4'APHIDOIDEAW DE LAS ISLAS CANARIAS
PO K
mAN GQWlyír.--Mn_NGE C!ETEGA
CatedrAtico de la Universidad de Madrid.
Solamente voy a tratar en este trabajo de aquellas especies que
yo he cazado en Canarias durante parte del verano del año 1950
y concretamente en la isla de Tenerife, que es en la que he efec-tuado
esta labor, pues en Gran Canaria solamente he permanecido
horas durante alguna travesía del Atlántico.
Aquí hablo sólo de "pulgones", que son los insectos que más he
estudiado, prescindiendo de las otras famili= de Ho&teros ster-
.ezorhymha.
1.-CARACJXRISTICAS Y F0,RMAS DE LOS AFIDOS
Los AphWdea vulgarmente se conocen con el nombre de "pul-gones".
Son insectos de piel blanda, de tamaño pequeño, variando
de 0,5 a 8 milímetros, en su máxima dimensión. Generalmente se
encuentran formando grupos de individuos situados sobre los bro-tes,
flores, inflorescencias, hojas, tallos finos y raíces, acompa-ñados
con frecuencia por hormigas, las que acuden a la secreción
melada que expulsan aquéllos por el ano. Generalmente estos gru-pos
están formados por hembras. Con frecuencia producen defor-maciones
en las plantas, resultando las zoocecidias o "agallas",
2 JUAN GÓMJB-MENOR ORTEGA
especialmente los Eriosomatidae del género Pemphigus, las cuales
pueden alcanzar gran tamaño. Se alimentan de la savia, que chu-pan
del parénquima en las hojas, o atravesando las células llegan
hasta los vasos liberianos o fleoma de los que la sacan.
Tipos morfoEgicos.-En los áfidos propiamente dichos existen.
varios tipos morfológicos, que son: 1.0H embras y machos alados;
2 . O Hembras ápteras vivíparas, y 3.0 Hembras ápteras oviparas y
machos ápteros.
1.0 HEMBRAAL ADA.-A continuación damos la morfología de la.
hembra alada, que es la que más características proporciona para
la clasificación de las especies. a
Salvo raras excepciones (Cerataphis latanhe), el cuerpo es de N
E
tegumentos blandos y puede presentarle desnudo, como ocurre en O
la mayoría, cubierto por pruinosidad cérea (Hyalopterus arundi- n-- m
nk, H. melanocepha2us), o por secreción de cera en forma de copos O
E
E de lana (Erwsoma Zanigmum), o con pelos ya juntos y cortos, o S
E claros, y más o menos largos, aunque con frecuencia su cuerpo es -
glabro. 3
La forma suele ser oval alargada, teniendo la cabeza mejor - -
0
definidos sus límites con el tórax que en las formas ápteras, pre- m
E
sentando además bien limitados el tórax y el abdomen. O
La cabeza es más ancha que larga; lleva, además de los ojos n
compuestos (fig. 1, k), formados por onmatidias o facetas circu- a-E
lares, un tubérculo posterior en cada uno, formado por tres onma- l
n tidias mayores que las restantes. Además, tres ocelos dispuestos en n
n
forma de triángulo, uno situado en la frente (fig. 1, h) y dos más 3
en el vértice o vertex (fig. 1, i). O
Los Lachnidae adultos presentan sutura epicraneal formada
por la sutura corona1 o metópica y dos ramas frontales que en con-junto
tienen forma de Y invertida; falta en los Aphidinae adultos.
A cada lado hay colocados simétricamente un par de saliente8
e z6czlns, den& ,u ip!e,rtu~!n_ u %n_te_n!!w~m, wdcs t&6r c~hrf r ia-to-
laterales (fig. 1, j) ; otras veces quedan internos a las inserciones
y redondeados, o cubiertos de rugosidades, como en Myzodes o
Myzus, y otras son alargados, también internos a las citadas inser-ciones,
como en Phorodon; estos tubérculos a veces faltan. Las
238 ANUARIO DE ESTUDIOS ATLANTICOS
"APHIDOIDEA" DE L4S ISLAS CANARIAS 3
antenas, generalmente, son de seis artejos; pueden tener cinco; los
dos primeros son más anchos, y el primero lo es más; el segundo
puede ser troncocónico, o piriforme estrecho, teniendo entonces su-
Ee)i g. 1.-Nomenclatura morfológica de un Aphidoidea: a ) tarso; b) tibia; c) f6mur; f!8gelu de: T c artej= a=tena!; f) -ensorior prim~ries; m> se~cnc&na;
h) ocelo frontal; i) ídem medios; j) tubérculo antenal; k) gjo compuesto; 1) tu-bérculo
torácico: m) mesotórax; n) metatórax: fi) abdomen; o) tubérculo mar-ginal;
p) idem dorsal; q) sifón.-r) lámina anal; S) cauda; t) estigma alar o pte-rostigma;
u) ganchos del seguAdo par de alar; C) vena costal; R) ídem radial;
M) ídem media; Sc) ídem subcostal; Cu) ídem cubital; A) idem anai.
~ L x im~ ~ah firpan el &=ice, conr_rn_ried p cuando p.cr 'rnnc~-r.ónico;
lleva subapical en el lado posterior una microsensila u órgano de
Jhonston; los restantes artejos pueden tener superficie escamosa o
lisa, y en ambos casos presentar pelos ; el tercero presenta más sen-
Núm. 6 (1960) 239
silas placoideas (fig. 1, g), que son los rinarios o sensorios secunda-rios,
que, a veces, los presentan en el cuarto y hasta en el quinto,
pero en éste, asi como en el sexto, hay sendos sensorios primarios,
que en 10s Aphidinae, Callipterinae y Lwhnidae tienen los bordes ci-liados
o franjeados, de los cuales el del quinto es subapical; el sexto
artejo consta de dos partes, una gruesa, llamada porción basal,
o base (fig. 1, e), en cuyo ápice lleva el sensorio primario (fig. 1, f) ,
acompañado de otros sensorios pequeños, poco visibles, llamados
satélites, y a continuación, una porción fina y generalmente más
larga, llamada el flagelo, o unguis (fig. 1, d).
El rostro o proboscis está formado por un lado estrecho y corto
y una epifaringe algo más ancha. El labio inferior es de cuatro o
cinco artejos; esto Último es propio de los Lachnidae; de los artejos, a
N
el más largo es el primero; el cuarto es extremadamente reducido, y E
en los Lachnidue forma un conjunto triangular con el quinto, y en O - su extremo lleva pelos íinos. Los artejos son acanalados y forman
-
m
O
E
una vaina donde se alojan las sedas, que son las mandíbulas y las SE
maxilas, las que en total originariamente eran cuatro, per? que- -E
dan reducidas a tres por unirse dos, las maxilares. Generalmente
el pico está adosado a la parte ventral del cuerpo, en un surco si-' 2 -
tuado entre las patas. Unicamente está colocado en reposo for-
-
0
m
E
mando un ángulo recto con el cuerpo en el género Rectinmus. La O
longitud del pico o rostro es muy variable; generalmente llega su
extremo a la base del segundo o tercer par de patas, pero en el -
-E
género Stomaphb pasa mucho de la extremidad del abdomen. a
2
El prototórax está bien limitado de la cabeza, y no tanto del -
mesotórax. Se une a aquélla por medio de una membrana bien mar- -
cada, que se señala al microscopio como una línea fina. El pronoto 3
O
e e s t r e rh~y p e & llevar a rada lado un tubérr.ulo cónico (tubérculo
protorácico) (fig. 1, 1). El mesotórax (fig. 1, m) es el más grande
de los tres segmentos torácicos y su noto tiene bien marcados cua-tro
lóbulos, uno medio anterior, dos grandes laterales y un cuarto
poco señalado. El primero es el prescudo. En los laterales o escudo
se i,vs&,~n_ ~I$CU!~S & !a E!=, y e! p & e r i c r pg T I P ~ ~ Z & ~ ^
escudete triangular. El metatórax (fig. 1, n) es pequeño. Los dos
pares de estigmas torácicos están situados en el primer y tercer
segmento.
240 ANUARIO DE ESTUDIOS ATLANTICOS
"APHIDOIDEA" DE LAS ISLAS CANARIAS 5
Las alas son dos pares; las anteriores son mucho más grandes
que las posteriores, membranosas y transparentes, o pueden estar
infuscadas o la infuscación se reduce a las nerviaciones, como Pen-tabnia
nigroneruosa. Se insertan sobre salientes débiles del me-sonoto.
La venación consiste en una vena costal (C) (fig. 1, C) , que
es el borde del mismo ala, y una subcostal llamada cubito (fig. 1, Sc),
que resulta de la unión de la subcostal con el tronco de las res-tantes
venas, las que parten a diferente distancia de la base. El
tronco, uniéndose a la costal en el tercio apical, forma un engro-samiento
llamado el pterostigma (fig. 1, t), del que parte, en forma
de arco, la vena radial (fig. 1, R). De la base del pterostigma, o un
poco más hacia la base del ala, parte la media (fig. 1, M), ya sim-ple,
o formada por un tronco común y dos ramas (MiM z); de éstas
h aiitt.iiLir puede t:r simple íTox=qjtsla) 9 Kifurca&. Ivz& hacia.
la base parte la cubital ~(fig1. , Cu),q ue es sencilla, y aún más en la
base, la anal (fig. 1, A), que también es sencilla.
Las alas del par posterior se insertan sobre un saliente débil
del metanoto; son más pequeñas y en la mitad de su margen cos-tal
presentan unos ganchos o "hamulas" para su unión con un
-pliegue anal de las anteriores. Su venación es muy sencilla, pues
hay un cúbito o tronco común del que sale la radial (fig. 1, R) casi
en línea recta, separándose oblicuamente la media (fig. 1, M) y
más hacia la base la cubital (fig. 1, Cu). No existen células cerradas,
salvo la costal; para nombrarlas se las enumera a partir de ésta
hacia abajo y hacia el ápice.
Las alas en reposo se disponen generalmente en forma de te-jado
sobre el abdomen; algunos las pliegan verticales y otros
(Thelaxes y Phylloxeridos) las llevan horizontales.
Las patas son delgadas, variando solamente en longitud. De
los artejos tarsales (fig. 1, a), el basal es muy pequeño, unido a
una gran tibia '(fig. 1, b) por la membrana articular. En los ápteros
del género Byrsomypta falta el artejo basal, y en Atarsos carece
& zn?_h~.zr fe-@. 1 ~ ñ . u pzres ~ ~p ~f ~iV i ! ~ m xr~g&
en los Callipterinos (Drepamsiphum platanoides), y carece de uñas
el género Hamamelistes.
El abdomen es de nueve segmentos (fig. 1, ñ), pero si se incluye-la
lámina anal (fig. 1, r) y la cauda (fig. 1, s) como segmentos, se
Núm. 6 (1960)
6 JUAN G~MJ~Z-MFNORO RTEGA
elevan a once. Lateralmente tiene pliegues formando el ctmexivum..
También presenta tubérculos laterales (fig. 1, o), que en el género
Aphk son salientes en los segmentos. Sobre el dorso los presentan
en el género Mymcallk (fig. 1, p).
Los estigmas son laterales, situados por debajo del conexivum
que une las áreas dorsal y ventral. Sobre el abdomen hay siete sen-cillos
transversos sin engrosamientos, pero distendidos por un
anillo quitinoso.
Sobre el sexto segmento abdominal y lateralmente se encuen-tran
en el dorso los sifones o nectarios (fig. 1, q), llamados así por
la falsa creencia de que emiten jugos azucarados. Existen en todos,
y varía mucho su tamaño; así, son muy grandes en Nwosiphum a
y Dactymtus, que alcanzan la mitad de la longitud del cuerpo, N
grandes y anchos en la base en Toxozptera, mazudos en Rbpulo- o
siphoninus; en Myzus son delgados en la base y mazudos, en Callip- n-- m
terus, anchos y muy cortos. En su superficie pueden presentar ñnas O
E
arrugas transversas o pequeños salientes de la piel, así como tam- E
2
E bién pueden presentar en el ápice un área reticulada algunas espe- -
cies de Macrosiphum. El ápice puede ser plano o presentar una deli- 3
cada franja de epitelio fino como en Brachycaudus pors2cae. Por - -
0
los sifones pueden segregar gotas de un fluído o hemolinfa, que m
E
nunca llega a ser en cantidad copiosa, siendo los órganos encar- o
gados de la autohemorrea. La melaza la segregan por el ano. La n
cauda varía mucho en forma y tamaño, según los géneros; así, es a-E
muy corta en Lach~idae y muy larga en Macrosiphum. Su forma l
n puede ser ensiforme, triangular, mazuda, acuminada o redondeada. n
n
Está colocada a continuación del noveno segmento abdominal, por 3
encima de la placa anal. Su superficie es muy espinosa, siendo ma- O
yores las espinas situadas en el ápice, y está provista de pelos fuer-tes
curvados, siendo su número un carácter bueno para la diferen-ciación
de especies. Debajo está la placa anal, provista de rugosida-des
o espinas en la superficie y pelos análogos a los de la cauda. En
C~?nyg&l_ k2-y uUprucm&!. Izo fermcw p-ductoras
de cera presentan distribuidas por todo el cuerpo glán-dulas
ciriparas.
2." HEMBRAAP TERA VIV~PARAm u~~~. -Di f ierdee la forma des-crita
por su cuerpo piriforme y la piel menos consistente en gene-
242 ANUARIO DE ESTUDIOS ATLANTlCOS
"APHIDOIDEA" DE LAS ISLAS CANARIAS 7
ral; algunas veces es aplanada en el dorso y raramente alargada
lineal. El cuerpo está bien dividido en segmentos. La cabeza, que
no presenta sutura epicraneal en los Aphidinae, está menos deli-mitada
del tórax comparada con la alada y es más ancha. Las ante-nas
generalmente carecen de sensorios secundarios y, cuando más,
presentan pocos, únicamente en el tercer artejo. La cauda suele
diferir en pequeños detalles, siendo generalmente algo más ancha
en la base que en la forma alada.
3.0 HEMBRAAP TERA OVÍPA.RA.-B la sexualmente perfecta. Es
más pequeña y redondeada que la vivípara, pero a veces es más
alargada, como ocurre en Hyaiopterus arzcdinis. Cabeza con sutura
epicraneal, y siempre presenta las tibias posteriores más gruesas
v nrni i~adaa;p r ~ v b t - ~&. S ~ ERQ~q~Q~ p.eP~ ~er,_ u~ep$n- 6h pre- J ----l--'---
sentan en las vivíparas, en la especie Chaitophorus sensoriata. En
general, las patas y antenas son más fuertes que en las otras for-mas;
las tibias posteriores, en la mayoria, son aplanadas; su pico
está menos desarrollado y carece de ocelos. Suelen ser sedentarias.
Estas hembras depositan el huevo en invierno y generalmente
los colocan cerca de una yema. Suelen poner cada una sólo uno.
Los huevos son de superficie lisa, cubierta de polvo céreo y de bas-tante
tamaño en relación al insecto. En Lachnus longzpes se colo-can
varias hembras alrededor de un tallito fino de la encina y dejan
así todos los huevos reunidos. La mayoria de las veces los colocan
en la base o pies de los brotes, pasando en este estado el invierno.
Otras los depositan en el follaje, cayendo al suelo con la hoja. Tam-bién
pueden ser puestos sobre las hierbas o en los tallos de las plan-tas
perennes, en tubérculos (Macrosiphon gei), en raíces como el
Aphk plantaginis en las de Piantago.
Hay algunos pulgones subterráneos que viven en hormigueros;
sus huevos son atendidos por las hormigas y llevados con ellas.
1." y 3." MACHO.-Puede ser áptero o alado. Tanto una forma
corno otra tienen e! rnisrn~a specto, y difieren de 11 heabra dada en
su tamaño, que en éste es menor; también en el número de sensorios
de las antenas, las cuales los presentan en mayor número que las
hembras, y siempre existen también los secundarios en el quinto
artejo.
Ei amlloinepnae ñ¿a spi;aioüe x-wai, ,&h Uitua&j -pr
Núm. 6 (1960) 243
8 JUAN WMEZ-MENOR ORTEGA
delante de la lámina anal y de la cauda en la parte ventral, cons-tando
de una placa o lámina subgenital (fig. 2, P) que se articula
con una pieza intermedia (fig. 2, B) con la pieza o apófisis de la
pip P.-Arrnzr?i'ra genital rne.rc~!inu Ve Eyrt!ipt&-m g w ~ i i GOIE?. : -4) v!st& =ir
;<yado ventral ; D) vista de perfil; P) placa subgenital; G) gonópodos; E) edeago;
E) pieza basa1 del edeago; L) lámina anal; C) cauda.
pieza basa1 del edeago, estando éste abierto en su parte anterior,
por donde sale el pene membranoso e hialino (fig. 2, E), y por de-lante
--1 e&agn se enccentran l ^ ~pa rámerns @g. 2,.(-*7),q o s ~ n
de algo mayor consistencia.
244 ANUARIO DE ESTUDIOS ATLANTICOS
11.-CICLO BIOLOGICO
Cada especie tiene su ciclo de vida. Indicamos aquí cómo es en
las especies que alcanzan mayor complicación. Generalmente pasan
el invierno en estado de huevo, aunque algunos, como Aphis, hacen
vida subterránea en dicha estación en los países de la zona tem-plada.
