Reflexiones sobre la enseñanza en Sur
de Tenerife en el tránsito del siglo XIX al XX:
Granadilla de Abona
CARMERNO SAPÉ REZB ARRIOS
Universidad Nacional de Educación a Distancia
Con este trabajo no pretendemos hacer un estudio concluyente so-bre
la realidad educativa del Sur de la isla de Tenerife en el tránsito del
siglo XIX al XX, tan sólo nos mueve el deseo de esbozar unos rasgos que
nos ayuden a aproximarnos a su realidad, y a comprender como los ba-jos
niveles culturales mantienen una relación directa con el tradicional
atraso en que vivió inmersa esta parte de la Isla. Por una parte, los
bajos niveles de escolarización y los altos índices de analfabetismo
parecen ser factores que coadyuvan al crónico desnivel económico
que soportó el Sur hasta tiempos relativamente recientes. Por otra,
observamos cómo una economía caracterizada por los cultivos de sub-sistencia
o sometida a los vaivenes de los mercados internacionales, jun-to
a dificultades como el alejamiento y la incomunicación con los prin-cipales
centros económicos de la Isla, parecen ser elementos poco
propicios para sustraer a su población del estado de postración cultural
a que se ven condenados, situación que se prolonga hasta buena parte
del siglo XX.
Boletín Millares Carlo, núm. 18. Centro Asociado UNED. Las Palmas de Gran Canaria, 1999
328 Carmen Rosa Pérez Barrios
Intentos de mejorar la situación educativa en el país se habían dado.
Éste fue el objetivo, por ejemplo, de la Ley Moyano de 9 de septiembre de
1857. Se trataba de solucionar los males de la enseñanza en España, pero
lo cierto fue que en la realidad no supuso la eliminación de las tremendas
deficiencias que tenia el sistema educativo, perpetuándose las altas cuo-tas
de analfabetismo en el país'.
El ideal de expansión educativa surgido tras la septembrina fue
abandonado en la Restauración, "las posibles bases de una educación po-pular'
impulsada desde el poder como fuente del bienestar colectivo fueron
abandonados a fnvor de la selección clasista concentrada en una educación
media y alta selectiva o una limitada instrucción primaria que poco a poco
llegaría a la mitad de la población en edad escolar"2. Serán las regiones me-ridionales
españolas las que registren en las últimas décadas del siglo XIX
los mayores índices de analfabetismo, representando, aún, en 1910, según
cifras aportadas por Gil y R. Garrido, una de las mayores cuotas, índices
en los que se engloba a Canarias con un 66%, valor muy similar a los de
Jaén, Almería, Albacete, etc.3
En Canarias se observará que, a pesar de los intentos liberales por ex-tender
la educación, ésta no mejoró sustancialmente. Inconvenientes co-mo
la carencia de material escolar, la falta de infraestructuras adecuadas,
etc., producto, a su vez, de la escasez de las consignaciones presupuesta-rias,
son frecuentes en la realidad educativa decimonónica4. Estos males
se perpetuarán en el siglo XX, baste recordar las cifras que sobre analfa-betismo
se daban para 1920: 74,50%, o los análisis que en la prensa se
hacían de los males del sector: "...escasez de escuelas, falta de condiciones,
tanto pedagógicas como higiénicas de la mayoría de las que funcionan; ser
casi todas lugares poco amenos a la infancia, que en ellos ve un lugar de
tormento, ya moral ya corporal; no cumplir los maestros su sagrada mi-sión,
y no concurrir los chicos a las clases con la asiduidad que ha me-nester
..."s.
1 PÉREZ BARRIOCS,. R.: "La instrucción pública en Arona (Tenerife) durante el siglo
Xm", X Coloquio de Historia Canario-Americana, Cabildo Insular de Gran Canaria, 1992, p.
652.
2 MART~NCEUZA DRADMO.:, "La burguesía conservadora (1874-1931)': Ed. Alianza,
1978, p. 124.
3 MART~NCEUZA DRAMDO.: ,O p. cit., p. 125.
4 BELENGUCEARL PEE,. y otros: "Faustino Méndez Cabezola. Un educador liberal cana-rio
del siglo XIX: Cabildo Insular de la Palma, Ayuntamiento de SIC de La Palma, C.C.P.C.,
pág 25.
5 El Progreso. 15 de Abril de 1920.
Reflexiones sobre la enseñanza en el Sur de Teneri fe...
En el Sur de Tenerife el estado de la enseñanza, en general, ha sufrido
al igual que otros sectores de la vida los inconvenientes del aislamiento.
La abundancia de barrancos que dificultaban las comunicaciones, la ca-rencia
de una red viaria que propiciara los desplazamientos terrestres, y
la dependencia de la vía marítima como fórmula más asequible para la co-municación,
influyeron en el poco atractivo que para sectores ilustrados
de la sociedad canaria pudiera tener el asentarse en estas bandas. Incluso
para múltiples sureños que descollaron en los círculos intelectuales de su
época, era poco atrayente el retorno, por lo que optaron por fijar sus resi-dencias
en el área capitalina, donde las aspiraciones políticas y las satis-facciones
sociales podían tener mejores perspectivas, manteniendo con
respecto a sus pueblos natales una actitud absentista, sosteniendo a lo su-mo
segundas residencias o conservando los vínculos con el terruño natal
a través de sus familiares.
Esta mentalidad, a su vez, impedirá la creación de un estado de opi-nión
popular favorable a la ampliación y atención escolar, lo que, unido a
factores físicos como las condiciones meteorológicas que arrojan una es-casa
pluviometría, la escasez de recursos hídricos, o lo costoso de su ob-tención,
con el freno consecuente para el desarrollo de la producción
agraria, impedirán la generación de capitales suficientes, que favorezcan
una mejora y ampliación de la instrucción.
