Poemas
A ! N A T () R !{ E N T - L E N Z E N
y TEXT'URAS
Yedra
En tus manos,
en tus bosques,
yedra.
Yedra en tus ojos
y en tus entrañas.
Yedra encaramándose
junto a tus pensamientos.
Tiernos vástagos de yedra,
tus balbuceos y rezos,
yedra húmeda, tus besos,
yedra arraigada.
)
Viaje
Zarpar,
ojos de fina tajada de luna,
cerrados por el cansancio
o por la muerte,
qué más da ..
tu corazón ancoró hace ya tiempo
en las honduras del mar,
te mecen ahora las olas y el recuerdo,
tu mecedora cruje los embates del viaje,
llegaste tan lejos ..
Tierras y texturas
Impenetrable y oscuro,
nuestro decurso,
adentrándose
en la umbría
de un abrazo.
Las horas nos han concedido
un rincón para detenernos
y llenar,
ceremoniosamente,
espacios tangibles.
Bebes ávidamente
el néctar de mis manos ..
... ellas resiguen tu sed,
de trazo transparente.
Cuán hermosos aparecen hoy
tus ojos jaspeados
por la sombra de las jemesías,
tu frente,
sutilmente aJambicada
con los destellos de un beso,
que demora,
tan húmedo e inesperado,
en mis labios cautivos.
11
Por entre tienas y texturas,
mundos concomitantes.
Tu entrega la mido hoy
en sabias porciones
de amor y de muerte,
abandonándolo todo
al sumiso ritmo
de tus rotas cadencias.
Y entonces
te sé y te siento mfo.
NEO 49
Río
Con el agua del río
pensamientos indómitos se arropan
en las vCrl ig inosas orillas.
Poemas
Poética
En la superficie del agua no solame nte se desnuda el otoño.
El poela habla del Inundo. Ordena y subordina
el mundo con sus palabras, creando nue·
vas esferas i ntersubjeti vas que vuelven a trans·
formarse al llegar al lector reci piente. Porque
éste se ve irrevocablemente sumergido en aque·
lIa tensión emocional, estética e intelectual con
que lo reta el poema pidiéndole una respuesta.
Transconexiones breves pero intensas.
Por el ag ua flu ye con tanta presteza nuestro abrazo.
Todo desaparece al mirar el agua.
En el agua resuena nuestro silencio.
Algo muy tuyo
Ese cosqui lleo del alma
me dice
que tan baladino no fue
algo muy tuyo que abandonaste
entre arrugas de amor
y sábanas de piel.
Paisaje
Extraño amanecer:
tus manos se han convertido en alas que recitan
cimas gélidas y selvas impenetrables
y luS pensamientos repiten un nombre
por entre los acantilados,
ahora transfi gurado en mantra.
Porque el acantilado es el único lugar
donde luchan mares profundos
y vientos enloquecidos
y donde estallan
las olas en espuma
y las esperanzas en gritos.
50 A. T
El poeta habla del mundo y de lo cotidiano.
El mundo cotidiano trasciende al e nlazarse
existencias, aunque los desenlaces no siempre
sean sati sfactorios.
El poeta habla del mundo y va penetrando
en el secreto de las palabras sin llegar nunca a
consumir ninguna de ellas. Porque so lamente
las palabras permanecen acri so ladas y ágrafas
·a pesar de su alhajada ortografía· y apátridas.
Aina Tor rent-Len zen nació en Barcelona en 1957. Estudió la
carrera de música en el Conservatorio de la Ciudad Condal y se
especializó e n laúd barroco y vihuela renace nti sta en la Sello/a
CallfOrUI1I de Bas ilea. Realizó los estudios de filología románica y
germánica en la Universidad de Aquisgrán, doctorándose sobre un
tema de lingüística catal ana. Como filóloga ha publicado estudios
sobre temas de lingüíst ica y de literatura; como poetisa, ha colaborado
en diversas revistas literarias castellanas y catalanas y ha
publicado en Alemania un poemario en lengua castellana (Bisa·
gras, 1998). Actualmente es representante de cátedra en la Uni versidad
de Cie ncias Aplicadas de Colonia.