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1 T O M Á S G Ó M E Z B O S C H: PINTOR Recopilatorio de su trayectoria artística Por Vicente González Rosales 2 D E D I C A T O R I A A la memoria de este gran artista y a la De todos aquellos que enjuiciaron su obra Y Que con su labor llenan de contenido a este Recopilatorio. AGRADECIMIENTOS A los hijos de don Tomás, Especialmente a Sofía y a su Esposo Nolo, por facilitarme El material fotográfico que tanto Ha enriquecido este trabajo. A mi hijo Vicente Manuel Por su inestimable colaboración A la hora de incorporar el material Fotográfico y resolverme todos Los problemas de índole informático Que se me han ido presentando. Este Recopilatorio fue acabado El día 31 de enero de 2014 En Las Palmas de Gran canaria, Por Vicente González Rosales, 3 I N D I C E I.- Perfil biográfico II.- Don Tomás cuenta su vida a Cano Vera III.- Don Tomás en Siesta de Memorias IV.- Pinceladas del diario acontecer V.- Cerveza, Chocolate y Cámara VI.- Exposiciones y Artículos VII.- Artículos y Comentarios VIII.- Entrevistas IX.- Homenajes y distinciones X.- Obituario XI.- Poemas con dedicatoria XII.- Cronología XIII Galería de retratos 4 P E R F I L B I O G R Á F I C O 5 Tenemos que empezar diciendo que estamos ante el recopilatorio de la vida y milagros interpretados por un ciudadano nacido en Las Palmas de Gran Canaria que se llama Tomás, y por tanto, son de su exclusiva autoría, y el hecho de que la mayor parte sean de dominio público, no les quita ni un ápice de esta condición. De cuanto se ha dicho y escrito de él, buena parte ha sido recogido de sus propias manifestaciones y el resto ha emanado de las vivencias que otras personas compartieron con él y que se convirtieron en fuente de información para todos los que nos hemos sentido atraídos por la personalidad de este ciudadano llamado Tomás que, por imperativos generacionales se convirtió, siendo muy joven, en industrial chocolatero y cervecero para sacar adelante los intereses de sus progenitores y que, llegado el caso, se vio impelido a ejercer como fotógrafo para sacar adelante su prole. Cuando ya, más o menos, la tenía encaminada, pudo dedicarse a lo que vocacionalmente se había sentido llamado durante toda su vida y que tuvo que posponer después de haber dado los primero pasos para convertirse en pintor, no de brocha gorda, sino de los de paleta y pincel, alcanzando cotas tan altas como insospechadas cuando en el Museo del Prado empleaba su tiempo copiando a los grandes maestros, especialmente Velázquez, Goya y El Greco, por los que sentía especial predilección. Como industrial, en nada se vio beneficiado en lo personal, a no ser por las muchas preocupaciones que le ocasionaba esta actividad comercial tan dura y competitiva que por necesidad tuvo que desarrollar y en la que, venida a menos, tuvo que dar un paso atrás para poner en juego sus capacidades personales y destacar en el campo de la fotografía al frente de su propio estudio, antesala de lo que sería su máxima realización, dedicarse plenamente, de cuerpo y alma, a la pintura. Cuando me planteé la idea de acometer la tarea de hacer una biografía de Don Tomás, tuve muy en cuenta las relaciones familiares que nos unían, en las que no faltan ratos de 6 amenas charlas y uno de sus cuadros colgado en el salón de mi casa, regalo suyo con motivo de mis esponsales. Pero la realidad me ha llevado al convencimiento de que todo lo que ahora, en estos momentos, yo pueda decir o escribir, aunque sea de primerísima fuente, ya ha sido dicho y escrito por él mismo o por tantos que a lo largo de su casi secular vida, se ocuparon de seguir sus pasos y del que, afortunadamente, hoy nos queda también el testimonio de su obra, repartida por innumerables hogares, pinacotecas privadas y museos públicos, tanto en las islas como en el territorio peninsular y hasta en el extranjero. Su obra dará aún mucho que hablar y para ello están los eruditos en arte, que seguirán analizando y comentando su pintura como corresponde a este importante eslabón en la cadena evolutiva del arte de los pinceles, que aún no ha llegado a su fin. Aparecen nuevos pintores, nuevas técnicas, nuevos estilos, nuevas tendencias, pero los viejos maestros nunca perderán su vigencia y su obra, lejos de devaluarse, verá acrecentar su cotización. Por ello, he decidido que antes de embarcarme en un relato personal, de contenido sobradamente conocido por todos, lo mejor sería recopilar cuanto esté a mi alcance de lo que dio de sí su trayectoria como pintor y el juicio que merecieron las exposiciones que realizó y muchos de los comentarios que en general se hicieron de su obra, respetando la identidad de sus autores, la literalidad de sus palabras y el medio empleado para su difusión, ordenados en el tiempo en un solo texto, en el que no puede faltar, aunque sea sucintamente, lo relativo al considerable espacio de tiempo que va desde que tuvo que abandonar, por cuestiones familiares, su formación artística, finales de 1906, hasta que la retomó para iniciar su carrera como pintor profesional, si bien con anterioridad “mataba el gusanillo” casi todos los domingos, pintando en casa. Su primera exposición individual se celebraría en el Gabinete Literario e inaugurada el 20 de abril de 1940, en la que colgó la nada despreciable cantidad de 55 cuadros, que como es lógico pensar, no los pintó en sólo dos o tres meses anteriores a esa fecha. A partir de aquí sostendría admirablemente el ritmo de una exposición anual, interrumpido en contadas ocasiones por razones de enfermedad, lo que da idea de su tenacidad, laboriosidad y plena dedicación al trabajo. El perfil biográfico de don Tomás Gómez Bosch, por lo que a mí se refiere, forzosamente tiene que ser muy escueto, apenas desgranar una serie de fechas a las que se asignan un cúmulo de circunstancias, casi todas de índole familiar y algunas personales, porque lo verdaderamente sustancioso nos viene desvelado ampliamente por el propio don Tomás, en las entrevistas concedidas a Cano Vera, en septiembre de 1966 y a Martín Moreno en septiembre de de 1996 para su “Siestas de Memorias”, amén de las numerosas que el pintor concedía en vísperas de sus exposiciones, que como ya hemos dicho, casi tenían periodicidad anual. 7 Tomás Gómez Bosch nació en Las Palmas de Gran Canaria, el 17 de diciembre de 1.883 y era el cuarto de los catorce hijos habidos del matrimonio compuesto por Cástor Gómez Navarro y Ana Bosch y Sintes, de los que sobrevivieron sólo once. Ella era hija de Tomás Bosch y Sastre, comerciante mallorquín y armador de barcos, en uno de los cuales arribaron al puerto de Las Palmas camino de Casablanca, pero hubo cambio de planes y se instalaron definitivamente en nuestra ciudad. Su padre procedía de una acomodada familia murciana y llegó a Las Palmas con otros jóvenes empresarios de aquella ciudad, instalándose inicialmente en la calle Cano. En el año 1906 adquirió la fábrica de chocolates El Escudo, propiedad de la familia Fabre, y que pasado unos años, en 1910, pasaría a llamarse Chocolates Gómez Bosch. El 18 de diciembre de 1918 se publica en el Diario de Las Palmas un comunicado de D. Vicente Lleó dando cuenta de que con fecha 30 de noviembre último y previa escritura otorgada ante notario, ha cedido su establecimiento de Droguería a don Cástor Gómez Navarro, quien se hace cargo del activo y pasivo, continuando el negocio en forma idéntica a la que hasta ahora ha llevado esta casa. En el mismo comunicado don Cástor ratifica lo manifestado por el señor Lleó. La Droguería estaba instalada en el número 65 de la calle de Triana. En el mismo periódico, con fecha 10 de enero de 1924, don Juan Antonio Ortiz, Alcalde accidental de la ciudad publica el siguiente edicto: “Habiéndose presentado instancia ante esta Alcaldía por don Cástor Gómez Navarro, en solicitud de permiso para instalar una fábrica de cerveza en un edificio situado en la calle de Eusebio Navarro, e informado que los documentos que por duplicado acompaña a su instancia reúnen los detalles y circunstancias necesarios; he dispuesto anunciar al público el proyecto conforme a lo prevenido en el artículo 372 de las ordenanzas municipales por término de treinta días, que empezará a contar desde esta fecha, estando de manifiesto en Secretaria a fin de que los vecinos que se consideren perjudicados con dicha instalación expongan ante esta Alcaldía lo que estimen conveniente: Las Palmas 22 de diciembre de 1923.- J. Ortiz” Con todo esto, don Cástor Gómez se ha convertido en un importante empresario canario que durante el bienio 1908-1910 llegó a ser vicepresidente segundo de la Cámara de Comercio de Las Palmas. El día 10 de mayo de 1924 fallecería el señor Gómez Navarro, recayendo todas las responsabilidades de sus negocios en la persona de su hijo Tomás, aumentando la carga 8 que sobre sus hombros pesaba desde 1906 en que se hizo cargo de la fábrica de chocolates y que tanta trascendencia tuvo en el rumbo que iba a tomar su vida, hasta que en 1939 pudo retomar su camino vocacional. Después de este breve paréntesis dedicado a su progenitor, situémonos en los primeros años del joven Tomás, que, como en casi todos los niños de su edad, estuvieron dedicados a recibir las primeras enseñanzas académicas, en su caso, en el Colegio de San Agustín, donde hizo el bachillerato y descubrió su pasión por la pintura de la mano de su profesor de dibujo, Nicolás Massieu y Falcón. En 1900, concluye Tomás Gómez Bosch sus estudios primarios y con el título de Bachiller en el bolsillo comienza a trabajar en un negocio familiar, sin dejar a un lado lo que en su interior le rumiaba machaconamente y no era otra cosa que la pintura y así, en sus ratos libres, comienza a asistir a las clases de Federico Valido, profesor de la Academia Municipal, animado también por la presencia en Las Palmas del pintor catalán Eliseo Meifrén, cuya influencia se hizo patente en sus primeros cuadros. En 1904, con la aquiescencia de su madre, emprende su pequeña aventura peninsular y se desplaza a Madrid, vía Cádiz, y una vez instalado en la capital de España, acude al estudio de José Garmelo y Alda para iniciar su aprendizaje en el arte de la pintura, y después de un año de permanencia en el mismo, opta por una vía más personal, acudiendo diariamente al Museo del Prado para copiar a los grandes maestros que hemos citado anteriormente, frecuentando por la tarde el Casón del Retiro, donde copiaba sus bellas esculturas. En Madrid tuvo ocasión de entablar buena amistad con su condiscípulo Gutiérrez Solana, Julio Romero de Torres, Joaquín Sorolla, Eliseo Meifrén y con Zuloaga, que como veremos más adelante lo estimuló para que se iniciara en el cultivo del bodegón, en cuyo ejercicio alcanzó gran predicamento. Su aventura madrileña iba a ser breve, apenas llegó a completar los tres años. Quizá por su carácter apacible, o por la morriña que padecemos los canarios cuando abandonamos de muy jóvenes las islas, a finales de 1906, don Tomás decide regresar a su tierra, pese a los reproches que le hiciera el maestro Meifrén, animándole a no rendirse y continuar con su carrea pictórica, para la que él consideraba, el canario tenía grandes posibilidades, habida cuenta de las notables cualidades que poseía para ello. Con esto se abre una nueva etapa en su vida. Puede decirse que su regreso a la isla supone el abandono total de los pinceles. No así el amor hacia la pintura, ya que en su 9 interior probablemente iba confeccionando una gran colección de cuadros irrealizados para una exposición que nunca se celebró. Ese mismo año, su padre adquiere la fábrica de chocolates El Escudo, encomendando a su hijo Tomás la responsabilidad de dirigirla, siendo sin duda el detonante que cambiaría radicalmente su vida, al menos en unos años. Quedaba atrás el aspirante a pintor y nacía el industrial; a partir del año 1910 la fábrica pasaría a denominarse “Chocolates Gómez Bosch. Un sábado, día primero de junio del año 1918, contrae matrimonio en la iglesia de Santo Domingo de Las Palmas, -su párroco don José Marrero bendijo la unión- con la joven Ana Arroyo Cardoso, -que resultó para él la compañera ideal en todos los aspectos-fruto del cual fueron los ocho hijos que tuvieron. En 1924, Don Cástor Gómez Navarro funda la fábrica de cervezas con la denominación de “La Tropical” pero, desgraciadamente, apenas pudo disfrutar de ella, ya que fallece a los pocos meses de su génesis, dejando las dos industrias a su hijo Tomás. Fueron muchas las vicisitudes por las que tuvo que pasar el improvisado industrial hasta el punto de que en el año 1939 se ve obligado a vender la fábrica de cerveza a la firma Sical S. L., dando por finalizada esta etapa de su vida. Pero este final de etapa no iba a dejar a don Tomás en completo desamparo, ya que, a principios de la década de los treinta, había compaginado sus actividades comerciales con la práctica en sus ratos libres, de otra de sus grandes aficiones junto a la pintura: La fotografía. De hecho la fábrica de chocolates llegó a convertirse en casi un museo donde compartían pared fotografías y copias de los grandes maestros realizadas durante su estancia en Madrid, sin olvidar que ya existían bastantes cuadros datados dentro de la década, entre ellos los retratos de su esposa y de su madre, realizados golpito a golpito, domingo a domingo, convirtiéndose el de su madre en una de las obras más elogiadas y valoradas de su carrera. La tercera etapa comprende los veinte años que transcurren entre 1939 y 1959, en los que Tomás Gómez Boch convirtió la fotografía en profesión y, por tanto, en medio de subsistencia para su familia. 10 El uno de septiembre, en un anuncio de prensa, el Ayuntamiento comunica el traslado del domicilio de don Tomás Gómez, de la calle de Canalejas a la de Domingo J. Navarro, núm. 5, donde también instaló su estudio fotográfico que pronto se convertiría en uno de los preferidos de la sociedad canaria y por el que pasaron invitados por don Tomás para posar, -hombre culto y amante de la buena música donde los hubiera-numerosos músicos y artistas que nos visitaban, contratados por la Sociedad Filarmónica o por la empresa del teatro. He tenido ocasión de visitar esa galería de famosos visitantes y tengo la impresión de que son muy pocos los que faltan en ella. En 1959, termina su etapa como fotógrafo profesional, entregando el testigo a su hijo menor, Néstor Gómez Arroyo, que siempre estuvo a su lado ayudándole en las tareas del estudio, lo que le proporcionó la debida formación como para hacerse cargo del mismo con plenas garantías de seguir contando con la consideración de su numerosa y selecta clientela. Por fin, en el año 1959, comienza la etapa más importante de su vida, que iba a durar hasta el fin de sus días, dejando a un lado todo lo que le había impedido dedicarse a su gran pasión desde que tuvo uso de razón: la pintura. Su primera exposición individual tuvo lugar en el Gabinete Literario, donde colgó 55 cuadros y fue inaugurada el 20 de abril de 1940, y la última, celebrada en la Sala Cairasco, con 35 cuadros, inaugurada el 13 de marzo de 1978; o sea, 38 años de plena dedicación profesional a la pintura, mostrando su producción a los aficionados de su tierra, Tenerife, Madrid, Barcelona, Venezuela y la Haya, dejando constancia de la maestría de sus pinceles, sin abandonar nunca sus preferencias por la escuela realista española, tanto en el campo de retrato como en los bodegones y paisajes, sobre todo los de su tierra, que plasmó en sus lienzo a pié de campo, cargando con su caballete y tocado con su inseparable compañero, el tradicional sombrero de paja. Por su edad, llegó a ser el decano de los pintores españoles en activo. Don Tomás Gómez Bosch falleció en Las Palmas de Gran Canaria el 25 de abril de 1980. El día 7 de febrero de 2007 tuvo lugar en el salón de actos del colegio Claret de Tamaraceite, un acto de homenaje a los 30 artistas isleños nacidos en el siglo XX, entre ellos don Tomás, que con sus nombres pasaron a conformar el “barrio de los artistas” ya que a cada uno de ellos se les había asignado el nombre de sus calles. Con ello, el Ayuntamiento capitalino quiso perpetuar el recuerdo de sus hijos más preclaros. 