Si, además, tenemos en cuenta la enorme dependencia que hacia un
determinado cultivo se tenía, y el riesgo que su vinculación a los merca-dos
internacionales suponía para la mayona de las economías familiares
-que sin embargo vieron en la segunda mitad del siglo XM cómo la co-chinilla
parecía sacarlos de su tradicional penuria-, comprenderemos
como no se llegan a gestar las condiciones precisas para que existiera una
verdadera inquietud cultural por parte de la mayona poblacional, que ten-dría
como preocupación perentoria el poder subsistir en la comarca sin
tener que recurrir a la emigración.
Granadilla, a lo largo de los siglos, había ido ganando un cierto pro-tagonismo
en el contexto sureño frente a la cabecera de la comarca
chasnera, liderazgo que comienza a gestarse en la creación de la iglesia
de San Antonio de Padua, al separarse de la matriz de San Pedro de
Vilaflor, en 16 176; con el nombramiento consiguiente de alcalde pedá-
6 HERNÁNDREZO DR~GUGE.:Z ",E stadística de las Islas Canarias. 1793-1906. de Francis-co
Escolar y Serrano", T.111, Caja Insular de Ahorros de Gran Canaria, Lanzarote y Fuerte-ventura,
1983, p. 64.
330 Carmen Rosa Pérez Barrios
ne07; con la delimitación de su jurisdicción en el siglo XVIII frente a Vi-laflor8,
o con la instalación de la escribanía en Granadilla en la segunda
mitad del siglo XK, tras las polémicas suscitadas con el pueblo de Vila-flor
a comienzos de dicho siglo por la escribanía que detentaba Domingo
Ruiz y Morag, pero, sobre todo, al convertirse en cabecera de un nuevo
partido judicial, con la instalación del Juzgado de Primera Instancia el 15
de septiembre de 1908, según lo dispuesto por el Real Decreto de 9 de ju-nio
de dicho añolo, papel que reforzaría posteriormente con la instalación
de otros organismos como el Registro de la Propiedad, que abarcaría to-dos
los pueblos que conformaban el partido judicial.
La burguesía agraria enfrentada a los intereses de la gran terratenen-cia
terminó consolidando su protagonismo en el lugar, inclinando la ba-lanza
a favor de Granadilla en la pugna mantenida con Vilaflor.
La sociedad sureña responderá de forma contradictoria ante el he-cho
educativo. Las estratos más bajos de la sociedad se enfrentarían al
dilema de tratar de sacar a sus hijos del oscurantismo al que el analfa-betismo
los condenaba, o seguir manteniéndolos como fuerza comple-mentaria
en la obtención de unas rentas que les permitieran, al menos,
subsistir. Pero tampoco debemos olvidar los recelos que despertaba una
enseñanza deficiente, pues podía dejar el nivel de conocimientos en po-co
más que en una firma "...a nuestra gente de campo ... recelosa de los 'se-ñoritos
del pueblo: no le gusta saber leer y si sabe lo niega con orgullo pa-ra
no andar en líos de justicia y no la puedan obligar a firmar documentos
por temor se atente en ellos a sus fincas, a sus ganados, a sus aperos de la-branza"
l1.
Los cuadros medios de la burguesía agraria verán en la enseñanza el
medio para sacar al Sur del atraso en que se encontraba. Pero en un sis-tema
político dominado por las élites económicas, el analfabetismo será
un factor que contribuya a la instrumentalización del individuo, convir-tiéndolo
en un aliado del fenómeno caciquil, lo que puede explicar, en par-te,
la dejación que los cargos públicos hicieron, en ocasiones, de sus res-ponsabilidades
en la enseñanza.
7 AFONSDOh z, S.: "La Historia de Granadilla de Abona", Ayuntamiento de Granadi-lla
de Abona, CCPC, 1998, p. 35.
8 ARBELOG ARC~AA.: , "Sociedad y conflictividad Social en el Sur de Tenerife (SS.
XVIII-m): una reflexión socio-política", I Jornadas de Historia del Sur de Tenerife (Co-marca
de Abona), Ayuntamiento de Arona, 1999, p. 127.
9 PÉREz BARRIOCS., R.: "Conflictividad local en tomo a la Escribanía de Vilaflor o de
las Bandas de Abona (1827-1837)", 1 Jornadas de Historia Local, Boletín Millares Carlo,
núm. 15, Las Palmas de Gran Canaria, 1996.
10 AFONSO Dkz, S.: Op. cit., p. 106.
11 El Progreso, 15 de abril de 1920.
Reflexiones sobre la enseñanza en el Sur de Tenerife ... 33 1
La situación educativa a mediados del XIX en el Sur de Tenerife era
deplorable. Las tasas de analfabetismo oscilaban entre el máximo de Ade-je,
94%, y el mínimo de San Miguel de Abona, 86%, siendo una carac-terística
aplicable a todos los pueblos del Sur el desigual grado de analfa-betismo
dependiendo del sexo, siendo mucho más alto el femenino.
Especialmente llamativo es el caso de San Miguel donde mientras las ta-sas
masculinas se sitúan en un 76%, las femeninas eran de un 95%.
Las tasas de niños escolarizados eran muy bajas, y ello pese a sola-mente
considerar la población infantil comprendida entre los 6 y los 10
años, por ser ésta la de obligatoria escolarización.
El estado cultural debería estar en relación directa con las cantidades
consignadas en los respectivos presupuestos para atenciones del sector;
sin embargo, y pese a las reservas con que deben observarse los datos ofi-ciales,
la relación no es directa, pues en el municipio de S. Miguel los ni-veles
de escolarización (aunque con diferencias por sexo) son mayores
que los de Arona, pese a que su presupuesto era prácticamente la mitad
del de aquél. En el municipio en el cual se confirma el principio de "a me-nos
recurso menor grado de escolaridad" es en el de Adeje.
Los términos de Arona y Granadilla son los que dedicaron en estas fe-chas
las cifras más importantes al sector de la instrucción pública, aun-que
en la práctica no se hicieran efectivos los gastos, pues en la mayoría
de las ocasiones iba a depender del estado de las haciendas municipales.
Por lo general lo consignado para las maestras fue mucho menor que las
cifras señaladas para los maestros, salvo en Granadilla donde aparecía la
misma dotación para ambos, tanto en concepto de personal como de ma-terial.