La hembra ovipara deposita los huevos, poco numerosos, unas
veces al azar, otras sobre yemas, como Y. maZfoliae,. otras sobre
las hojas, a los que, al caer, recogen las hormigas, custodiándolos
hasta que nacen en primavera, en el mes de marzo, y producen una
hembra virginópara o vivípara partenogenética, que recibe el nom-bre
de "tronco madre" o "fundatriz", que vive sobre una especie
de planta. Esta da lugar, por viviparismo, a otra generación ágama
vivípara, que recibe el nombre de "fundatrigenia" y que puede dar
nacimiento a otra u otras generaciones de ápteras o aladas, pues
se observa que la producción de aladas está relacionada con la con-centración
de los jugos de la planta matriz; ésta o las varias gene-raciones
aladas partenogenéticas viviparas reciben el nombre de
"emigrantes", pues buscan otra planta donde, por viviparismo, fuw
dan una colonia, siendo los individuos ápteros que nacen de éstas
las hembras llamadas "colonícolas" que pueden ser varias gene-raciones.
-Al final del verano tiene lugar el nacimiento de otra ge-neración
alada, la "retornante", que vuelve a la primera especie
de planta. En ocasiones no existe esta generación y las ápteras
pasan el invierno sobre una planta perteneciente a otra especie y
forman una colonia "exil", y estos individuos "exilados" o "exiles"
o "alienícolas" dan lugar en primavera a otras generaciones que,
emigrando a otra especie de planta, forman una serie paralela.
Cuando existe la "retornante" vuelve a la especie de planta ori-ginaria
y da, por viviparismo, una generación que puede ser la
sexúpara o también la anfigónica, esta última bisexuada, formada
por la hembra ovípara y, a veces, el macho. Otras la "retornante"
produce hembras vivíparas solamente, oviparas solamente o ambas
juntas.
La generación anfigónica no se produce siempre en el otoño,
Núm. 6 (1960) 243
10 JUAN G~MEZ-MENOR ORTEGA
pues la hemos podido observar para Aphis saliceti en Madrid en
el mes de junio, y, según Theobaldls, es la época norma1 de pro-ducción
para dicha especie. En cambio, HyaZqterzcs arzcndinis pre-senta
la generación indicada, en Madrid, durante el mes de noviem-bre,
coexistente con algunos grupos de hembras partenogenéticas.
Algunas especies de áfidos cumplen su ciclo biológico completo
en dos años.
Hay algunos áfidos en los que los individuos sexualmente per-fectos
o generación anfigónica son muy raros y hasta el presente
no se han encontrado, como ocurre con el Neomyxarpltis abietilaa y
el Aphk franguZue; éstos se reproducen asexualmente todo el año.
Como caso raro se cita el Aphk saliceti, que solamente produce una
generación, y la bisexuada al año en verano. Las emigraciones de
los Afidos pueden ser regulares (anuales) o espasmódicas.
Polimorfismo fis2oZógico. -Además del puramente externo,
existe un polimorfismo derivado de la actuación fisiológica, como
se ha podido ohervar al indicar el ciclo biológico.
La hembra que nace del huevo de invierno es la Fundadora o
Fundatriz, que es partenogenética virginópara (o sea productora
de hembras partenogenéticas), y en algunas, pero raras ocasiones, '
da por partenogénesis, lugar a la generación sexúpara, la que a
su vez origina por partenogénisis la generación bisexuada o anfi-gónica.
La fundadora generalmente es áptera, siendo alada en
Drepanosiphum platanoides.
Fundatrigenia es la hembra partenogenética alada o áptera,
virginópara, ovipara o vivípara, nacida de la fundatriz, y que ge-neralmente
da lugar, por virginogenia, a generaciones partenoge-néticas
iguales o fundatrigenias.
Sexúpara es la hembra partenogenética alada o áptera vivipara
que nace de una virginópara, y ella produce una generación bise-xual,
nacida como ninfas de ambos sexos.
Las sexúparas productoras de machos y hembras no se pro-ducen
en la misma generación, aunque coinciden en el tiempo, y
segun sean productoras de machos o hembras se las llama andró-paras
o ginóparas.
Las hembras partenogenéticas, que pasan el invierno a veces,
246 ANUARIO DE ESTUDIOS ATLANTICOS
presentan caracteres que permiten su distinción y se llaman in~er-nantes
o hiemal-.
Las generaciones que viven en verano, en seco a veces, presen-tan
caracteres especiales y se las llama "formas" estivales.
También hay diferencias de coloración que dan lugar a formas
fisiológicas como las precursoras de las sexúparas.
Ninfales.-Son hembras ápteras que presentan algunos carac-teres
de los alados (antenas más grandes, vainas o rudimentos de
alas más o menos aparentes). Se reproducen por partenogénesis;
pueden ser virginóparas, oviparas o viviparas.
Anfigónicas o bisexuales.-Aparecen al final del verano o en
otoño en los países templados, o en determinadas condiciones cli-matológicas
en los cálidos, y son las que ponen el huevo duradero
o de invierno en los países templados.
Las formas aladas pueden ser emigrantes o retornantes, segiin
vayan de la primera planta a otra de otra especie, donde nació la
fundatriz, o vuelvan a la primera especie. Cuando hay una tercera
forma emigrante que va a otra tercera especie de planta a fundar
una colonia, la resultante se llama colonia exil.
En cuanto a su régimen alimenticio, todas las especies son pa-rásitas
de plantas, alimentándose de los jugos que chupan me-diante
su aparato bucal. Existen especies que sólo se alimentan
de los jugos de una sola especie de planta (monófagas) y otras de
los de varias (polifagas). La polifagia puede producirse al mismo
tiempo que emigra, y aun siendo especies emigrantes puede presen-tarse
la polifagia en la fundatriz.
Cuando el ciclo completo se cumple en una misma especie de
planta se dice que esta especie presenta monoecia, y cuando nece-sitan
emigrar a otra especie de planta y para reproducirse en gene-ración
anfigónica vuelve a la especie original presentan heteroecia.
Res-pecto a su colocación en la planta puede ser variable; como
se ha visto, aun para la misma especie, según la generación, siendo
unas veces caulícula, cuando vive sobre tallitos o brotes; caulinar,
cuando está sobre el tallo; folícola, cuando sobre las hojas; radi-cícola,
sobre las raíces; gallícola, si es formada de agallas.
EFECTOSPR ODUCIDOS POR ESTOS INSECTOS SOBRE LAS PLANTAS.-En
algunas, a consecuencia de la invasión de estos insectos, se produce
un desarrollo anormal de algunas de sus partes, siendo frecuente
el arrugamiento de las hojas, que puede ser ligero, como en las
hojas de peral cuando están invadidas por el Piraphk pirinus, o ser
grande, ocasionando el arrollamiento de ellas, formando densos
paquetes por acortarse los entrenudos, como ocurre en el meloco-tonero,
cyando se encuentra en grande, por el Hyalopterus arun-dinis
o pruni, o al naranjo cuando está invadido por el AphZs *id
raeicola; también el Aphk grosulariae ocasiona el acortamiento
del tallo, dando lugar a la formación de acúmulos de hojas defor-madas.
a Además de las deformaciones también producen otros efectos N
"AL..,. 1-- -l--A-- A - l - - ---- -- ---- L-e
UVLJIC: r a J parra*, Laica r;oi~iol i t ~rr mrir;iia*r y el c~iiseciieiited emi-o
miento ocasionado por la pérdida de jugos por la planta. También
n-= ocasionan daños por la inyección de sustancias tóxicas contenidas m
O
E
en la saliva de estos insectos, así como los producidos por las he- S£
ridas, que facilitan la entrada de los hongos productores de enfer- =E
medades. Sobre las secreciones azucaradas que emiten y que a veces 3
salen de las heridas finas ocasionadas por la picadura de estos in- --
sectas en las plantas, se desarrollan con frecuencia hongos del gé- 0m
E
nero Capnodium o MelwZa que forman una cubierta negra super- o
ficial, que es el micelio y cuerpos fructíferos del hongo que impiden
la absorción de la luz y dificulta el cambio de gases en la planta, n
-E
llamándose la cubierta negra "furnagina". a
2
Son perjudiciales también, por ser transmisores de enferme- n
0
dades en las plantas, las que están producidas por virus filtrables,
3 papel que desempeñan también con otros hemípteros y homópteros, O
tales como Tingidos y Cicadelidos ; siendo los virus que transmiten
los que ocasionan los efectos sobre las plantas conocidos por el
nombre de "matizados" o "mosaicos". En España el Ingeniero
Sr. Rodriguez Sardiña ha demostrado que la enfermedad conocida
en Valencia con el nombre de <'Blanql~eta.s>o>b re e1 pimiento es
transmitida, según sus experiencias, por el Sido Myxus persicae..
Muy conocido por su importancia económica es el "mosaico" o
"matizado" de la caña de azúcar, que tantas pérdidas ha ocasionado
y ocasiona en este cultivo y que ha hecho necesaria la creación de
248 ANUARIO DE ESTUDIOS ATLANTICOS
"APHIDOIDEA" DE LAS ISLAS CANABIAS 13
híbridos inmunes a dicha enfermedad, problema aún no resuelto
satisfactoriamente, siendo esta enfermedad transmitida por el in-secto
Rhopalosiphon zeae o Aphis maidk.
Por su secreción anal azucarada, estos insectos son buscados
por las hormigas, quienes los cuidan y los conducen a los brotes
más tiernos, así como también cuidan los huevos.
DI.-ENEMIGOS DE LOS AF'IDOS
Según la manera de que se valen para destruirlos, sus enemigos
se agrupan en predatores o depredadores y parásitos.
Los parhitos p'o&n ser tanto veg-ta.le,r, c.amo animales. ~ n t r e
los primeros nos encontramos con algunos hongos, siendo los prin-cipales
varias especies del género Empusa; también el género Isaria
ofrece posibilidad para utilizarla como verdadero parásito en la
lucha natural; Empusa fresenii Nas. la cita Theobald sobre Mpus
persicae, y sobre este mismo insecto han sido observados por mí
destrozos ocasionados en colonias sobre Berengena por el hongo
AcrostaZagmus aphidum, en la República Dominicana, así como
también en el Aphk frangulae sobre Algodón, quedando unidos los
cadáveres de los Afidos al tallo u hoja de la planta mediante los
filamentos micelianos blancos.
Los parásitos animales son insectos himenópteros pertenecien-tes
a diferentes familias. Entre los AfeIinidos está el Aphelinw
mali, que ha sido empleado y se emplea con éxito en la lucha bioló-gica
contra el pulgón lanígero del manzano o Erwsoma Zanigerum,
y también parasitiza al Brewicoryne brccsicae, al ~ e m ~ h if~rauxis-taifolii
y al Aphis monardae. Entre los Bracónidos se encuentran
con frecuencia capullos de Praon con la piel del áfido colocada sobre
él, así como también el Aphidius menae parasita a los áfidos que
viven sobre los cereales y especies del género LysiphZebus encon-tradas
por D. Modesto Quilis, tales como el L. Janini, L. Gomexii.
Entre los predatores o depredadores se encuentran también los
insectos himenópteros, pertenecientes a muy diferentes órdenes,
y las especies del género Pemphredon. Así entre los Neurópteros
son frecuentes las larvas de diversas especies de Chrysopa. J. M.
14 JUAN. GÓMEZ-MENOR ORTEGA
Gómez-Menor ha encontrado predando sobre Pemphigus spirothe-cae
la larva del hemeróbido Symopherobius gratksus Nav., que se
alimenta devorando los áfidos, y los adultos pueden aún colocar
sus huevos fijos por su largo pedúnculo.
Entre los Coleópteros, la principal familia, por el número de
especies predatoras, es la de los coccinélidos, siendo el predador
más conocido la Coccinelta septempunctata; otras especies son la
AdaZia bipumtata, Halyzia dzcodecimgutatta, Chibcorus b.ipustu-latus,
Hyperaspis reppens2s, Phtynaspis luteorubra y Scymnus
Apexxi. Entre los Falácridos tenemos el PhaZacrm substriatus.
De los Dipteros nos encontramos con las larvas de Leucopk
y larvas de diversos sirfidos, tales como el Syrphus corollae, Pipixa,
y en América, Baccha clavata y otras especies de este Último
género.
Entre los Hemípteros se han encontrado como predatores algu-nos
antocóridos, tales como el Anthocoris nemoralis, y entre los
Cápsidos, especies de los géneros Capsus y PZagwgnatus. También
existen Acaros predatores.
Pero los enemigos más importantes son algunas aves.
ANATOMEX~T ERNA.
Hemos indicado parte en la descripción de las formás, en espe-cial
de las alas.
Cabeza.-Sólo hemos de indicar que además del vertex o ver-tice,
que, como se ha visto, es dorsal y se extiende por la porción
ventral de la misma, la frente es muy reducida y está representada
por una pequeña pieza situada entre las ramas frontales de la su-tura
epicraneal, cuando existe, y la base del clípeo. Las mejillas
están a partir de los ojos para la base del rostro, que en realidad
están formadas por las piezas basales o láminas de las mandíbulas
y maxilas. Por debajo de la frente está una pieza aplanada y de
contorno pentagonal; formada por la soldadura del postecli~peo:
250 ANUARIO DE ESTUDIOS ATLANTICOS
anteclípeo y labro (que a veces esta Última pieza queda bien limi-tada).
El rostro está formado de cuatro artejos, o de cinco en los
Lachnidae, que forman un tubo abierto en la parte anterior, cuyos
dos primeros artejos están poco quitinizados y son los que se re-pliegan
en la cabeza cuando pican y reciben telescópicamente al
siguiente; el tercero es consistente y m& ancho que el o los dos
siguientes para albergar mayor número de músculos transversos;
su mayor longitud está en la parte opuesta al canal, y el Último o
los dos apicales se fusionan y tienen la forma de lanceta, con varios
pelos gustativos situados en su extremo, quedando las sedas maxi-lares
y mandibulares alojadas en un pequeño espacio. A lo largo
de los límites del canal anterior hay una serie de pelos largos. La
gula o garganta queda membranosa. Existe crumena o bolsa in-terna,
en forma de dedo de guante, a lo largo del cuerpo, donde se
alojan los estiletes en reposo, plegándose cuando son más largos
que el pico, como ocurre en los Lachnidae y en los Theluxidae. Las
sedas mandibulares quedan externas y aplicadas a las maxilares;
tienen el extremo fino. Las sedas maxilares están íntimamente apli-cadas,
de forma que no es posible separarlas, y llevan dos escota-duras
cada una, que, aplicadas, forman dos canales, el superior o
de la succión, por donde sorben el alimento, que es poco más ancho,
y el inferior o canal salivar, por el que sale la saliva.
Por la posición de la base del pico son ortognatos, es decir, que
el nacimiento del pico queda perpendicular al ojo longitudinal de
la cabeza, y esa es la posición cuando está funcionando. En el ex-tremo
de las sedas maxilares, al unirse, presentan una pequeña
oquedad, en donde se estrechan y unen ambos canales, y terminan
en punta fina.
Hemos indicado que por debajo del anteclípeo existe un labro
alargado triangular que lleva unida la epifaringe.
Para picar van introduciendo los estiletes, apretando fuerte-mente
con los músculos protractores primero de una mandíbula,
Q.-$7Q.;;zandeu! wt;lzte, Y 1. .A,.-.-. ""e"""
,.-..e l u c ~ j ua v a l i I a 1% v y u c a"+L" a li1.a"o"+t.^a . z-:+.i.e.i.-.L-. u a l u c Q.
su nivel; por los músculos protractores de las maxilas avanzan
entre ellas estas últimas, que se sujetan e incluso hacen fuerza como
pinza fijadora los músculos transversos del labio. Al mismo tiem-
Núm. 6 (1960) 251
16 JUAN a=-MENOORTREG A
po, la parte basa1 no quitinizada del pico va plegándose teles-cópicamente.
Cada vez que tiene que avanzar un estilete mandi-bular
se relajan los músculos transversos del pico. Existe un esque-leto
interno o tentorio que tiene como función servir de punto de
origen a los músculos retractores de las mandíbulas y maxilas.
Cuello. -Existen escleritos cervicales de posición lateral; de:
ellos, el Aphk tiene uno longitudinal en forma de S y otro inter-cervical
latero-inferior, y el transverso, que sirven de puntos de
origen a los músculos. cervicales.
Tórax.-Ya indicamos algo en la descripción de las formas.
e Ahora pasemos a señalar algunos detalles para la "forma áptera". D
N
En el protórax, su noto es de una pieza alargada a su través, E
pudiendo llevar a cada lado un tubérculo y pelos. En la parte ven- "
n -
tral quedan las pleuras, de las que sus porciones episterno y epí- m
O
E mero se sueldan a la precoxa o pieza anterior a la coxa, pero el E
2
epimero queda señalado por un surco. El esterno está formado por E
una pieza cuadrangular, el basiesternito; sigue detrás una pieza
transversa o furcasternito, de la que sus lados se invaginan for-mando
la furca o apodema ventral del endoesqueleto, y unido a la -
0
m
E precoxa está el llamado apotoma o interesternito triangular y di- o
rigido hacia atrás.
En el mesotórax, en la parte dorsal, sólo existe el noto sin divi- n
E
siones, formado por una sola pieza transversa. En la parte ventral a
existen varios escleritos (dos cuadrangulares y transversos, el an- n
n terior o basiesternito y el posterior o furcasternito), la precoxa que
se separa en su parte externa del epimero pequeño trapezoidal por 3
O
Ir. sutl;ra p!ewal y ea !a @e e1 borde externo de la Última pieza
está poco separada del estigma mesotorácico; por la parte interna
está completamente unida con una pieza triangular falciforme o
apotoma, quedando entre ésta y el furcasternito el orificio de la
fuma o apodema ventral.
El imtatóraii, pr !a ?arte Uorual, yrese~ta tambikn su nek;
y por la ventral, excepto la precoxa, el epimero, el apotoma y un
pequeño furcasternito a cada lado, el resto es membranoso.