11 D. TOMÁS CUENTA SU VIDA A CANO VERA 12 Conversaciones noveladas 18 de septiembre de 1.966 El Eco de Canarias DON TOMAS GÓMEZ BOSCH CUANTA SU VIDA Por Cano Vera Medio siglo de la Historia de la Pintura. El artista y su obra figura en la Enciclopedia Espasa I D. Tomás Gómez Bosch o medio siglo de pintura canaria. Este sería el resumen de una vida dedicada casi por entero al arte. Una figura señera y venerable. Una biografía interesante por su historia dentro de la pintura insular. Gómez Bosch ha sido embajador de nuestro arte, dentro y fuera de España. Su producción artística ha sido enorme, ni él mismo conoce el número de sus obras. Sus cuadros figuran en museos y entidades culturales de toda España. Y su nombre y sus obras han sido recogidos por la Enciclopedia Espasa. La pintura de Gómez Bosch es una pintura de juego limpio que responde a la madurez lograda por su autor a lo largo de un quehacer honesto, sentido y meditado, entendido como servicio misional de creador personalísimo, sincero y noble de belleza plástica en su máxima emocional pureza, pinturas de formas con espíritu y de palpitante entraña. Nada se atisba en ella de antiestético ni anti plástico. Todo obedece a una Ley, a un orden y un concepto elevado del artista de su funcional cometido, es decir, como aconsejara Schiller, “estampando el ideal en la verdad y en la ilusión en los juegos de su fantasía y en la seriedad de sus actos o imprimiéndoles en todas, las formas sensibles y espirituales, entregándolo silenciosamente al tiempo infinito. 13 Así vemos a este magnífico y veterano pintor canario, seguro de sí mismo, y sin adulterar nada de las puras esencias del arte, del suyo. Y así lo han visto críticos de juicios más autorizados que el nuestro, como es José Francés que en el semanario “Domingo” afirmaba: Entre unos y otros, academizantes y vanguardistas, Gómez Bosch sitúa su pintura. Es una pintura que se funda y se arregla en los perennes del realismo; pintura veraz y honrada, limpia de preocupaciones, ajenas al noble y grandioso oficio de paletas y pinceles”. Federico Díaz- Falcón en el diario “Madrid” “El paisaje canario nos habla al alma. Eso explica que la pintura de Gómez Bosch sea una pintura sociológica y contemplándola nos viene a la memoria La Tour, aquel famoso pintor francés del siglo XVIII, de quien dijo Gustavo Larroumet: “cala hasta el fondo de las almas y cada retrato es una cumplida descripción del carácter de su modelo”. Lo mismo podíamos decir de Gómez Bosch.” Alfredo Marquerie en una conferencia dijo: “Se ha dicho con razón que no hay pintura sin aire. Y la de Gómez Bosch es magníficamente una pintura de algo más, una pintura de clima, abre con sus cuadros ventanales y miradores, a la contemplación de la flora y de la humanidad isleña.” Este es el pinto grancanario Tomás Gómez Bosch. Y para conocer su vida hemos ido hasta su domicilio, el tranquilo y recoleto barrio de Buenavista. El mismo artista ha sido el que nos ha abierto la puerta. Confesamos que no lo conocíamos por sus rasgos físicos, pero inmediatamente nos dimos cuenta de que tenía facha y clase. Su nariz, un poco roma, sus orejas grandes, su mirada distraída y su natural sencillez son los rasgos que más sobresalen en el pintor Tras los saludos de rigor, don Tomás nos dice que ha seguido con mucho interés las crónicas publicadas en estas columnas de “Nuestra ciudad y sus hombres” - Es una pequeña historia de los últimos años de nuestra provincia. Naturalmente servirá para hacer un poco de justicia a figuras ilustres de nuestras islas. Estamos hablando en una confortable sala de estar. En las cuatro paredes cuelgan magníficos cuadros del pintor. En un rincón, un televisor. En el bando, entre abierto, una cómoda butaca. Sobre una silla varios periódicos y revistas. En una mesa un libro. Don Tomás no pierde el tiempo: 14 - Aquí paso la parte de mi vida diaria. Desde que estuve enfermo pinto muy poco, algunos ratos por las mañanas y los domingos. El médico me dijo que no me esforzara mucho. - ¿Qué tal se encuentra? - Bien, pero uno se siente un poco acobardado. Pasan unos minutos y el artista nos invita a pasar a su estudio, que ha levantado en el último piso de la casa. Las escaleras las subimos lentamente. Se abre una puerta y ante nosotros tenemos el estudio de Gómez Bosch. Una sala de unos siete metros de largo por cuatro de ancho. Cuadros y más cuadros. Unos terminados, otros por rematar o retocar. Otros se ven que están olvidados. También observamos algunos albúmenes con fotografías y recortes de prensa. Y también una bien nutrida biblioteca especializada en arte. ¿Cree usted que yo puedo decir algo, que es interesante? - Su vida tiene que ser interesante. Usted como otros canarios, son parte de la historia de nuestras islas. No le quepa duda alguna. Nuestra profesión periodística nos lleva a husmear todo. En el presente caso tenemos predilección por las viejas fotografías, por los recuerdo de familia, por todo aquello que está enmarcado en la intimidad del biografiado. Don Tomás Gómez Bosch se sonríe levemente y nos comprende. Es parte de nuestro trabajo. Al poco rato la mesa del estudio del pintor está abarrotada de fotografías, de recortes de prensa, de programas de exposiciones, de papeles y de cartas, etc. Nos vamos situando. Pero yo observo al pintor. Me interesa su carácter, su forma de ser y de pensar. Sus pequeños gestos espontáneos. Nos sentamos frente a frente. Vemos nuevamente sus recuerdos gráficos. Seleccionamos algunos. Le pregunto por la fotografía de boda, que no la veo por ningún lado: - Verá usted, es que no quise hacérmela. Una manía ¿sabe? Después su esposa nos informaría que no fue por una manía sino que don Tomás Gómez Bosch se casó un poco mayor, con 34 años y no se veía muy guapo, quizás. 15 - Son cosas que se le meten a uno en la cabeza. Pero un mes más tarde nos hicimos una que se la entregaré el lunes. Si es que la encuentro. El primer contacto con el pintor ha terminado. El lunes seguiremos relatando su vida, sus primeros años de la infancia, allá a finales del siglo XIX, cuando Las Palmas era una ciudad tranquila, sosegada llena de encanto pueblerino, con sus tertulias, sus cafés y sus peñas de amigos. Eso dicen los más viejos del lugar. II Eco de Canarias 29 de septiembre de 1.966 1900: Una polémica graciosa y una fecha con encanto El pintor estudia en colegio de San Agustín y dibuja “clandestinamente mientras trabaja. Son las once de la mañana. El lunes se ha iniciado con una temperatura agradable. “Sentimos” el otoño, casi lo percibimos, lo olfateamos. Es una sensación gozosa que casi llega a ser una impresión de tipo sicológico, una misteriosa asociación de ideas basadas en las circunstancias climáticas. El otoño y la primavera son las dos estaciones del año más agradables. Incluso para trabajar. Y para vivir. Nos sentimos más humanos, si este término puede ser paralelo al romántico, más sensible a las circunstancias que nos circunda. Conversar con don Tomás Gómez Bosch en su estudio a esta hora del día y con esta idílica temperatura, es un placer extraordinario. Los rayos del sol penetran por una ventana, delicadamente, detenidos por la suavidad de una coquetona cortina a manera de 16 visillo. Por otra, un fresco airecillo que hace bailar los papeles y moverse a una pequeña lámpara. El pintor se ha sentado en una amplia butaca. Se ha fijado las gafas y nos ha mirado interrogativamente. Iniciamos el diálogo: - Me interesa el artista como tal y como hombre. Creo que debemos acercar las (grandes) figuras de Canarias al pueblo. - - Siempre he sido un hombre sencillo, ya lo comprobará usted. - Por eso mismo me interesa que cuente usted la vida de Tomás Gómez Bosch, primero; después la del pintor. - Tomás Gómez Bosch nació hace muchos años, en el siglo pasado, un día cualquiera de un año cualquiera. - - ¿Cuándo? - - El 17 de diciembre de 1883 - Es decir, que tiene ochenta y tres años. Para nosotros y lo decimos sinceramente, ha sido una sorpresa, porque le calculábamos, a lo sumo, unos sesenta y más años. Gómez Bosch se conserva increíblemente bien, salvando una dolencia cardíaca que no ha revestido por fortuna ninguna gravedad. Come normalmente, duerme unas ocho horas, hace algún que otro ejercicio, lee mucho y pinta a ratos. - ¿Dónde nació? - En Las Palmas. En una calle que lleva su primer apellido, Cano. No recuerdo el número, pero muy cerca, creo, de donde está actualmente la Sección Femenina. Fui el cuarto hijo de una prole de doce hermanos. Mis padres eran peninsulares: él originario de Murcia; ella de Mallorca: Vinieron muy jóvenes y aquí se establecieron al calor de la cordialidad y hospitalidad de esta capital de mi alma. - ¿Cómo transcurrió su infancia? - Aquí poco había que hacer en aquellos años. Las Palmas ha iniciado su desarrollo y su pujanza en los últimos veinte años. En mis tiempos de niño esto era un pueblo grande, y nada más. - Estudió, claro. - Así es. Fui al principio a la escuela primaria, hasta los diez años. Poco después iniciaba mis estudios de Segunda Enseñanza en el famoso colegio de San Agustín, desaparecido ya. Entonces era su director don Diego Mesa de León. - ¿Recuerda algún condiscípulo suyo que viva en la actualidad? 17 - ¡Hombre, cómo no! Don Luis Doreste Silva. Él estudiaba en un curso inmediatamente superior al mío. Me lleva un año. - ¿Pues sabe, don Tomás, que forman ustedes un dúo envidiable? - ¡Oh, eso quisiera yo! - ¿Qué tal estudiante era? - No muy bueno; tampoco malo. Solamente regular. Y era porque la pintura y el dibujo me tenían absorbido. Era una pasión grande. A todas horas estaba dibujando. Aún cuando tenía ante mí cualquier libro de texto. Se me iba la imaginación; tomaba un papel y un lápiz y estaba horas y horas haciendo garrapatos. - ¿Cuál fue el primer profesor de dibujo? - ¿Cuándo estudiaba bachillerato? - Si. - Don Nicolás Massieu. Este fue mi primer profesor. Él me enseñó muchos secretos del dibujo que yo desconocía en mi infancia. - ¿En qué año terminó el bachiller? - Un año con encanto: 1.900. - Cuando se pasa de un siglo a otro se hacen grandes fiestas. ¿Es cierto? - Igual que cuando se pasa de año. Por lo menos eso fue lo que ocurrió aquí en Las Palmas. Lo que sí recuerdo bien es que hubo una gran polémica respecto a la fecha. También respecto al año. Unos decían que el siglo XX comenzaba en 1900; otros que en 1901. - ¿Y usted qué opina? - A mí me daba exactamente igual, pero creo que lógicamente debió ser en 1900. ¿No le parece? - Termina el Bachillerato e inicia sus estudios superiores. - Pues no. Terminé mis estudios de Segunda Enseñanza y me puse a trabajar. - ¿En un negocio de la familia? - Sí, en un establecimiento de mi abuela, viuda de don Tomás Bosch y Sastre. Durante muchos años estuve haciéndolo, pero sin perder jamás la esperanza y la ilusión se seguir por el camino que la vocación me marcaba desde que era pequeño. No podía resistir la tentación. - ¿Pero olvidó por completo el pintar? - No, eso no. Trabajaba y en ratos perdidos, casi siempre en domingos y días festivos hacía un poco de dibujo. Pintura aún no. - ¿Cuánto duró esto? - Hasta que me propuse ir a París, que luego cambié por Madrid. Pero si le parece dejamos esta nueva etapa de mi vida para contarla en otra ocasión. Mañana. Me interesa mucho que ahora veamos algunos cuadros. Durante cerca de una hora, don Tomás Gómez Bosch nos va mostrando una parte de su exhaustiva producción artística. Catálogos, programas y fotografías de retratos que ha hecho a lo largo de su vida pictórica. El artista goza de esta intromisión periodística y a cada instante nos reprocha con cierta dulzura nuestro apego por las fechas. 18 - Tantas fechas. Tantas fechas. ¡Con la memoria que tengo yo, querido amigo! - Le perdonaremos algunas, palabra de honor. Don Tomás Hace un ademán como de duda y se fija otra vez las gafas sobre su roma nariz. El Eco de Canarias 21 de septiembre de 1.996 III GÓMEZ BOSCH SE HACE AMIGO DE ROMERO DE TORRES El pintor canario estudió durante tres años en Madrid Sorolla recibe un racimo de plátanos al son de la Marcha Real El joven Tomás Gómez Bosch inicia sus estudios en una escuela de enseñanza primaria, para poco más tarde al prestigioso Colegio de San Agustín para cursar el Bachillerato. Hace la correspondiente reválida y se produce un corte en la preparación intelectual o de formación del pintor. Durante algunos años trabajaba en un comercio de su abuela sin desligarse por completo del dibujo. A ratos perdidos trabajaba con intensidad en esta afición que le atrae poderosamente. El artista se va forman también desde el punto vista humano. Se hace hombre. Alguna vez asiste como mero espectador a conferencias y exposiciones. En su interior bulle la idea con la cadena que le ata y saltar las fronteras de la isla y volar hasta Paris. Rafael Martín Fernández de la Torre Gómez Bosch no es un conformista. Ni tampoco sabe aguantar con estoicismo las estocadas de la vida. Es un rebelde. Sin actitudes de cara a la galería... Echa a volar su 19 imaginación, sopesa opiniones y juicios. Y toma una decisión crucial para su futuro: marcharse a Madrid. Gómez Bosch comunica a sus familiares que deja el trabajo y que quiere proseguir sus estudios de dibujo. Es una firme determinación; su vocación hay que respetarla. Hay acuerdo familiar y Tomás Gómez Bosch, joven aún, toma el barco correo, desembarca en Cádiz y emprende viaje hacia Madrid. Es un viaje larguísimo, de semanas, una aventura casi. Entonces no había DC-8 que acercara Madrid a Las Palmas en el mismo tiempo que se hace por carretera el itinerario desde Las Palmas a San Nicolás de Tolentino. Tomás Gómez Bosch llega a Madrid, la ciudad dorada de la juventud de entonces. El ambiente cultural es intensísimo: Unamuno, Pérez Galdós, Valle-Inclán, Sorolla, Julio Romero de Torres, Azorín y otros muchos con sus famosas tertulias de los cafés de Madrid, Levante y Gijón, que ponen sobre la actualidad matritense el sello inconfundible de su personalidad. Bulle la generación del 98. Políticamente se viven momentos muy interesantes. En África ha nacido una nueva rebelión, la de 1.904. Pero Madrid vive un poco a su aire. Se habla, se comenta, pero también se procura llevar una existencia cómoda. Tomás Gómez Bosch llega a la capital de España con un bagaje inmenso de ilusiones, deseos y esperanzas. Ávido de aprender y estudiar a los grandes maestros del momento y a los clásico de la pintura española. Toma contacto con varios grupos de estudiantes y personalidades canarias e inicia su vida de estudiante, alternándola con alguna otra juerga sin importancia, en la que el mosto abunda en proporciones moderadas pero suficientes para alegrar las dificultades del momento. - Naturalmente, mi primera visita fue al Museo del Prado. Llegué hasta sus galerías con casi devoción. Muy nervioso y todo emocionado. Mi primera visita duró casi cuatro horas. Me extasiaba ante los cuadros de Velázquez, Goya y el Greco, mis maestros. Al otro día volví de nuevo. Allí estuve hasta que casi me echaron. Estos tres pintores me entusiasmaban. - ¿Volvió con frecuencia? - ¡Ya lo creo! Hice numerosas copias durante el tiempo que estuve en Madrid. Me sirvió mucho esta experiencia. - ¿Con quién estudiaba en Madrid? 20 - Fui alumno de dibujo de don José Garnelo, una figura nacional de la que aprendí muchas cosas. - ¿Pintores conocidos? - Solana, Sorolla, Zuloaga y Julio Romero de Torres. - ¿Amigos? - Conocidos excepto el pintor cordobés que tanto enalteció a la mujer de su tierra natal. Romero de Torres fue íntimo amigo mío. - ¿Cómo era personalmente? - Un cordobés cien por cien, pero sobre todo muy amable y cortés .Un caballero. - ¿Cómo se desarrollaba su vida? - Por la mañana estudiaba con don José Gardelo y después me iba al Mueso del Prado. Por la tarde al estudio del pintor Emilio Sala, no para tomas lecciones, sino para asistir a una tertulia, o más bien reunión de pintores y alumnos suyos. Algunas veces trabajaba yo en ese estudio. Sala fue muy deferente conmigo, animándome siempre en mis primeros pasos. - ¿Recuerda alguna anécdota? - A principio de siglo el plátano era un manjar diría que casi desconocido. Un día recibí desde Las Palmas un gran racimo de ellos, y como sabía que Sorolla era un gran entusiasta de esta fruta se lo llevé a su casa para regalárselos. Cuando los vio se alegró infinito y me dijo: “No sé si habrá que tocar la Marcha Real”. - ¿Cuánto tiempo estuvo estudiando en Madrid? - Unos tres años aproximadamente. - ¿Tan poco? - Así fue. Mis padres me apremiaban para que volviera. El negocio no iba muy bien y era necesaria mi presencia. Así es que decidí volver a Las Palmas y, a finales de 1906 abandoné Madrid, a donde no volvería hasta pasar muchos años. De mi estancia en esta capital guardo los mejores recuerdos de mi vida. Fueron inolvidables. Don Tomás Gómez Bosch se reclina sobre la butaca. Respira hondamente y guarda silencio. El diálogo ha quedado ligeramente en suspenso. Desde el exterior llegan los apagados ruidos de algún que otro vehículo que pasa toda velocidad. Los gritos de alegría de unos niños que adivinamos que juegan sobre la acera o en el cercano jardín. Un rayo de sol ha penetrado por el quicio de la ventana y ha roto el pétalo de una flor que permanece yerta. Un pincel está caído. El retrato de un hombre nos mira fijamente. Sigue el silencio. 