En San Miguel no se observa ninguna dotación para la escuela de ni-ñas,
ni en personal ni en material, aunque sí se señalaba lo que debía per-cibirse.
Las diferencias en las consignaciones presupuestarias guardaban
relación con la clase de escuela de que se tratase, señalándose cantidades
inferiores a las escuelas incompletas, tipo al que pertenecían normalmen-te
las de las niñas.
En esta fecha, en todos los municipios, el número de profesores exis-tentes
era de dos, salvo en Adeje y Vilaflor, donde no existía maestra, aun-que
en este último lugar las niñas asistían a las clases impartidas por el
profesorl2.
En 1887, la población del Partido judicial de La Orotava, al que perte-necían
los pueblos del Sur de Tenerife, presentaba el siguiente cuadro:
12 Para mayor información ver: PÉREZ BARRIOCS,. R.: "La instrucción pública...".
332 Carmen Rosa Pérez Barrios
Total Varones Mujeres
Saben sólo leer 1.154 425 729
Saben escribir 7.102 3.422 3.680
No saben leer 45.241 19.690 25.554
Si observamos los datos relativos al grupo de edad de 5 a 11 años te-nemos:
Total Varones Mujeres
Sólo saben leer 414 223 191
Saben escribir 616 2 94 322
Total 1 .O30 517 51313
Resultan, por tanto, muy altos los valores de analfabetismo pues al-canzan
el 84,5% de la población total, siendo mayor en el caso femenino,
que acapara el 47% frente al 37% masculino.
En cuanto a los niños que por edad podrían estar escolarizados, tene-mos
que las cifras son realmente escasas, pues utilizando como referen-cia
los que saben escribir o leer, tenemos que tan sólo representan un
10,7% del total. En este caso los índices masculinos y femeninos están
bastante equilibrados, pues el 5,3% de las niñas saben leer o escribir, fren-te
al 5,4% representado por los niños.
A tenor de la discriminación -a que aludían varios artículos de pren-sa-
que sufría el Sur de la Isla en el ámbito educativo respecto a los pue-blos
de las bandas del norte, parece inferirse un mayor peso del analfabe-tismo
en los pueblos sureños, lo que viene a ser cuestionado por los
índices de 82%, 86%) 87% de analfabetismo que soportaban en 1887 los
municipios de La Orotava, Icod y Garachico, respectivamentel4.
Analizado el estado educativo en varios pueblos del Sur de Tenerife en
1877 y 1887, tenemos que es la jurisdicción de San Miguel de Abona la
que registra los porcentajes mas bajos, situándose Fasnia a la cabeza del
analfabetismol5.
13 Censo de la Población de España T. 11. Dirección General Instituto Geográfico y
Estadístico. 1887. I.N.E.
14 "Censo de la población de España, 1887". Tomo 1, I.N.E.
15 Ibídem.
ANALFABETISEMNO E L SURDE TENERIFEEN 1887
Año Analfabetismo Sólo saben leer Población
- - --
Municipio V. M. Total V. M. TOS V. M. Total
% % Yo % % %
Adeie 1877 40.4 47.3 87.8 1.6 1.8 3.4 786 855 1.641
- -- - - -
Arico 1877 41 ,O 48.4 89.4 0.8 0.7 1.6 1 S39 1.739 3.278
Arona 1877 39,2 47,O 86,3 1 ,o 1,1 2,1 1 .O72 1.244 2.316
Fasnia 1877 46,O 52,O 98,l - - - 857 923 1.790
Granadilla 1877 38,7 46,8 85,5 1 ,O 2,3 3,3 1.674 1.844 3.518
Guía 1877 39.3 49.1 88.4 0.6 0.9 1.6 1 .348 1.635 2.983
S. Miguel 1877 34.4 46.3 80.7 0.3 0.9 1.2 955 1.127 2.082
Vilaflor 1877 39,4 47,4 89,9 0,4 1 2 1,6 464 53 1 995
Adeje 1887 39,7 47,6 87,3 09 1,5 2,4 718 833 1.551
Arico 1887 38,O 49,O 87,l 0,6 1 2 1,9 1.334 1.688 3.022
Arona 1887 35,7 44,4 80,2 0,9 1 3 2,7 839 1.022 1.861
Fasnia 1887 44.0 46.7 90.7 0.8 2.2 3.0 705 738 1.443
Granadilla 1887 36,8 49.5 86.4 1 .O 0.8 1.8 1.432 1.705 3.137
Guía 1887 36,2 51,4 87,7 0,3 0,5 03 1.357 1.900 3.257
S. Miguel 1887 33,9 459 79,9 - 03 0,s 793 997 1.790
Vilaflor 1887 36,l 46,l 82,3 1 ,o 1 ,o 2,1 477 562 1.039
Fuente: Elaboración propia a partir de los Censos de población de España de 1877 y 188716.
l b "Censo de la Población de España, 1887", T.I.; "Censo de la población, 1877", I.N.E.
334 Carmen Rosa Pérez Barrios
En las primeras décadas del siglo XX, las cifras de analfabetos seguían
siendo realmente importantes, estimándose a juicio de algunos que el
auténtico analfabetismo era casi total en España. Un ejemplo del nivel
educativo con que llegaba la juventud a su "edad dorada" podía verse en
las cifras de analfabetismo de los mozos alistados: Cádiz, 56,96%; Cana-rias,
58,12%; Málaga, 57,20% y Murcia, 60,73%17.
Si tomamos como muestra el municipio de Arona, tenemos que los ex-pedientes
de quintos relativos a los años 1864-1920, arrojan cifras de un
100% de analfabetos para los años 1864-1872, mientras que a partir de los
años 80 se detecta una baja significativa, moviéndose desde 1882 hasta
1907 en cantidades comprendidas entre un 69% y un 95%
En el siglo XX, con la excepción de los años 1907 y 19 12 donde de nue-vo
se alcanza un 100% de analfabetismo, las cifras tienden a la baja, lle-gándose
a las mínimas de 36% y 25% para los años 1917 y 1920, respecti-vamente,
pero produciéndose picos en algunos años como 19 1 8, en el que
se llega a un 90%18. Estos valores, en general bastante alto, podrían ser
mayores si se tiene en cuenta, como señala Chinea Oliva, que se basan en
la posibilidad de realizar una firma por parte del jovenlg.
