la Comisión Ejecutiva, con la siguiente vehe-mencia
de contenidos:
La Federación Tinerfeña de Trabajadores de la Enseñanza
está hoy donde mismo ha estado siempre: frente a la reacción y
contra el rutinarismo, y, por lo tanto, no respalda ni respaldará
nunca, ni implícita ni explícitamente, cargos que recaigan en
personas de la ideología y actividades del Sr. Gaviño8.
Con problemas de este tipo y buena predisposición para afrontarlos
fue caminando la F.T.T.E. hasta la celebración del Congreso Extraordi-nario
en abril de 1934, donde después de formarse varias comisiones,
se plantea como tema estelar la constitución de un Frente Unico con las
demás asociaciones provinciales de maestros para mejor salvaguardar
sus intereses y, conjuntamente, realizar campañas divulgativas con ob-jeto
de dotar a este movimiento de carácter popular9. Tanto fue la
notoriedad que tuvo el tema que la F.T.T.E. dirige una carta a la Junta
Directiva de la Asociación Nacional del Magisterio Primario para abor-dar
75 6 Manuel Ferraz Lorenzo
propaganda pública a través de mítines, asambleas, y manifestaciones.
Asimismo se convocaba para octubre una Asamblea Nacional de Maes-tros
en la que intervendrían delegados de las secciones provinciales de
las organizaciones que componían el Frente Unicolo.
Mientras todo esto ocurría, en la Provincia de Santa Cruz de Tenerife
se seguía trabajando sindicalmente al margen de la legislación vigente,
siendo costosos los esfuerzos por cambiar esta situación.
Creación legal de la Federación Tinerjieíiu drí Trabajadores de la Enseñanza
A pesar de que, como hemos visto, la Federación Provincial co-mienza
su andadura desde julio de 1933, no pasaban desapercibidas las
"ambiciosas" aspiraciones de sus afiliados que en su afán por formar
una organización con más presión institucional y más apoyo social,
trabajan por constituirse jurídicamente en Federación (o Sindicato) de
Trabajadores de la Enseñanza. Embarcados en este cometido la primera
tarea consiste en elaborar unos estatutos para hacer factible la petición
al Ministro de Instrucción Pública, y para que éste, a su vez, diera el
beneplácito ai proyecto. Con esta actitud ios asociados no pretendian
más que "legalizar" la actividad que pretendían desarrollar.
Se elaboran, de este modo, unos estatutos de siete folios de exten-sión
y dieciséis artículos en los que se desarrollan los apartados
fundamentales que los afiliados creen más ajustados al carácter de sin-dicato
que defienden, y cuyas aspiraciones se concretaban en los cinco
primeros apartados del artículo uno:
a.- Luchar eficazmente en favor del mejoramiento de la situación
material, jurídica e intelectual de los trabajadores en la Provincia.
b.- Procurar la transformación de todos los centros de educación y
cultura hasta convertirlos en centros populares y democráticos.
c.- Conseguir una íntima compenetración entre el Magisterio y los
organismos obreros cuya acción se inspire en la lucha de clases por la
liberación de la clase obrera; en el convencimiento de que sólo la
transformación social por éstos propugnada, es capaz de liberar a la
Surgimiento del sindicato de trabajadores ... . 757
Uno tras otro, los distintos artículos exponían la filosofía propia de
un sindicato crítico y alternativo en un régimen republicano que, a
pesar de comenzar su actividad proponiendo cambios tajantes con res-pecto
a su precedente modelo político, no satisfacía las demandas de
los docentes más entusiásticamente implicados en la realidad político-educativa.
El sindicato se autodefinía apolítico y aconfesional y daba
cabida a los Maestros Nacionales, Privados, Profesores de Escuelas
Normales, Inspectores de Primera Enseñanza, Profesores de Escuelas
Especiales, Profesores de Institutos, Catedráticos de Universidad, Alum-nos
de Escuela Normal, "y cualquier trabajador de la cultura que estudie
o enseña como medio de ganarse la vida en el trabajo de la enseñan-z
a 9 9 1 ~ . Asimismo, como hemos visto más arriba, se fundaba un órgano
de expresión quincenal del magisterio tinerfeño (Obreros de la cultu-ra).