21 Eco de Canarias 22 de septiembre de 1966 IV GÓMEZ BOSCH ABANDONA TEMPORALMENTE LA PINTURA En 1937 celebra su primera gran exposición en el Gabinete Literario Colacho Massieu fue un gran pintor y un entrañable amigo, casi un hermano” Don Tomás Gómez Bosch es un hombre de pocas palabras. Un ser reflexivo como casi todos los pintores de corte académico. Acostumbrado al silencio artístico, a la concentración de ideas, a la observación, muy lejos del arte publicitario, montado en el absurdo, en las extravagancias y las intemperancias. Es un hombre serio que hace una pintura seria, clásica, de finos acordes en grises y que en sus retratos obtiene una gran elegancia y una profunda verdad humana. Gómez Bosch ha logrado con su técnica vencer todos los secretos de las resistencias formularias, modelando con notable soltura la gracia siempre nueva de la materia en triunfo, para dotarla de un leve aire poético que afianza y adorna el realismo de sus cuadros. Dentro de esta seriedad de Gómez Bosch, como persona y artista, está el canario con su peculiar ironía de las cosas, un carácter bondadoso y una sencillez ejemplar en todas sus actitudes. Vive en su mundo. Lo que le rodea, excepto la pintura, es secundario. Su misma esposa nos lo decía en una amplia charla que sostuvimos el sábado. Para Gómez Bosch todo está circunscrito a la pintura. - ¿Cuándo empieza un cuadro lo muestra a su esposa o hijos? - Sí, pero especialmente a mi esposa. Ella es una eficaz colaboradora. Mis hijos son meros observadores de la obra de su padre. - ¿Son críticos veraces? - Cuando hay algo que no les gusta, lo dicen rápidamente. - ¿Usted les hace caso? - Depende de sus observaciones. 22 La conversación ha ido por otros derroteros. Volvemos al relato cronológico. Don Tomás Gómez Bosch tiene que regresar a Las Palmas, el negocio tiene que ser atendido mejor y es muy necesaria su presencia. El pintor regresa a nuestra capital a finales de 1906, después de haber pasado tres años en Madrid. - Regresé y estuve cerca de 24 años sin pintar. Fue una de las etapas más difíciles de mi vida. Mis ilusiones y afanes se vinieron abajo de repente y me vi sumido en el anonimato más oscuro. No obstante asistía, una vez más, como mero espectador a exposiciones – las pocas que se celebraban en Las Palmas - y trabajaba en mi modesto estudio muy de vez en cuando. No tenía tiempo para nada; mis trabajos comerciales consumían todo mi tiempo libre. Había que defender las industrias que poseíamos, aunque al final todo resultó vano: nos quedamos sin ellas. - ¿Qué hizo? - Monté un estudio fotográfico. Me sirvió para expansionarme un poco. A modo de escape. Y ahí está. - Prosiga. - Me casé ya un poco mayor y sigo dando gracias a Dios por este paso. Su esposa –que está junto a nosotros- esboza una sonrisa feliz. Ya nos contó el día que don Tomás se resistió a seguir la tradición de todos los casados. No quiso hacerse la acostumbrada fotografía de boda. Al mes y después de haberlo pensado mejor, se fotografió con su señora. - Mi vida transcurrió anodina durante estos largos años. Trabajaba en el estudio fotográfico y hacía algún que otro cuadro cuando era posible. Seguimos atosigándole con cifras y fechas, pero el pintor tiene mala memoria: - Fíjese hasta qué punto, que llevo en mi chaqueta un librito con las fechas de los nacimientos de mis hijos, por si me preguntan alguna vez. Don Tomás Gómez Bosch, después de veinticuatro años de silencio artístico, toma contacto con el mundo del arte en un intento de volver a él. Nuevamente su vocación le lleva a una actitud rebelde. De resistencia a todo aquello que no sea pintar. Y surge la gran ocasión: - Don Luis Doreste Silva, que como siempre ha sido para mí como un hermano más, siendo presidente del El Gabinete Literario, me invitó a que celebrar una exposición. Era a principios del Movimiento Nacional. Quizás por 1937. Naturalmente no lo pensé mucho. En unos cuantos días la organicé de acuerdo con las directrices marcadas por el Gabinete y presenté una selección de mis mejores obras, todas ellas realizadas durante los años que permanecí en silencio 23 artístico. Entre ellas, una cabeza del Generalísimo Franco. Esta fue mi primera y gran exposición. Anteriormente participé, en Madrid, en algunas de carácter colectivo. Que años más tarde volví a repetir en dos ocasiones más, hasta el momento en que de forma oficial fui presentado al mundo en el arte de Madrid, hecho que ocurrió mucho más tarde. - ¿Cuántos cuadros presentó en el Gabinete Literario? - Podría mirarlo ahora, pero posiblemente fueron unos cuarenta. Poco más o menos. - ¿Qué motivos eran? - Retratos, paisajes, marinas, floreros, bodegones, etc. - Una pregunta don Tomás, ¿recuerda la primera obra que vendió? - Eso sí que es difícil de decirlo. En aquellos años se vendía poco y mal. - ¿En la actualidad se hacen mejor las cosas? - Sí, sí, mucho mejor. - Antes del año 1936 ¿Cuál es la entidad que mas actividad artística desarrollaba? - Tal vez el Casino. Quiero decir El Gabinete Literario. También el Museo Canario. - De su época ¿qué pintores quedan? - Solamente yo - ¿Su mejor amigo entre ellos? - Colacho Massieu era de mi generación pero un poco mayor de edad. Creo que me llevaba unos seis o diez años. Nuestra amistad fue entrañable. Infinidad de veces salíamos juntos al campo, a pintar. - ¿Es usted autodidacta de la pintura? - Hasta cierto punto todos los pintores somos autodidactas. El artista nace y después se hace. Esto es evidente. Pero en su formación hay que tener en cuenta, su vocación y autoformación. No olvide, querido amigo, que la pintura es también muy ingrata, se sufre mucho hasta conseguir cierto auge y fama. - ¿La pintura es una solución económica para usted? - Cuando me iniciaba no. Más tarde fue una necesidad para mí. La vida del artista es así de desconocida para muchos. Todo no es de color de rosa. - Pues bien, si le parece don Tomás, dejamos para mañana el capítulo mayor de su vida. Cuando el pintor ha triunfado de forma definitiva, celebra sus grandes exposiciones y consigue alcanzar fama nacional como el genuino representante de la pintura canaria. - Muy bien, pero a mí me parece que mi aportación ha sido más modesta de lo que dice usted. Pienso que he hecho algo y que mis grandes éxitos han tenido lugar en Madrid, Barcelona, Las Palmas y Caracas, pero cuando pase algún tiempo más, la historia se encargará de fallar. - Canarias siempre hace justicia a sus hijos, con el lógico transcurrir de los años. 24 El Eco de Canarias 23 de septiembre de 1.966 V “RETRATO DE MI MADRE” OBRA CUMBRE DE TOMÁS GÓMEZ BOSCH “Puede que no sea la mejor que he hecho, pero sentimentalmente lo es para mí. Marquerie y Pombo Angulo presentan al pintor canario en el mundo artístico de Madrid. Don Tomás Gómez Bosch – nos decía ayer-es un enamorado del paisaje grandioso de la Cumbre. Han sido muchas las veces que se ha asomado desde aquel balcón inmenso de la isla, para contemplar el panorama que la naturaleza ha embellecido con su sabiduría. El Parador de Tejeda es el lugar de cita que el pintor ha tomado al asalto, como si fuese un castillo de hadas que se han posado sobre el pincel para llevar al cuadro la sinfonía pétrea de sus vistas. El periodista, que también es un enamorado de aquellos lugares, ha sabido comprender y captar la intensidad de las palabras del artista. Don Tomás Gómez Bosch nos habla de su vida como si estuviera dibujándola. Llevando al relato todas sus impresiones, siempre con una objetividad extrema, a veces adorna sus palabras con un suave lirismo, que hace más apto el cuadro pero siempre poniendo el color y la luminosidad de su tierra canaria, dejando en esta ocasión el gris a un lado, para llevar hasta nuestros ojos imaginativos una escena y encuadre perfectos. - Después de mi primera gran exposición en el Gabinete Literario, continúo pintando; trabajo intensamente y me preparo ya definitivamente para una vida artística mejor. Por esa época hice la obra más lograda que he llevado a cabo y la cual me valdría pasar a la Enciclopedia Espasa, que la recogió. Se trata del retrato de mi madre, que si para mi es una obra de gran valor artístico, lo es aún más desde el punto de vista sentimental. - ¿Cuánto tiempo tardó en hacer este retrato? - ¡Ah, no sé! Tardé bastante, ya que lo hacía en domingos y días festivos, porque a pesar de todo tenía que dedicarme a mis trabajos de fotografía. 25 Mi madre venía a casa durante estos días, almorzaba con nosotros y después posaba. La pobre se quedaba algunas veces dormida y yo pasaba las de Caín. Ya era muy mayor. ¿Cómo fue que la Espasa reprodujera este retrato dos veces? - Los editores vieron el cuadro en una de mis exposiciones de Madrid, me pidieron autorización para ello y reprodujeron el cuadro, aunque tengo que decirle que fue una sola vez, ya que en la segunda fue un retrato de mi mujer. - Bien, después de su exposición en el Gabinete Literario ¿hizo alguna otra? - Sí, quizás la más comentada para mí desde luego la más importante de mi vida ya que fue la presentación de mi obra ante la élite del mundo artístico de España. - ¿Recuerda el año? - Alrededor de 1947. - ¿En qué sala de exposiciones? - En el Salón Dardo, que ya hoy no existe. Fue entonces cuando tomé contacto con los editores de la Enciclopedia Espasa. Recuerdo que fui presentado por Alfredo Marquerie y Pombo Angulo, entre otras personalidades, el Ministro de la Gobernación, don Blas Pérez González, que como usted sabrá es de la isla de La Palma. Recuerdo que fue él quien me ayudó mucho en una cosa sin importancia, pero que a mí me trajo de cabeza durante dos días. - ¿De qué se trató? - Pues que cuando llegué a Madrid me pusieron una serie de pegas enormes en la Aduana de Barajas. El papeleo era enorme y los depósitos que tenía que realizar cuantiosos. Todo ello me iba a retrasar el montaje de la exposición que sería inaugurada en pocas fechas. Fui a verle, me recibió y en veinticuatro horas tenia resuelto todo el problema. Respiré con satisfacción. Ya le digo que quizás no tenga importancia, pero los que somos artistas y nos ha ocurrido alguna vez esta tortura, sí que la tiene. No entendemos de papeleos. - ¿Cuál fue su segunda exposición? Tras la celebrada en Madrid, expuse en Barcelona. Fue en el año 1950. El 30 de noviembre, fue en la sala Hespérides, que por cierto yo inauguré. Presenté 26 cuadros. ¿Esta fue la última exposición que hizo en la Península? - No, amigo, la última fue en Madrid en 1952. - Así pues, en Madrid hizo dos exposiciones. - No; fueron tres. En la primera intervine en una colectiva organizada por el Marqués de Lozoya. Fue en 1944…me parece porque en esto de las fechas soy una calamidad. La segunda, y más importante, en 1947, y la tercera y última en 1952. Y como ya le he dicho, otra en Barcelona. - Por favor, es sólo curiosidad. ¿Qué número tenía el cuadro de su madre en la exposición? - El número treinta. - ¿Dónde está ese retrato? - En mi casa, en el salón de estar, junto con el de mi esposa. - ¿Lo han intentado comprar alguna vez? 26 - Sí, sí, muchas veces. Pero no he llegado nunca a un acuerdo con los compradores. El Museo de Arte Moderno es el que más empeño ha tenido, pero tampoco hubo acuerdo. Es muy difícil para mí desprenderme de esta obra a la que tanto amo. - Seguimos pidiendo fechas y más fechas al señor Gómez Bosch y él nuevamente nos responde que no recuerda. Nuevamente llama a su esposa, quien se acerca en auxilio suyo. La señora de Gómez Bosch es una mujer amable y simpatiquísima. La admiradora número uno de su esposo, una eficaz colaboradora que siempre está a su lado. Pese a su edad, aún conserva el encanto de una belleza fina y delicada. - ¿Qué tipo de pintura le gusta hacer más? - Todos, pero tengo predilección por los retratos; es además lo que me va mejor. - ¿Le hubiera gustado se escultor? - No lo he pensado. - ¿En su juventud, qué pintura prevalecía? - La pintura de figuras históricas: personajes, batallas, actos de la familia real, estampas políticas, etc. Después, los maestros de los primeros años del siglo, Sorolla, Romero de Torres, Zuloaga, terminaron con esta forma de hacer. Nuestra conversación con el pintor canario se ha ido apartando. Algunas fechas han venido a su memoria auxiliado por su esposa, aunque quedan algunas por despejar y al final nosotros le recordamos un hecho que también se le olvidó y que ha llegado hasta nosotros por medio de de la autorizada voz de don Luis Doreste Silva, quien ayer nos decía que a Gómez Bosch se le había olvidado señalar que en su exposición del Gabinete Literario había intervenido su hermano Cástor Gómez, pianista y que fue precisamente don Luis quien hizo la presentación de los dos hermanos. Un detalle curioso e interesante. Una anécdota más que son como paréntesis gratos en el párrafo corto y chocante de nuestra vida. 27 El Eco de Canarias 24 de septiembre de 1966 VI GÓMEZ BOSCH EXPONE EN EL CÍRCULO MILITAR DE CARACAS Ha sido uno de los pocos pintores extranjeros que supo captar la luz de Venezuela. En 1960 obtiene el Premio de Honor de la Exposición Regional de Bellas Artes. La obra de Gómez Bosch es una pintura sincera. Por lo menos es objetiva. Casi una fotografía exacta de lo que se quiere llevar al lienzo. Si su pintura sólo tuviese esta cualidad –que posee más- nos quedaríamos con ella, porque la sinceridad en la pintura, en la música, en nuestras actitudes y en nuestras ilusiones, es lo más puro que el hombre puede dar y recibir. Nuestro mundo necesita de hombres sinceros, por lo menos para poder creer en algo y no dar vueltas en torno a una entelequia o a una utopía, para terminar estrellándonos con la misma sombra de uno mismo, convertida en piedra impermeable a toda acción exterior. ¿Existe sinceridad en la pintura? Suponemos que sí, por lo menos en ésta que se amolda a los patrones clásicos y academicistas. La otra puede que también lo sea, pero no queremos molestarnos en averiguaciones que nos pueden producir un desengaño artístico. La obra de Gómez Bosch responde a la misma personalidad del artista. Don Tomás es un hombre bueno, melancólico y lleno de sabiduría, que en esta faceta es técnica, ciencia y vocación. Cuando no nos hemos entrevistado, por la tarde me llama por teléfono. A la misma hora: siete y media. “Hoy me ha gustado”. O: “No me interpretó bien”. Cuando me dice que le ha gustado el capítulo es porque he puesto en boca de él una frase cariñosa para su madre, su esposa, sus hijos o amigos. Cuando pone peros es porque he olvidado algún detalle o frase en la que recordaba a alguien. 28 - El título de Colacho Massieu me ha gustado. Ha sido un pequeño tributo a alguien que ha sabido llevar el nombre de Canarias muy alto. Esto me dijo esta mañana mientras mostraba una serie de cartas recibidas en el Eco de Canarias en las que se felicita al pintor por el magnífico retrato del prelado de la diócesis, Doctor Pildain y Zapiain, reproducido en nuestra edición de ayer, que como se sabe, fue conseguido a base de una fotografía. - Plasmar el ropaje fue cosa distinta. Pero esto pertenece al secreto del sumario. - ¿Conoce el señor obispo este cuadro? - No. Aún no. Yo hubiera querido que hubiera posado pero ya conocemos todos su natural sencillez y humildad. Estoy seguro de que se hubiera resistido. Pero como pintor y católico no podía dejar de hacer esta obra de la que me siento orgulloso. Don Tomás, tras este pequeño paréntesis explicativo, vuelve a relatarnos su interesante vida. - En 1962 hice mi última exposición en Madrid. Aunque antes celebré una en Caracas. En el Círculo Militar de las Fuerzas de la Armada. Presenté 39 cuadros. De ellos cuatro o cinco los llevé desde Las Palmas, los demás los pinté allí. - ¿Cuánto tiempo estuvo en Caracas? - Un año. En este momento interviene su esposa, quien nos informa que Gómez Bosch hizo también dos exposiciones en Santa Cruz de Tenerife. Pero esto ocurrió anteriormente. Alrededor de 1947 o 48. De nuevo volvemos a Caracas. Gómez Bosch nos dice que fue un autentico éxito, de crítica y de público. Asistieron a la exposición lo más florido del mundillo artístico de Caracas, prensa y gran cantidad de canarios. 