Aunque estas tasas pueden asumirse como referentes de la situación
educativa real, debemos poner de manifiesto las limitaciones de esta cla-se
de fuentes, en tanto observamos que en afios en los que se registra un
100% de analfabetismo, da la casualidad de que algunos jóvenes acomo-dados,
y que presumiblemente gozaban de un mayor nivel de instrucción,
pretendían la exención en sus reemplazos, caso de Eugenio Domínguez
Alfonso, o José Bethencourt Medina en 1868 y 1872 respectivamente20.
Los sectores más progresistas de la sociedad eran conscientes de las
dificultades con las que se enfrentaba la escolanzación infantil. La nece-sidad
de motivación era triple, pues debía dirigirse por una parte a los
maestros, mal pagados: "Todos los días oímos relatos tristes de maestros
que piden limosna, ó se mueren de hambre, y apenas se piensa en remediar
la situación horrible de tan útil y digno profesorado"2~, a veces mal prepa-rados,
y con escasos medios materiales para ejercer la docencia; por otra,
al alumnado, con más predisposición hacia los trabajos físicos que a los
mentales y, por último, hacia los padres, quienes debían prescindir del
17 La Prensa, 24 de octubre de 1919.
18 CHINEAO LIVAM, . M.: "Arona: una aproximación al estudio de la emigración a
través de los expedientes de quintos", I Jornadas de Historia del Sur de Terlerife (Coirzarca
de Abona), Ayuntamiento de Arona, 1999, p. 260.
19 Ibidem.
20 CHINFAO LNA,M . M.: Op. cit., p. 268.
21 Revista de Canarias, "La Instrucción primaria ante la razón y la fé", 23 de febrero
de 1881.
Reflexiones sobre la enseiianza en el Sur de Tene rife... 335
aporte laboral de sus hijos. No olvidemos que desde temprana edad los ni-ños
colaboraban en las faenas agrícolas, ganaderas, etc, generando dichos
populares que se mantuvieron hasta tiempos relativamente recientes: "el
trabajo de muchacho chico es poco y el que lo pierde es un loco".
A un intento por mejorar la consideración hacia los maestros y por
concienciar a las familias del deber educativo que tenían hacia sus hijos
responderán múltiples escritos de prensa en la década de los 80 y de los
90. A este mismo objetivo pudo responder la práctica de publicar en los
medios de comunicación insular noticias relativas a los exámenes a que
eran sometidos los a l m o s . Así ocurrió en 1854 en Guía de Isora cuan-do
son presentados a examen público los alumnos de primaria de Adelai-da
Morales de Padrón -escuela que era costeada por los padres de fami-lia
bajo los auspicios del Ayuntamiento-. Se celebraban los buenos
resultados obtenidos en las distintas materias: doctrina cristiana, lectura,
escritura, aritmética y labores a mano, publicándose para orgullo de sus
familias, incluso, los nombres de los niños examinados. Estos aconteci-mientos
darán lugar a comentarios satisfactorios por parte de los corres-ponsales,
tales cómo "Damos a Vdes. con gran placer estas noticias, pues
ellas demuestran que la ilustración, va penetrando en estos olvidados luga-res"",
u "Orgulloso puede estar el Sr. Viera por el brillante resultado que ob-tuvieron
los exámenes y muy satisfechos los padres que, con profunda emo-ción,
presenciaron los ejercicios, asombrándose del notable adelanto que
han adquirido sus hijos"23.
Esta práctica daba lugar a importantes eventos sociales, donde ade-más
del lucimiento del alurnnado y del profesorado se daba cabida a la in-tervención
de los vecinos más significados en el ámbito cultural o, sim-plemente,
social. Este es el caso de los exámenes verificados en
Granadilla, en julio de 1896, a los alumnos de Isaac Viera, en el que par-ticiparon
con sendos discursos José Tresguerra y Barón y Juan Reyes
Martín, notario público y maestro, respectivamente, del lugar24.
A finales de siglo XIX, según Juan de la Puerta Canseco, en el Sur de
Tenerife existían las siguientes instituciones escolares:
- Arona: 2 escuelas en el casco y 1 de niños en el Valle de S. Lorenzo.
- S. Miguel: 1 escuela de niños y otra de niñas.
- Adeje: 2 Escuelas.
- Vilaflor: 1 escuela de niños y otra de niñas.
22 El Noticioso se Canarias, 9 de julio de 1854.
23 La Opinión, 30 de julio de 1896.
24 La Opinión, 30 de julio de 1896.
336 Carmen Rosa Pérez Barrios
- Granadilla: varias escuelas en el casco y 1 de niños en Charco del
Pino.
- Fasnia: 1 escuela
- Arico: 4 escuelas de primera enseñanza. Dos de ellas, una de ca-da
sexo, se encontraban El Lomo y otra de niños en El Río.
- Guía de Isora: tenía escuelas de primera enseñanza25.
Pese al notable empeño por mejorar la educación por parte de algunos
vecinos, las iniciativas son aisladas, y no significan un sustancial cambio
en la situación cultural. No en vano, se hablará del "salvajismo" de las ban-das
del Sur, aunque esa negra visión será desmentida por profesionales
como el maestro de enseñanza primaria de Granadilla Alfonso Rodnguez
Díaz, quien hablará además de la belleza y progreso del pueblo, de lo so-ciable
de su gente y del buen nivel de sus alumnos, criticando a los que
pretendían dar una imagen de salvajismo irreal, basándose simplemente
en algún episodio aislado. Su opinión queda expuesta de forma clara
cuando con motivo de la instalación en el pueblo de la plana mayor del
batallón reserva numero 7, manifiesta: "Algunos imbéciles sujetos atemori-zaban
a sus jefes diciéndoles con un cinismo inconcebible que desistiera de
su propósito, pues, venían a un pueblo de salvajes donde serían poco menos
que mordidos por sus moradores"26.