Este reglamente se firmaba en Santa Cruz de Tenerife el 28 de junio
de 1933 por los siguientes fundadores: Roque Quirós, Víctor Pérez
Quesada, Robustiano Toledo, Edmundo G., Helenio Padrón, Francisco
Delgado, Plácido Sánchez, Domingo González y Servando Afonso Bnto,
siendo presentado en la Delegación del Gobierno de Santa Cruz con
L-L- i 2- :.-%le a L- A- --ii-a- --- 1- n - i - - , . - : ~ . . m..-...:..-:,.i
ieuia I ut: JUUU, ucq~ucsu c C>LCII aciiauu pui ia ucicgauuii riuviiiuai
del Trabajo. Un año tardaron los trámites burocráticos en contestar la
instancia y una vez transcumdo éste, la respuesta no presentaba dudas
resolviendo "no otorgar la autorización ministerial solicitada para la
constitución y legal funcionamiento de la proyectada as~ciación"'~.
Los argumentos esgrimidos en esta negativa consistían, según la
comunicación, en no haber informado todas las autoridades competen-tes,
en no cumplir todos los requisitos del reglamento de 7 de septiembre
de 1918, y en las observaciones realizadas a varios artículos por el
Claustro de la Escuela Profesional de Comercio de Santa Cruz de
Tenerife debido a que no se ajustaba a los preceptos legales en materia
de asociaciones de funcionarios públicos. Ello, como hemos visto, no
impidió que el sindicato comenzara su trabajo desarrollando la activi-dad
reivindicadora, denunciando las irregularidades que en materia
educativa se cometían, y publicando el quincenario portavoz de la Fe-deración.
Pero no habían terminado aquí los intentos por conseguir la autori-zación
758 Manuel Ferraz Lorenzo
estatutario que anula el anterior y comienzan las gestiones oportunas
para que se produzca su aprobación. Esta vez su extensión se reduce en
más de la mitad quedando en sólo tres folios que. contienen cuatro
capítulos y un total de diecinueve artículos no sobrepasando en su
mayoría las tres líneas. El radicalismo del primer proyecto de estatuto
se ha esfumado, resultando unos artículos desvaídos en su exposición y
articulación, acentuándose, eso sí, su formalismo jurídico. El principal
capítulo digno de mención era el primero que en su punto tercero decía
lo siguiente:
La Federación Tinerfeña de Trabajadores dé la Enseñanza
declara libre, entre sus afiliados, el pensamiento individual,
siempre que éste sea dirigido a la emancipación de la clase
trabajadora y practicar el espíritu de solidaridad con todas las
organizaciones de tendencia progresista, dentro de la Constitu-ción
del Estado14. -
E
E
Su más destacada novedad consiste en que, de ahora en adelante tal SE
y como presenta su encabezado, la Federación sólo acogerá en su seno
a los Maestros Nacionales, con lo cual se disipa el proyecto encamina- =
A n n l n . z - ; G n n A X n An ir\Anri Ir\" nnrinñoninri D o t o .mx.r G-on nl n t n v r n r i n
UU a 14 UIlIllLUbIUIl Ub L U U U J IU3 b l l J b L J U L I L b J . L J L U V L 1 i l l l l J l U l l bl p I V J b b L U -
Roque Quirós, Francisco Delgado y Pedro J. Jiménez en Santa Cruz de 0
m
E Tenerife a 20 de julio de 1934. O La respuesta emitida en Madrid el 6 de octubre de 1934, visto el
informe favorable del Gobierno Civil, del Consejo e Inspección Provin- n
E cial de Primera Enseñanza y Sección Administrativa, otorgaba la a
autorización para que se constituyera legalmente la sociedad denomina- n da Federación Tinerfeña de Trabajadores de la Enseñanza, Asociación n
n
Provincial de Maestros Nacionales de Tenerife,
3
O
considerando que la Asociación de que se trata persigue fines
lícitos y que su funcionamiento no obsta al buen servicio del
Estado, ni se opone a la disciplina que debe existir en el magis-terio15.