29 - Precisamente hace unas semanas estuvo aquí el general Risquet, Jefe del Estado Mayor del Ejército venezolano, quien fue uno de los que más me alentaron. Vino a saludarme con su señora y a invitarme a que volviera, pero ya va a ser difícil. - ¿En qué año fue esa exposición? - En 1959 - ¿A qué nivel está la pintura en Venezuela? - En un alto nivel. - ¿Fue su única exposición? - No. Fueron dos. Esta que tuvo lugar en el Círculo y la otra en un salón del que ahora no recuerdo su nombre. - ¿Presentó nada más que retratos? - Retratos y Paisajes. - ¿El paisaje venezolano es parecido al canario? - En cierto modo sí. Es muy interesante. Nuevamente interviene su esposa: - Precisamente la prensa afirmó, así como el público que había sido uno de los pocos pintores que mejor había plasmado el sol de Venezuela. - La luz - interviene Gómez Bosch- Allí, en Venezuela, hay un lugar que le llaman Monte Ávila que es el que rodea a Caracas, y que todos los pintores que llegan a este país intentan llevar al lienzo porque es un paisaje muy interesante. Naturalmente yo hice lo mismo. Durante la exposición me dijeron que había conseguido captar la luz y la figura de aquella imagen con suma perfección, cosa poco común entre los pintores extranjeros. - ¿Qué tal acogida se le dispensó? - Francamente estupenda. - ¿Vendió muchos cuadros? - Sí, creo que fueron todos. - Después de regresar a Las Palmas, tras un año de ausencia ¿celebró alguna exposición más? - En el año 1961, en el mes de noviembre. Y más tarde me trasladé a Madrid en el año 1962; tuvo lugar la muestra en el Hogar Canario. Esta fue mi última y definitiva exposición en la capital española. Después me limité a presentar mis obras en Las Palmas. Casi todos los años. Hasta que me puse enfermo. La última fue en 1964, también en el Gabinete Literario. - ¿Usted no opina que en Las Palmas se está produciendo últimamente una especie de inflación de exposiciones? - Eso pienso, ya son muchas. No obstante también debo decirle que esto beneficia al público siempre y en cuanto se haga una previa selección. - ¿VA usted a las exposiciones? - Antes iba a todas; ahora no. - ¿Presentará alguna exposición próximamente? - Sí, pero para mandarla a Caracas. En Las Palmas por ahora no. 30 - ¿Cuál sido el premio que con más cariño ha recibido y con mayor entusiasmo? - El premio de honor de la Exposición Regional de Bellas Artes, que como ya se sabe se celebra en el Gabinete Literario cada dos años. Lo obtuve en 1960 - ¿Con qué cuadro? - Con uno que titulé “Un retrato”. Por cierto en esta ocasión me sucedió una cosa muy curiosa. Yo no pensaba presentarme, pero me animaron y fui a la exposición con un retrato que tenía hecho a una hija política mía, el cual pensaba regalárselo en una fecha conmemorativa, onomástica o cumpleaños, no recuerdo. El caso es que lo expuse y le concedieron el premio de honor. Naturalmente me quedé sin él, con el consiguiente enfado de mi nuera. Le hice otro nuevo y en paz. Gómez Bosch ha contado la anécdota con satisfacción. Observamos que estas situaciones le divierten y que además este premio de honor ha constituido un galardón que le ha colmado su dilatada vida como pintor del sol, la luz y el paisaje interior del Archipiélago en general y de Las Palmas en Particular. Mañana diremos adiós a don Tomás Gómez Bosch. El Eco de Canarias 25 de septiembre de 1966 VII EL ÚLTIMO CUADRO DE GÓMEZ BOSCH, UN PAISAJE DE VALSEQUILLO Plasmó las figuras del Conde de la Vega Grande, López Botas, Diputado Perojo, Dr. Déniz, Eusebio Navarro, Francisco Gourie y otras La figura de Avendaño Porrúa, obra inédita. Hoy decimos adiós a don Tomás Gómez Bosch. Mejor que adiós, hasta siempre. Las despedidas deben tener un sabor menos sentimental. Sobre todo en periodismo. La vida informativa tiene, casi siempre, unos minutos, unas horas de existencia... Siempre estamos diciendo adiós porque la noticia, la crónica, la entrevista y el reportaje tienen veinticuatro horas de vida, a lo sumo; mientras nace, se desarrolla y muere. Decimos hasta siempre a don Tomás Gómez Bosch porque estamos seguros de que seguirá siendo noticia. Cuando exponga de nuevo, cuando plasme alguna otra gran obra, cuando viaje, cuando haga el juicio crítico de una exposición. Cuando se es figura del arte, siempre ocurre de esta forma. 31 El periodista tiene que agradecerle al señor Gómez Bosch una sola cosa: el haber conseguido una amistad más. No por el acto informativo de haber relatado a grandes rasgos su vida, sino por la satisfacción de haberle conocido y haberse recreado en su obra. Vivo agradecimiento para él y para otros muchos, que me están enseñando a conocer mejor Canarias y a los canarios. A través del arte, de la pintura de Gómez Bosch, hemos conocido también al hombre y hemos aprendido, porque cuando se llega a su edad – ochenta y tres años- se consigue una serenidad de espíritu, un estar de vuelta sobre las pequeñeces de la vida, que obligatoriamente sus opiniones y sus juicios -y sus actitudes- son auténticas lecciones. Nuestra última conversación con el pintor gira en torno a los últimos años del arte y de la obra que aún tiene en perspectiva. Le preguntamos por la obra cumbre que siempre ha deseado plasmar y que aún tiene en proyecto: - Sí, siempre tenemos los artistas algo que hacer y que deseamos constantemente lograr. Pero en la pintura es algo más difícil. No se piensa, o se medita o se estudia: viene por sí misma. Pero yo pienso que mi obra maestra es el retrato de mi madre. Otros afirman que es el que tengo de mi esposa. Y también hay quienes creen que lo mejor ha sido el gran mural que hay en el Cabildo Insular, en el que se plasma la constitución del primer Cabildo de Las Palmas. Este fue un trabajo que me costó mucho trabajo y muchos sacrificios. También tengo la ilusión de hacer unos retratos de ancianos. Ahí verá usted un ensayo que queda por retocar. Efectivamente, sobre un mueble hay una galería de ancianos pintados con suma maestría, recogidos con bondad y matizados de una sencillez asombrosa. - ¿Ha hecho usted algún cuadro en el que se refleje la personalidad, el prototipo del campesino canario? - Un trabajo serio, a conciencia, no. Pero en cierta ocasión hice un ensayo con un personaje muy popular en Las Palmas, conocido por Pancho “el Bruto”. Naturalmente no era – ha muerto ya- quien mejor podía personalizar al campesino canario, tan lleno de virtudes y de valores. No obstante está enmarcado dentro del personaje popular de la isla. Recuerdo que cuando posaba para mí, cuando vivía en Las Palmas, sus carcajadas se oían en una legua. Era tremendamente simpático. - ¿Presentó ese cuadro en alguna exposición? - Sí, en una regional- - ¿Y figuras de la vida canaria? 32 - El conde de la Vega Grande, (quién fundó el Hotel Santa Catalina, el viejo hotel, no el actual); todos los señores que están en el cuadro grande del Cabildo; casi todos los almirantes que han pasado por nuestra isla; don Antonio López Botas, fundador de el Gabinete Literario; el diputado Perojo; Dr. Déniz; don Eusebio Navarro; don Francisco Gourie de Armas, fundado de la iglesia de Arucas; el actual obispo de canarias Dr. Pildain y Zapiain, y el último gobernador, don Antonio Avendaño Porrúa. Y otros muchos que ahora mismo no recuerdo. - Pasando al terreno económico ¿Cuál es el cuadro que ha vendido más caro? - Los retratos. - ¿Qué es más difícil de pintar, un hombre o una mujer? - Sin discusión, la mujer. El hombre tiene caracteres más acusados y es más fácil - ¿Y de alguna parte del cuerpo humano en especial? - Para casi todos los pintores siempre han sido los ojos y las manos; pero para mí, no. Me cuesta más trabajo la boca. - ¿Cuánto tarda en hacer un retrato? - Eso depende del tiempo que se posa. No se puede calcular. - ¿Usted ha empezado alguna vez un cuadro y no lo ha terminado? - Jamás. Todos los he terminado. - ¿Cuál es el último cuadro que ha realizado? - Un paisaje de Valsequillo. - ¿De nuestra geografía qué le gusta más pintar? - Las marinas. Especialmente la zona de las canteras, con mareas vacías y en puestas de sol. Para terminar esta serie de relatos preguntamos a don Tomás Gómez Bosch su opinión sobre la pintura abstracta. -Como no entiendo no puedo emitir un juicio justo. El pintor termina haciendo un encendido elogio del Marqués de Lozoya y recordando sus tiempos juveniles. La esposa del pintor nos dice que es muy casero y amigo de la intimidad. Aunque antes de casarse precisamente era lo contrario. - Muy alegre, muy alegre… Gómez Bosch en su última entrevista con quien escribe estas líneas tuvo palabras de cariño y gratitud para con su esposa. Un pequeño homenaje a la mujer, a la madre y a la compañera. Lo dijo con emoción, entrañablemente. El matrimonio, por un instante, se miró a los ojos. Y en ellos pude captar una vida entregada al arte. Al arte de ser padres y al arte de vivir para una vocación: La del espíritu. FIN DE LA SERIE CANO VERA. 33 DON TOMAS EN “SIESTA DE MEMORIAS” DE MARTIN MORENO 34 15 de septiembre de 1.996 La Provincia SIESTA DE MEMORIAS Martín Moreno. Cronista Oficial de Gran Canaria DONDE AFLORAN LAS RESONACIAS DE OTRORA AQUEL GRANCANARIO LLAMADO TOMÁS GÓMEZ BOSCH Artista y caballero, consta inolvidable en la historia protagonizada. El señor don Tomás Gómez Bosch, caballero ´a lo redondo ´ y por otras bastantes señas esposo y padre edificante, que pintaba bonito y a lo grande, extasiado y mágico, nació en Las Palmas de Gran Canaria el 17 de diciembre de 1.883 – el año mismito de haberse registrado el 26 de febrero la bendición, por el obispo José Pozuelo Herrera en presencia de un gentío inenarrable, del comienzo de las obras de nuestro Puerto de Refugio, rematadas por la casa “John A. Swanston” de Londres- , y en su ciudad moriría el ennoblecido artista el 25 de abril de 1.980. Es decir, a más de 96 años de edad después que sintió poquito antes, como el mismo dijo a modo de despedida, “que había dejado de ser joven”. Si a don Tomás lo apreciamos tantísimo cuando estaba en este mundo, ahora, recordándolo, nos pasa igual. Seguimos advirtiéndolo tal cual, y escuchando su conversación sonreímos ambos como otrora. En 1.946, cuando en su renombrado estudio fotográfico realizamos unos planos de cine, nos doblaba la edad, todavía más con un pico de tres años a su parte, y sin embargo, la mutua suerte en la manera de ser, de respetuosa franqueza y miras ideales, apuntó la amistad iniciada hacía un lustro. Fuimos, verdaderamente, el entendimiento de dos personas forjadas en sueños de artes y el apego a lo nuestro fundamental de la tierra: lo canario del alma. Era un conversador de nacimiento: de verbo seductor simple, a lo sencillo y timbrado a lo barítono; de sabia naturalidad, a veces deliciosa sumamente al reflejar el candor del niño grande que muy a su gusto llevaba dentro el admirado personaje de amigos innumerables, a toda escala desde el habitante más elevado a la acusada modestia del peón a sus órdenes en la fábrica dirigida durante más de veinte años. Ahora que, de otro lado, la campechanía de don Tomás se mostraba desconcertante de veras en los momentos de ´distraerse´. Una vez que se cruzó con cierto amigo, dialogaron como sigue: - No sé donde se mete usted que pasan años sin que nos veamos… - Nos vimos hace menos de un mes don, Tomás; en el Teatro Pérez Galdós. - ¡Y es verdad que tiene usted muchísima razón, caramba! Esta memoria mía… - Recuerde que comentamos su última exposición. - Sí, hombre, sí. Perdóneme el despiste… Y, dígame, a lo que veo, ¿lleva usted luto? 35 - Por mi esposa, recién fallecida. - La pobre… ¡Cuánto lo siento! No me enteré, que si no… - Su ponía que ignoraba usted esa desgracia mía. - Me estoy enterando. De otro modo hubiera asistido al entierro. - De todas maneras le quedo muy agradecido. Hablarían a continuación de otras cosas, y, en la despedida, se apuntó el distraído pintor a una matrícula de honor, cuando menos: - He tenido mucho en saludarle, don Tomás. - El gusto es mío y que siga usted bien…Y recuerdos a su esposa. La historia prosigue su curso. Nunca aceptamos la razón de cierta causa por otros imaginada. Mentira no es que se sumaron unas cuantas las personas dadas a decir que el grancanario Tomás Gómez Bosch constituía un “género de milagro” en su aproximación al arte de la pintura, por advenido a ella cuando ya tenía andada mucha vida en otras ocupaciones. Eso no era verdad, aunque le pasara que durante más de cuatro lustros hubo de verse retirado de la dedicación abrazada desde niño. Veinte años tenía cuando agarró el barco que lo dejó en Cádiz para tirar con dobles incomodidades hacia Madrid, a cubrir la etapa primera de su formación como pintor; ansia que le hervía por dentro de la piel, que es donde las sensibilidades les arden a los que las tengan. O sea que, como perfectamente explica su biógrafa inspirada, María Rosa Bordes Benítez, ni soñada tenía entonces, cuando aprendía a pintar, el muy isleño de Canarias la gran familia que les obsequió el amor de la esposa muy señora que sería doña Ana Arroyo Cardoso; a la que estábamos deseando nombrar por el encanto de evocarla entre nubes desde los silencios de nuestro escritorio, ella con la sonrisa inseparable que su rostro bellísimo dibujaba. Mas, antes de rememorar las andanzas del mozo Gómez Bosch en un Madrid que se gozaba en la estela de los ilustres del 98, empezando por donde es debido veámoslo en el tiempo de su infancia, ya después de haber asistido a la escuela primaria, saliendo del Colegio de San Agustín- donde cursaba la segunda enseñanza y aprendía dibujo y nociones de pintura con don Nicolás Massieu y Falcón- derechito a su casa de la calle Cano, cercana al caserío número 12, de habitaciones aglomeradas y patios espléndidos, que más tarde sería sede de los miembros últimos de la familia. Era el cuarto de los catorce hijos dados a luz por doña Ana Bosch y Sintes, cónyuge de don Cástor Gómez Navarro, un murciano alongado a esta tierra con ánimos de negociar a lo importante y que después de intenciones varias, ya casado, fue armador de barcos de ir a Cuba y otros puertos del Caribe, de donde traían miel, azúcar, ron y especias. Abriría oficinas en la propia calle del Cano, y despabilados sus hijos en esas preocupaciones se irían estimando continuadores de una empresa finalmente desaparecida en la vorágine posterior de una ciudad que se fue modernizando. 36 Sería aquella madre, todita dulzura y consuelo, el orgullo de su esposo y la adoración de los hijos, que aprendieron de su sencillez y la inmensa ternura rociada a conservar la unidad familiar. El talento de Luis Benítez Inglott la definió “robusta encina”, y su hermano Eduardo, yerno amantísimo de la excepcional anciana, no dejaba de visitarla cada día, recordamos; siendo así que una de aquellas tardes, al pasar para su casa por la Peregrina en el regreso de verla y preguntarle don Agustín Alzola cómo había encontrado a la feliz longeva, le contestó, ocurrente, con todo el mayor cariño por delante: - Como un cañón, gracias a Dios. ¡Pero con más teclas que el órgano de la catedral! En Madrid Desde su infancia, de plácido transcurso, conocidos los primeros secretos del arte de pintar, nuestro protagonista estaba ya persuadido de que debía marchar a Madrid. Concluidos sus estudios de bachillerato comenzó a trabajar en un almacén de la familia y desde que reunió las perritas necesarias se fue en 1.904. De entrada sabría, además de otras cosas, que los literatos y pintores afamados acudían a las tertulias de los cafés más populares. Eran fáciles de ver en ellos a Pérez Galdós, todavía celebrando los éxitos de su Electra triunfal; Sorolla, Romero de Torres, Valle- Inclán, Azorín… Aún no era Gutiérrez Solana, su compañero de taller, un pintor destacado, y lo mismo hizo amistad con Eliseo Meifrén, el catalán que se ´mandó´ en la Laja más de un caldo de pescado y al que Gómez Bosch había visto aquí siendo él niño. Ávido de saber de cuanto rodeaba sus esperanzas, entró a formar en el taller de José Garnelo y Alda, pintor consagrado y su segundo profesor de dibujo, y al año siguiente se estableció por su cuenta con un plan de trabajo que entrañaba llevar a efecto todas las mañanas una visita al Museo del Prado, a copiar a los tres maestros de su preferencia: El Greco, Velázquez y Goya; y por las tardes iba al Caserón del Retiro, a trazar la belleza de sus esculturas. Dichos directos contactos con el Arte se añadirían a enaltecer y depurar su estilo, indudablemente. Sería 1.906 otro año de aprendizaje¸ aunque, convencido a la sazón de no poseer la voluntad suficiente para seguir su carrera, se acobardó, o dejó “que tirara de él su amor a la peñita natal”. Meifrén, que lo orientaba en ocasiones, sería el primero que, al declararle el canario que no lo iba a dejar del todo, le llamó “cobarde”. Pero la decisión estaba ya tomada. Quizá, llevado de su arregosto a las corridas de toros desde que en 1892, a los nueve años, viera actuar en la Plaza de la Feria a don Fernando Gómez, “El Gallo”, padre de Rafael y “Joselito”, sintió idéntica sensación que un diestro cuando le cortan la coleta. Madrid significaría para Gómez Bosch una etapa coronada de hondísimas vivencias y nostálgico recuerdos. Allí había experimentado sueños de pintor en la evaluación artística de un momento notable. Allí le había regalado a don Joaquín Sorolla el primer racimo de plátanos que su padre le