Desde el Sur se responsabilizará del estado de atraso a los poderes pú-blicos,
que habían primado a las localidades del Norte: "Parece que la di-latada
región que se extiende desde Arico hasta Guía no pertenece a la isla
de Tenerife, pues, mientras tanto a las localidades del Norte las han empuja-do
por la senda del progreso, colmándolas de beneficios, las del Sur perma-necen
en el más punible abandono, en el más lamentable atraso intelectual
y materia11'27.
Otras veces se culpabilizará a los profesionales del sector, así en 1908
se criticaba que en Arona la escuela de niñas permaneciera cerrada por 19
días, dejando de percibir enseñanza unas 50 alumnas, mientras la maes-tra
se dedicaba en la Iglesia a dar canto con acompañamiento de órgano
a unas cuantas: "Se dio una velada, para lucir sus habilidades, tres o cuatro
25 PUERTCAA NSECJO. d, e la: "Descripción Geográfica de Las Islas Canarias", Santa Cruz
de Tenenfe,1897, Reedición facsímil, 1988, p. 46-49.
A inicios del siglo XX se señalaba la existencia de tres escuelas en el municipio de Gra-nadilla,
dos de niños y una de niñas, y dos en Guía de Isora, que permanecían cerradas:
LÓPEZS OLERJ.,: "La Isla de Tenerife. Su descripción general y geográfica", Madrid, 1906, p.
113, 130.
26 La Opinión, 30 de julio de 1900.
27 El Porvenir, 14 de agosto de 1905.
Refleniones sobre la enseñanza en el Sur de Tenerife ... 337
niñas de padres adinerados, sacrificando para esto a muchas niñas que no
han recibido clase en 19 días ...q ue el Gobierno paga á los empleados para
que cumplan sus deberes sin contemplaciones particulares"28. El pueblo,
según este informante, clamaba por el establecimiento de clases diarias, y
no por veladas para las que no había motivo: "Mucha instrucción hace fal-ta
por ahora para ganar aquel precioso tiempo perdido en que estuvo clau-surada
la Escuela por falta de casa"29.
Al informante se le refutará días después de su comunicado que la
causa real de la carencia de clases se debía a la insuficiencia de recursos
económicos y a la apatía de muchos vecinos. La indolencia de algunos ha-bía
dado lugar a que fuera el propio Gobernador Civil, quien, en una de
sus visitas, encabezará una suscripción popular para cubrir los gastos de
reparación que necesitaba la escuela de niñas30.
Vemos, por tanto, que ante la carencia de presupuestos oficiales se re-currirá
a la suscripción popular para solventar las necesidades más ur-gentes,
o incluso a la realización de tómbolas que recaudasen algunas
cantidades. Así, a finales de junio del mismo año, las obras de reparación
que se realizaban bajo la dirección del maestro mampostero José Fumero
se ejecutarán gracias a los remanentes de la suscripción popular y de lo
recolectado en una tómbola31.
Dado que en la misma fecha se habla de que la escuela del Valle de San
Lorenzo carecía de local propio y de casa para el maestro, planteando la
conveniencia de acudir a la suscripción para la construcción de un edifi-cio
dedicado a escuela, y no señala lo mismo para Arona, parece lógico su-poner
que en el casco del Municipio existía local propi03~.
Uno de los problemas que se detecta y que se consideraba, ya en la
época, responsable del atraso cultural, era el que permanecieran clausu-radas
las escuelas. Los motivos podían ser diferentes, pero hemos
constatado la queja por la falta de incorporación a su destino de los ma-estros.
En Arico, en 1887, permaneció sin abrir, por más de un año, la es-cuela
incompleta de Arico el Nuevo, al no haberse hecho cargo de la mis-ma
el maestro Peña, quien, según los vecinos, estaba residiendo en Santa
Cruz, cobrando sus haberes, probablemente escudado en su afiliación
política33.
28 El Tiempo, 20 de abril de 1908. Se trata de dar la réplica a un escrito publicado
en La Opinión de fecha 7 de abril de 1908.
29 Ibídem.
30 Ibídem.
31 El Tiempo, 30 de junio de 1908.
32 Ibídem.
33 La Opinión, 5 de octubre de 1887.
338 Carmen Rosa Pérez Banios
La falta de recursos económicos repercutirá en las retribuciones del
colectivo de enseñantes de forma negativa34. La carestía de la vida en Ca-narias
en esos años hacía poco atractivo a los maestros su desplazamien-to
en las Islas. Desde las páginas de la prensa se presentarán sugerencias
para dar salida al problema. Entre ellas, estaba el obligarlos a resjdir al
menos dos años, concediéndoles posteriormente para los traslados las
mismas preferencias que a los inspectores, y dado que el sueldo que do-taba
su actividad era realmente bajo, se le agregase un 50% por residen-cia,
concepto que ya disfrutaban otros funcionarios con sueldos rnayores
que los maestros nacionales35.
La comprensión que pudiera existir hacia las reivindicaciones econó-micas
del sector, no le privan de recibir fuertes críticas por su falta de
cumplimiento: "Se ha dado el caso -nos dijo el señor Batlle- de una vnaes-tra
que se negó a ocupar la casa que se le había designado, por carecer de
cuarto tocador. Y por este estilo, no tienen fin los pretextos que se inventan
para dejar incurnplidos los altos deberes del magisterio"36.
Similares reproches se hará a los Ayuntamientos, que debían velar por
la enseñanza en sus pueblos, haciendo que funcionaran las escuelas que
estaban clausuradas sin motivo, disponiendo locales adecuados, o exi-giendo
a los maestros el cumplimiento de su deber37.