El tórax de la "forma aladau.-Difiere grandemente, pues el pro-
252 ANUARIO DE ESTUDIOS ATLANTICOS
"APHIDOIDEA" DE LAS ISLAS CANARIAS 17
noto está ligeramente escotado en la parte media posterior y de
.cada uno de los extremos de las escotaduras salen dos piezas que
la unen al mesonoto, que son los posterguitos; por la parte ventral
y lateral es como en la forma áptera.
En la membrana entre el protórax y el mesotórax se encuentra
un esclerito que lleva el estigma.
En el mesotórax, su noto presenta un prefragma interno, el
prescudo triangular, dos piezas que forman el escudo, otra trian-gular
posterior y una transversa o escudete, otra transversa sa-
.liente que es el postnoto o postescudete, que termina en los cos-tados,
en punta dirigida hacia delante, con un endofragma. En la
parte ventral, el basiesternito lo forman dos piezas grandes cua-drangulares,
separadas entre sí por una sutura media longitudinal,
,y el furcasternito también en forma de dos piezas cuadrangulares,
.con el borde posterior arqueado y separadas en la línea media por
una sutura longitudinal.
Para la inserción de las alas hay primero el proceso alar ante-rior
dividido.en fuma de ramas muy próximas y separadas del
escudo por la sutura llamada hendidura o sutura tergal.
El mesotórax presenta lateralmente dos piezas: superior o ane-
.pisterno e inferior o catepisterno por delante de la inserción de la
pata, y un epimero que se une en su extremo antero-inferior con
ambas piezas para formar un cóndilo, articular de la segunda coxa.
El metanoto está formado por un esclerito transverso, con un
postnoto formado por dos piezas triangulares; uno de ambos vér-tices
es interno y largo, con sendos pequeños fragmas. Lateralmen-te
hay un episterno y un epímero estrechos, de los que el primero
.se une a la precoxa y el segundo da el cóndilo para la inserción de
?u tcmeru cexu.
Alas.-Para la inserción de las alas existen los escleritos ar-ticulares.
En la rama anterior del proceso o apodema alar anterior
existe una pequeña pieza o tégula. El esclerito axilar primero es en
O,.,".-. an n:n+ri1n nrin .inri a, m.." n r r + n n u r i m .-.m nr.+:n.nr, lnrl.. .. ,L,. .
L U L U L ~ uc y r a L u i a y p r uuu UG JUD GALLGIIIU~ nc a L L l b u r a L b u 1 1 la U&=
de la subcostal; por su parte central, con la segunda rama del apo-dema
alar anterior, y en su extremo posterior, con el segundo escle-rito.
El segundo se articula por su extremo anterior con el pri-
Núm. 6 (1960) 253
18 JUAN GÓMEZ-MENOR ORTEGA
mero en su cuerpo o base ancha con el tronco o cúbito, y'por el
extremo posterior con el tercer esclerito; este último se articula.
por su parte media con la base de la anal y con el apodema alar-posterior.
El segundo par de las alas presenta sólo dos escleritos.
en la base, de los que el primero es igual en forma al correspon-diente
de las alas anteriores y el segundo es en forma de S.
Patas.-Están formadas por las piezas llamadas coxa, que es
la basal-corta y más o menos tronco-cónica, inserta por detrás de.
la precoxa del esternón; sigue un trocánter que presenta micro-sensilas
placoides; después, un fémur alargado; la tibia es alar-gada
y siempre más ancha en su ápice. Con frecuencia se observa.
en el extremo entre la articulación con el tarso una vesícula plan-tar
o suela; después está el tarso poco desarrollado, que en su por-ción
de la planta o extremo lleva de tres a cinco pelos más Iargos;
el tarso es mayor y en su extremo se observa el esclerito ungui-.
tractor que .se une al músculo retractor de las uñas, al ligamento
dorsal y al tendón longitudinal del músculo retractor; y el escle-.,
rite u-:i!iar baw! de !as ccs P&S hu&s que casi llegan
al ápice de ellas, y que son análogos a las digítulas de las uñas de
los cóccidos.
Abdomen.-Formado por nueve segmentos, más la cauda y 1á-mina
anal, que se consideran como el décimo y undécimo; lleva a
veces láminas quitinosas transversas en el noto, que son los ter-guitos
o láminas tergales, no estando representado por reducirse
el primer noto ; lateralmente existen también cuatro láminas por
delante de los sifones, y Ia quinta en la base de los mismos. Las
láminas posteriores al sifón se unen a l&te rgales. Lateralmente,
entre estos últimos y las tergales, puede haber pequeños escleritos
en forma de manchas que se llaman posterguitos.
Existen siete pares de estigmas abdominales colocados sobre
pequeños tubérculos quitinizados. Los. dos primeros pares están
muy próximos, y el último se sitúa por detrás de los sifones.
En la parte ventral, las piezas quitinosas que existen se han
indicado al hablar de la forma áptera.
254 ANUARIO DE ESTUDIOS ATLANTICOS
Sifones.-Son los órganos encargados de la autohemorrea. El
líquido que sale por ellos es hemolinfa, pero cargada de gotas de
grasa o de cera, con los cuales regulan su tensión sanguínea.
Están formados por una base que puede ser cónica o alargada,
o cilíndrica, a veces muy largos; su extremo presenta una pequeña
dilatación llamada flángula y tiene una hendidura tapada por un
opérculo en el que se insertan los mUsculos del opérculo, que tiene
su origen en las paredes del sifón.
La superficie de estos Órganos puede ser lisa, escamosa o pro-vista
de numerosos dientecillos finos dispuestos en líneas trans-versas
que no se unen formando anillos.
El extremo &Z abdomen es atenuado y presenta por encima del
ano una expansión más o menos semicircular que lleva en su por- ..:-- -^-A--:--. ..-- -.-:A:-:---:I- 1-1- 2- L _ _ l _ Z _ _ _ _ _ 1 _ _ ~ l u r r~ B L CIUI I uua qulLllll,muuu pruvls~a.u e I ~ U I U ~ ~ V S VLSU U~ICUIOS
espiniformes y pelos dispuestos por pares largos y simétricos; esta
expansión recibe el nombre de lámina anal. Se la considera como
el décimo segmento. Por detrás de ella se abre el orificio anal.
Sobre el dorso de la placa anal se encuentra una porción alar-gada
y escierosada como ia anterior, de forma variable, iiamada
cauda.
Delante de la lámina anal, en ambos sexos, se encuentran las
gonapófisis, que en la hembra son dos prolongaciones cortas, ru-dimentarias,
situadas lateralmente por delante del orificio sexual.
Delante de las gonapófisis existe una lámina quitinosa de forma
variable, con pelos esparcidos, llamados gonaquetas o filas de pelos,
y la lámina se llama placa genital. En el macho, la armadura genital
es más complicada; consta de varias piezas basales en forma de
semicírculo y dos parámeros o ganchos, quedando entre ambos el
órgano basa1 del edeago, que soporta a un pene membranoso largo,
de forma variada según la especie.
Tegumento.-En los Afidos propiamente dichos no presentan
glándulas ceriparas, pudiendo ser el tegumento liso, peloso o pro-
-,",-Wt.. LU ;mileru~us& ieiitecil]os, a veces foruian redeU, tuno
en el caso del área postsifonal en el género Tbxoptera. Sin embar-go,
a pesar de no haber glándulas con conducto visible, existe se-creción
cérea en forma de polvo, como en el género Hyalopterus.
Núm. 6 (1960) 255
JUAN G6m-MENOR ORTE~A
ANATOMI~NATE RNA.
Tubo digestivo.-Como hemos indicado antes, e1 aparato bucal
es chupador y la boca comienza en el cibariurn o lugar donde los
estiletes se separan; allí existe un órgano gustativo o epifaringe
impar, que está en relación con el ganglio nervioso frontal. Las
células presentan canales intracito-plásrnicos que se abren al exte-rior
y en su citoplasma penetran las terminaciones fibrilares de los
nervios epif aríngeos (P. Peson, 1943).
En los Afidos el tubo digestivo es relativamente corto. Sin em-bargo,
existen dos tipos: uno, como en Doralis fabae, en que, a
continuación del esófago, está el intestino medio, en cuya entrada
existe una válvula cardíaca circular y luego un estómago volu-minoso;
después sigue el intestino delgado, que forma dos pliegues
sobre el estómago, y a continuación está el intestino posterior o
recto, no existiendo tubos de Malpighio. En la especie americana
Longktigma caryae, Knowlton ha descrito otra forma, en la que
e! es6fago mncluce al intestino medio, que se encuentra abrazado
por la porción posterior del intestino delgado, formando una cá-mara
filtro como en la mayoría de los Homópteros, donde pasan por
Ósmosis los líquidos directamente de la parte anterior del intestino
medio al posterior y después al recto, aunque el intestino delgado
se sigue comunicando con el recto para el paso del alimento sólido,
siendo la parte anterior digestiva y la posterior del intestino del-gado
la absorbente.
Apa~atoc irculatorio.-Se ha descrito un corazón de varias cá-mara
-$y JXdit!aezi] y ?,I=r~";;i&= a!mn~s g&rc~. &-&ten S&
más órganos pulsátiles accesorios en la base de las tibias. ,
La sangre.-Al lado de los elementos habituales contenidos en
la de otros insectos, existen células céreas muy especiales que se
fgi -ria~a ensrsas & !us ]eUcoeitose, ar2&ndooep wI "n5- m1 Li xUm* vr nCWnAnIUtI~~A uu
, de vacuolas que encierran cera liquida; al parecer, estas células
reemplazan al tejido adiposo o de'reserva. La mencionada cera se
encuentra también en el vitelo de los huevos.
256 ANUARIO DE ESTUDIOS ATLANTICOS
"APHIJJOXDEA" DE LAS ISLAS CANARIAS 21
Sistema nervioso.-En los Afidos está muy concentrado, exis-tiendo
tres centros nerviosos, quedando así enmascarada su me-tamerización.
Existe, pues, un centro formado por la reunión de
los ganglios supraesofiigicos, o sea, proto, deuto y tritocerebro, y
después los conectivos paraesofágicos; otro centro formado por
los tres pares de ganglios, mandibular, maxilar y labial; por últi-mo,
un gran centro formado por la fusión de los ganglios torácicos
con los abdominales.
Existe gran diferencia en el desarrollo de estos tres centros
entre las formas aladas y ápteras, En las primeras hay mayor des-arrollo
del cerebro, especialmente del proto, correspondiendo al
mayor de los ojos y a la presencia de ocelos, mientras que en las
ápteras hay acortamiento del centro torácico abdominal.
Los "corpora aiaW se fusionan, aunque se pueiie probar bis-tológicamente
su origen par.
Organos sensoriales.-Hay los llamados sensorios o rinarios,
situados en las antenas; bajo la lámina de esta sensila placoide se
encuentra un grupo de células nerviosas en conexión con el nervio
antenal; se les asigna la función olfatoria. También existe una pe-queña
sensila en el segundo artejo que es un órgano de Johnston.
Existen en el trocánter y la base del fémur otras plaquetas sen-soriales
pequeñas.
Hay sensorios de tipo análogo en las tibias de las hembras anfi-gónicas.
En el ápice del pico existen pelos táctiles y posiblemente gus-tativos.
Organos sexw2es.-El aparato reproductor masculino es sen-ciiio,
formado por un par de testículos, con sus canales deferentes
que se unen en un canal eyaculador impar, el cual se abre en el
extremo del pene, presentando glándulas accesorias grandes que
desembocan en la unión de los conductos deferentes.
En el femenino hay dos ovarios, con las ovariolas en forma de
racimo sobre los oviductos.
En las hembras partenogenéticas hay mayor número de ova-riolas
que en las sexúparas o que en las sexuadas. En las sexuadas
suele haber un ovario con una ovariola, a veces dos.
Núm. 6 (1960)
22 JUAN G6MEZ-MENOR ORTEOA
Las ovariolas son acrotróficas. Cada una lleva dos oocitos. Los.
oviductos se unen formando un útero musculoso y termina en una
vagina más o menos larga en la que desembocan las glándulas acce-sorias.
Micetoma.-En los Afidos han sido estudiados los simbiontes.
por Paillot, Sf i l~B, uchner y Mahdihassan. Al principio se conside-raban
como levaduras ; fueron encontrados por Sfil,q ; Buchner les
dio el nombre de Schizosacharomyces aphidk?, y otro encontrado
después en D-repanosiphm platanoides, como Schkosacharomnyces
drepanosiphi. El primero que demostró que eran bacterias y no
levaduras fue Paillot.
Posteriormente, Uichanco, en 1924, encontró simbiontes de tipo
coccus en Mmosiphon tanaceti, y Klevenhusen encontró además.
otro en forma de bacteria.
Cultivos de ambos por separado no dan formas iguales. Mahdi-hassan
en Aphis rzlmZcis encuentra dos simbiontes intracelulares,
uno grande de tipo Coccus y otro más pequeño de tipo Bactem'urn.
Además en este pulgón hay asociadas externamente once especies.
de bacterias.
El micetoma en los Afidos está formado por células en la hemo-linfa,
y la transmisión se efectúa por la aplicación de las células
o micetocitos contra el pedúnculo de la ovariola al polo posterior
del huevo y los simbiontes entran directamente en las células del
foliculo y luego en el huevo. Durante el desarrollo embrionario pue-den
quedar aislados en células diferentes.
Se han observado variedades de plantas que no son atacadas
por los Afidos, existiendo otras de las mismas especies que lo
son fácilmente. Cuando no lo son y la causa es mecánica y ex-terna,
el fenómeno se llama epifilaxis; puede ser ésta debida al gran
espesor de la corteza o tejido o a una coloración repelente. Cuando
la inmunidad es producida por la acción repelente de secreción de
la planta (aceites esenciales) o por la naturaleza química de la savia
o valor nutritivo, entonces se Ie llama en,dnfihr:2.~.
258 ANUARIO DE ESTUDIOS ATLANTICOS
"APHIDOIDEA" DE LAS ISLAS CANARIAS 23
El principio de la picadura parece estar determinado por esti-mulos
diversos; posiblemente los que determinan más son los olfa-tivos,
gustativos y táctiles; el labio presenta en el ápice pelos sen-soriales
que sirven para tantear el lugar escogido para la picadura;
la gustación se efectúa en la hipofaringe, pero ha sido antes el
estimulo olfativo y táctil el que determina la picadura. Por la pre-sencia
de nervios en la base de los estiletes mandibulares parece
que éstos también presentan sensación táctil. El lugar del tejido
que prefiere el insecto parece quizá ser el que presenta el mismo
Ph. que su saliva.
En los pulgones o áfidos las sedas mandibulo-maxilares son tan
largas como el pico, cuyo extremo sirve de pinza para hacer fuerza
para que penetren los estiletes después de haber lacerado el tejido
con el ápice dentado de los mandibulares, siendo en realidad el
avance de los estiletes el que determina el progreso, debido a la
acción de los músculos protractores. El labio se recoge telescópi-camente,
sirviendo la pinza labial, o extremo, de .guía, estando un
estilete en avance mientras los otros tres están en reposo.
Los efectos son: determinar la herida, cuyo trayecto se recubre
de una sustancia cromófila alrededor de los estiletes, que persiste
cuando éstos se han retirado, formando las llamadas vainas nutri-doras
o vainas estilares que tienen una composición muy proteica.
Estas vainas permiten reconocer el camino de los estiletes en los
tejidos, y si llega al parénquima, o los efectos tóxicos son débiles,
tradúcese al exterior por manchas amarillas o pardas, quedando
el tejido necrosado en puntos, a los que se llama estigmosis; pero
cuando llega al floema es peor, ya que, absorbiendo el insecto los
productos de la síntesis clorofilica y la acumulación de éstos por
encima de las partes picadas, hay una obstrucción de los vasos
debida a la desorganización del liber en dicha zona.
La acción tóxica de la saliva determina las llamadas fitotoxe-mias
reconoscibles como manchas.
-
La saiiva contiene con frecuencia auxinas, y a veces se engendra
también en las plantas como consecuencia de las picaduras; pero
es indudable que tienen que ser especificas, ya que especies afines
del mismo género determinan agallas diferentes sobre la misma
planta, aunque esto no sea exacto a veces, pues especies de dife-
Núm. 6 (1960) 259
24 JUAN GÓMEz-MENOR ORTEGA
renta géneros sobre una misma planta determinan igual forma de
agalla. En este idtimo caso es posible que determine la agalla la
hipertrofia de tejidos debida al estímulo mecánico de los estiletes,
y ésta pueda ser la causa de que determinen los mismos efectos
sobre los brotes de melocotonero los áfidos Appelia persicae, Hya-
Zopterta y Myxodes. También puede ocasionar la castración para-sitaria
por aborto de los órganos sexuales de la flor, volviendo sus
órganos a su estructura total o parcial de hojas.
TRANSMISIÓDNE AGENTES DE PUDRICI~N.
Agentes de pudriciones y virus se transmiten por áfidos. EI
agente de pudrición amarilla de la cebolla se transmite por más a
de cincuenta virus diferentes, Sweiyj Smlt;h_; A: M; y Hamilton;
utilizando alimentos coloreados con un producto radiactivo, han O
n
demostrado la emigración de estas sustancias a las glándulas =m
O
salivares. Hay casos de transmisión de virus mecánica y otros E
E
2 biológicamente; así el virus que produce el arrollamiento de las E
hojas de la patata se transmite biológicamente por Ngzo&s
persicae, y mecánicamente por otras especies de áfidos, siendo más 3
eficaces como transmisoras las que pican al floema. -
0m
También son transmisores de bacterias el Cinaria taeniata E
(Koch.) o Cinara pinihabitans (Mord.), que transmiten la bacteria O
productora de tumores bacterianos en Pinta halepe&.