mandó de Canarias e igualmente tenía edificada una gran amistad con Romero de Torres, después continuada en un rosario de cartas inefables. Zuloaga lo había empujado a pintar bodegones… Ya de vuelta, las circunstancias se le tornaron adversas… 37 2 22 de septiembre de 1.996 EL GOZO DE MIRAR AL PASADO DE LA ISLA AQUEL GRANCANARIO LLAMADO TOMÁS GÓMEZ BOSCH Ana Arroyo Cardoso fue la mejor admiradora de su marido, y la ayuda más eficaz. Decíamos el domingo que al retornar en 1.906 a sus lares se le volvieron distintas y adversas las circunstancias a Tomás Gómez Bosch. Su padre, Don Cástor, tenía recién adquirida una fábrica de chocolate sita en la calle Torres, y afrontar el progreso de esa actividad sería el inmediato destino del regresado. Así, a los 22 años hubo de aquietar los pinceles en la entrega a crecer la fama del chocolate marca El Escudo y lustros más tarde, en la calle Canalejas se haría cargo además de la industria cervecera La Tropícal inaugurada en 1924, negocio a cuyos comienzos añadirían los devenires un final no deseado. Se mantuvo 23 años sin pintar. Aunque sí lo hizo mentalmente, reteniendo en sus pensamientos observaciones profundas de formas y colores. Entonces- y aquí volvemos al auxilio de su biógrafa puntual y entusiasta- a través de aquel tiempo de reflexionar y madurar internamente fue calificado como artista recoleto, pintor silencioso, cenobita de la pintura…acepciones que no dejaban de ser válidas para caracterizar esa época suya. Se había ido encontrando un grupo de valores llamados Domingo Doreste (Fray Lesco), Tomás Morales, Rafael Romero (Alonso Quesada), Saulo Torón, Néstor de la Torre Millares, Pedro Perdomo Acedo, Luis Benítez Inglott, Adolfo Miranda, Néstor Martín- Fernández, Juan Carló, Nicolás Massieu…relevantes de la literatura, la poesía, el arte de la pintura y el periodismo de la tierra nuestra. Aún sintiéndose inmerso totalmente en el tráfico comercial a su responsabilidad, Gómez Bosch participaría cuanto pudo en las recordadas inquietudes culturales, como así mismo mantuvo con Néstor Martín-Fernández de la Torre el asiduo contacto derivado del aprecio mutuo asentado en las familias respectivas. En 1918 hizo Fray Lesco realidad la Escuela de Artes Decorativas Luján Pérez, fundación a la que, por causa de sus ocupaciones, tan solo le fue posible al artista escondido en un industrial colaborar indirectamente, asistiendo sobre todo a los actos afines a paliar la penuria económica de la incipiente entidad artística que, pasados 78 años, prosigue conmoviendo a la gran ciudad de hoy. 38 La suerte de un amor verdadero. Ese año mismito sonreiría significativamente al sorprendido Tomás Gómez Bosch, de 34 años, la cara bonita de una complacida damisela de 18 años, hija del encumbrado arquitecto municipal y diocesano don Laureano Arroyo y Velasco y doña Ana Cardoso y Ruiz de Medina, padres también de Tomás, Carmen Adela, Isidro y Consuelo Arroyo Cardoso. Veraneaban las familias de Tomás Gómez y Ana Arroyo en casa próximas de Tafira y algunas veces había conversado la pareja con deleite¸ hasta que un día, sacando la procesión que llevaba por dentro, hizo ella que clavaran frente a frente sus miradas a surgir espontánea y decisiva la gracia de un amor verdadero, para toda la vida. Armarían boda prontamente, pues el día primero de junio exaltaron su unión matrimonial en la iglesia de Santo Domingo de Guzmán, ante el altar de nuestra señora del Rosario, con la bendición del párroco don José Marrero y Marrero, orador brillante que por cierto pasaría apenitas después a ser canónigo de la Catedral. Apadrinaron a los contrayentes el padre del novio, don Cástor Gómez Navarro, y la madre de la novia, entonces ya viuda de Arroyo; y como testigos figuraron los antedichos amigos fieles del enamorado, Juan Carló y Nicolás Massieu. Colaboraría al esplendor de la nupcial ceremonia los músicos notables Costa, Terán y Casó, trío que se hallaba cosechando éxitos en esta ciudad. Pero su actuación acarrearía al santuario precioso de Vegueta a más curiosos de la cuenta a restarle intimidad al acto, efecto que hizo mella en la alabada sencillez del contrayente, enfadándolo. Ya se convertiría la esposa admirable en eficaz animadora del marido. Exquisita y delicada, la influencia de Ana Arroyo iría debilitando el carácter apasionado del hombre elegido, ayudándolo a reintegrarse a sus cuadros; aunque solo pintara los domingos y demás días festivos. Siendo ella su primera admiradora, logró el ansiado propósito. Vendría la primera niña, Ana María a aumentar con el alboroto de su inocencia la felicidad de un hogar de bien portada paz; mas, igual asomaría su presencia a señalar imborrable en la memoria de sus progenitores el paso del angelito subido a la Gloria del Señor cuando había cumplido seis añitos. Sabemos que, al recibir sepultura la muñequita inerte, las sensibilidades del enternecido y maltrecho Alonso de Quesada hicieron rodar en sus mejillas el dramatismo de unas lágrimas de homenaje; a su vez adelantado, cual se vería, como un vaticinio de la propia muerte del gran poeta, ocurrida enseguida aquel año mismo de 1925. El gran retrato de su madre Transcurrido el tiempo, advino la carga voluntaria y dichosa de los hijos y el negocio familiar se hundió sin remedio. El padre bueno se obligaría a enfrentarse a la crudeza del instante y se agarró a nueva dedicación que tenía aprendida. En la calle de José Domingo Navarro montó el estudio fotográfico que triunfó y don enseñaría a su hijo Néstor lo mucho que sabía de ese otro arte. 39 Y en aquel haz de luces y perspectivas en blanco y negro reavivaría sus ilusiones pictóricas, venciendo su voluntad de abrazar de nuevo la paleta en el ancho salón de su casa, pegadito al mismo de su esposa. Mire el lector, de aquellos pasos de su marido, los versos que escribió doña Ana. “Pasamos siempre solos La tarde del domingo En el amplio salón Que mira hacia el naciente Tomás está gozando Silencioso y tranquilo La paleta en la mano Realizando su sueño. A veces me preguntan: ¿No te aburres en casa? ¿Cómo no vas al cine, O un café a merendar? No comprendes el goce De estas horas en calma Leyendo un buen libro Y viéndola pintar.” Fueron sus obras primeras, retratos de familiares y amigos, en los que tal vez el pintor sintiera las directrices de la Escuela Castellana- Madrazo, Esquivel, Vicente López- en cuanto a la estricta realización del retrato en sí, aun conservando elementos del nuevo arte. El avance de los años maduró su estilo y afianzó su técnica, y en 1936 elaboró el cuadro más admirado por la crítica durante su carrera; el retrato de su madre queridísima, pintado a ratos grandes los domingos y otros festivos. La anciana posando en sesiones dilatadas que la vencían hasta sumirla en un hondo sueño. Pero merecerían la pena el sacrificio de la señora mallorquina que vino niña a sentirse canaria, y al tesón del hijo a la mayor gloria de su madre. Primera exposición y otros apuntes La evolución veloz de su obra y su aumento le proporcionarían a Tomás Gómez Bosch la oportunidad de llevar a cabo su primera exposición en el Gabinete Literario el 20 de abril de 1.940, con el adelanto de un concierto de piano por su hermano don Cástor y la presentación de la muestra a cargo de don Luis Doreste Silva, ilustre cronista de la ciudad. 40 Estuvo integrada por retratos y paisaje que sumaban 55 cuadros, y el éxito obtenido aconsejaría trasladar en el mes de noviembre una parte al Círculo de Bellas Artes de Santa Cruz de Tenerife, para que el autor tuviera y el honor de que el maestro Francisco Bonnin Guerín calificara la obra de “honrada y sencillamente magistral”, destacando el cuadro de la madre del pintor como “obra reposada y profundamente sentida” A continuación, sus exposiciones se sucederían anualmente en la isla natal, cosechando en todas ellas la calurosa acogida de sus paisanos En 1.944 tuvo lugar en el Museo de Arte Moderno de Madrid la Exposición de Artistas de la Provincia de Las Palmas, organizada por iniciativa de la Dirección General de Bellas Artes y de modo principal por el Marqués de Lozoya. Participaron 18 pintores figuras relevantes del momento insular –Néstor, Juan Carló, Nicolás Massieu, Juan Guillermo, Jesús Arencibia, Santiago Santana, Cirilo Suárez, Servando del Pilar…- y por supuesto Gómez Bosch, destacando de los escultores Juan Jaén, Abraham Cárdenes, José de Armas Medina y Manuel Ramos. En total 97 cuadros y 25 esculturas, obras de entre las que el Marqués de Lozoya escogió un paisaje de Gómez Bosch – el titulado “Degollada de las Yeguas” para figurarlo en su colección particular. 29 de septiembre de 1996 3 GRAN CANARIA: VUELO DE CUMBRES SOBRE EL MAR AQUEL HIJO ILUSTRE LLAMADO TOMÁS GÓMEZ BOSCH Desentrañaba en su pintura el encanto de las cosas humildes A partir de aquel año 1944, la evolución del pintor Tomás Gómez Bosch iría rezagando sus lógicas vacilaciones. No habían sido, no, ´fuegos de artificio´ las expresiones loables de la crítica madrileña a las evidencias de su obra expuesta en el Museo de Arte Moderno, volcadas extensas en las páginas de los rotativos ABC, Diario de Madrid, Arriba y otras publicaciones. En 1945, él y su amigo Nicolás Massieu, ambos en representación de Las Palmas de Gran Canaria, participaron en la Exposición Nacional de Bellas Artes, y en la alta calidad de las obras presentadas triunfaron, incluidos los grancanarios: Massieu con un retrato del pianista Rafael Romero Spínola, y Gómez Bosch con el asimismo alabado de su madre. Ese año también exhibiría don Tomás 22 bodegones en el Gabinete Literario. De nuevo en Madrid, en el Salón Dardo celebró en 1947 la primera muestra individual efectuada allá, con 31 cuadros de temas diversos: bodegones, marinas, paisajes, 41 composiciones derivadas de temas isleños, floreros, y además el consabido retrato de su madre y varios de familiares. En los días de esa exposición ofrecerían conferencias Alfredo Marquerie, Manuel Pombo Angulo y algunos otros valores en boga, y entonces ocurriría que regocijó a un elevado número de personas la sencillez dominadora en el talante del artista. Lo homenajearon con un banquete, y arrente de los postres le indicaría Pombo al agasajado que fuera pensando unas palabras de respuesta a las del comensal encargado de ofrecerle el acto. - ¡No me diga eso, don Manuel¡ - Pero… - No me condene a semejante apuro. Discursos no…No sabría decir nada. Se levantaría en ese instante el intérprete del brindis, y Pombo se entregó a aconsejarle al pintor canario - Usted, don Tomás, solo tiene que decir que está muy contento por todo, que lo agradece todo, que todo lo tiene emocionado y que jamás olvidará este momento. A base de eso diga unas palabras en tres minutos y ya está. Cuando iba a responderle el atribulado que ni así podría cumplir el encargo, por haber concluido el que hacía uso de la palabra ´empujó´ Pombo a nuestro paisano - Ahora, don Tomás… ¡Arriba!... Sin saber lo que hacía se puso en pié el comprometido, y más o menos fue su discurso el siguiente: - Les digo que estoy muy contento por todo, que todo está muy bonito, que me emociona todo y a base de eso nunca olvidaré nada de esto todo. Y sin más, el propio ´orador´ iniciaría un aplauso que se transformó general y espléndido, ante el natural sonrojo de su esposa, doña Ana. Pero, ciertamente, la gracia natural de su marido fue la nota más simpática del acto. Sin embargo, don Tomás Gómez Bosch descollaba como un conversador gratísimo y de graciosa vena, pero espontáneo. A su campechanía no le iban los discursos. Un cachito de Gran Canaria Colmado de ilusiones inenarrables retornaría al trabajo en sus lares con la pasión que le ardía. En mayo de 1.948 expuso nuevamente en el Círculo de Bellas Artes 42 nivariense, y a continuación en la colectiva de de 27 artistas que fue la Regional de Pintura movida por la Universidad de La Laguna. Dos años después inauguraría la Sala Hespérides de la Ciudad Condal, con 26 cuadros de su temática; resaltando los retratos, sin falta del protagonizado por su madre. Era, decían, “un pintor hecho y maduro que sabía lo que quería y cómo lograrlo”. Según el Noticiero Universal, pintaba “seguro de estelo y ofrecía la expresión plástica de las cosas de la tierra, dibujando con firmeza y poniendo el sentimiento y la fuerza de su línea acusada y viva”. Para la revista Destino, y para La Prensa era “un artista de sórdida formación y muy refina sensibilidad”. Volvió, volvió a su Isla con el corazón abrigado de propósitos, y sería cuando abordó el indecible empeño de realizar, durante seis meses de tarea ímproba, ´malvada´, el cuadro admirable obrante en el Cabildo Insular de Gran Canaria, con las 26 personas que constituyeron en 1913 la primera corporación de dicho organismo. En 1959 marchó a triunfar en Venezuela, con importantes exposiciones en el Círculo de las Fuerzas Armadas y la Galería de Arte de Caracas. Además de retratos y paisaje exhibió numerosas marinas y bodegones de Canarias, y de aquel país bastantes obras una vez que gozado en el estudio de sus panorámicas, en su intento de hilvanar ambas culturas. Después, en 1960, obtuvo el Premio de Honor en la IX Exposición Regional de la sociedad El Gabinete Literario, con el retrato de Fina Cáceres de Gómez e interminables se contarían las muestras celebradas posteriormente, cual la del Hogar Canario de Madrid. En 1967 una dolencia le obligó a observar un reposo de varios meses, pero no por ello dejó de rendir su puntualidad a la cita otoñal con los admiradores de su arte. Más tarde, en 1968, sería cuando el Neo-Tea –sueño mágico del imborrable Antonio Izquierdo Baños, al frente de un grupo de amigos- le tributó a Tomás Gómez Bosch un muy cálido homenaje, juntamente con su hermano Cástor, éste asimismo de infatigable vocación como virtuoso del piano. Y otra deferencia igualmente digna recibiría la persona de don Tomás Gómez Bosch el 10 de enero de 1974, ya con 90 años cumplidos. Se la ofertó el Gabinete Literario con el nombramiento de directivo y socio de honor de la ilustre entidad. Seguiría pintando hasta que dejaría de ser joven a los 96 años. Murió el 25 de abril de 1980, después de haber acogido la Sala Cairasco, en marzo de 1.978, la que sería su última exposición, y de recibir un nuevo homenaje de su tierra en la clausura de la misma, consistente en la emocionada entrega de la medalla conmemorativa del Bicentenario de la fundación de la Real Sociedad Económica de Amigos del País. Su muerte le ocasionaría a Gran Canaria la pérdida de otro cachito de su gracia: Tomás Gómez Bosch se fue con el íntimo recuerdo de haberle sido útil a la tierra 43 más querida, la natal que le apretó en sus querencias y le dejara él bien aportado su grano de arena al culto de la mayor grandeza. Más datos de familia y otros anecdóticos Aunque de prisa y corriendo sea, de aquí no pasamos sin escribir que el pintor Tomás Gómez Bosch, dimanó de un Tomás Gómez Sastre mallorquín que, por un roce casual con la isla nuestra, acabó siendo vecino de ella, y para bien de ella, a partir de 1.863. Casado con Margarita Sintes Llabrés –hija del propietario José Sintes Nadal, de afuera igualito- de tener el marino, naviero y comerciante balear un barco llegaría a tener los cinco que formaron su flota en la década postrera del XIX, veleros todos: el pailebot San Antonio (a) “Posible” y las goletas Joven Antonio, Sensat, Margarita Sintes y Juanita, los cuales ´tritones´ toditos se atrevieron a pasear sus siluetas por el Levante español, las costa noroccidental de África, las Canarias orientales,, las Antillas y a entrar también en algunos puertos del litoral norteamericano. Padre aquel señor de Ana Bosch y Sintes, esposa del murciano Cástor Gómez Navarro, fue el abuelo materno de Tomás Gómez Bosch, cuarto de los catorce hijos habidos por el matrimonio. Y siempre hablando de “Tomás, el Chico” recordando de pasada algunas visitas a sus estudio de la Calle Domingo J. Navarro, el referente a sus pinturas y el otro de la máquina de retratar, -este segundo con la presencia de su hijo Néstor-, de ningunita manera hemos podido olvidar ciertos ratos de palique con el entreverado de unos “pisquitos”, de aquellos rones que él sabía aderezar al modo de golosina. Hacía igualmente las delicias de los hermanos Eduardo (su cuñado), Miguel y Luis Benítez Inglott, Luis Doreste Silva, Nicolás Massieu, Ignacio Quintana Marrero, Feliciano Ojeda y tantos otros que se fueron, y dos que todavía lo pueden contar también: Mario Hernández Álvarez y Luis Jorge Ramírez. Asimismo tenemos presente la refinada personalidad de la señora de la casa, doña Ana Arroyo Cardoso, en sus sonrientes y fugaces apariciones “a ver cómo iba la cosa” y tampoco se nos escurrió del tino el adorno magnífico que significaba la espectacular cabeza de toro que parecía observar a los de la “reunencia”, por más datos perteneciente al que había sido hermoso ejemplar denominado ´Ermitaño´, que don Tomás viera estoquearlo, siendo niño, en la Plaza de la Feria por don Fernando él Gallo´. Dos ´casos´ Desde 1919 hasta 1980, casi llegaron a ser cuarenta las exposiciones de su arte, sin sumar las ofrecidas en Venezuela y Holanda. Nos resulta, pues, imposible la enumeración de sus retratos de personas incontables y la exagerada cantidad de parajes, marinas, bodegones, floreros recreados por el isleño inefable que, como un muchacho nuevo´, harto escaló alturas o se hundió en los barrancos a encantarse en las bellezas de su isla. 44 A todas esas sin desprendérsele el buen humor ni la sal de sus distracciones ´históricas´ Armando Bordes lo invitaba a pasar los veranos en su casa bonita de la Atalaya de Santa Brígida, y una tarde en que salieron don Tomás y doña Ana a estirar las piernas por los alrededores, al cabo de sentirse cansados acordaron iniciar el regreso. A poco se detendría el artista, con los ojos fijos en algo: - Muchacha, Anita, casa preciosa esa… - ¿Cuál? - La que tenemos delante. ¿O no miras? Es preciosa; preciosa de verdad. ¿De quién será, tú? - Si le preguntaras a Armando te diría enseguida quien es su dueño. - Seguro que él lo sabe. - Si. Yo también. Y si tú te fijaras, verías que es la mismita donde comemos y dormimos. El artista no resolló. Miró incrédulo a su amada compañera, sonrió luego, algo confundido, y humillando cómicamente la cabeza reanudó la marcha. Otro día, por haber empezado a sentir un dolor fuerte al fondo de la encía asistió a consultar al odontólogo don Alejandro Ramírez: - Me trae tieso y erizado un rayo aquí detrás, y deseo saber la causa. - Muy bien. Abra la boca… - Ah…ah… - ¡Caray, don Tomas…! - ¿Qué pasa? - Cosa rara es… - ¿Peligrosa? - No, pero rara…Porque se trata de que le ha salido el cordal cuando va usted para los noventa años - ¡Carajo! - No se preocupe. Se lo desapareceré… - Bueno…Y ya que estamos en eso, una dentadura nueva. Fuertita, mi amigo, para que me dure toda la vida. Ya decíamos que se sintió joven toda la vida, hasta hallándose próximo a morir. Unta y magua Comentaba don Tomás que su vocación le había nacido temprana y autodidacta. Se fue logrando a la manera de no imitar ni seguir estilos, ni las tendencias pictóricas de nadie ni de escuela alguna. 