Una muestra de las carencias que sufría el sector podría verse en las
relación de lo que adeudaban los Ayuntamientos de la Provincia, respecto
a los trimestres l.", 2." y 3." del año económico de 1898-99, por atencio-nes
a la Primera Enseñanza, y que en los pueblos de Sur de Terierife, se
concretaba en las siguientes cifras (en pesetas):
34 La Asociación Nacional del Magisterio primario realizó en 19 19 una activa cam-paña
en favor de los funcionarios, cuyos intereses representaba. Se daba el caso que
13.048 maestros no habían conseguido el sueldo de 1.500 pesetas; es decir, cuando todos
los funcionarios civiles habían podido conseguir la mejora de su situación económica, el
maestro de primeras letras no tenía aún asegurados sus medios de vida. La Prensa, 24 de
febrero de 1919.
35 La Prensa 7 de mayo de 1921. Las cifras de analfabetismo para Canarias en esta
fecha estaban en tomo al 52%.
36 La Prensa, 9 de noviembre de 1923.
37 La Prensa, 9 de noviembre de 1923.
Reflexiones sobre la enseñanza en el Sur de Tenerife ... 339
Importe de las Ingresos Débitos
Municipio atenciones de los verificados de los
3 trimestres Ayuntamientos
Fasnia 1.525,17 376,39 1.148,78
Adeje 1.617,41 1.149,15 421,26
Granadilla 2.990,31 1.864,49 1.125,82
Guía 2.338,62 783,58 1.555,04
San Miguel 1.525,17 851,66
-
Vilaflor 1.613,91
La penuria y demora que caracterizó a las dotaciones económicas
correspondientes a la instrucción pública dejaba desamparado al colec-tivo
de maestros, influyendo sensiblemente en su motivación. La situa-ción
real en que muchos de ellos se encontraban era descrita desde El
Auxiliar, en 1899, en los siguientes términos: "...Se traslada á un pobla-do
donde desde los primeros momentos todo les es hostil; .... se esfuerzan
aunque en vano para captarse las simpatías de que necesitan; que después
de agotar los pocos recursos de que disponían, se les veja é insulta cuan-do
reclaman los mezquinos haberes que han devengado; que ven presen-tarse
el hambre con todos sus horrores acompañada de la injuria y el me-nosprecio.
.."39.
El número de escuelas que pudieran haberse creado en las primeras
décadas del siglo XX40, quedaba oscurecido por la realidad del alto nú-mero
de las que permanecían cerradas por falta de personal o de recur-sos,
y que en el Partido de Granadilia ascendía a 12, frente a La Laguna
con 10, Orotava con 5, Icod con 3, y Santa Cruz con 441. Al analizar en
1926 los problemas del analfabetismo en España, y en particular en Ca-narias,
después de esbozarse los factores que hacían variar las tasas de
38 El Atuciliar, Periódico de Primera Enseñanza, 20 de mayo de 1899.
39 Ibídem.
40 Negrín Fajardo señala que a finales del siglo XIX existían en tomo a 250 escuelas
públicas y unas 60 privadas, a pesar de lo cual había un amplio déficit de escuelas: NEGR~N
FAJARDOO,. : "La enseñanza en Canarias", Mancomunidad de Cabildos, 1982, Colección
Guagua, 42, p. 18.
4' ANGULOG ~MEAZ.:, "61 Escuelas cerradas", La Prensa, 2 de junio de 1921.
340 Carmen Rosa Pérez Barrios
analfabetismo, como la edad, el sexo, la profesión, la situación econórni-cal
la miseria del pueblo, la falta de medios de comunicación, el carácter
agrícola y rural de la sociedad, se señalaba uno más decisivo y más gené-rico,
que se resumía en "la falta de escuelas"4~.
A pesar de las tímidas mejoras que pudiera experimentar el sector, las
quejas sobre la carencia de centros educativos son una constante a lo lar-go
de estos años. A comienzos de la década de 1930, al tratar sobre la si-tuación
de la enseñanza, se hace referencia al estado anterior: "Muy defl-ciente
hasta hace poco tiempo. Se han creado algunas escuelas, no las
necesarias"43.
En Granadilla de Abona, hacia inicios de la década de 1930, existían
dos escuelas unitarias y una mixta, habiéndose solicitado la creación de
una para el desdoblamiento de la última, y otras para los distintos pagos
del municipio.
Por estos años, cubiertas las necesidades escolares de El Salto, uno de
los pagos de Granadilla, se reivindicará igual beneficio para El Draguito,
"...ciertos padres se han dirigido a la maestra del Salto, casi en actitud su-plicante,
para que sus pequeñuelos sean admitidos a clase, sin tener la dicha
de ser complacidos. La causa es bien justificada y bien conocida de todos. El
exceso de escolares"44.
En 1932, se estimaba que el censo escolar de los pagos de Granadilla
era inferior, en la mayoría, a 20 alumnos, lo que contrastaba con el casco
del Municipio, que tenía exceso de matrículas, lo que va a favorecer la
aparición de posturas como la manifestada por Rosa Ardébol Solá favo-rables
a la graduación de la enseñanza. Su opinión se basaba en que los
objetivos de la enseñanza primaria, al pretender la formación integral del
niño con la heterogeneidad de materias, con una orientación hacia las
profesiones agrícolas, artísticas e industriales, sólo podrían conseguirse
en Granadilla a partir de la graduación de sus escuelas45.
<
Dos MAESTROS DE GRAN RELIEVE EN GRANADILLA
Juan Reyes Martín. Es uno de los personajes de obligada referencia
en el análisis de la situación educativa de Granadilla. Octavio Rodríguez
dedica en su estudio sobre la familia Reyes Mai-tín capítulo especial a es-
42 La Prensa, 28 de noviembre de 1926.
43 Ibídem.
44 La Prensa, 24 de enero de 1932.
45 Ibídem.
Reflexiones sobre la enseñanza en el Sur de Tenerife ... 34 1
te vecino46, incluyendo en su anexo la reproducción facsímil de su libro
"Serie de Barbarismos, Solecismos, Aldeanismos y Provincionalismos que se
refieren especialmente al vulgo Tinerfeño", publicado hacia 191 8 en la im-prenta
de García Cmz.
Nació este maestro en Granadilla de Abona el 31 de julio de 1842, re-cibiendo
en su pueblo la mejor educación que en la época se pudiera re-cibir.