A continuación doy la clave para la distinción de las familias: 3
O
1 (2) Vena radial de las alas anteriores completamente unida
al pterostigma, media sencilla (fig. 3, a). Antenas de tres
artejos en todas las generaciones, que son siempre ovi-paras
y presentan pico en el estado adulto, excepto la
anfigónica. Troductorm & Mas e.n i3ePo80 hú-rizontales
.. . . . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . . . . . . . . Fam. Phylloxeridae.
2 (1) Vena radial distinta (fig. 3, b), saliendo de la porción
anterior o en mitad posterior del pterostigrna. Antenas
de tres a seis artejos.
260 ANUARIO DE ESTUDIOS ATLANTICOS
"APHIDOIDEA" DE LAS ISLAS CANABIAS 25
3 (4,5) Hembras de las generaciones partenogenéticas y sexua-das
o anfigónicas oviparas. Fundadora áptera, con an-tena
de tres artejos. Con pico en el estado adulto. Ante-nas
de cinco artejos en la forma alada; alas en reposo en
forma de techo ........................... Fam. Adelgidae.
Flg. 3.-a) ala de Philloxera; m) nerviación media; b) ala de Aphidae; r) nervia-ción
radial; c) antena de Eriosomatidae; d) antena de Callaphidae; e) antena de
Aphidae.
4 (5,3) Formas de la generación anfigónica carentes de pico.
Adultos de las restantes formas sin sifones o muy redu-cidos.
Antenas con sensorios secundarios anulif ormes y
transversos (fig. 3, c) ; los dos sensorios primarios, circu-lares;
a veces, con los sensorios secundarios circulares
transversos, pero de limites irregulares; en el sexto ar-
tejo, el flagelo es grueso y rudimentario ..................
............................................ Fam. Eriosomatidae.
5 (3,4) Formas de la generación anfigónica con pico.
26 JUAN G6NIEZ-MENOR ORTEGA
6 (7) Pico de cinco artejos. Cuerpo elíptico, antenas y sifones
provistos de numerosos pelos fuertes. Cabeza sin tu-bérculos
fronto-laterales, con sutura epicraneal en el
adulto alado. Antenas de seis (fig. 4, a), con el flagelo
del sexto corto (fig. 4, b). Sifones cónicos (fig. 4, c), an-chos,
provistos de numerosos pelos. Cauda y lámina anal
redondeadas ,(fig. 4, d), muy pelosas, aquélla de aparien-
Wg. 4 . 4 ) antena de Lachnidae; b) detalle del VI artejo de la misina: d! cauda
y lámina anal; e) sifón también de Lachnidae.
cia semilunar y con el ápice hacia el dorso. Radial casi
recta, la nervadura media apenas señalada, sin tráquea
en ella ...... . . . ... . . . .... .. .. . . . . . ... . . . ... Fam. Lachnih.
7 (6) Pico & C = & ~Q -_rtedMs;~ ~ ~ ntie&ne- cj i ~ c ~ , s i f ~ ~ e s
son largos o cortos, pero sin pelos o muy escasos. Ca-beza
sin sutura epicraneal en el adulto.
8 (9) Radio saliendo de la porción media del estigma. Antenas
de cuatro a seis artejos, con sensorios anuliformes o
circulurs. C&em t ~ ~ i daw! p rctSrzx e= !z fcrmo. alada,
con lóbulos poco desarrollados en el protórax. Sensorios
primarios sin coronas de pelos en los AnoecZms, presen-tándolos
en las otras tribus. Cabeza unida por completo
ANUARIO DE ESTUDIOS ATLANTICOS
CUADRO SUVOPTICO DE LOS "APHIDOIDEA DE LAS ISLAS CANAFUALS WNERIFE) - --
Tipo r l w e Superoiden 01-den Superfanillla FarniH~i Subiam~lia Ti lbu Género Subgénero Especle Hsbltat -- Lricalldsd
Nogal Agua Mansa
Manzano Agua musa
( a ) CAWITIIDIDAE.. . CaUaphidinae ......................................C hromaphis . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Chromaphw juglandioka..
b) EEIOSOMATIDA.E. Eriosomatiinae . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Eriosoma . . . . . . . . . . . . . . . 1 Aphla ianigera . . . .
( Hyalopterus .............................. j .. H'azopterus Or*ndin's ...
1 Rhopaiosiphonini . . (
Aphidinae
...................... ~ -
~opalosiphon Rhopalosiphon aeae
[ Aphidini
Toxoptera . . . . . . . . .
nphls ........... imalie ....... !, .
Pdedoraün. . Medoralis ........
Aphrs aurontiae
Aphrp fabae
~ p h pbom t
Almendro La Perdorna (La Orotuva).
Malz La Omtava y Realdos.
NaranJo La Orotava.
Hinojo La Perdoma
Peral . La Perdoma
Boup11Wea LB Orotava
Parletaria arborea La Laguna
Nerlum oleandor Puerto de la CNZ
[ Lupinua Tacoronte ~ e n m t a Las Cadadasi
Almendm La Orotava
"APHIDOIDEA" DE LAS ISLAS CANARIAS 27
al protórax, formando un escudo en la forma áptera ......
................................................ Fam. Theluxidae.
Radio naciendo de la porción anterior del estigma. An-tenas
en el adulto de seis artejos, siempre con sensorios
circulares secundarios (fig. 3, a y b). Cabeza separada
por un cuello del resto del cuerpo, sin formar escudo con
el pronoto en los ápteros.
Insectos provistos de pelos largos, patentes, esparcidos,
y finos en las antenas y el cuerpo. Sensorios y primarios
de las antenas sin espinas. Ojo sin tubérculo posterior.
Sin glándulas gruesas productoras de cera. Sifones
truncados. Lámina anal entera, cauda rara vez mazuda.
Tibias posteriores en la larva, con pelos móviles, sin es-yni>
unrowo .................................. m-m /ILni+nmLnmiJnn L. aui. u r b w u & u y r b u r uw-.
Insectos con el cuerpo sin pelos largos; cuando más,
pelos cortos y ñnos apenas visibles. Sensorios primarios
en general con corona espinosa o con otros pequeños
(sensorios satélites).
Cauda mazuda y lámina anal bilobada o escotada. Sifo-nes
tronco-cónicos o sin ellos. Tibias con espolones. An-tenas
con los sensorios primarios provistos de una co-rona
fina de pelillos (excepto en el género Bornerina) y
con pelos finos esparcidos (fig. 3, d) . Fam. CaHaphidue.
Cauda alargada, rara vez mazuda, pero nunca la lámina
anal se presenta bilobada. Sifones rara vez cortos ; cuan-do
lo son, entonces cilíndricos, generalmente largos y ci-líndricos.
Sensorios primarios de las antenas con corona
de espinas o con sensorios satélites. Patas provistas de
pelos y espinas ............................. Fam. Aphiidae.
De entre todas éstas hemos encontrado en Canarias ejemplare's
de las siguientes familias y subfamilias:
Caracteres.-Aphidoidea de cuerpo elíptico alargado, con pelos
finos, escasos o sin ellos. Antenas con el flagelo corto o largo; de
Núm. 6 (1960) 263
28 JUAN G6MEZ-MENOR ORTEGA
seis artejos en el adulto y de tres a cinco en la ninfa. En el alado,
con sensorios circulares o ligeramente ovales trans.rersos; senso-rios
primarios en el alado siempre, y en la mayoria de los ápteros
(excepto en el gén. Bornerina) con corona de cilios. Gonaquetas
casi siempre sobre dos tubérculos que están muy próximos, a veces
sobre un pequeño tubérculo medio (Drepanosiphon) . Pico de cuatro
artejos. Con o sin tubérculos oculares. Cauda mazuda. Lámina anal
bilobada o escotada. Tibias de los tres pares de patas, y con frecuen-cia
los tarsos, con finos espolones entre los pelos. Con o sin glán-dulas
de cera. Las hembras oviparas poseen, casi siempre ventral a
los sifones, unas gruesas glándulas de cera, con cuya secreción
pulverulenta revisten los huevos. (Faltan en Drepanosiphon.) a
Huevos de invierno desnudos. N
Esta familia, según Borner, se divide en cuatro subfamilias, de O
las que damos claves originales para su separación. n-- m
O
Claves de subfamQias.
Sin tubérculos posteriores en los ojos compuestos. Insec-tos
muy alargados, casi triple de largos que anchos, con los
fémures engrosados ............. Subfam. Saltwaphidinae.
Ojos compuestos provistos de sendos tubérculos oculares
posteriores. Cuerpo más bien ancho, nunca triple de largo
que ancho. Fémures posteriores poco engrosados.
Sifones reducidos a meros anillos o largos e inflados. Sen-sorios
secundarios de las antenas, circulares u ovales. Oví-paras
con glándulas secretoras de cera (faltan en el gé-nero
Drepanosiphon) .............. Subfam. PhyZaphidinae.
Sifones cortos, cónicos.
Lámina anal escotada o dividida, pero en este último caso
lo es poco, de forma que los lóbulos son cortos. Fémures
....a-,.- :.-.-,.m ..,....-..l..- -...-d.. 4?..--4.,.-*..a-* ---..,l..
CLL~LCLI UL c.3 IIUL ulalcis. uauua IUCL LCUIUILC u ~ a ~ u u..a.. ........
........................................... Subf am. CaZlaphidinae.
Lámina anal profundamente dividida, en la que sus dos par-tes
son lóbulos alargados. Fémures anteriores engrosados.
Cauda fuertemente mazuda .... Subfam. Thericaphidinae.
ANUARIO DE ESTUDIOS ATLANTICOS
Subfam. Caliaphidinae.-12 (5
Gén. CHROWHIS Walk. (1870).
Walker : "The Zoologist", vol. 5, p. 2001 (1870).
Cabeza sin tubérculos fronto-laterales. Antena de seis artejos,
más cortas que el cuerpo, con pelos diminutos escasos, con el flagelo
más corto que la porción basal. Sifones tronco-cónicos con algún
pelo mazudo. Los pelos del cuerpo, de la hembra ovipara y ninfas,
mazudos y poco largos. Lámina anal débilmente escotada en el ápice.
Cauda de ápice circular, con pelos finamente mazudos.
Tipo del género : Lachnus juglandicola Kalt.
-T.-a. -6nir.a especie^^ recogida por mi
CHROMAPHISJ UGLANDICOLA O(;tlt-) m
Sinonimia : Lachnus - juglandicoZa Ealt. "Mon. Pflan.", 151,4
(1843).
ap$k ~ ~ g l ~ & ~ , ~ "lAan n. Sc." , u9, T1, T Iy, A1v5, .v2-A- 2
(1848).
Crornaphis juglcvndicoZa. Walk.. "Zool.", V, Se, 2, 200 (1870).
~ R ALADAA VIV~PA RA (fig. 5, núm. 1).- De color amarillo ver-doso,
o amarillo limón al pálido, con los lóbulos torácicos pardo-anaranjados.
Antenas (fig. 5, núm. 3) del mismo color que el cuer-po,
pero algo más cortas que éste, con los ápices de los artejos 3.",
4.", 5.0 y 6.0 pardos, siendo los dos primeros más anchos que los
restantes y aproximadamente de la misma longitud, provistos de
escasos pelos finos y cortos; tercero, el mb iai7g0 de iüliüs, pri-uvist~
de seis a nueve sensilas elíptico-transversas grandes, regularmente
espaciadas, estando el artejo ligeramente ensanchado al nivel de
cada una, de casi doble de longitud que el siguiente; cuarto, lige-ramente
más largo que el quinto; este Último con la sensila prirna-ria
subapicai grande; sexto, de dos tercios de longitud que el pre-cedente,
provisto de la sensila primaria y cinco a seis satélites, de
los cuales dos están en la base del flagelo.
F'rente convexa provista de algunos pelos larguillos dispuestos
Núm. 6 (1960) 265
30 JUAN G~MEz-MENOR ORTEGA
simétricaniente y finamente mazudos. Ojos semiesféricos, algo sa-lientes,
con el tubérculo postero-lateral marcado.
Rostro más bien corto, que apenas alcanza el nivel de las coxa
Fig. 5.4ronzaphis jugzandicola (Kalt.): 1) hembra adulta alada; A) lado dorsal;
B) lado ventral; 2) hámulas o ganchos del ala posterior; 3) antena en detalle de la
hembra dada; 4) sifón de la hembra; 5) cauda v lámina anal.
266 ANUARiO DE ESTUDIOS ATLANTICOS
"APHIDOIDEA" DE LAS ISLAS CANARIAS 31
.del segundo par de patas, con los dos últimos artejos en conjunto
de perímetro t&ingular, de algo mayor longitud que el doble del
-precedente en su menor longitud y provisto de dos series, cada una,
-de dos pares de pelos.
Patas de conformación normal, amarillas, con una mancha ne-gra
apical en los fémures posteriores; tarso ahumado.
~ l a kan teriores hialinas; con la nervadura parda, presentando
,en la base y en el ápice de cada nervio una mancha oscura. Pteros-tigrna
más bien corto y grueso, con la vena R fuertemente curvada,
,quedando un espacio entre el ápice de la R y el del pterostigma
algo menor que la longitud de éste. M. bifurcada dos veces, con el
-tronco común basa1 igual o poco más corto que M, y el apical
algo mayor que cada una. de sias ramas, Pnsterinr con frénulo de.
tres ganchos (fig. 5, núm. 2).
Tórax con los lóbulos mesotorácicos y pectus ahumados.
Abdomen algo más largo que la cabeza y el tórax reunidos, de
.color amarillo verdoso, con la dermis dorsal y ventral provista
-de filas de pelos larguillos y finos. Sifones mamilares truncados con
.algunos pero escasos pelos largos y íinos, algo mazudos en la base;
.ésta, doble de ancha que el ápice.
Lámina anal (fig. 5, núm. 5) escotada en el ápice en forma casi
-de dos lóbulos, pero no independientes, provista de cerdas largas.
Protórax casi cuadrado, algo más ancho que largo, sin tubérculos
laterales.
Mesotórax y pectus ahumados.
Patas de constitución normal.
Cauda con el extremo dilatado casi circular y que lleva cerdas
rectas tanto en,el margen como en el dorso.
Dimensiones: long., 1,7 a 1,8 v.id;. c on alas, 2,5 mm.;
anch., 0,4 a 0,5 mm.
Habitat: en ia.cara inferior de iaa hojas y ramitas cie JugiarS
regia (nogal).
Localidad : Agua Mansa (Tenerife) .
Caracteres. - Cabeza sin tubérculos fronto-laterales, vértex
convexo. Fundatriz, con el área ocular de tres onmatidias, y en la
forma áptera estival, ojos más o menos rudimentarios, compues-tos,
bien desarrollados en la alada. Rostro de cuatro artejos, el
5." no distinguible. Sin rostro en las generaciones anfigónicas, las
cuales son de pequeño tamaño. Glándulas ciríparas compuestas o
simples sobre la cabeza y el resto del cuerpo. Antenas de seis arte-j
o ~ a, veces de cinco, con los sensorios primarios circulares y los
secundarios generalmente anuliformes transversos; en algunas ge-neraciones
son circulares, pero de límites indecisos, sin sensorios 2
secundarios en el macho. Flagelo más corto que la porción basa1
U (excepto en el gén. Mordwilkoja). En la anfigónica, sin sensoriosG 8-
en las tibias posteriores. Ovíparas que dejan un solo huevo. Pelos
-
0"
poco patentes. Alas anteriores con la nerviación radial naciendo I
f
en la parte media posterior del pterostigma o en su base. Media -
simple o sólo bifurcada una vez. Sifones rudimentarios o nulos.
Cauda poco patente semilunar. Viven formando agallas, pseudo- 2
-B
agallas en raíces de plantas o en tallos al aire libre cubiertas por =
0
secreción cérea de aspecto algodonoso. A veces en raíces de gra- U
míneas y acompañadas de hormigas. d
Se agrupan en tres subfamilias, que son: Er~somatinae,P em- 8
1
phiginae y Fordinae. De la primera es de la que hemos recogido c
una especie. 2
8
D -
Subfam. Eriosomatinae.4 (1
Se caracterizan sus especies por tener glándulas ciríparas com-puestas
y los sifones marniliformes, cortos.
Gén. ERIOSOMLeAac h.
Leach, "a'rans. Hort. Soc.", London, 111, p. 60 (1818).
Cabeza con el margen anterior convexo. Antenas de seis arte-jos
en la forma alada; el tercero, cuarto y quinto con sensorios se-
268 ANUARIO DE ESTUDIOS ATLANTICOS
cundarios transversos, y el sexto con el flagelo muy corto. Alas an-teriores
con la media bifurcada una vez; las posteriores con dos
venas oblicuas. Sifones en forma de poro. Glándulas ciríparas dis-puestas
en anillo y colocadas en dos series dorsales y dos margí-nales.
Forma sexuada adulta carente de aparato bucal.
Tipo del género : Aphk lanigera Hausm.
Sinonimia: Aphis lanigerurn Hausmam, "Mag. f. Inst.", v. Km1
Illiger, 1, p. 426-455 (1802).
Coccus mdi Bingley (1803).
Eriosoma mdi Leach.
Schixoneura lanigerum Hartig (1841) .
Schixoneura ulmi Woodworth (1913).
Pemphigus pyri Fitch (1856).
Eriosoma pyri Riley.
HEMBRA ÁPTERA.-Piriforme, de color variable de púrpura os-curo
a pardo rojizo claro a pardo.