45 - Me hice pintando lo que veía y tal como lo veía –aclaraba- y de ahí mi tradicional realismo. Aunque permaneciera dos años en Madrid, continuando estudios y ampliando mi primera formación. Del ilustre que fue sin tregua un portento de jovialidad, el pintor eminente y fraternal amigo suyo José Aguiar, hijo de canarios de La Gomera nacido en La Habana y traído niño a la isla colombina, escribió: “Tomás Gómez Bosch desentraña en su pintura el encanto de las cosas humildes. Para los artistas como él, Dios es el mismo y distinto cada día; la fruta, la flor o el paisaje tienen siempre el mensaje nuevo y maravilloso de su presencia” Aún viendo venir la muerte, el miembro 4º de los 14 recibidos por don Cástor Gómez Navarro y doña Ana Bosch y Sintes, persistía intenso e inagotable. No había dejado de ser joven, y si ya lo tenía proclamado socio de mérito la Sociedad Filarmónica, le faltaba el “Almendro de plata” del municipio de Tejeda, a donde no pudo subir a hacerlo suyo y en su nombre lo recogieron los hijos. Ya, entonces, don Tomás guardaba cama a la cristiana espera de dormirse para siempre, al consuelo de su compañera de por vidas: Doña Ana Arroyo, valentía inseparable del lecho. Si ahora perdura en el corazón de los suyos la ejemplaridad del padre, no es menos verdadera la magua que acreditamos los que fuimos sus admiradores y amigos del hombre buenísimo que mucho amó a su tierra y la honró con la pureza de su arte. Porque Tomás Gómez Bosch es, señoras y señoras, otro de los ciudadanos notables que no tiene calle a su nombre ni rincón aparente que conmemore sus glorias. 46 PINCELADAS DEL DIARIO ACONTECER 47 Donde se relatan cronológicamente hechos puntuales, anecdóticos o intrascendentes de la vida de Don Tomás. La Provincia 13 de abril de 1912 SUSCRIPCIÓN Para los heridos de Melilla A continuación damos cuenta de las cantidades recibidas por la Junta de señoras, para el caritativo fin indicado. Figura D. Tomás Gómez Bosch con una aportación de 10 pesetas, siendo la media de particulares de 5 ptas. La Provincia 19 de noviembre de 1912 Notas de Sociedad. Viajeros Ha regresado de la Península, acompañado de su hijo D. Tomás Gómez, la Sra. Dña. Ana Bosch de Gómez. La Provincia 15 de enero de 1915 AYUNTAMIENTO Sesión Orden del día para la sesión ordinaria que celebrará esta tarde a las dos la corporación municipal: - Expediente sobre instalación de un motor de combustión interna, en la fábrica de chocolate que tiene establecida D. Tomás Gómez Bosch en la calle de Canalejas. La Provincia 16 de enero de 1915 AYUNTAMIENTO Sesión de Ayer Se concedió la autorización solicitada a D. Tomás Gómez Bosch para instalar un nuevo motor en la fábrica de chocolate de su propiedad. 48 La Provincia 16 de junio de 1915 AYUNTAMIENTO Secretaría Aprovechamiento de aguas Don Tomás Gómez Bosch ha solicitado de la Alcaldía que se inscriba en el registro de aprovechamientos de aguas el cuarto de paja de su propiedad que disfruta su casa en la calle de Canalejas. Instancias Don Tomás Gómez Bosch ha solicitado la autorización de la Alcandía para el funcionamiento de un motor de combustión interna, instalado en la fábrica de chocolates de su propiedad. Diario de Las Palmas 4 de octubre de 1916 TEATROS Y FESTEJOS Entre los nombres de los señores que se han inscrito para constituir la Sociedad “Teatros y Festejos”, que en breves días ha de quedar funcionando en esta población figuran, entre otros Don Tomás Gómez Bosch; D. José, D. Pedro, D. Antonio Gómez Bosch; D. Cástor Gómez Navarro; D. Juan Roca y Bosch; D. Luis Benítez Inglott; D. Antonio Roca y Bosch; D. Pantaleón Quevedo y Franchy; D. Enrique Orive Riaño; D. Rafael Jiménez Hernández y otros. La cuota era de 2 ptas. La Provincia 14 de mayo de 1918 Notas de sociedad En breve contraerá matrimonio con la señorita Ana Arroyo Cardoso, el joven don Tomás Gómez Bosch. 49 Diario de Las Palmas 3 de junio de 1918 UNA BODA En la parroquia de Santo Domingo, y ante la imagen de Nuestra Señora del Rosario, tuvo lugar en la noche del sábado último, la boda de la apreciable y bondadosa señorita, que une a su belleza física, sus méritos personales, Ana Arroyo Cardoso, con el estimado joven D. Tomás Gómez Bosch, apadrinándolos la Sra. Viuda de Arroyo, madre de la novia, y nuestro distinguido amigo D. Cástor Gómez y Navarro, padre del novio. La unión la bendijo el párroco de Santo Domingo D. José Marrero. Durante la ceremonia ejecutaron música selecta los notables artistas Terán, Costa y Casaux. Los invitados, muy numerosos, fueron obsequiados en el domicilio de la Sra., viuda de Arroyo. Deseamos a los jóvenes desposados muchas prosperidades. La Provincia 21 de diciembre de 1918 NOTAS DE SOCIEDAD Hoy, festividad de Santo Tomás, celebrarán su fiesta onomástica D. Tomás Quevedo Ramírez, D. Tomás Morales, D. Tomás Sintes Llabrés, D. Tomás Gómez Bosch, D. Tomás Peñate y D. Tomás Miranda. La Provincia 12 de marzo de 1920 En honor del poeta canario Tomás Morales. Anoche tuvo lugar en el “Hotel Metropole” el banquete en honor del laureado poeta don Tomás Morales, organizado por la Sociedad “Fomento y Turismo”, como homenaje al triunfo alcanzado en el Ateneo de Madrid. El comedor se hallaba artísticamente adornado. Entre los asistentes se encontraban doña Francisca Millares de la Torre, doña María Suárez de León, doña Ana Arroyo de Gómez, doña Rosa Pérez de Bird y otras. Entre los caballeros se encontraban don Bernardo de la Torre Cominges; don Néstor y don 50 Bernardo de la Torre Millares; don Rafael Hernández, en representación del Museo Canario; don José Miranda Guerra, por Diario de Las Palmas; don Manuel Hernández González por “El Tribuno”; don Juan Sintes Reyes por “Renovación”; don Juan Bosch Millares, don Antonio Gómez Bosch, don Arturo Sarmiento por “El defensor de Canarias”: don José Rodríguez Iglesias por la sociedad “Los Doce”; don Tomás Gómez Bosch, don José Hurtado por “El Espectador”, don Manuel Hernández Suarez, don Martín Saavedra Medina, director de “El Ciudadano”, don Juan Carló por la Escuela Lujan Pérez y otros muchos que harían interminable esta relación. La orquesta dirigida por el maestro don Agustín Hernández ofreció un concierto ejecutando de selectas composiciones. La presidencia estaba formada por el poeta Tomás Morales y señora, el presidente de “Fomento y Turismo y señora y el Alcalde don Bernardino Valle y señora. El señor Navarro hizo uso de la palabra ofreciendo el banquete al poeta, pronunciando un sentido discurso. El señor Valle en poéticas y sentidas frases saludó al compañero profesional y al poeta, en nombre de la ciudad. Don Luis Millares Cubas hizo un elocuentísimo discurso en honor dedicado al festejado. Don Claudio de la Torre leyó un bonito trabajo literario que comprendía datos biográficos del poeta en sus comienzos siendo estudiantes. Se leyeron varias cartas y telegramas recibidos hoy de Madrid, Arrecife, Tenerife, Agaete, Gáldar y de amigos y admiradores de Tomás Morales que no pudieron asistir, de las que recordamos las de don Ambrosio Hurtado de Mendoza, don Vicente Ruano, Alonso Quesada, don Saulo Torón, don Rafael Cabrera y otros. Tomás Morales dio las gracias por el homenaje de que era objeto y recitó varias poesías de su libro que fueron calurosamente aplaudidas por la concurrencia. A las doce y media terminó la fiesta, haciéndosele entrega de un álbum firmado por todos los asistentes al acto. La Provincia 20 de noviembre de 1921 NOTICIAS MUNICIPALES A don Tomás Gómez Bosch se le traslada dictamen del ingeniero municipal sobre queja del vecindario de la calle Canalejas contra el ruido y demás perjuicios que les causa un motor de aceite pesado, que sin las formalidades del caso ha instalado en su fábrica de dicha calle. 51 La Jornada 3 de enero de 1922 Fábrica de Chocolates de Tomás Gómez Bosch ANUNCIO El chocolate de esta acreditada fábrica Sobresale entre todos por su excelente calidad Y exquisito sabor. Es el preferido por las personas de buen gusto. Diario de Las Palmas 3 de junio de 1922 Para el Monumento a León y Castillo Figura entre los relacionados en este día, Don Tomás Gómez Bosch, con una aportación De 10 pesetas. La Provincia 14 de marzo de 1923 Por los mineros del Ruhr En la lista del señor Neizke figura don Tomás Gómez Bosch con una aportación de 7 ptas. Diario de Las Palmas 27 de abril de 1923 SECCION DE NOTICIAS Con arreglo a lo dispuesto en el Real Decreto de 26 de enero de 1920, ha quedado constituida en esta población la Cámara Oficial de la Propiedad Urbana de Las Palmas, formando su junta directiva los señores siguientes: Presidente, D. Bartolomé Apolinario; Vice-presidente, D. Pedro Barber; Vice-presidente, D. Luis Manrique de Lara; Tesorero, D. Tomás Gómez Bosch; Contador, D. Salvador Pérez Miranda; Vocales, D. Fernando Navarro y D. Francisco Caballero; Secretario, D. José Ponce. 52 La Provincia 11 de mayo de 1924 DON CASTOR GÓMEZ La muerte de don Cástor Gómez Navarro nos ha sorprendido dolorosamente, por ignorar que estuviera enfermo y por la antigua amistad con que nos honraba. Establecido en esta ciudad desde hace muchos años, el señor Gómez Navarro supo conquistarse generales simpatías y sinceras amistades por su correcto proceder y por sus especiales dotes de carácter. Trabajador incansable, dedicó todas sus energías al comercio consiguiendo después de tenaz lucha y gracias a su laboriosidad y a sus aptitudes, labrarse una brillante posición, que no influyó nunca en su natural modestia. A su viuda, doña Ana Bosch y Sintes, a sus hijos, don Antonio, don Cástor, don Pedro, don Tomás y don José, y a sus hijos políticos don José Mesa López, don Eduardo Benítez Inglott y don Fermín Martínez, estimados amigos nuestros, y demás distinguida familia, significamos la sincera expresión de nuestra condolencia. Diario de Las Palmas 18 de enero de 1926 Los últimos temporales en Las Palmas Y en Gran Canaria Los temporales en esta isla, que han castigado también a Las Palmas, a que aludimos en nuestro número del sábado, se reprodujeron en la noche de este día, con mayor intensidad, causando grandes estragos en Las Palmas, cuyas calles han quedado en estado intransitable, penetrando las aguas en casi todos los pisos bajos de la de Triana, y averiando muchas mercancías… …El barranco se desbordó frente a las fincas de Dª Josefa de la Coba y don Santiago de Ascanio, esta última frente al paseo de Bravo Murillo, quedando completamente llena de tierra y de piedras. La enorme cantidad de agua que penetró en la finca de la citada señora, derrumbó un muro que la bordea y que está junto a la calle de Eusebio Navarro, que fue donde el agua hizo efectos verdaderamente desastrosos…El agua penetró en la fábrica de cerveza “La Tropical”, propiedad de don Tomás Gómez Bosch, quedando anegada, causando grandes desperfectos. Todos los efectos colocados en el escritorio y en el despacho de cerveza, situados por la calle de Canalejas, quedaron inutilizados. Hasta las seis de la tarde de ayer, una bomba accionada por un motor, estuvo desalojando agua. Las máquinas de la fábrica están hundidas en el lodo. 53 La Provincia 20 de enero de 1926 NOTICIAS Reparados parte de los desperfectos ocasionados por el temporal en las fábricas de cerveza “La Tropical” y de chocolates de don Tomás Gómez Bosch, en el día de hoy comenzarán a funcionar ambos establecimientos. Diario Las Palmas 10 de julio de 1926 SUCESOS En la Cruz Roja fue asistido de herida contusa en el dedo pulgar de la mano derecha, F.N.S., de 12 años, que se produjo trabajando en la fábrica de chocolates de don Tomás Gómez, en la calle de Canalejas. La Provincia 17 de octubre de 1928 UNA BODA El día 7 del actual se celebró en la parroquia de San Agustín la boda de la Srta. Paca Suárez Cazorla, con el cajero del Banco Brithis, don Domingo Quintana Cruz, siendo uno de los padrinos el Dr. D. José Gómez Bosch. Terminada la ceremonia pasaron los invitados a la casa de los padres de la novia, donde fueron espléndidamente obsequiados, admirando los soberbios presentes recibidos por los novios de sus numerosas amistades, entre los que figuraba una figura de bronce para luz eléctrica de D. Cástor Gómez Bosch; un maletín de viaje de los hermanos D. Pedro, D. Antonio y D. Tomás Gómez Bosch; un estuche de escritorio de D. José Juan Mulet y señora y muchos más que harían interminable esta relación. La Provincia 1 de marzo de 1929 NOTAS DE SOCIEDAD Está enfermo un hijo de don Tomás Gómez Bosch. 54 La Provincia 13 de agosto de 1929 NOTAS DE SOCIEDAD Marchó de temporada a Tafira don Tomás Gómez Bosch. La Provincia 26 de noviembre de 1930 Última lista de donantes para el homenaje A la vejez del marino En ella figura Don Tomás Gómez Bosch con un donativo de 10 ptas. La Provincia 27 enero de 1932 VITO DUMAS Como despedida al intrépido navegante y gran deportista argentino Vito Dumas, que prosigue hoy a la una su arriesgado viaje, don Miguel Ángel de Gama, cónsul de la Argentina reunió anoche en fraternal banquete en el Hotel Atlantic a numerosas personalidades de todos los ámbitos de nuestra capital… A más de los artículos y regalos hechos a Dumas y de los que ya hemos dado cuenta, hacemos hoy mención de veinticuatro botellas de cerveza, obsequio de La Tropical, y unos paquetes de chocolate de la fábrica de don Tomás Gómez. La bella poetisa Josefina de la Torre, ha tenido la gentileza de dedicarle su libro de poesías “Poemas de la isla”. La Provincia. 