De espíritu inquieto y vigoroso, tras contraer matrimonio, viajó por
varios países americanos dedicándose a la docencia. Se estableció prime-ro
en Colombia y posteriormente en Venezuela, donde fundó y dirigió un
Colegio en Altagracia de Orituco (Monagas), al frente del cual estaba en
1878.
Destacó como pedagogo, siendo tanto el sistema de enseñanza emple-ado
como los textos obras suyas47. En 1880 se trasladó a Cuba, estable-ciéndose
en Madruga, provincia de La Habana. Dedicose a las tareas mer-cantiles,
fundando una academia especializada en Matemáticas y
Contabilidad mercantil, donde también impartió clases, dejando "una
obra sobre cálculos de contabilidad mercantil, que ha merecido el aplauso
unánime de cuantos lo conocen"48.
En 1885 regresó a Tenerife, dedicándose en su pueblo al fomento de
cuantas iniciativas pudieran sacar a Granadilla, y en general al Sur, del
declive económico en el que se encontraba. Entre los proyectos y cargos
que defendió, podemos señalar la creación, en 1899, de la liga de propie-tarios
del Sur para el fomento de la agricultura, que, establecida en Gra-nadilla,
elegirá para presidente, vicepresidente y secretario de la misma a
Gerardo Alfonso Gorrín, vecino de San Miguel de Abona, y a Juan Reyes
Martín y José Frías Pomar, vecinos de Granadilla49.
No obstante, sus esfuerzos estarán dirigidos, sobre todo, al incremen-to
cultural, impartiendo clases, sobre todo en la llamada "Escuela del Ca-sino",
que alcanzó su mejor momento entre los años 1889 y 189250. En de-finitiva,
destacó como pedagogo, por sus conocimientos en Matemáticas,
en Contabilidad mercantil y en Filología, y como pianista y periodista: "Su
estilo, de corte clásico, está lleno de sonoridades. El Memorándum, que di-rigió
el inolvidable don José M. Pulido, Las Novedades, La Opinión, de esta
capital, y el Aguere, de La Laguna honraron muchas veces sus columnas con
46 RODR~GUDELZG ADOO.:, "LOSR eyes Maríín y la Cultura. Una familia clave en la his-toria
de Granadilla de Abona", C.C.P.C., Ayuntamiento de Granadilla de Abona, 1994.
47 La Prensa, 27 de diciembre de 1992, "Hijos Ilustres de Granadilla de Abona".
48 Anuario del Diario Hoy, Agosto de 1933.
49 Boletín de la Real Sociedad Económica de Amigos del País, 27 de junio de 1899: ex-traído
de La Voz Icodense.
50 RODR~GDUEELZG ADOO.:, Op. cit., p. 77.
342 Carmen Rosa Pérez Barrios
las luminosas producciones de la fecunda phma del castizo escritor recién
fallecido"51.
Respecto al centro docente denominado "Escuela del Casino", re-sulta
clarificadora la opinión vertida por Juan Batista Fuentes en su re-torno
al pueblo natal con motivo de las fiestas de San Antonio de Pa-dua:
"Y mi asombro subió de punto, a1 enterarme que no existía ya Centro
docente análogo a aquel que se denominó 'Escuela del Casino: verdadero
plantel instructivo, en donde preparaban para el Bachillerato hombres de
la preclara inteligencia de don Juan Reyes Martín, gramático de altos vue-los;
don Joaquín Estrada y Mudan, inteligente abogado y notario del pue-blo;
don Atanasio Viña y Vera, notable latinista; don Blas Batista Pérez,
calígrafo, y muy conocedor de la gramática académica de la lengua caste-llana"
52.
Su labor pedagógica será equiparada, al tiempo de su fallecimiento, a
la de un Comenio o un Dr. Berro, siendo destacada su labor como filólo-go,
al desentrañar a la manera de José Rufino Cuervo y de Valbuena las
raíces del idioma. Hombre liberal, exaltará la democracia y las virtudes de
la educación como medio de conseguir los principios fundamentales del
liberalismo: "Seguid, queridos niños, con empeño y noble emulación el cuí-tivo
de las ciencias y las artes, el estudio ... Cultivad, en fin, ese poderoso ele-mento,
sin cuyo eficaz auxilio, jamás podremos llegar á la meta de nuestros
legítimas aspiraciones, jamas podremos alcanzar el anhelado ideal que la
santa democracia resume en esos sublimes palabras: LIBERTAD, IGUAL
DAD Y FRATERNZDAD"53.
Isaac Viera. Nació en 1858 y murió en 1941. Natural de Yaiza, en la
isla de Lanzarote, destacó como periodista, poeta y dramaturgo. Viajó a
América y contrajo matrimonio en Uruguay. Su actividad política le obli-gará
a huir a Cuba. A su regreso a Canarias se establece en Tenenfe, don-de
una hermana suya era maestra. Viajará a Venezuela54, de donde huirá
a Argentina. En este país intenta independizar el municipio de Lanús
(provincia de Avellaneda) y se ve forzado a huir por tercera vez. Entre sus
obras podemos citar: "Vidas ajenas", "Por Fuerteventura", "Costumbres ca-narias",
"Aires isleños"55.
5' El Progreso, 4 de septiembre de 1926.
52 La Prensa, 24 de enero de 1932.
53 La Opinión, 30 de julio de 1896.
54 En su obra Palotes y Perfiles (autobiografía) da una visión en clave irónica de sus
desventuras en Venezuela.
55 RODR~GUPAEZD R~J.N: P, rimer Ensayo para un Diccionario de la literatura en Cana-rias,
Madrid, Viceconsejena de Cultura y Deportes (Colección Clavijo y Fajardo, n.14),
1992, p.330; ALONSOM,. R.: "La literatura en Canarias durante el siglo XIX", en Historia Ge-neral
de las Islas Canarias, vol. V., Las Palmas de Gran Canaria, Edirca, 1977, p. 178.