Cabeza, antenas y patas negras, cubiertas con secreción de cera
en forma de polvo, sobre todo en el abdomen, en donde a veces cubre
a varios individuos próximos.
Al microscopio presenta: antena de seis artejos, los dos pri-meros
más anchos que los restantes, el primero algo más corto
que el segundo, siendo menor la longitud de la antena, y presenta
muy escasos pelos larguillos; segundo, poco más estrecho en su
base, su borde externo anterior casi de doble longitud que el del
primero, el posterior externo es más corto, siendo el extremo ante-rior
inclinado, tiene cerca del ápice algunos pelos largos, teniendo
algunos menos más pequeños cerca de la base; tercero, de mayor
longitud que los que le siguen en conjunto, en la superficie lleva
algunos pelos finos y largos, pero más cortos que los del segundo
artejo, dispuestos en tres niveles algo irregulares, uno cerca del
ápice, otro hacia su mitad, y el inferior cerca de la base; además
tiene, dispuestos transversales, dientecillos cortos en grupos que
a veces están algo inclinados. De los tres artejos siguientes, el más
Núm. 6 (1960) 269
34 JUAN G~MEZ-MENOR ORTEGA
pequeño es el cuarto, cónico, con la superficie provista de los dien-tecillos
como el anterior, pero los grupos dispuestos en arco; quin-to,
poco más corto que el sexto, con un sensorio primario subapical
y algunos pelos finos; sexto, con la base dos veces más larga que
el flagelo, un sensorio primario circular ciliado y dos a tres sen-sorios
satélites y varios pelos en su extremo. Todos los artejos,
menos los dos primeros, presentan en la superficie pequeños diente-cillos
reunidos en grupos a veces arqueados y siempre más o menos
transversos. Pico pasando poco la inserción de las coxas del tercer
par de patas; el artejo anteidtimo es el más corto; el último es el
doble de longitud, pero más estrecho.
Los ojos están poco desarrollados y cada uno consta de tres a
onmatidias algo elípticas, algo alejadas entre sí y colocadas sobre N
E un área quitinosa circular. Sobre la cabeza (fig. 6: núm. 5) se obser- O
van cuatro área.; claras formadas por cinco orificios, de ellos uno n -
=m
central y los otros laterales, que forman un conjunto poligonal; O
E
son los orificios de las glándulas ciriparas y forman una fila a cada E
2
lado de la línea media. E
=
En el abdomen dichas glándidaq (fig, 6, núm, 4) forman dna 2
filas longitudinales a cada lado de la línea media, y éstas son de -- 0 más orificios y poligonales alargadas. m
E
En las patas el artejo basa1 del tarso es pequeño. Las uñas, O
fuertes en su base, son casi tan anchas como en el ápice del artejo n
tarsal, estrechándose gradualmente hacia el extremo y algo cur- E a-vadas.
l
n Sifones sentados, su anillo apical se quitiniza en los lados y n
0
hacia la parte dorsal. Lámina anal y cauda redondeadas, cortas y 3
provistas de numerosos pelos de tamaño algo mayor que los si- O
L. ..a-" ."-l.-. 1-- ----,.-L..- 2 - 7 -La----
L u a u u n DUUL G KJD U I Z ~ L I ~ ~ ~ UL CUL* ~ LUUUILICLL.
Dimensiones : long., 1,7 a 1,6 mm. ; anch., 0,5 mm.
HEMBRA ALADA (de manzano) .-Alargada, de color verde a gris,
con la cabeza, antenas y patas negras. Alas transparentes, con el
-pL~ -s.r-u--As: -~--i grria-a*n - -u--m-- a- a~*o- .
Al microscopio presenta antenas de seis artejos (fig. 6, núm. l),
los dos primeros algo más anchos que los restantes, casi cilíndricos,
el primero algo más corto que el segundo, con algunos pelos finos
270 ANUARIO DE ESTUDIOS ATLANTICOS
mg. 6.-Eriosoma lanigerum Hausm.: 1) detalle de los artejos IV V y VI de la
an~ena de la hembra alada; 2) detalle del 111 artejo de la misma; 3) antena de la
hemara alada; 4) glándula cerosa abdominal; 5) idem cefálica: 6) ídem torhcica;
7) sifón visto de frente: 8) tarso posterior.
36 JUAN mMEZ-MENOR ORTEGA
y larguillos en la superficie; el tercero (fig. 6, núm. 2) es el mis
largo de todos, algo más corto que los tres siguientes reunidos,
presentando de 12 a 24 sensorios transversos anulares, general-mente
incompletos, no observándose entre ellos sensorios circu-lares
que tiendan a complementarlos; cuarto, casi de igual longi-tud
al siguiente; aunque parece que no es constante, presenta un
número variable de sensorios, de tres a siete, que son anulares,
incompletos y transversos, con algunos pelos pequeños finos situa-dos
entre los extremos de los sensorios; quinto, con tres a seis
sensorios de los antedichos y uno pequeño circular subapical.
Sexto artejo más corto que el anterior, con la base doble de larga
que el flagelo y en ella un número de sensorios anulares transver-sos
que varía de cero a tres, generalmente dos, y además dispues- a
N
tos en filas circulares transversas de cuatro a cinco líneas de pe- E
queños dientecillos regularmente espaciados, un sensorio casi O
n circular en la base delbflagelo y dos o tres sensorios satélites ci-
-
m
O
E liados; también presenta algunos pelos algo largos agrupados en E
2
el ápice del flagelo. -E
Ojos bien desarrollados; el área anterior con numerosas onma-tidias
circulares, poco espaciadas; el área posterior presenta tres 2 -
onmatidias mayores y más espaciadas. Los tres ocelos son mayores. -
0
m
E
Patas con el artejo basa1 del tarso pequeño, de un cuarto de la O
longitud que el apical, éste con filas de dientecillos pequeños colo-cados
transversalmente. Uñas normales, enconadas en el ápice, n
-E
y en su base lleva cada una un pelo análogo a las digitulas de los a
2
cóccidos; sobre el tarso (fig. 6, núm. 8) lleva un solo pelo, pero no n
mazudo, y poco largo. Sifones sentados (fig. 6, núm. 7) ; alrededor n
de la base hay una corona de pelos largos arqueados; el orificio, 3
O
salvo en la porción ventral o anterior, que lo es poco; en el resto
del contorno está engrosado. Lateralmente el abdomen presenta
tubérculos en los que están los estigmas.
Cauda y lámina anal redondeadas, con algunos pelos largos.
Dimensiones: long., 2 mm.; con alas, 3 mm.
Habi tat : sobre Ma1u.s communk.
Localidad : Agua Mansa (Tenerife) .
272 ANUARIO DE ESTUDIOS ATLANTICOS
O b s ~ - r v ~ eEsn: E spaña y otros países de Europa vive uni-camente
sobre el manzano (Malus communis L.). En Norteamé-rica,
su país de origen, tiene como planta huésped principal el
Ulmus americana, emigrando al manzano y luego nuevamente al
Ulmus (Heteroecia) con holociclia. En Europa inverna en la raíz
.y cortezas del manzano. Forma agallas y deformaciones. En Suiza
y sur de Inglaterra se han observado emigraciones a Ulmus. En
España se reproduce por partenogénesis de una manera indefinida,
por formación de una raza en Europa que es anolocíclica, descu-bierta
por pllarchal.
Caracteres.-Antenas de longitud media a muy largas. Flagelo
algunas veces corto o de poca longitud, pero casi siempre mucho
más largo que la porción basal. Sensorios primarios con corona
espinosa en su base o con una cubierta en roseta (en la mitad de la
cúpula sensorial, a veces (Neopterocomma) desnudos). Cuer-po lam-piño
o con pelos pequeños; a veces pelos largos, pero esparcidos y
fuertes, también. mazudos. Generación anfigónica con pico.
FORMMAE RA.-Con cabeza sin unir, no formando escudo con
el protórax. Alas anteriores con radial patente que nace en la parte
anterior del pterostigma. Media simple, bifurcada a trifurcada.
Sifones cortos o largos, cilíndricos, lampiños. Cauda en general
mazuda. Lámina anal entera. Cauda alargada, rara vez en forma
de maza ancha, siempre la maza más larga que ancha, a veces la
cauda corta y ancha (Anuraphidinae). Tibias provistas de pelos
y espinas.
Comprende ,cuatro subf arni1kz.s.
1 (6) Cabeza sin tubérculos fronto-laterales.
2 (3) Antenas y cuerpo con pelos largos esparcidos. Sifones ya
c~r tes !uqr~se icf,ad=s. Cs~day !&mina.a na.1 se-milunares
. . . . . . . . . . . . . . . . . . Subfam. Pterocommininae Mordnr.
3 (2) Antenas y cuerpo con pelos muy finos, escasos y poco vi-sibles.
Cauda y lámina anal cortas.
Núm. 6 (1960)
Cauda de la mitad de longitud que su anchura de ápice re-dondeado
y que apenas sobrepasa a la lámina anal. Sifones
cortos. Estigmas abdominales 1." y 2." (excepto en la fun-datriz)
aproximados más o menos. E1 primer tubércuIo Ia-teral
del abdomen, cuando existe, está al nivel del tercer
estigma; el segundo tubérculo, entre el nivel del segundo y
tercer estigma ............ Subfam. Anuraphidinae Mordw.
'Cauda más larga que ancha, digitiforme o terminada en
maza alargada, a veces triangular; 1.0 y 2.0 estigma abdo-minal
muy próximos. En general con los siete tubérculos
laterales en el abdomen ...... Subfam. Aphsinae Mordw.
Cabeza con tubérculos fronto-laterales.
Tubérculos fronto-laterales de superficie rugosa, más o a
menos convergentes hacia el ápice, más cortcs en general
que su base. Cauda menos de tres veces de larga que ancha O
n
en la base. Antenas más cortas o de la misma longitud que =m
O
E el cuerpo, fuertes. Sifones no muy largos ..................... E
2
........................................ Subfam. Myxinae Mordw. E
Tubérculos fronto-laterales de superficie lisa, francamente
divergentes, más largos que la base. Antenas finas y más
- largas que el cuerpo. Sifones muy largos y finos. Cauda 0m
E más de tres veces de larga que ancha en su base ............ O ..................................... Subfam. Dactynotbae C. B.
n
E
a
Subfam. AphicPinae.-13 (5 n
5 Existen dos tribus, los Rhopalosiphonini y Aphidini, distin- O
mdánrlnnn nnn Isa aiu~rinntnn onrnfitnríatinna
6U'bUUUUG FUI ILIiU Ulb L(IUllib\r*l UWA U V b U A S Y I A V I I U
Las especies pertenecientes a la primera tienen el primer tu-bérculo
lateral del abdomen por encima del nivel de las inserciones
de los estigmas primero y segundo; séptimo tubérculo de posiciin
variable, ya detrás del estigma correspondiente, a la misma altura
0 alga dursal. Los r rAlJIuML "L-0 %- - nmLn " t'n;r . nl +-.l4rin-rln vmsnninnl A n l p G o G L & , . a u .zL , . U " b & b U L U &*LWIhAAA'..A u"-
primer segmento abdominal entre el nivel de las estigmas primero
y segundo abdominales; séptimo tubérculo muy patente, por de-trás
del estigma correspondiente.
274 ANUARIO DE ESTUDIOS ATLANTICOS
"APHIDOIDEA" DE LAS ISLAS CANARIAS
1." Tribu : RHOPALOSIPHONINI.
Solamente cito los dos géneros que he podido ver, no dando cla-ves,
pues por la descripción de los géneros se pueden distinguir fá-cilmente.
Son Hyaloptorus y RhopalosipMm.
Gén. HYALOPTERUKSo ch.
Koch, Mm. P f h . Aphid., p. 16 (1854).
Cabeza con la frente saliente en el lado basa1 interno de las
antenas, quedando al nivel del ocelo medio. Antenas con sensorios
secundarios subcirculares, los primarios con coronas de cilios.
Pronoto con tubérculo lateral. Alas con las nerviaciones M, y M,
más cortas que el tronco común. Abdomen con tubérculos laterales
sobre los segmentos primero al séptimo, ambos inclusive. Sifones
pequeños, algo estrechados en la base.
Tipo del género: Aphis arundZnis Fab.
Sinonimia :
Aphis pruni Fab., "Sp. Ins.", 11, 385, 12 (1781).
Aphk arundink Fab.
Hyahpterus pruni Koch, Die Pianx., p. 21 (1854).
Hyabpterzcs arundinis Koch.
HEMBRAAL ADA VIV~PARA.-& color verde botella a verde claro,
ggn 12 gzkzg, h s ~ d s& ! rnwr-n--n.n, tn xr rn~cmtíwa-z -----A --' mi= ~~~~~~~n s i ~ i a-- --a----, --
como las antenas, excepto la base del tercer artejo, que es más
clara. Abdomen por entero y patas verdes; tarsos negruzcos.
Cabeza con los ocelos muy salientes; frente convexa, con una
línea de pelos finos a cada lado y próxima al eje longitudinal desde la
fre=te per e! -&terz,' yUe se a!ejandG cps swfientw de
color rojo oscuro, casi negro, con el tubérculo posterior bien marca-do.
Antenas de seis artejos (fig. 7, núm. 2), con los dos primeros más
anchos; el primero algo más que el segundo, poco más largo y con un
Núm. 6 (1960) 275
tubérculo ancho, obtuso, ligeramente por encima de la mitad, en la
parte interna, más. largo en su parte interna que por la externa;
segundo, tronco-cónico a cilíndrico, con su parte más ancha sub-apical
y lleva sobre ella pelos finos y cortos, espaciados, formando
una corona; tercero, casi doble de largo que el siguiente, algo más
Fig. 7.-Hyaloptems pmni Geoffr.: 1) antena de la kiernbra áptera; 2) antena de la
hembra alada y detalle de los artejos 111 a VI; 3) tarso posterior: 4) sifón de la
hemtbra alada; 5) lámina anal y cauda de la misma.
claro en la base, con 19 a 32 sensorios circulares secundarios, dis-puestos
irregularmente; cuarto, apenas más largo que el quinto y
con cuatro a nueve sensorios; quinto, de la mitad de longitud que
el tercero, con el sensorio primario subapical grande y de cero a
das más sensmios u e c ~ d a r k as,i tU&doa e a i siempre en !a mitad
basal; sexto, mayor que el tercero, con la porción basal un poco
más larga que la mitad del quinto ; flagelo cerca de cinco veces más
largo que la base, con un sensorio primario grande y seis satélites.
276 'lNUAR1O DE ESTUDIOS ATLANTICOS
Rostro corto que no llega a las coxas del segundo par de patas,
con el ápice ancho y los dos últimos artejos de la misma longitud,
siendo el anteúltimo más ancho.
Pronoto con un tubérculo lateral situado un poco debajo de la
mitad del lado; la banda transversal oscura, casi negra. Resto del
pronoto, negro.
Patas de longitud y forma normal, con la tibia ensanchada en
el ápice, casi doble de ancha que el resto, y toda ella con numerosos
pelos finos, pero fuertes. Primer artejo del tarso (fig. 7, núm. 3)
aproximadamente de 1/4 de la longitud que el segundo, éste de su-perficie
imbricada y con el borde ventral provisto de cuatro pelos
finos. Uñas casi rectas, oscuras hasta un poco por encima de la
mitad y curvadas en el mismo ápice.
Alas anteriores con la media bifurcada dos veces, estando la
M, la más próxima al ápice, y el trazo común de la segunda furca
más largo que ella. Radial uniformemente curvada desde la base.
Pterostigma y nervadura verde; alas hialinas.
Hámula de las posteriores con dos ganchos.
Cauda tres veces -por lo menos de larga que de ancha en la base,
con los lados rectos y convergentes o algo mazuda, pero en el sub-ápice
se estrecha al nivel del iiltimo par de pelos y lleva tres pelos
a cada lado y uno a dos dorsales en el ápice. Tanto la lámina anal
(fig. 7, núm. 5) como la cauda están cubiertas de espinas h a s for-mando
grupitos transversos.
Abdomen de color verde manzana a verde sucio, con los tu-bérculos
estigmáticos poco salientes. Sifones (fig. 7, núm. 4) más
cortos que la cauda, estrechos en la base, ensanchándose gradual-mente,
y alcanzan su máxima anchura en la porción subapical en el
ladn intPrnn, y se pcltrechm en e! +ice, sin flángdu.
Lámina anal con el borde posterior semicircular y provista a
cada lado de cuatro a cinco pelos langos y curvados.
Dimensiones : Long. del cuerpo, 1,5 mm. ; id. con alas, 3 mm. ;
anch., 0,28 rnm.
HEMBROAV ÍPAÁRmAm A.-De color verde oscuro, con la cabeza
y protórax oscuro, así como también las coxas. Cubierta de secre-ción
de cera en forma de polvo que le da apariencia blanquecina.
Núm. 6 (1960,) 277
42 JUAN GÚME Z - ~NOORRT EGA
Cabeza con la frente casi recta y un poco avanzada en la base
de las antenas, quedando entre ambas cóncava; tanto en la proxi-midad
de las antenas como por el vértice lleva algunos pelos finos
arqueados. Ojos negros, con los tubérculos posteriores rojos bien
patentes.