Surgimiento del sindicato de trabajadores ... 759
como no había sucedido antes en la historia estatal (y provincial), surge
un número considerable .de maestros políticamente definidos y
sindicalmente solidarios con la denuncia y transformación de las es-tructuras
de la sociedad en continuo movimiento pendular y, por ende,
en estable y anquilosado estancamiento.
Su pretensión se situaba en la educación pero a sabiendas de que por
sí sola no generaría la mutación necesaria que acabaría con los grupos
hegemónicos, históricamente en el poder debido a condicionantes eco-nómicos
y políticos, fundamentalmente. Por tanto, el interés de la
Federación de Tenerife, al igual que las Federaciones estatales, radica-ba
en mejorar las condiciones educativas de docentes y discentes
tratando de implicar a los afiliados en particular, y a los habitantes en
general, en la resolución de los conflictos sociales derivados de la lucha
de clases, a través de la conciencia necesaria capaz de demostrar que
los problemas, lejos de ser individuales, eran el reflejo de una situación
de injusticia generalizada. Por ello trabajaron durante más de un año al
margen de la legalidad dado que no se sentían representados por ella,
pero convencidos de que sólo en ella, realizarían una labor más
divulgativa y menos constreñida por los poderes públicos.
En resumen, tanto el Partido Socialista como, en menos medida, el
bloque representado por el incipiento Partido Comunista, supieron apro-vechar
la apertura política propiciada por los gobernantes republicanos
para fomentar el activismo educativo, para denunciar las injustas condi-ciones
de vida de los maestros, para ejercer un mayor control en los
organismos de representación, para atenuar su indefensión ante la pre-sión
caciquil etc. etc. Pero no nos engañemos, tal y como ha quedado
reflejado a lo largo del trabajo, su objetivo final sobrepasaba con creces
la modificación de este -importante pero al fin y al cabo- fleco
social, que es la educación.
Manuel Ferraz Lorenzo
1. Vid. PESTANA, F.: "El despertar del magisterio", Obreros de la Cultura,
Tenenfe, 15 de mayo de 1934, núm. 22, p. 2. Es necesario puntualizar que la mayor
parte de la información desarrollada en este sentido ha sido extraída de este interesan-te
artículo.
2. Idem.
3. "La fusibn de Asociaciones. Juicios de la Prensa", Escuela Canaria, Revista de
Instrucción Pública, Santa Cruz de Tenerife, 20 de Noviembre de- 191 1, núm. 141, pp.
1 y 2.
4. G. SANCHEZ, P.: "A los compañeros asociados a la Provincial del Magisterio
de Tenerife, La Palma, Gomera y Hierro", Eco del Magisterio Canario, Tenerife, 7 de
marzo de 1932, núm. 964. p. 3.
5. Idem.
6. Obreros de la Cultura, Tenenfe, 15 de julio de 1933, núm. 2, pp. 7 y 8.
7. Obreros de la Cultura, 15 de febrero de 1934, nC>m. 16, pp. 1 y 8.
8. Idem.
9. Obreros de la Cultura, 15 de abril de 1934, núm. 20, pp. 3 y 4.
10. Obreros de la Cultura, 2 de octubre de 1934, núm. 31, p. 2.
11. Estatutos de la Federación Tinerfeiia de Trabajadores de la Enseñanza, sec-ción
Provincial de la Federación Española de Trabajadores de la Enseiíanza (UGT).
Archivo de Alcal6 de Henares, Legajo 784, G-59, p. 1.
12. Ibidem, p. 2.
13. Comunicación enviada al Sr. Ministro de la Gobernación, dada en Madrid el
30 de junio de 1934. Archivo de Alcalá de Henares ...
14. Reglamento de la Federación Tinerfeña de Trabajadores de la Enseñanza,