Reflexiones sobre la enseñanza en el Sur de Tenerife ... 343
A finales del siglo XIX lo encontramos en Tenerife. En 1891 publica-ba
La Casa de la Señora, leyenda en verso editada por Abelardo Bonnet56,
imprimiéndose Palotes y Pevfiles en 1895, fecha en la que pudo estar resi-diendo
en Granadilla, pues en 1896 regentaba una escuela privada en di-cho
pueblo. A inicios de año, sus alumnos obtenían notables resultados en
los exámenes trimestrales, siendo su centro docente calificado como el
primero del Sur, lo que contrastaba "con el abandono en que vegeta la ins-trucción
primaria en casi toda esta parte de la isla"57.
El corresponsal del lugar describirá cómo los exámenes realizados a
los alumnos del profesor Viera los días 22 y 23 de julio de 1896 se lleva-ron
a cabo con brillantez, recibiendo el maestro los mas entusiastas feli-citaciones
por el aprovechamiento e inteligencia de sus discípulos, que
destacaron en la tribuna, analizando difíciles períodos gramaticales, re-solviendo
arduos problemas aritméticos y algebraicos y varios ejercicios
de geografía, francés, literatura y teneduría de libros.
Sobre la desaparición del centro docente que dirigió Isaac Viera se la-mentará
también Juan Batista Fuentes, en su visita a Granadilla, tras 25
años de ausencia: "Ni aquel otro Colegio de segunda enseñanza, que más
tarde, en otra época de entusiasmo literario, dirigió el erudito don Isaac Vie-ra,
con otros profesores de reconocida competencia, en cuyas frentes cente-llea
la luz de la cienciaU58.
Sobre las razones que trajeron a Granadilla de Abona a este lanza-roteño
no tenemos noticias, pero lo que nos consta es la gran admira-ción
y respeto que logró en el lugar, donde su figura será ensalzada por
las mentes más ilustradas de la vecindad. Una buena amistad debió
unirle a Juan Reyes Martín, al decir de las cálidas palabras que este ú1-
timo le dirige "...mi pobre locución jamás podrá traspasar los modestos lí-mites
de una humilde conversación familiar; pero compelido hoy por ine-ludibles
deberes de consideración y gratitud hacia mi amigo distinguido el
ilustrado director de este plantel, y por otra parte, deseoso de rendir tribu-to
al amor que siempre he profesado a la instrucción popular, á cuyo no-ble
ideal he consagrado, aunque muy defectiblernente, una efímera parte
de mi existencia ..."59.
Palabras elogiosas le dedicará, asimismo, su paisano el notario públi-co
José Tresguerras y Barón, quien además de felicitar a su amigo, apro-vecha,
al igual que Juan Reyes Martín, para dar una visión de la enseñan-za,
y de sus beneficios y limitaciones: "Al dirigir anticipadamente un
56 El Auxiliar, Periódico de Primera Enseñanza, 3 1 de agosto de 189 1.
57 La Opinión, 9 de enero de 1896.
58 La Prensa, 24 de enero de 1932.
59 La Opinión, 30 de julio de 1896.
344 Carmen Rosa Pérez Barrios
aplauso al profesor amigo, legítimamente lleno de orgullo en ese día (casi
única recompensa que por desgracia suelen hallar los que á tan meritorias,
pero áridas tareas se consagran) ..."60.
La labor desempeñada por el profesor Viera dará lugar a aspiracio-nes
más ambiciosas. La celebración de los exámenes, con el lucimiento
de alumnos, padres, y profesores, será el momento oportuno para lan-zar
una nueva iniciativa: "la creación de un centro docente de mayores
vuelos e importancia", en palabras de José Tresguerras, quien no dudará
en ponerse a disposición de tal idea, accediendo a la petición de con-vertirse
en unos de los profesores de ese futuro instituto de Granadilla.
El mismo proyecto será defendido por Reyes Martín quien invita a los
amantes del progreso a unirse en torno a Isaac Viera, para el estableci-miento
de un centro docente, es decir un colegio de segunda enseñanza,
utilizando para ello la influencia de determinados elementos locales, lo
que redundaría no sólo en la mejora del concierto cultural sino en la
economía de muchas familias, al permitírseles de esta forma completar
en el lugar, sin tener que trasladarse con los costos consiguientes, una
enseñanza media61.
Un mismo proyecto, un mismo anhelo, trabajar en pro de la educa-ción,
debió crear fuertes lazos de amistad entre estos enseñantes. Muestra
de ella será el poema sobre Granadilla que Isaac Viera dedique a su ami-go
Juan Reyes.
Vedb de un monte á la falda
reclinar su blanca frente
como sultana indolente
sobre un lecho de esmeralda.
Vedle en sueños tropicales
con campestres atavíos
entre sus bosques umbríos
de frondosos naranjales.
Zagalas y campesinas
discurren por sus senderos
que sombrean limoneros
y tapizan clavellinas.
Y sus linfas serpentean
por entre huertos feraces,
y las cabras montaraces
entre los pinos sestean.
Su gente es buena, sencilla,
tan franca y hospitalaria
que no hay en tierra canaria
pueblo como Granadilla.
Una tarde en Acojeja,
en esa hora en que el sol
coronado de arrebol
sobre la mar se refleja,
60 Ibídem.
61 Ibídem.
Reflexiones sobre la enseñanza en el Sur de Tenerife ... 345
vi un paisaje que el pincel.
no osa imitar, ni la pluma,
porque es la belleza suma
o bellezas á granel.
Allá el Guajara imponente
entre el cendal de un celaje,
más abajo el oleaje
del Océano rugiente.
Y á mis pies una aldeílía,
en la margen de un barranco
y allá el caserío blanco
del pueblo de Granadilla.
De sus brisas al rumor
lancé mis tristes cantares
que suenan en sus pinares
como gritos de dobr.
Granadilla es un pedazo
del Paraíso perdido,
y su recuerdo va unido
á mi alma con dulce lazo.
Perdona mi atrevimiento
amigo, si mi cantar
no lo puedo ya adornar
con galas del pensamiento62.
62 El Porvenir, 6 de noviembre de 1905.