Antenas negruzcas (fig. 7, núm. l), con el tercer y cuarto artejo
pálidos, más cortas que el cuerpo, de seis artejos; con los dos ar-tejos
basales más anchos que los restantes, negruzcos, el primero
más ancho, asimétrico, con algunos pelos subapicales y algunos
otros pelos próximos a la base; en conjunto está formando un án-gulo
abierto hacia el lado externo; segundo, cilíndrico, con algunos
pelos situados en la mitad; tercero, pálido, casi tan largo como los
dos siguientes reunidos, y como los restantes con la superficie esca- a
N
mosa; cuarto, ligeramente más largo que el quinto, oscureciéndose E
gradualmente hacia el ápice y con el sensorio primario subapical; "
n sexto, algo mayor que el tercero, con la porción basal de Pa misma
-
m
O
E
longitud que el cuarto, flagelo casi doble que la porción basal, ésta E
2
con el sensorio primario y seis satélites a un lado. -E
Rostro que apenas alcanza las coxas del tercer par de patas. -
Protórax estrecho, formando un cuello con el noto casi del mis- --
mo tono que el resto y con un tubérculo pequeño pero patente a cada 0
m
E
lado y algunos pelos. El resto del tórax forma una sola masa con e1 O
abdomen.
n
Patas de constitución normal, pero más bien cortas y fuertes, -E
con el artejo basal del tarso de la mitad de longitud que el apical o a
2
algo menor, con dos pelos larguitos y finos apicales; el segundo, de n
n
superficie escamosa, con dos pares de pelos finos. Uñas negras en
3 su mitad basal, con el ápice claro y ligeramente curvado. O
¿a tika pos~er-iores6 01, largj,,s m & anchau; e= h a ,
estando poco curvadas, y llevan en la superficie sensorios circu-lares
pequeños, bien visibles, con grandes aumentos y en número
de ocho a diez.
Abdomen globoso aplanado, con los tubérculos estigmáticos
poco marcacios.
Sifones cortos, negros, de la mitad de longitud que la eauda, de
forma casi cilíndrica, poco inás anchos en la base y con el borde
externo ligeramente convexo, ápice recto con flángula pco visible.
278 ANUARIO DE ESTUDIOS ATLANTICOS
Lámina anal negra, con el borde posterior arqueado y provista
de tres pelos a cada lado. Cauda negra, ancha en la base, con los
lados convergentes y una diminuta maza, llevando cuatro pelos a
cada lado. La superficie de ambas piezas lleva numerosas espinitas
.dispuestas formando líneas transversas.
Dimensiones.-Cauda: long., 0,12 mm.; anch., 0,076 mm. Lá-mina
anal: long., 0,076 mm.; anch., 0,218 m.; long. del cuerpo,
:1,4 a ñ,6 mm.; anch., 0,9 a 0,8 mm.
HEMBRÁAPT EBA ~MPARA.-Dc~o lor verde, con la cabeza y el a
protórax oscuros. Sifones, cauda y lámina anal negruzcos. Cuerpo
alargado, con lados paralelos.
Cabeza con la frente recta, un poco levantada al nivel de la
-inxrciáE de Iw %=ten=, c c a~l g m~ sp& r, p y ~ e ñ e esu pgrcid~s31
colocados simétricamente. Ojos negros con el tubérculo posterior
.apenas marcado.
Antenas de seis artejos, de la mitad de longitud que el cuerpo,
con los dos artejos basales, porción apical del quinto y el sexto ne-gros;
los dos primeros más anchos que los restantes; el basal es
más ancho y algo más largo que el segundo, con algunos pelos
-finos subapicales y algo asimétrico; el segundo cilíndrico, con al-
.gunos pelos finos dispuestos en forma de corona, colocados en su
parte media; tercero, un quinto m& largo que el siguiente, y como
:los que le siguen, de superficie escarnosa, con algunos pelos finos;
cuarto, apenas más largo que el quinto, también con algunos plos
finos; quinto, de m tercio más largo que la porción basal del sexto,
con el sensorio primario subapical y el extremo negro; sexto, con
la porción basal de un tercio de la longitud del flagelo, con el sen-sorio
primario y cinco a seis satélites a un lado.
Rostro que apenas alcanza las coxa del tercer par de patas.
Protórax más estrecho, con un tubérculo lateral patente; los
otros segmentos 'están formando un conjunto con el abdomen.
Patas de constitución normal, con el artejo bmal del tarso de
un tercio de la longitud del segundo. Uñas con algo más de la mitad
.negra, en el ápice claro y poco curvado.
Abdomen alargado, con los lados paralelos, los tubérculos la-
-terales negros, pero apenas marcados. El color, verde uniforme:
44 JUAN G6MEZ-MENOR ORTEGA
Sifones negros, más cortos que la cauda y con la flángula poco
marcada, algo inñados cerca de la base y de superficie escamoso-dentada.
Cauda doble de larga que ancha; en su base, doble de ancha
que en el ápice, y sus lados en la base convergentes, luego son pa-ralelos
hasta casi el ápice, siendo éste redondeado; lleva lateral-mente
tres pares de pelos.
Lámina anal corta, de algo menos que la mitad de la cauda, con
el .borde posterior redondeado y provisto de pares de pelos arquea-
Cos marginales. Lámina anal y cauda negras y provistas de espinas
finas.
Dimensiones: Long., 2 i/4 a 2,5 mm.; anch., 1 a 1,2 mm.
a
N
MACHO ALADO.-De color verde, con la cabeza, tórax, antenas,
patas, sifones, cauda y lámina anal ahumados, casi negros. O n Cabeza con la frente ligeramente convexa. Ojos hemisféricos, -
m
O
poco salientes, con el tubérculo posterior poco marcado. E
2 Rostro corto y grueso, cuyo ápice está situado entre las inser- -E
cienes del primer y segundo par de patas; el artejo apical tiene
contorno triangular, algo poco más largo que su anchura en la 2 -
base, de lados curvos y con el ápice redondeado, aproximadamente -
0
m
de la misma longitud que el precedente, aunque más estrecho.
O
Antenas de seis artejos (fig. 8, A) ; su ápice llega al nivel de la
inserción de los sifones, es decir más cortas que el cuerpo, finas; n
-E
con los dos primeros artejos casi iguales, el primero algo más corto a
y más ancho; tercero, casi de doble longitud que el siguiente, pro- 2
n
visto de 46 a 48 sensorios circulares secundarios; cuarto, poco más n
corto que el siguiente, con 19 a 21 sensorios; quinto, algo más de O3
doble en longitud que la ~ r c i ó nba sal del sexto. con 15 a 16 sen-sorios
secundarios, más el primario subapical; sexto, con la porción
basal igual a un tercio de la longitud del flagelo, con el sensorio pri-mario
y seis satélites; en conjunto, este artejo es algo más largo
que el tercero.
m'7X-n- --+m- nhAr.mari nrrmrr nn n hnmhr~ ~ l s r l a
LVL p a b a n y a w u w u l c u \ i u u I w bu ubuIVL
Alas hialinas, con la nervadura parda, como en la hembra alada,
pero el trazo común de la segunda furca es un tercio mayor que
el conjunto de M, y Mz. Posteriores con frénulo de tres ganchos.
280 ANUARIO DE ESTUDIOS ATLANTTCOS
Abdomen alargado. Sifones de la misma forma que en la hembra
alada.
Lámina anal corta, arqueada en su borde posterior y con tres
pares de cerdas largas y arqueadas, colocadas simétricamente.
Cauda (fig. 8, B) doble de larga que ancha en la base, triangular,
con el vértice posterior fino y agudo, al parecer provisto sólo de dos
pares de cerdas finas marginales y el par subapical corto.
Mg. &-A) antena del macho de Hyalopterms pruni Geoffr.;
B) cauda del mismo.
Dimensiones : Long. del cuerpo, 1,5 mm. ; id. con alas, 3,5 mm. ;
anch., 0,4 mm.
MACHO Á_PT~o,-Clnrn indica Walker, es rriás pqaeñe qce !S
hembra; es también más activo que elia, de cuerpo más estrecho y
con el tubérculo pronotal bien marcado. Cabeza de la misma an-chura
que el cuerpo, desprovista de ocelos, de color verde oscuro.
Antenas de longitud igual a los dos tercios de la del cuerpo, con los
tercer=, cuurt= y quixtG prGViütudBe &;;surjOss eeüryd~-
rios: el tercero con 9 a 14, el cuarto con 4 y el quinto con 2 ó 3, de
color verde oscuro, excepto la mitad basa1 del tercer artejo, que es
verde amarillenta. Sifones anchos y cortos, tronco-cónicos, ligera-
Núm. 6 (1960) 281
46 JUAN WEZ-MENOR ORTEGA
mente curvados, de poco menor longitud que la cauda; tanto los
sifones como la cauda son de color verde oscuro, así como también
las coxas, hasta los fémures inclusive, y el resto de la pata, excepto
la mayoría de la parte media de la tibia y los fémures anteriores,
que son amarillentos. Es posible que existan siete pares de tu-bérculos
dispuestos del primero al séptimo segmento abdominal.
El color del abdomen es verde amarillento a pardo. Armadura ge-nital
bien visible (fig. 9).
Fig. 9.-Armadura genital masculina de Hyalopterus pmni Geoffr.: A) vista por
el lado ventrai; D) vista de perfil; P) placa subgenital; G) gonópodos: E) edeago,
B) ppieza basa1 del edeago: L) lámina anal; C) cauda.
282 ANUARIO DE ESTUDIOS ATLANTICOS
"APHIDOIDEA" DE LAS ISLAS CANMIAS 47
Dimensiones: long. del cuerpo, P,3 mm.; anch., 0,4 mrn.
Habitat : sobre Amygdalus commun2s,. también vive en Ar2mü.o
donax, Phragriites, sp., Pers2ca vulgarisJ Armeniaca uulgaris,
Prunzcs communk.
Localidad : La Perdoma, La Orotava (Tenerife) .
Gén. RHOPAL~SIPHOKNoc h.
Cabeza ligeramente saliente en el lado interno de las antenas.
Pronoto provisto de tubérculos laterales, así como también exís-ten
en los segmentos abdominales segundo y séptimo. Sifones de
.forma y longitud variable.
Tipo del género: Aphk nympheae L.
Sinonimia: Aphh zeae Bonnafous, M.: Description dJune not~
-vezle espece de Pweron. "Ann. de la Soc. Ent. Fr.", pág. 657, pl. XX,
:S,fi.gs . 1:" y 2.", 1835: Aphis maidis Fitch. (1856).
HEMBRAAL ADA VIVÍPARA.-Dec olor verde oscuro, con la cabeza,
tórax, antena, patas, sifones y cauda negros.
Cabeza con la porción frontal bastante avanzada, de manera
que el ocelo queda algo saliente. Zócalos donde se insertan las an-tenas
apenas pronunciados y algo rugosos, que llevan algunos
pelos finos, así como también hay algunos pelos más, esparcidos
por el vérlex. Ojos rojo cereza a negros, con el tubérculo posterior
bien marcado.
Antenas de seis artejos (fig. 10, núm. l), con los dos primer&
-algo más anchos que los restantes; el primero algo más largo que
,el siguiente y de superficie escarnosa, más bien tuberculada y pro-visto
de algunos pelos finos; segundo, en forma de tronco de cono
h~&- i& y c ~ r i n gt r ~ p s o rm& nya--l-,n a. t..~.,-rYre-.rvn, us n,f-e-n--s cc
Núm. 6 (1960) 283
48 JUAN GÓMBZ-MFNOR ORTEGA
más corto que los dos siguientes reunidos,. y como los restantes,
de superficie escamosa, a diferencia del segundo, en el que es lisa,.
provisto de 15 a 20 sensorios circulares secundarios, algunos do-
Fig. 10.-Rhopaloaiphon zeae Bonn. : 1) antena de la hembra adulta; 2) ala anterior;
3) ganchos del ala posterior: 4) sifón; 5) cauda y lámina anal.
bles, y además escasos -pelos finos; cuarto, algo mayor que la mitad
del tercero, con dos a nueve sehorios circulares, de éstos puede
haber uno o dos más pequeños y también algunos pelos finos; quin-to,
ligeramente más corto que el precedente y con cero a dos sen--
sorios secundarios y el primero subapical; sexto, casi tan largo
284 ANUARIO DE ESTUDlOS ATLANTICOS
como el tercero, su porción basal de la mitad de longitud del fla-gelo,
con el sensorio principal y seis satélites.
Rostro que no alcanza el nivel de la inserción de las coxas de
las patas del segundo.
Protórax negro, en forma de banda estrecha alargada transver-salmente
y provisto de un tubérculo lateral cilíndrico, bien patente.
Patas de conformación normal, con la tibia de un tercio de lon-gitud
más que el fémur. Tarso con el artejo basal de un tercio de
longitud que el segundo, ambos de superficie rugosa. Uñas con su
mitad basal negra.
Alas anteriores (fig. 10, núm. 2) con la nerviación media bifur-
-cada dos veces y la rama primera bastante curvada hacia el borde
L..--.-.-.l &,.-:-....a- ..--. . .
i iuri icraq ~~siiiuiaiiu~va & 23 áN í-XT . 1i2i"YiXiuiiES 6e W!Gr
pardo. Hárnula formada por tres ganchos.
Abdomen provisto de dos pares de tubérculos laterales, uno si-tuado
en el segundo segmento y otro en el séptimo. Los estigmas
son poco salientes. Color verde grisáceo, llevando lateralmente en
cada segmento una mancha negra.
Sifones (fig. 10, núm. 4) poco más largos o tan largos como la
cauda, negros, con la base y el ápice algo estrechado, de superficie
imbricada.
Lámina anal (fig. 10, núm. 5) y cauda negras, con el borde pos-terior
redondeado, provisto a cada lado de la línea media de cuatro
a cinco pelos curvos y largos. Cauda algo larga, ancha en la base,
estrechándose algo por bajo de su mitad y termina en maza. Está
provista de dos a tres pares de pelos marginales curvos y largos.
Dimensiones: Long., 1,9 mm.; id. con alas, 3 mm.
HEMBRAÁ PTERA VIVÍPA-RA D.e color verde, con el abdomen
provisto de manchas pardas esparcidas. Cuerpo cubierto por secre-ción
cérea en forma de polvo que le hacen aparecer gris. Antenas
más pequeñas que el cuerpo, que apenas llegan a la base del abdo-men,
con los artejos pardo oscuros, siendo el tercero un poco mas
.largo que el cuarto y desprovistos de sensorios secundarios. Sifones
y caudas negros, así como también la lámina anal, y de la misma
:forma que en la hembra alada.
Núm. 6 (1960) 285
50 JUAN G6M@L-I\1ENOR ORTEGA
Dimensiones: long., 2,2 rnm. ; anch., 0,9 mm.
Habitat: sobre las espigas y hojas de m&.
Gcalidad : La Orotava y Reale jo Alto (Tenerif e) .
2." Tribu: APHIDINI.
Clave para distinguir los géneros que se citan:
Dermis dorsal por detrás de los sifones con una reticu-lación
de trabéculas finas quitinizadas claramente visibles.
Flagelo de las antenas muy largo.. . Gén. Toxopter~K och,
Dermis por detrh de los sifones sin reticulación marcada.
Cerdas o pelos de las coxas, trocánter y fémures largas y
erizadas.
Cuerpo en la forma áptera con bandas transversas negras,
esclerosadas sobre el dorso del mesotórax. Cuerpo sin cu-bierta
gruesa de polvo céreo o con pequeñas manchas de
polvo céreo colocadas segmentalmente en el abdomen. Si-fones
oscuros, doble de largos que la cauda ..................
........................... Gén. Aphis, subgén. Doralis Risso.
Dorso en la forma áptera poco esclerosado. Sifones tres
veces más largo que la cauda ....... Gén. Medoral2s C. B.
Cerdas dorsales del fémur cortas, rara vez de % de lon-gitud
que la anchura del artejo, entonces los sifones más.
cortos que la cauda.
Dorso del cuerpo en la forma áptera con manchas débil-mente
quitinizadas ........... Gén. Cerosiph Del Guercio.
Dorso del cuerpo en Ia forma áptera con manchas negras
muy quitinizadas ................ Gén. Pergandeidu Schout.
Koch, LLie PfZanx. Aphid., p. 253 (1857).
Antenas de seis artejos. Alas anteriores con el nervio medb
bifurcado una sola vez. Pronoto con tubérculos laterales, así como-
286 ANUARIO DE ESTUDIOS ' ATLANTICOS
"APHIDOIDEA" DE LAS ISLAS CANARIAS 51
también los segmentos abdominales primero y séptimo. Sifones y
cauda algo largos. Dermis por detrás de los sifones claramente
reticulado.
Tipo del género: Aphk aurantiae B. de F.
TOXOPTERAUAR ANTIAE (B. de F.).
Sinonimia: Aphis aurantii Boyer de Fonscolombe, 1841. "Ann.
Soc. Ent. France", X, p. 178.
HEMBRAAL ADA mvÍ~~~A.-Cabezay tórax negro, abdomen ahu-mado,
antenas claras. Sifones, lámina anal y cauda casi negros.
Cabeza con la frente excavada, de manera que las antenas se
insertan sobre un zócalo rudimentario; en la base interna de éste
y a cada lado del ocelo anterior lleva un _pelo fino y larguillo. Ojos
negros con el tubérculo posterior marcado.
Antenas de seis artejos (fig. 11, núm. 1), finas, casi tan largas
como el cuerpo, con los dos primeros artejos más anchos que los
restantes; de ellos, el primero algo más largo que el siguiente, con
algunos ;-los finos subapicales; seg~ndot,r onco-rónirn y romo e1
anterior de color pardo, con una corona de pelos finos y cortos in-sertos
hacia la mitad; tercero, un tercio menor que el sexto y ape-nas
más largo que el siguiente; como los restantes, claro, con seis
a ocho sensorios circulares secundarios dispuestos en la porción
interna y escasos pelos finos; cuarto, con un, sensorio, de i/4 más
largo que el siguiente, con el ápice algo oscuro; quinto, algo más
largo que la mitad del sexto, con un sensorio subapical y más oscuro
en el ápice; sexto, con la porción basa1 de l/, de longitud que el
flagelo, con el sensorio primario y cinco a seis satélites.