11 de septiembre de 1932 SUCESOS Chocan dos camionetas Y resulta un hombre herido. Sobre las ocho de la mañana de ayer, chocaron en la calle Eusebio Navarro, las camionetas número 3.135, de esta matrícula, propiedad de don Vicente Guerra y la matriculada con el número 1.616 propiedad de don Tomás Gómez Boch. El acompañante de la primera camioneta fue asistido en la Casa de Socorro de contusiones 55 en la región parietal derecha y en la cara interna del tobillo derecho, de pronóstico leve salvo complicaciones. Los dos vehículos resultaron con desperfectos, no habiendo sido valorados los del vehículo de don Vicente Guerra, y si el de don Tomás Gómez Bosch en 120 ptas. Del hecho se ha dado cuenta al juez de Instrucción de Triana. La Provincia 14 de abril de 1934 La Gran Exposición de productos canarios del Círculo Mercantil. Concurrirán más de ochenta casas expositoras. Plácemes sinceros merece el Círculo Mercantil de Las Palmas por la plausible iniciativa de celebrar en sus salones una Exposición de productos isleños dando a conocer de este modo, ante propios y extraños, las manifestaciones de nuestra actividad industrial y agrícola. Entre las firmas expositoras figuran don Luis Correa Medina con su conocidos productos alimenticios, galletas, tabacos, chocolates. Don Juan Mulet con sus pastas alimenticias. “La Criolla” y don Tomás Gómez Bosch con varios productos de chocolatería de su fabricación. “La Salud” y “La Tropical” con cervezas y otras bebidas espumosas, etc. Diario de Las Palmas 5 de abril de 1935 “Viera y Clavijo” Este es el título de la nueva revista que los alumnos del colegio Viera y Clavijo han editado con todo lujo de detalles y soberbia presentación, en la que colaboran destacados alumnos del mencionado colegio y otros estudiantes. El sumario está encabezado por un interesante artículo de J. Rodríguez Doreste en el que comenta el retrato de Viera y Clavijo de Tomás Gómez Boch. La Provincia 9 de mayo de 1935 Crónicas de sociedad Con toda felicidad a dado a luz a un niño la señora de don Tomás Gómez. 56 Diario de Las Palmas 29 de septiembre de 1936 Comunicados oficiales que remite la Comandancia Militar Y que interesan a los ciudadanos de Gran Canaria. Relación de ciudadanos que han donado su oro para la Patria. 1926.- D. Antonio Gómez Bosch, tres anillos y tres alfileres de corbata. 1929.- D. Tomás Gómez Bosch y señora: una moneda isabelina, una cadena, una pulsera, una caja de reloj pulsera, dos sortijas, dos alfileres, una medalla, un par de zarcillos y un trozo de cadena. Diario de Las Palmas 15 de marzo de 1937 Notas del Gobierno Militar de Las Palmas Relación de ciudadanos que han dado su oro para la Patria. 3737.- Don Tomás Gómez Bosch y señora, (segunda aportación), dos alianzas. Falange 30 de marzo de 1937 Anuncio insertado en la página 2 de este periódico Fábrica de Cervezas LA TROPICAL Las Palmas Canalejas nº 5 teléfono 5-4-4-1 ========= ============== Fábrica de Chocolates EL ESCUDO De T. Gómez Bosch Las Palmas Canalejas núm. 5 teléfono 5-4-4-1 Falange 22 de abril de 1937 Junta para el pago de obreros movilizados Pago a los patronos de las cuentas del mes de diciembre Entre los patrones relacionados figuran Eloy Alonso Ramírez, José Mesa López, Francisco de Elejabeitia, Tomás Gómez Bosch, Cástor Gómez Navarro y Alfredo Schamann Romero. 57 Falange 1 de septiembre de 1939 AYUNTAMIENTO Traslados de domicilio Tomás Gómez Bosch, de Canalejas 5, a Domingo J. Navarro 5 Falange 20 de noviembre de 1939 Anuncio insertado en la página 2 de este diario ESTUDIO BOSCH Fotografías artísticas bajo la dirección del pintor Tomás Gómez Bosch Precios Tamaño corriente 7,50 copias 5 13x18 12,00 cada una 18x24 25,00 cada una Domingo J. Navarro, 5 Las Palmas Falange 20 de abril de 1940 EN EL GABINETE LITERARIO La Fiestas artística de hoy Esta tarde a las seis y media, tendrá lugar, como hemos anunciado, la inauguración de la Exposición de retratos y paisajes de Tomás Gómez Bosch. En el salón de actos, precediendo a la visita de la vasta colección de obras expuestas por el notable pintor canario, se celebrará un interesante festival artístico, cuyo programa es el siguiente: “En la apertura de la Exposición de Tomás Gómez”, palabras de Luis Doreste Silva, Presidente del Gabinete Literario. Armonía de la noche y La Campanella, de F. Liszt, por Cástor Gómez Bosch. Concierto a dos pianos de Mozart, por las señoritas Dolores Hernández y Carmen Martínez Gómez. 58 Falange 21 de abril de 1940 En el Gabinete Literario quedó abierta Desde ayer la Exposición de Tomás Gómez Bosch. Ayer tarde quedó abierta en el Gabinete Literario la exposición de pinturas de Tomás .Gómez Bosch. Un público selectísimo llenaba el salón de fiestas del Casino. El Dr. Doreste Silva hizo un magnifico discurso de presentación en el que enfocó las personalidad artísticas de Cástor y Tomás Gómez Bosch. Luego Cástor Gómez ejecutó al piano música clásica con la limpieza y maestría reconocidas. También dos de sus alumnos regalaron al público diferentes composiciones musicales. Abiertos luego los salones de la exposición, el público admiró el arte de Tomás Gómez Bosch, del que nos ocuparemos detenidamente. Falange 18 de mayo de 1940 Las sesiones del Cabildo y el Ayuntamiento. Se toma el acuerdo, a propuesta de la Presidencia del Cabildo Insular, encargar la confección de un retrato al óleo del Caudillo, al eximio artista español Julio Moisés; como también la adquisición del cuadro “Frutos de la tierra”, del que es autor el pintor canario don Tomás Gómez Bosch. Falange 16 de agosto de 1940 Un retrato de Tomás Gómez Bosch. Recientemente nos hemos ocupado de un retrato maestro debido a los pinceles de Tomás Gómez Bosch; al del alférez Porfirio Artiles, muerto por Dios y por la Patria. La neta limpieza de su colorido, sobriamente entonado, acusa mano experta y una lección perenne de lo que debe ser un retrato bien logrado, su bien lograda concepción. Hoy, que la pintura toma a veces rumbo descompuesto, place registrar la presencia de un retrato fiel a los eternos cánones del género. 59 La Provincia 21 de noviembre de 1940 EXPOSICION La Prensa de Santa Cruz de Tenerife anuncia para dentro de breves días, la apertura en el Círculo de Bellas Artes de aquella ciudad, de una exposición de cuadros de nuestro paisano el bien reputado pintor Tomás Gómez Bosch. Sabemos que en la vecina isla ha despertado gran interés la obra del pintor canario que, según nuestras noticias, exhibirá veintidós retratos y una veintena de paisajes de Gran Canaria. Deseamos completo éxito al artista amigo. Falange 22 de noviembre de 1940 EXPOSICION DE ÓLEOS DE TOMÁS GÓMEZ BOSCH Nuestro paisano, el notable pintor Tomás Gómez Bosch ha marchado a Santa Cruz de Tenerife donde se propone abrir la próxima semana, en el “Círculo de Bellas Artes” un exposición de sus más destacadas producciones. En la expresada exposición presentará Tomás Gómez a la admiración del público tinerfeño treinta obras entre retratos y paisajes al óleo, con lo cual tendrá ocasión de acreditar una vez más en la vecina isla, don ya han tenido oportunidad de conocer diversos trabajos suyos, su alta personalidad artística. La Provincia 21 de diciembre de 1940 GABINETE LITERARIO En atento saluda nos comunica el señor presidente de esta Sociedad, que la Junta General eligió para formar la Directiva el próximo año a los señores siguientes: Presidente, don Luis Doreste Silva; Vice-Presidente, Director de Fomento, don Juan E. Quevedo Ramírez; Vice-Presidente, Director de Recreo, don Antonio Grondona Martín; Bibliotecario, don Francisco Hernández Suárez; Tesorero, don Miguel Suárez Navarro; Contador, don Matías Matos del Toro; Secretarios, don Manuel Padrón Quevedo y don Carlos L. Monzón Grondona; Vocales, don Cayetano, Guerra de Aguilar, don José L. 60 Avellaneda Cardoso, don Néstor Doreste Silva, don Tomás Gómez Bosch y don Agustín Díaz de Aguilar. Agradecemos los ofrecimientos que el señor Presidente se sirve hacernos a los que correspondemos con nuestra cooperación para cuanto pueda realzar el prestigio de la antigua Sociedad. Falange 20 de diciembre de 1941 HOY APARTURA DE LA EXPOSICIÓN GÓMEZ BOSCH Esta tarde, a las seis y media en los salones del antiguo Cabildo Insular, (Triana ,46) será inaugurada la exposición de pintura de nuestro artista Tomás Gómez Bosch. La entrada será pública. La Provincia 2 de enero de 1942 Resumen local del pasado año Durante el año anterior se han verificado en esta ciudad las exposiciones de los pintores canarios Carlos Morón, Jesús González Arencibia y Tomás Gómez Bosch, y de los peninsulares Rodolfo Rinaldi (éste casi paisano nuestro por su larga residencia en las islas) y Carmelo F. González, las cuales dentro de su diverso carácter, obtuvieron cada una gran éxito y aplauso del público. La Provincia 30 de octubre de 1942 INVITACION Agradecemos al distinguido pintor don Tomás Gómez Bosch la atenta invitación que nos hace para visitar la exposición de sus obras que con el título de “Marinas de la Isla” inaugurará en los salones del Gabinete Literario, mañana sábado 31 a las seis de la tarde. Falange 28 de noviembre de 1942 AYUNTAMIENTO Libramientos al pago: En la Depositaría del Municipio de esta capital se hallan al pago libramientos extendidos a favor de los señores y entidades siguientes: …Don Tomás Gómez Bosch se encuentra entre ellos… 61 La Provincia 29 de enero de 1943 CRÓNICA DE SOCIEDAD Fallecimientos: En la tarde de ayer y con numeroso acompañamiento se efectuó el entierro del cadáver de la virtuosa señora doña Ana Cardoso y Ruiz de Medina, viuda del arquitecto don Laureano Arroyo y Velasco, cuyo fallecimiento tan sentido ha sido en el amplio círculo de sus amistades. Expresamos a sus hijos entre los que figuran nuestros amigos don Tomás y don Isidoro, hijo político don Tomás Gómez Bosch, hermanas y demás familiares nuestro sincero sentimiento de condolencia. La Provincia 28 de junio de 1944 CRONICA DE SOCIEDAD Regreso de Madrid el pintor don Tomás Gómez Bosch. La Provincia 31 de julio de 1944 CRONICA DE SOCIEDAD Bodas. En la tarde de ayer se verificó en la parroquia de San Bernardo el matrimonio del teniente de Aviación don Enrique Cuyás Díaz con la señorita Margarita Gómez Arroyo, a quienes apadrinaron doña Isabel Díaz, viuda de Cuyás, madre del novio y don Tomás Gómez Bosch, padre de la desposada. Los nuevos esposos, a los que deseamos infinitas prosperidades, marcharon a Santa Brígida. La Provincia 4 de noviembre de 1944 DELEGACION DE TRABAJO Familias numerosas. Se hace público para conocimiento de los interesados, que se ha recibido de la Superioridad los títulos de beneficiarios de familias numerosas correspondientes a los peticionarios que a continuación se reseñan:…Tomás Gómez Bosch… 62 La Provincia 23 de junio de 1945 CRONICA DE SOCIEDAD Viajeros: De la Península ha regresado don Tomás Gómez Bosch. Falange 9 de agosto de 1945 En el Gabinete Literario Exposición de pintura de Antonio García. …Antonio García, aún en plena formación pictórica, es un nuevo valor que se incorpora lleno de inquietudes afanosas al renacer de la pintura isleña, esta pintura de paisajes nuestros que, con Colacho Massieu y Tomás Gómez Bosch tienen la máxima expresión valorativa…. La Provincia 8 de noviembre de 1945 Ha comenzado la creación de un catálogo artístico. Constará de tres órdenes de aportaciones: bibliográficas, fotográficas y documentales. En su conferencia inaugural de la Exposición de bodegones de Tomás Gómez Bosch, el ilustre profesor de Historia del Arte de la Universidad de La Laguna, don Rafael Lainez Alcalá, dio a su distinguido público la agradable noticia de que con sus alumnos se dispone a confeccionar (habiendo ya encontrado en Tacoronte preciosos materiales para comenzar su redacción) Un Catálogo Artístico del Archipiélago que constará de tres partes: bibliográfica, fotográfica y documental… Falange 10 de enero de 1946 3 preguntas sobre arte y artistas 1.- ¿Cree usted necesaria una Escuela de Bellas Artes? 2.- ¿Qué papel podría desempeñar la “Escuela de Lujan Pérez” en este sentido? 3.- ¿Piensa usted en alguien para dirigir dicha Academia? 63 Las preguntas fueron realizadas a don Pedro Cullen del Castillo, don Luis Doreste Silva, don Tomás Gómez Bosch, don Néstor Álamo y don Mariano Laforet de Altolaguirre Don Tomás fue el más lacónico y concreto en sus respuestas: 1.- Sí. 2.- Importantísimo puesto que aportaría a ella toda una generación de artistas y el espíritu joven que siempre la animó. 3.- Me ha parecido muy bien el nombre señalado por los señores que han opinado antes que yo. Colacho Massieu sería el director de esa Escuela, si llegara a crearse. La Provincia 2 de mayo de 1947 GOBIERNO CIVIL Donativos recibidos en la Caja Insular de Ahorro con motivo de la Fiesta de la Flor: Suma anterior: 18.749 pesetas. …don Tomas Gómez Bosch 15 pesetas… Suma y sigue: 23.390 pesetas. La Provincia 3 de mayo de 1947 INVITACION Agradecemos al distinguido pintor Tomás Gómez Bosch la invitación que nos dirige para asistir al acto de apertura de la exposición de sus cuadros que se efectuará en el Gabinete Literario, esta tarde a las siete y media. Como tenemos dicho, en este acto disertará el distinguido crítico tinerfeño Leocadio R. Machado sobre el tema “Solana y yo a través de Gómez Bosch” La Provincia 9 de diciembre de 1947 CRÓNICA DE SOCIEDAD Hoy ha regresado de Madrid con su señora el pintor don Tomás Gómez Bosch. 64 La Provincia 27 de abril de 1948 CRÓNICA DE SOCIEDAD Marchó a Tenerife don Tomás Gómez Bosch. La Provincia 5 de mayo de 1948 CRÓNICA DE SOCIEDAD Ha regresado de Tenerife el pintor don Tomás Gómez Bosch. La Provincia 13 de mayo de 1948 CRÓNICA DE SOCIEDAD Hizo viaje a la vecina isla don Tomás Gómez Bosch. Falange 14 de mayo de 1948 VIDA DE SOCIEDAD De la vecina isla ha regresado don Tomás Gómez Bosch. Falange 11 de junio de 1948 VIDA DE SOCIEDAD De Tenerife regresó el ilustre pintor don Tomás Gómez Bosch. Falange 25 de marzo de 1949 Del homenaje a los hermanos Millares en el Casino Dos retratos de Tomás Gómez Bosch. Tomás Gómez Bosch está dando fin a dos magníficos retratos de los nunca bien llorados Hermanos Millares- don Luis y don Agustín Millares Cubas- con destino a la galería de retratos de canarios distinguidos que hace tiempo se viene organizando por el Excmo. Cabildo Insular. 65 La presentación de los citados retratos tendrá efecto en un acto que celebrará el Gabinete Literario y en el cual Pedro Perdomo Acedo, el agudo escritor y poeta, dará a conocer parte de un trabajo crítico-biográfico suyo sobre aquellos ilustres hijos del país y que a renglón publicará el “Grupo de Bibliófilos del Gabinete”. La Provincia 1 de noviembre de 1950 CRÓNICA DE SOCIEDAD Con su señora embarcó hoy para Barcelona, donde expondrá sus obras, el pintor don Tomás Gómez Bosch. La Provincia 25 de abril de 1952 Uno de los magníficos retratos que figuran en la Exposición de pinturas que en el Museo Canario ha presentado el ilustre pintor don Tomás Gómez Bosch es este cuadro del Excmo. Sr. D. Francisco García Escámez, marqués de Somosierra, a quien dedicamos hoy el homenaje de un artículo del escritor Alfonso de Gabriel. Esta magnífica pintura sólo tuvo delante al ilustre modelo muy poco tiempo y sin embargo en ella quedó plasmada para siempre la enérgica figura del héroe laureado. Don Tomás es un pintor de almas y sus pinceles reflejan fielmente la personalidad de las personas que se acercan a su lienzo, aunque sólo sea por unos instantes. Diario de Las Palmas 19 de octubre de 1953 Homenaje a Gómez Bosch en Madrid Una vez más, Tomás Gómez Bosch ha llevado este año a Madrid, donde siempre le espera el éxito, una treintena de óleos que expuso en el Salón Dardo con éxito de crítica y público. La colonia canaria acaba de rendirle, en el Círculo de Bellas Artes madrileño, un homenaje de cariño que al fin y a la postre ha sido la única forma de devolverle las emociones resucitadas en su nostalgia ante la contemplación de sus cuadros, que aparte su valor como materia pictórica, y es mucho, están llenos de condensaciones visuales de Gran Canaria. 66 Diario de Las Palmas 8 de agosto de 1953 Gobierno Civil Lista núm. 11 de donativos con motivo de la Fiesta de la Flor. Suma anterior 186.993,75 ptas. …don Tomas Gómez Bosch, 15 ptas. Suma y sigue 310.324,70 ptas. Falange 22 de noviembre de 1956 En el día de la fecha aparece insertado el siguiente anuncio: ESTUDIOS BOSCH Participa a su distinguida clientela y público en general que se hará cargo de toda clase de reportajes, así como bodas, bautizos, etc. en casa particulares, avisando en Domingo J. Navarro, 5, teléfono 6048 Diario de Las Palmas 15 de mayo de 1958 ECOS DE SOCIEDAD Regresó de Tenerife el pintor don Tomás Gómez Bosch Diario de Las Palmas 8 de octubre de 1959 Entre las noticias que nos llegan de Venezuela siempre figuran algunas referentes a nuestros artistas. Éxitos de Tomás Gómez Bosch, de Juan Ismael, de Eduardo Gregorio (que hoy ejerce funciones asesoras en el Departamento Nacional de Bellas Artes, o del escultor Juan Jaén. Diario de Las Palmas 14 de noviembre de 1959 Ecos de Sociedad Natalicios: Con toda felicidad ha dado a luz un niño, primero de sus hijos, la esposa de nuestro particular amigo don Manuel Rodríguez Martín, de soltera Sofía Gómez Arroyo. 