Rertrn c m rc extreme sir¿i?wde eiltre !us csxas de! .wgr:n& y
tercer par de patas, con el Último artejo algo más largo que el ante-rior
y más o menos cónico.
Protórax en forma de banda transversa, negro, con un par de
tubérculos laterales largos bien marcados y algunos pelos finos.
LSbu!cs r?.,sotcráciccs y p c t m mgrw
Patas de forma normal, con un sensorio circular pequeño en la
base de cada fémur, sobre un pequeño abultamiento. Fémures, ex-cepto
en la base (que es pálida), negros, así como lo son la base y el
Núm. 6 (1960) 287
52 JUAN G6MEZ-MENOR ORTEGA
ápice de la tibia, siendo el resto de ésta blanca. Tarsos cortos (figu-ra
11, núm. 5 ) , en conjunto más pequeños que la porción engrosada
terminal de la tibia; primer artejo corto, de la mitad de longitud
Fig. 11.-TOsoptera awantzae B. de F . : 1) antena de la hembra alada y detalle de
los artejos 111, V y VI: 2) sifón de la misma; 3) porción apical del ala anterior, en
que se ve la bifurcación iinica de la vena media; 4) dermis contigua al sifón dorsal;
5) tarso posterior; 6) lámina anal y cauda de la hembra alada.
que el segundo y con dos pelos cortos en el ápice; segundo, de su-perficie
escamosa. Uñas negras, hasta un poco por encima de su '
mitad basal, el ápice claro y fuertemente curvado.
Alas hialinas (fig. 11, núm. 3), con las nerviaciones pardas. Las
288 ANUARIO DE ESTUDIOS ATLANTICOS
"APHIDOIDE.4" DE LAS ISLAS CANARIAS 53
anteriores con su máxima anchura, correspondiendo a la mitad de
su longitud. Pterostigma pardo oscuro; radial uniformemente cur-vada;
media bifurcada una sola vez, con el tronco común tan largo
como la rama posterior, pero un tercio más corto que la rama pri-mera,
la que termina un poco por detrás del ápice del ala; poste-riores
con tres ganchos hamulares.
Abdomen verde, con pares de tubérculos laterales, uno en el
segundo y otro en el séptimo segmento, el de este Jiltimo más pe-queño;
también algunas manchas negras laterales colocadas simé-tricamente
en número de cuatro a cada lado, en las que resaltan
más los pelos y finos dentículos espaciados de la dermis; los tu-bérculos
dorso-laterales, estigmáticos negros. Además de las man-chas
laterales, de las que la mayor es la situada en la base de los
sscrLhaey uc;t,r s LilauehG E ~ &~igadTa ~ a Czz-& s ; l~ce iP
segmentos séptimo y octavo. A partir de los sifones y hacia la parte
ventral hay dos grandes áreas reticuladas (fig. 11, núm. 4) con las
líneas que forman la malla formada por diminutos salientes oscuros
dirigidos hacia detrás y agrupados en lineas. Este área comienza
al nivel anterior de los sifones, dirigiéndose hacia detrás. Por de-lante
hay otro área igual, pero poco marcada, casi desvanecida.
Sifones (fig. 11, núm. 2) vez y media en longitud que la cauda,
casi poco más anchos en la base que en el ápice, negros, de super-ficie
escamosa.
Lámina pregenital más o menos rectangular, negra, con la su-perficie
granulosa y llevando a cada lado en la porción posterior
unos ocho a diez pelos largos, pero finos.
Lámina anal negra (fig. 11, núm. 6), de forma normal, con tres
a cuatro pares de pelos laterales y la superficie provista de dien-tecillos
finos.
Cauda mazuda, negra, la máxima anchura de la maza de la mi-tad
de longitud de ésta, con tres pares de pelos laterales; la maza
de ápice obtuso poco más ancha en la base que en el ápice y casi
doble de ancha en la base de la cauda que en la maza.
Dimensiones : Long. 2 mm. ; id. del cuerpo con alas, 3 mm.;
anch., 0,8 mm.
HEMBRA MER&APAR A. -De color pardo negrusco, con el
tórax y la cabeza negros, así como los sifones, cauda y lámina anal.
Núm. 6 (1960)
54 JUAN G~~IEZ-MENORO RTEGA
Antena con los dos primeros artejos negros, los restantes claros..
Cabeza con la frente ligeramente cóncava, de manera que las
antenas se insertan en un pequeño saliente, sin llegar a formar un
zócalo, y lleva en la frente pelos pequeños dispuestos simétrica-mente.
Ojos negros, con el tubérculo posterior de forma normal.
Antenas de seis artejos, aproximadamente de la misma longi-tud
que el cuerpo, con los dos primeros negros y más anchos que
los restantes, pero el primero más ancho y más largo que el se-gundo
y ligeramente torcido y con una corona subapical de escasos
pelos finos, cortos; segundo, tronco-cónico, con una corona de esca-sos
pelos finos y cortos, situados en la mitad de la superficie; ter-cero,
pálido y como los restantes de superficie escamosa, Iigera-mente
mayor que el siguiente; cimrfo, im cimrtn 25s largo ni'- e1
siguiente; quinto, algo más largo que la mitad del sexto, con un
sensorio primario subapical; sexto, con la porción basa1 aproxi-madamente
de un quinto que el flagelo, con un sensorio principal
y cinco a seis satélites.
Rostro que apenas pasa de las coxas del segundo par de patas;
el Último artejo oscuro, cónico y tan largo como el anterior, que es
vez y media tan largo como ancho.
Protórax, aunque más ancho que la base de la cabeza y unido
en toda su anchura con los restantes segmentos, bien definido, con
un tubérculo lateral larguiilo y no ancho en la base y algunos pelos
finos. Meso y metatórax muy unidos al abdomen, con el que forman
una masa piriforme.
Patas de constitución normal, llevando en la base de los fémures
un microporo anular situado sobre un pequeño abultamiento; los
fémur= de las dos patas posteriores negros, así como también la
base de la tibia. Tarsos y uñas como en la forma dada.
Abdomen verde oscuro con escasas manchas laterales irregu-lares
negras, con dos pares de tubérculos laterales, uno en el se-gundo
y otro en el séptimo segmento, triangulaw además de los
estigmáticos dorso-laterales negros, apenas salientes. También se
observan muy bien las áreas reticuladas situadas en la misma po-sición
que en la forma alada.
Sifones cónico-alargados, negros, de superficie imbricada, apro-
290 ANUARIO DE ESTUDIOS ATLANTICOS'
"APHIDOIDEA" DE LAS ISLAS CANARIAS 55
ximadamente de vez y media de longitud que la cauda;algo menos
de doble de anchos en la base que en el ápice.,
Lámina pregenital de color negro, rectangular transverso de
ángulos redondeados y con tres pares de pelos largos y finos si-tuados
simétricamente.
Lámina anal y cauda como en la forma alada.
Dimensiones : long., 1,7 mm. ; anch., 0,4 mm.
Habitat : en hojas de Citrus aurantinum, C. Zimcrraium y BWUS sp.
Localidad : La Orotava.
Cuerpo más o menos ovoide, con las antenas sentadas directa-mente
sobre la cabeza, sin tubérculos secundarios, ni zócalos; an-tenas
de seis artejos con sensorios secundarios circulares en la
forma alada. Pronoto con tubérculos laterales. Abdomen con cinco
tubérculos laterales situados en los segmentos primero al cuarto,
ambos inclusive, y en el séptimo. El subgénero DoraIis, a que per-tenecen
las especies fabae, tiene lateralmente placas quitinosas
grandes sobre los segmentos segundo al quinto, ambos inclusive, y
tubérculos laterales sobre los segmentos primero y séptimo. Sifo-nes
algo lbgos, subcilíndricos. Cauda normal, provista de sedas
variables.
Tipo del género : Aphis sambuci L.
Sinonimia : Aphk fabae Scopoli : Ent. CarnZoZica, p. 139 (1763).
liala rva.-De color verde manzana, contorno elíptico alargado,
eghm ~4pr8& c ~ e r pp,re- &&s e: su regiSz fr==ta!, hacia
el lado inferior, de pelos simétricos dispuestos por pares a lo largo
de la sutura metópica.
Antenas de inserción lateral, de cuatro artejos, siendo los dos
primeros más anchos y cortos que los restantes y aproximadamen-
Núm. 6 (1960) 291
te de la misma longitud; el basal bastante más ancho que el se-gundo,
llevando éste en su parte media una corona de pelos ; tercero,
cilíndrico, casi dos veces tan largo como los dos anteriores reunidos
y de superficie escamosa, provisto en la porción subapical del sen-sorio
primario, además escasos pelos subapicales ; cuarto, poco más
largo que el anterior, con la porción basal algo más corta que los
dos primeros en conjunto, lleva un sensorio primario y un grupo
de seis satélites; el flagelo, algo más largo que el doble de la por-ción
basal, está provisto de algunos pelos en la base y cuatro a
cinco en el ápice. Ojos de color rojo, divididos en dos áreas, la ante-rior
formada por numerosas onmatidias pequeñas, y la posterior,
apenas limitada de la precedente, constituída por tres mayores, pero a
sin formar tubérculo posterior.
Pico largo, que apenas pasa el nivel de las coxas del tercer par O
de patas, con el Último artejo triangular ancho, pero más corto que n - m
el precedente y ligeramente estrecho en relación a él. O
E
Patas de forma normal; el trocánter lleva dos placas sensoriales E
2
pequeñas y algunos pelos; la tibia tiene seis filas de pelos, los de E
las tres esternas m& largas que los de las restantes; tarso muy 3
corto, provisto de dos pelos apicales; oniquio provisto de dos digi- O-tulas
larg., que pasan poco el extremo de las uñas, éstas débil- m
E
mente curvadas. O
Abdomen alargado, provisto en su dermis a cada lado de tres n
filas longitudinales de pelos. Sifones muy cortos en forma de ma- E
melón, de superficie rugosa, Extremo posterior del abdomen en a
punta obtusamente redondeada, provista de un par de pelos y cu- n
n
bierto de espinas, no siendo la lámina anal recta en el extremo
3
posterior. O
Dimensiones : long., 1,042 mm. ; anch., 0,474 mm.
HWRA ALADA VLVIPARA.-De color negro aterciopelado. Cabeza
con la frente casi plana, ligeramente convexa, provista de dos pares
de -plus fiiiusy CUeaSc, ~ : ~ c s~iIii~&tiG"iE d.rIeiite, 0juu, k);&reü!a
posterior y ocelos en posición normal.
Antenas de seis artejos (fig. 12, núm. l), poco más cortas que el
cuerpo, con los dos primeros mas anchos, el segundo algo más cor-to;
tercero, un sexto más corto que el último, de superficie esca-
mosa, como los tres siguientes, provisto de sensorios circulares
secundarios cuyo número varía de 10 a 23; cuarto, apenas más
corto que el precedente, también con cinco a cero sensorios secun-darios;
quinto, aproximadamente de la misma longitud que el ante-rior,
con el sensorio primario y rara vez con uno secundario ; sexto,
Tig. 12.-Doralis hbae (Scop.) : 1) antena de la hembra adulta alada y detalle de
loa artejo6 111 a VI. 2) antena de la hembra adulta &ptera; 3) sifón de la hembra
alada; 4) cauda y dmina anai de la hembra alada; 5) sifón de la hembra &ptera;
6) cauda v IArnina anal de la hembra kptera.
casi doble de largo que el quinto, con la porción basa1 casi igual a
la mitad del quinto, el flagelo tres veces de largo que ésta.
Rostro que su ápice apenas alcanza la inserción del segundo
par de patas, con el artejo apical triangular, íino, pero de extremo
casi piano redondeado y casi ciobie cie iargo que ia porción más
corta del precedente.
Protórax en forma de banda transversa, con un tubérculo a
cada lado.
Patas negras, de constitución normal.
Alas anteriores hialinas, con la nervadura parda. Pterostigma
con el límite apical en línea recta oblicua al ala. R poco curvada;
.M bifurcada dos veces, con el tronco basa1 casi de la misma longi-tud
que Ms,tr onco apical casi doble de largo que cada una de sus
ramas, con M, terminando un poco anterior al ápice del ala. Poste-riores
con frénulo de tres ganchos.
Abdomen elíptico-alargado, con tubérculos en los segmentos
segundo, quinto y séptimo, además de los dorsales estigmáticos.
Sifón (fig. 12, núm. 3) un tercio más largo que la cauda, negro,
de superficie imbricada, casi doble de ancho en la base que en el
ápice, vez y media de largo que la longitud de la cauda.
Dermis abdominal con líneas en forma de espinitas dispuestas
zii forma. de retie-doa, sobre t o d ~pc r detrk de !es u i f ~ms .
Lámina anal negra (fig. 12, núm. 4), semicircular, achatada,
provista en el borde de cuatro a cinco pares de pelos largos fuertes
y arqueados, dispuestos simétricamente.
Cauda alargada, ligeramente mazuda, de ápice estrecho y re-don&&,,
con ires pailm & largos marg-inBle8 iiwertas s~ la
maza, simétricos y arqueados.
Dimensiones: long., 1,5 mm.; íd. con alas, 3 mm.; anch., 0,5 mm.
HEMBRA APTERA VIVIPARA.-De color verde oscuro a negro, con
la cabeza, antenas, protórax, patas, sifones, cauda y lámina anal
negras.
Cabeza con la frente casi plana, con dos pares de pelos finos,
dispuestos simétricamente. Ojos y tubérculo postocular de forma
normal.
Antenas de seis artejos (fig. 12, núm. 2 ) , algo más cortas que
el cuerpo, con los dos artejos basales algo más anchos, siendo el
segundo tronco-cónico; los restantes artejos, excepto el Último, pre-sentan
las mismas proporciones que en la forma alada, siendo en
el sexto el flagelo más corto.
Rostro poco más largo que en el alado, llegando bien a la inser-ción
del segundo par de patas.
Protórax más estrecho que los restantes segmentos torácicos,
con un tubérculo lateral. Los restantes segmentos forman con el
294 ANUARIO DE ESTUDIOS ATLANTXCOS
"APHIDOIDEA" DE LAS ISLAS CANARIAS 59
:abdomen un conjunto globoso. Segmentos segundo, quinto y sépti-mo
con un par de tubérculos.
Sifón cilíndrico (fig. 12, núm. 5 ) , negro, de superficie escamosa,
poco más corto que el doble de la cauda.
Lámina anal (fig. 12, núm. 3) y cauda como en el alado.
Dimensiones : long., 2 mm. ; anch., 0,5 mm.
Habitat:' en tallos de Poen~lum.
Localidad : La Perdoma.
Gén. MED~RALCT. BS. , subgén. Mt?&rdis C. B.
C. Borner, "Mitt. der Thuring. Bot. Ges.", Heft 4, p. 245 (1952).
Cauda más larga que ancha, de ápice redondeado. Flagelo de
las antenas casi igual en longitud que el tercer artejo, más largo
que la porción basal. Coxa, trocánter y fémur con pelos largos más
o menos erizados. Sifones coloreados de oscuro, de superficie imbri-cada,
rectos.
Tipo del subgénero Aphk mi De Geer.
APHIS POMI De Geer.
Sinonimia: Aphk pmi De Geer. "Mems. des Ins.", IZI, p. 53
(1773,.)
HEMBRA ÁPTERA.-De color verde oscuro, casi negro a verde
claro, con las antenas, excepto la base de los fémures, y las tibias,
-excepto el ápice que es negruzco, amarillas. . .
fv,l.,,, ,, ,., ,,, 1, C,,,*, L,,C,-L.. ,.A--, ,.., ,-l.-.
~ f f i ; Z i a .U t;gL-LIl.C;aG.,U U la. I l G l l L t : U¿laLalLLG CUUVCZLa., quti aUULt í -
pasa una longitud un poco menor que el primer artejo de las ante-nas.
Antenas más cortas que el cuerpo (fig. 13, núm. 2), pero ma-yores
que su mitad, de seis artejos, los dos primeros más anchos
que los restantes, de superficie lisa, siendo el segundo más estrecho,
---- ---- ..-1- 1 -. 1 - - - - a ---l_-- .----_-'-A.-- 3- -------
pero u11 p c u mas iargu que er pasal, amuus pruvrs~osu e w c w
pelos finos y cortos; tercero, amarillo, un tercio más largo que el
siguiente y como los restantes de superñcie escamosa, con algunos
pelos finos ; cuarto, apenas más corto que el quinto, y éste, un cuarto
6U JUAN MENOR ORTEGA
más largo que la porción basal del sexto y con el sensorio primario
subapical; sexto, en conjunto, un poco más largo que el tercero,
con el flagelo dos veces a dos y media tan largo que la porción basal,
mg. 13,-Med~aUa pomi (De Geer.): 1) antena de la hembra alada y detalle de 10s O
artejo8 111 V y VI; 2) antena de la hembra áptera; 3) wuda y lAmina anal de la
h-uVia &&,rrs; 4: ca~& y !&-i=o a-& <e !a hgmyy~g y Y g ; 5) s!fSn de !U hemhra
áptera: 6) ídem de la hembra alada.
Protórax algo más ancho que la cabeza, que lleva lateralmente
un tubérculo largo y de ápice redondeado. Los restantes segmentos
torácidos se unen a los abdominales para formar un conjunto pi-riforme.
Patas de forma normal, con las tibias amarillas, excepto en el'
ápice, que es casi negro, y provistas de numerosos pelos erizados.
Artejo basal del tarso corto, de un tercio de longitud que el
296 ANUARIO DE ESTUDIOS ATLANTICOS.
"APHIDOIDEA" DE LAS ISLAS CANARIAS 61
segundo y provisto en el ápice de tres pelos cortos y fin&; segundo,
de superficie escamosa y con algunos pelos cortos dispuestos por
pares. Ambos artejos, de color negro. Uñas negras hasta un poco
por encima de su mitad basal; ápice hialino y apenas curvado.
Abdomen globoso, grueso, de color verde oscuro, con algunas
manchas laterales negras colocadas simétricamente y llevando la-teralmente
cada segmento un tubérculo cónico que es más visible
en el quinto y séptimo y falta Únicamente en el octavo.
Sifones (fig. 13, núm. 5) largos, negros, dobles en longitud que
la cauda, rectos o apenas ligeramente curvados hacia el lado ex-terno,
tronco-cónicos, de superficie escamosa, casi doble de anchos
en la base; flángula corta, pero patente (rectos en el lado interno
y curvos en el externo).
CEE& y Iámlnz (fig 13, ncm. 3) negra, &&a cnn el borde
posterior convexo y redondeado, provisto su margen de cinco o más
pares de pelos largos y finos. Aquélla larga, apenas estrechada en
BU tercio basal, ligeramente mazuda y de ápice redondeado con
tendencia a ser agudo.
Dimensiones : long., 2 mm. ; anch., 0,6 a 0,7 rnm.
HEMBRA ALADA VN~PARA.-Dc~o lor verde con la cabeza y tórax
negro, así como también las antenas, sifones, lámina anal, cauda,
&pice de la tibia y tarso.
Cabeza con la frente ligeramente convexa, provista de un par
de pelos íinos colocados símétricamente. Ojos hemisféricos de color
rojo cereza, con el tubérculo posterior bien marcado.
Rostro que apenas alcanza el nivel de la inserción del segundo
par de patas; el último artejo fino y largo, casi doble que el prece-dente
y algo menos de la mitad de su anchura.
Antenas aproximadamente de la mitad de longitud que el cuer-po
(fig. 13, núm. 1), de seis artejos, con el ápice de los artejos a par-tir
del tercero más oscuros y el sexto casi por completo, excepto
la base. Los dos primeros más anchos que los restantes, siendo algo
más corto el primero ; segundo, tronco-cónico ; tercero, algo ancho,
pero más corto que el sexto, con seis a diez sensorios circulares
dispuestos en línea; cuarto, con cero a cuatro sensorios circulares,
doble de largo que la porción basal del sexto; quinto, algo menor
62 JUAN G6MEZ-MENORO RTEGA
que el precedente, aproximadamente igual a los tres cuartos del
tercero, con el sensorio primario, y sexto, con el flagelo doble que
la porción basal, provista ésta del sensorio primario y seis satélites.
Protórax en forma de banda transversa, corta, más estrecha
que el resto del tórax, provista a cada lado de un tubérculo grande.
Mesotórax y pectus negro. Patas de forma normal, con el ápice
de los fémuztes de la tibia y por completo el tarso negro.
Alas hialinas, con la nervadura verde oscura. R poco curvada
en la base y en el resto. M con el tronco basal común, casi igual
a M,; tronco de variable longitud, en general más corto que sus
dos ramas; M, terminando en la mitad del ápice.
Posteriores con cuatro ganchos en el frénulo.
Abdomen alargado, provisto de tubérculos laterales en los seg-mentos
segundo, quinto y séptimo.
Sifones negros (fig. 13, núm. 6), más bien cortos, tronco-cónicos,
alargados, casi cilíndricos, rectos, de superficie imbricada, con la
flángula bien patente.
Lámina anal negra (fig. 13, núm. 5 ) , con el borde posterior eh
forma de arco achatado con tres pares de pelos finos largos ar-queados.
Cauda poco alargada, negra, mazuda, poco estrechada en su
porción subapical, provista de cuatro pares de pelos largos y ar-queados.
Dimensiones : long. del cuerpo, 1,5 mrn. ; íd. con alas, 3,5 mm. ;
anch., 0,5 mm.
Habitat : sobre Byrus mmuak.
Localidad: La Perdoma, La Orotava.
Gén. CERQSIPHAD el Guercio, 1900.
Del Guercio, Prosp. &ZIJAphid Ital. R. Stax. Ent. Agric., Firen-ze
2, p. 111 (1900).
C*nnAnm Anronlno Anl $A-..- m-4-nn nn..n- --+-.--m A+-. S/ dir lrrri.-A+..A
u u u a m UVLU~LW UGL IG~L~LU ~ VmL , r a r a u v cwz a uc 14 uc m.morc.uu
que la anchura del artejo, pero entonces los sifones más cortos que
la cauda, ésta poco estrechada en la porción subapical.
Tipo del género : Ceros-iphu pwserOnk1w;c Del Gu.
298 ANUARIO DE ESTUDIOS ATLANTICOS
"APHIDOIDFX" DE LAS ISLAS CANARIAS
Sinonimia : Aphk franguZue Kaltenbach. "Ent. Zeit.", 6 th, p. 18,
1845.
HEMBRA ALADA VIV~PARA.-Dcoe lor verde oscuro, con la cabeza,
antenas, tórax, sifones, cauda y lámina anal negros.
Cabeza con la frente casi recta, provista de algunos pero esca-sos
pelos finos y cortos, dispuestos por pares colocados simétrica-mente.
Ojos rojo negruzcos, casi negros, con el tubérculo posterior
más claro y señalado.
Antenas de seis artejos, más cortas que el cuerpo (fig. 14, nu-mero
l), con los dos primeros artejos más anchos que los restantes,
casi de la misma longitud, de superficie provista de pequeñas ele-
-vinanb;i*.w.runGo u ;m+*nmnAina n 1- e o r i smn a ~r s l a ~ n n@wl nc ~nrtncrT I finnn' ULIGL ALA~~CIIUU U AUS lrmUY-CUi. CYiUY r---n --- --- -----,
,el segundo presenta en la porción subapical del dorso un microporo
circular; tercero, como los restantes, de superficie escamosa, un
tercio más largo que el siguiente, ligeramente pálido en la base y
provisto de sensorios circulares secundarios en número de siete a
czt-i-ce; c~al tus,p naz> e6i-t~q ~ e2! s igAect&, pyj~.nkto des
a cuatro sensorios; quinto, un quinto más largo que la porción
basal del sexto y generalmente desprovisto de sensorios secunda-rios,
a veces existe uno además del primario subapical; sexto, el
más largo de todos, con la porción basal algo más corta que el
cuarto, provista del sensorio primario y seis satélites colocados a
un lado; flagelo más largo que el tercer artejo, unas cuatro veces
tan largo como la porción basal.
Rostro que su extremo posterior casi llega al nivel de la inser-ción
de las coxas del tercer par de patas, con los dos Últimos artejos
formando un conjunto m& o menos conoideo, casi ciobie de iargo
que el precedente, el que es bastante más ancho que largo en su
parte ventral.
Protórax en forma de banda alargada y estrecha a su travCs,
provista a cada lado de un tubérculo bastante señalado y algunos
pelillos finos.
Lóbulos mesotorácicos, protórax y pectus negros.
Alas hialinas, con la nervadura negruzca; la máxima anchura
situada un poco por delante de la base de la mitad apical. Radio
Núm. 6 (1960) 299
curvado en la base y casi paralelo al borde en el ápice. Media dos
veces fumada, con el tronco común basa1 más corto que cual-quiera
de sus ramas, y el apical mucho más largo que sus dos ramas
Fig. 14.-Csrosipha frangulae (Kalt.) : 1) antena de la hemsbra alada y detalle de
los artejoa 111, V y VI; 2) antena ,de la hembra áptera; 3) cauda y lámina anal de
la hembra alada; 4) sifón de la hembra alada; 5) fdem de la hembra áptera.
r... ,.-..<....+A +n,.,-;..r...,4A l.-. .;-m.-. m,-.., ,4,.1.-...4-* d,.l A-;',,. Am1 -1-
GU C~UIIJILULU, LGL uuuauuu L a ~ I L U C L a PUL U c L a u ~ cU CI apbc uci ala,
Posteriores con dos a tres ganchos. Patas de conformación normal,
con el trocánter provisto de dos microporos, y el fémur, en su base,
de cuatro, de ellos tres laterales y uno posterior y mayor colocado.
300 ANUARIO DE ESTUDIOS ATLANTICOS
sobre un pequeño inflamiento o tubérculo chato; fémur pálido en
su base y en el resto negruzco; tibia con la base y el ápice negro,
y éste bastante inflado: tarso, de un cuarto a un quinto de la lon-gitud
que el pretarso y provisto en el ápice de tres pelos finos, de
ellos el central algo más largo; pretarso de superficie escamosa y,
como el tarso, negro; uñas poco curvadas en el ápice claro y oni-quio,
con pelos que apenas alcanzan el ápice de éstas.
~bdomena largado, verde, con cinco manchas negras laterales
en las que resaltan algunos dientecillos diminutos dispuestos en
líneas; una de estas manchas abraza la base del sifón de su lado;
además en el sexto, séptimo y octavo segmento, en el vientre, pre-senta
tres manchas negras transversalmente alargadas, siendo la
primera muy corta, estando la Última que forma la lámina prege-nital
que lleva a cada lado algunos pelos que forman sus insercio-nes
una línea oblicua. Lateralmente lleva dos pares de tubérculos,
uno en el segundo y otro en el séptimo segmento, que son bastante
señalados.
Sifones negros (fig. 14, núm. 4), casi cónicos, rectos o ligera-mente
-rquearl_ns hacia fuerai & suprfici- n%nsaj C o n flángda
poco patente.
Lámina anal negra (fig. 14, núm. 3), posteriormente arqueada
convexa, m& o menos semicircular, con tres pares de pelos dorso-laterales.
Cauda larga, claramente mazuda; la maza casi doble de
larga que ancha, con la base o estrechamiento situada en la mitad
hacia la base, provista de tres pares de pelos marginales y simé-tricos
con el extremo redondeado.
Dimensiones: long., 1,2 mm.; id. con alas, 2,2 mm.; anch.,
0,3 mm.
HEMBRÁAP TERA VI~ÍPARA.-Dceo lor verde oscuro, con la cabeza
parduzca; sifones, cauda y lámina anal negros, así como también
los dos últimos artejas de las antenas y parte del anterior.
Cabeza con la porción media de la frente ligeramente infiada
y saiierlte, y pr-uvbi&a, y gris U-&
puestos simétricamente por pares. Ojos rojo-oscuros, con los tu-bérculos
posteriores bien marcados.
Antenas de seis artejos (fig. 14, núm. 2), de la misma forma y
Núm. 6 (1960) 301
66 JUAN G6MFZ-MENOR ORTEXA
tamaño relativo de sus artejos que en la hembra alada, pero el ter-cero
y cuarto desprovistos de sensorios, con los dos Últimos ahu-mados,
casi negros.
Rostro que apenas alcanza la inserción de Ias coxas de1 tercer
par de patas, con los dos últimos artejos formando un conjunto
conoideo ancho, casi doble de largo que los dos artejos anteriores
reunidos.
Protórax formando con los restantes segmentos torácicos y el
abdomen un conjunto piriforme. El primero lleva a cada lado un
tubérculo bien pronunciado.
Patas de forma normal, con un microporo en la base del fémur
sobre un tubérculo saliente y uno a cada lado en el trocánter.
Abdomen globoso con dos pares de tubérculos laterales bien a N
señalados, uno situado en la base y otro en el séptimo segmento E
abdominal. O
n -
Sifones negros (fig. 14, núm. 5), de superficie escamosa, algo =m
O
E más anchos que en la forma alada, vez y media tan largos como la E
2
cauda y con la flángula bien visible. =E
Lámina pregenital poco marcada y provista a cada lado de una
2 línea oblicua de pelos largos ligeramente arqueados. La dermis -
ventral presenta diminutos dientecitos dispuestos en línea, que son -
0m
E más visibles y marcados en la lámina pregenital.
~ ámi n aan al como en la forma alada, con tres pares de, pelos
O
largos laterales dispuestos simétricamente. n
-E
Cauda alargada, ligeramente mazuda, empezando su maza en
a l la mitad, terminando redondeada, pero más bien aguda, con tres n
pares de pelos largos y arqueados, colocados simétricamente. 0
Dimensiones: long., 1,5 rnm.; anch., 0,25 mm. 3
O
Habitat : sobre Bougainuilba.
Localidad : La Orotava.
302 ANUARIO DE ESTUDlOS ATLANTICOS
"APIIIDOIDEA" DE LAS ISLAS CANARIAS 67
HEMBRAALA DA VIV~PARA-Dceo lor verde oscuro a verde man-zana,
con el tórax y cabeza casi negros, así como también los sifo-nes
y cauda.
Cabeza con la porción frontal recta, con algunos pero escasos
pelos finos a cada lado de los ojos y sobre el vértex. Ojos negros
poco salientes, con el tubérculo posterior marcado.
Rostro largo, que pasa algo el nivel de las coxa del tercer par.
Antenas tan largas como el cuerpo, con los dos primeros artejos
más anchos que los restantes, el basal algo más corto, pero más
ancho que el segundo; éste cilíndrico y con superficie algo esca-mosa,
con una serie de pelos dispuestos en forma de corona en la
parte media; tercer artejo ligeramente más largo que el siguiente,
con cuatro sensorios circulares dispuestos en línea y, como los res-tantes
artejos, de superficie imbricada; cuarto, algo más corto que
el siguiente, desprovisto de sensorios; quinto, un tercio más largo
que la porción basal del sexto, con el sensorio primario circular;
sexto, que lleva el sensorio primario y seis satélites pequeños a un
lado; flagelo tres veces más largo que la porción basal.
Pr ~ t 6 r ~nsxc xn, C O I~ns tuhPlcc-~ilosla terales finos. pero muy
bien marcados. Resto del tórax, tanto los lóbulos mesotorácicos
como el pectus, negro.
Patas de constitución normal, con el extremo de las tibias en-sanchado
y de color oscuro. Artejo basal del tarso corto, en su
máxima longitud algo menor que la mitad del segundo, con dos
pelos finos en el ápice ; segundo, de superficie imbricada. Uñas con
algo más de la mitad basal oscura, el ápice claro y bastante curvado.
Alas hialinas con la nervadura verdosa, radial, curvada en la
base, casi recta en el ápice. Media bifurcada una o dos veces; en el
Caso de serlo ü a vez, !a rama e~xfi:: es igw! u. 12 primeri media.
Alas posteriores con dos ganchos hamulares.
Abdomen de la misma anchura que el tórax, de color verde, con
un par de tubérculos laterales salientes en los segmentos segundo
y séptimo. Tubérculos estigmáticos apenas perceptibles. Sifones
negros, aigo más iargos que ia cauda, más anchos en ia base, en su
borde anterior recto, el inferior convergente hacia el ápice; flángula
bien marcada.
Cauda alargada, oscura, conoidea, de un tercio más de longitud
Núm. 6 (1960) 303
68 JUAN GÓMEZ-MENOR ORTEGA
que anchura en la base de lados rectos con tres pelos largos ar-queados
a cada lado.
Lámina anal oscura, con el borde posterior curvo, pero acha-tado
; los laterales casi paralelos y con algunos pelos largos arquea-dos
a cada lado de la línea media.
Dimensiones : long., 1,6 a 1,8 mm. ; id. con alas, 3 mm. ; anch.,
0,5 a 0,6 mm.
HEMBRA ÁPTERA vIvfpA~A.-De color verde, con los sifones ne-gros,
así como son de color oscuro cauda y lámina anal.
Cabeza con la frente ligeramente convexa, y lleva, tanto en la
frente como en el vértex, algunos pelos finos dispuestos simétri-camente.
Ojos negros poco salientes, con el tubérculo posterior ape-nas
señalado. Rostro largo que pasa algo el nivel de las coxas del
tercer par, con los dos Últimos artejos en conjunto más o menos
cónicos y casi doble de largos que el precedente, el que es un poco
más ancho; aquél con el extremo negro.
Antenas delgadas, casi tan largas como el cuerpo, con los dos
primeros artejos más anchos que los restantes; de ellos, el basal
aproximadamente de la misma longitud que el siguiente, pero m&
ancho; segundo, tronco-cónico, con el ápice más estrecho; tercero,
apenas más largo que el siguiente; como los que le siguen, de su-perficie
escamosa y desprovisto de sensorios, con algunos pelos
finos; cuarto, algo más largo que el quinto, este último un tercio
más largo que la porción basal del sexto, la mitad apical negruzca,
llevando en el subápice el sensorio primario circular; sexto, ne-gruzco,
con la porción basal de un tercio de la longitud que el fla-gelo,
con el sensorio primario y cinco a seis satélites formando una
roseta htenl.
Protórax algo más estrecho que los restantes segmentos to-rácicos,
lleva a cada lado un tubérculo bien visible y algún pelo
fino. Los restantes segmentos torácicos forman una sola masa con
el abdomen, que es globoso.
Patas de foma mcma!, c m b u férntmes y ápice cle !S tibizs
ligeramente infuscados. Tarsos negruzcos, con el artejo basal corto,
en su máxima longitud de la mitad del segundo, con dos pelos finos
y cortos; segundo, de superficie escamosa y con algunos pelos dis-
304 ANUARIO DE ESTUDIOS ATLANTICOS
''APHIDOIDEA" DE LAS ISLAS CANARIAS 69
puestos por pares en la parte inferior. Uñas con la mitad basa1 ne-gra,
en el resto claras.
Abdomen globoso de color verde uniforme, con los tubérculos
estigmátic