67 Diario de Las Palmas 22 de diciembre de 1959 ¿Gran Canaria, también “plató” cinematográfico en miniatura? Desde la “Hija de Mestre” hasta que Hollywood y la cinematografía europea se acercan a los escenarios naturales de la isla. Los alemanes, los primeros que vinieron con equipo técnico. Por Luis García Jiménez A Gran canaria se le ha puesto el sobrenombre de “continente en miniatura”, pero no debemos olvidar que también puede ser una meca del cine en miniatura… “Teide Gigante” se basó en el poema de Félix Navarro “Romance del buen Ladrón” con un solo rollo de 300 metros. El equipo técnico fue el mismo que el documental anterior teniendo como asesor a Adalberto Benítez. El intérprete principal fue Nicolás Puga que personifica al Teide y en el documental se recogen las más bellas estampas de la isla hermana. Y un detalle importante. De este documental se rodaron interiores en el estudio de don Tomás Gómez Bosch…. Diario de Las Palmas 9 de mayo de 1960 El sábado se inauguró la IX Exposición Regional de Bellas Artes. El pasado sábado, día 7, con asistencia de nuestras primeras autoridades y de la Junta Directiva del Gabinete Literario, así como un gran número de expositores, tuvo lugar la inauguración de la IX Exposición Regional de Bellas Artes, que con motivo de las fiestas de san Pedro Mártir ha organizado el Casino en colaboración con el Ayuntamiento, Cabildo Insular, Club Náutico y Círculo Mercantil. Revista de Historia 1 de junio de 1960 Triunfos artísticos: En mayo pasado se hizo pública la concesión al pintor canario don Tomás Gómez Bosch del Premio de Honor en la Exposición Bienal de Bellas Artes. Diario de Las Palmas 25 de julio de 1960 LUCHA CANARIA 12-8 Victoria del Ajódar sobre Rosario, en Gáldar Presidió el jurado de esta luchada, que tuvo por escenario el amplio patio de la Graduada de Gáldar, el presidente de la Federación Regional de Lucha, Dr. Doreste Silva, acompañado de los federativos, señores Ferrera Villar y Ayala Cabrera, a los cuales acompañaba el pintor canario don Tomás Gómez Bosch. 68 Diario de Las Palmas 30 de diciembre de 1961 ECOS DE SOCIEDAD A Tenerife hizo viaje, acompañado de su esposa, don Tomás Gómez Bosch. Diario de Las Palmas 13 de marzo de 1962 ACTIVIDADES DEL HOGAR CANARIO DE MADRID Semana dedicada a Fuerteventura. En la tarde del jueves, 8 de los corrientes, se ha reunido la ponencia nombrada por la Junta Directiva del “Hogar Canario” para la preparación de los actos que han de celebrarse con motivo de la próxima “Semana Canaria” y redacción del programa a desarrollar durante dicho periodo de celebraciones isleñas. La junta directiva se propone este año revestir de la mayor brillantez la tradicional “Semana canaria”, que, en esta ocasión, estará dedicada a la isla de Fuerteventura. Aparte de los actos religiosos se pronunciarán conferencias por destacados oradores, sobre temas principalmente relacionados con la isla de Fuerteventura. El día 2 de mayo se inaugurará la Exposición de pintura del ilustre artista grancanario don Tomás Gómez Bosch. Hará la presentación el académico de Bellas Artes don José Aguiar García. El día 16 será clausurada esta exposición. Se celebrarán otros actos culturales y folklóricos y la tradicional comida de hermandad, con un menú compuesto de productos típicos de la isla de Fuerteventura. Diario de Las Palmas 19 de abril de 1962 ECOS DE SOCIEDAD Hizo viaje a Madrid el pintor don Tomás Gómez Bosch, acompañado de su esposa. 69 Diario de Las Palmas 12 de septiembre de 1963 Homenaje al catedrático y poeta don Luis Millares Carló Don Juan Millares Carló, que pertenece –como es sabido- a una familia ilustre en las letras y en las artes de Gran Canaria, ha sido profesor durante largos años y ha publicado algunos cuadernos de versos. Es natural que estas y otras circunstancia obliguen a un grupo de amigos a rendirle homenaje cuando don Juan Millares se acerca a la cima de la vida. Las adhesiones han sido numerosas, señalemos algunas de las más significativas como la de José Ramírez Bethencourt, Luis Doreste Silva, Saulo Torón, Manuel Padrón Quevedo, Ignacio Quintana Marrero, Tomás Gómez Bosch, Lola Massieu, Felo Monzón, Pedro Perdomo Acedo, Luis García de Vegueta, Antonio Izquierdo Baños, Chona Madera, Andrés Hernández Navarro, Natalia Sosa, Pedro Lezcano y otras muchas más. Diario de Las Palmas 24 de febrero de 1964 Homenaje al poeta Domingo Velázquez. El sábado se celebró en la Escuela de Hostelería del Cabildo Insular el anunciado homenaje que el grupo Neo-Tea y numerosos amigos ofrecieron al poeta Domingo Velázquez con motivo de la publicación de su libro “Poemas del sueño errante”. Hizo el ofrecimiento Juan Sosa Suárez al que siguió en el uso de la palabra Vicente Mujica. Fueron leídas numerosas adhesiones entre las que se encontraban la del Presidente de Cabildo Insular de Gran Canaria, del Centro de Iniciativas y Turismo, Alcalde de Puerto del Rosario, Fernando González, Lucy Cabrera, Tomás Gómez Bosch, Pedro García Cabrera y otras. El Eco de Canarias 26 de julio de 1964 Ayer en Agaete, homenaje al Poeta Fernando González Más de cien personas le expresaron su admiración y amistad. En el mediodía de ayer, organizado por el grupo Neo-Tea le fue ofrecido en Agaete un homenaje al ilustre poeta canario Fernando González. Unas cien personas rodeaban al poeta que, iniciando su retorno a la tierra que le vio nacer tras una larga ausencia en el pasado año, ha querido de nuevo volver a ella. 70 Tras la lectura de varias ofrendas poéticas, don Juan Sosa hizo lo propio con las adhesiones recibidas desde Arrecife Don Pedro Perdomo y las de don Juan Velázquez y Agustín de la Hoz, Lucy Cabrera, Natalia Sosa desde Madrid y Cartas de don Luis Doreste Silva, don Tomás Gómez Bosch y Abraham Cárdenes. El Eco de Canarias 21 de octubre de 1964 PUBLICACIONES Un bello número de la revista “Isla” La revista “Isla”, órgano informativo del Centro de Iniciativas y Turismo, acaba de aparecer en su número 27, correspondiente al tercer trimestre de 1964. En su portada, la reproducción en color de un bello paisaje cumbrero de Gran Canaria. El “Roque de Bentayga”, visto desde una de las vueltas de la carretera que serpentea desde la “Cruz de Tejeda” al pueblo de Tejeda, captado por el mágico pincel del maestro de la pintura canaria Tomás Gómez Bosch. Diario de Las Palmas 5 de diciembre de 1964 CHISMOGRAFIA LEVE Díaz Cutillas No hace mucho tratábamos del poco ambiente de exposiciones en Las Palmas. Ahora hay que rectificar. Porque también se ha rectificado. Hemos tenido hasta ayer la de Gómez Bosch. Con anterioridad fue clausurada la de Gabriel Rodó Sellés. En marcha está la del tinerfeño Raúl Tabares, en Galería Wiot. Diario de Las Palmas 16 de diciembre de 1964 Campaña de Navidad y Reyes Pro-vivienda del necesitado IV relación de donativos Suma anterior 685.450.00 pesetas Suma y sigue 691.700.00 pesetas Cuadro donado por don Tomás Gómez Bosch valorado en 5.000.00 pesetas. 71 Diario de Las Palmas 22 de junio de 1965 ECOS DE SOCIEDAD Necrológicas: El pasado domingo falleció en esta capital, rodeada del cariño de sus familiares, la señora Doña. Carmen Arroyo Cardoso, tras larga y cruel dolencia sobrellevada con ejemplar resignación y después de recibir los Santos Sacramentos y la Bendición Apostólica. Al acto del sepelio, celebrado ayer, con misa de “corpore insepulto”, en la parroquia de San Agustín, asistió numerosa concurrencia. Expresamos nuestro sentido pésame a sus hermanos don Tomás, Adela, don Isidro (ausente), Ana y Consuelo; hermanos políticos, doña Bernarda Medina, doña Maruxa de Celis y don Tomás Gómez Bosch; sobrinos, en particular a don Laureano Arroyo Medina, primos y demás familia. Diario de Las Palmas 26 de noviembre de 1965 Miscelánea de noticias La galería de ex presidentes del Cabildo Insular Por Orlando Hernández Parece que se ha acordado reunir en una sala denominada de los ex presidentes, a cuantos han pasado por la presidencia de nuestra Mancomunidad de Cabildos, completando, así, el número de los retratos ya existentes. Así, figurarán en breve los retratos de don Miguel Alonso, don Francisco García García, y don Antonio Limiñana, obras encomendadas al parecer a nuestros retratistas más representativos, Carlos Morón, Cirilo Suárez y Tomás Gómez Bosch, tres pinceles con muy diferente personalidad, pero bien representativos dentro de nuestro panorama insular, en ese difícil arte del retrato. El Eco de Canarias 10 de mayo de 1966 Subasta benéfica en el Gabinete Literario. En Galería Wiot se celebra una exposición de cuadros donados a la Asociación Católica de Orientación a la Joven, pro-nueva casa, por artistas de nuestra isla, que serán subastados el próximo día 12, a las siete de la tarde siendo el acto presidido por el 72 presidente del Gabinete Literario, don Manuel Padrón Quevedo, actuando de mantenedor del acto el locutor de Radio Atlántico don Carlos Martín. El importe r
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Calificación | |
Título y subtítulo | Tomás Gómez Bosch, pintor : recopilatorio de su trayectoria artística |
Autor principal | González Rosales, Vicente |
Tipo de documento | Libro |
Lugar de publicación | Las Palmas de Gran Canaria |
Fecha | 2014 |
Páginas | 717 p. |
Materias |
Gómez Bosch, Tomás (1883-1980) Entrevistas Crítica e interpretación Exposiciones |
Formato Digital | |
Tamaño de archivo | 17063927 Bytes |
Texto | 1 T O M Á S G Ó M E Z B O S C H: PINTOR Recopilatorio de su trayectoria artística Por Vicente González Rosales 2 D E D I C A T O R I A A la memoria de este gran artista y a la De todos aquellos que enjuiciaron su obra Y Que con su labor llenan de contenido a este Recopilatorio. AGRADECIMIENTOS A los hijos de don Tomás, Especialmente a Sofía y a su Esposo Nolo, por facilitarme El material fotográfico que tanto Ha enriquecido este trabajo. A mi hijo Vicente Manuel Por su inestimable colaboración A la hora de incorporar el material Fotográfico y resolverme todos Los problemas de índole informático Que se me han ido presentando. Este Recopilatorio fue acabado El día 31 de enero de 2014 En Las Palmas de Gran canaria, Por Vicente González Rosales, 3 I N D I C E I.- Perfil biográfico II.- Don Tomás cuenta su vida a Cano Vera III.- Don Tomás en Siesta de Memorias IV.- Pinceladas del diario acontecer V.- Cerveza, Chocolate y Cámara VI.- Exposiciones y Artículos VII.- Artículos y Comentarios VIII.- Entrevistas IX.- Homenajes y distinciones X.- Obituario XI.- Poemas con dedicatoria XII.- Cronología XIII Galería de retratos 4 P E R F I L B I O G R Á F I C O 5 Tenemos que empezar diciendo que estamos ante el recopilatorio de la vida y milagros interpretados por un ciudadano nacido en Las Palmas de Gran Canaria que se llama Tomás, y por tanto, son de su exclusiva autoría, y el hecho de que la mayor parte sean de dominio público, no les quita ni un ápice de esta condición. De cuanto se ha dicho y escrito de él, buena parte ha sido recogido de sus propias manifestaciones y el resto ha emanado de las vivencias que otras personas compartieron con él y que se convirtieron en fuente de información para todos los que nos hemos sentido atraídos por la personalidad de este ciudadano llamado Tomás que, por imperativos generacionales se convirtió, siendo muy joven, en industrial chocolatero y cervecero para sacar adelante los intereses de sus progenitores y que, llegado el caso, se vio impelido a ejercer como fotógrafo para sacar adelante su prole. Cuando ya, más o menos, la tenía encaminada, pudo dedicarse a lo que vocacionalmente se había sentido llamado durante toda su vida y que tuvo que posponer después de haber dado los primero pasos para convertirse en pintor, no de brocha gorda, sino de los de paleta y pincel, alcanzando cotas tan altas como insospechadas cuando en el Museo del Prado empleaba su tiempo copiando a los grandes maestros, especialmente Velázquez, Goya y El Greco, por los que sentía especial predilección. Como industrial, en nada se vio beneficiado en lo personal, a no ser por las muchas preocupaciones que le ocasionaba esta actividad comercial tan dura y competitiva que por necesidad tuvo que desarrollar y en la que, venida a menos, tuvo que dar un paso atrás para poner en juego sus capacidades personales y destacar en el campo de la fotografía al frente de su propio estudio, antesala de lo que sería su máxima realización, dedicarse plenamente, de cuerpo y alma, a la pintura. Cuando me planteé la idea de acometer la tarea de hacer una biografía de Don Tomás, tuve muy en cuenta las relaciones familiares que nos unían, en las que no faltan ratos de 6 amenas charlas y uno de sus cuadros colgado en el salón de mi casa, regalo suyo con motivo de mis esponsales. Pero la realidad me ha llevado al convencimiento de que todo lo que ahora, en estos momentos, yo pueda decir o escribir, aunque sea de primerísima fuente, ya ha sido dicho y escrito por él mismo o por tantos que a lo largo de su casi secular vida, se ocuparon de seguir sus pasos y del que, afortunadamente, hoy nos queda también el testimonio de su obra, repartida por innumerables hogares, pinacotecas privadas y museos públicos, tanto en las islas como en el territorio peninsular y hasta en el extranjero. Su obra dará aún mucho que hablar y para ello están los eruditos en arte, que seguirán analizando y comentando su pintura como corresponde a este importante eslabón en la cadena evolutiva del arte de los pinceles, que aún no ha llegado a su fin. Aparecen nuevos pintores, nuevas técnicas, nuevos estilos, nuevas tendencias, pero los viejos maestros nunca perderán su vigencia y su obra, lejos de devaluarse, verá acrecentar su cotización. Por ello, he decidido que antes de embarcarme en un relato personal, de contenido sobradamente conocido por todos, lo mejor sería recopilar cuanto esté a mi alcance de lo que dio de sí su trayectoria como pintor y el juicio que merecieron las exposiciones que realizó y muchos de los comentarios que en general se hicieron de su obra, respetando la identidad de sus autores, la literalidad de sus palabras y el medio empleado para su difusión, ordenados en el tiempo en un solo texto, en el que no puede faltar, aunque sea sucintamente, lo relativo al considerable espacio de tiempo que va desde que tuvo que abandonar, por cuestiones familiares, su formación artística, finales de 1906, hasta que la retomó para iniciar su carrera como pintor profesional, si bien con anterioridad “mataba el gusanillo” casi todos los domingos, pintando en casa. Su primera exposición individual se celebraría en el Gabinete Literario e inaugurada el 20 de abril de 1940, en la que colgó la nada despreciable cantidad de 55 cuadros, que como es lógico pensar, no los pintó en sólo dos o tres meses anteriores a esa fecha. A partir de aquí sostendría admirablemente el ritmo de una exposición anual, interrumpido en contadas ocasiones por razones de enfermedad, lo que da idea de su tenacidad, laboriosidad y plena dedicación al trabajo. El perfil biográfico de don Tomás Gómez Bosch, por lo que a mí se refiere, forzosamente tiene que ser muy escueto, apenas desgranar una serie de fechas a las que se asignan un cúmulo de circunstancias, casi todas de índole familiar y algunas personales, porque lo verdaderamente sustancioso nos viene desvelado ampliamente por el propio don Tomás, en las entrevistas concedidas a Cano Vera, en septiembre de 1966 y a Martín Moreno en septiembre de de 1996 para su “Siestas de Memorias”, amén de las numerosas que el pintor concedía en vísperas de sus exposiciones, que como ya hemos dicho, casi tenían periodicidad anual. 7 Tomás Gómez Bosch nació en Las Palmas de Gran Canaria, el 17 de diciembre de 1.883 y era el cuarto de los catorce hijos habidos del matrimonio compuesto por Cástor Gómez Navarro y Ana Bosch y Sintes, de los que sobrevivieron sólo once. Ella era hija de Tomás Bosch y Sastre, comerciante mallorquín y armador de barcos, en uno de los cuales arribaron al puerto de Las Palmas camino de Casablanca, pero hubo cambio de planes y se instalaron definitivamente en nuestra ciudad. Su padre procedía de una acomodada familia murciana y llegó a Las Palmas con otros jóvenes empresarios de aquella ciudad, instalándose inicialmente en la calle Cano. En el año 1906 adquirió la fábrica de chocolates El Escudo, propiedad de la familia Fabre, y que pasado unos años, en 1910, pasaría a llamarse Chocolates Gómez Bosch. El 18 de diciembre de 1918 se publica en el Diario de Las Palmas un comunicado de D. Vicente Lleó dando cuenta de que con fecha 30 de noviembre último y previa escritura otorgada ante notario, ha cedido su establecimiento de Droguería a don Cástor Gómez Navarro, quien se hace cargo del activo y pasivo, continuando el negocio en forma idéntica a la que hasta ahora ha llevado esta casa. En el mismo comunicado don Cástor ratifica lo manifestado por el señor Lleó. La Droguería estaba instalada en el número 65 de la calle de Triana. En el mismo periódico, con fecha 10 de enero de 1924, don Juan Antonio Ortiz, Alcalde accidental de la ciudad publica el siguiente edicto: “Habiéndose presentado instancia ante esta Alcaldía por don Cástor Gómez Navarro, en solicitud de permiso para instalar una fábrica de cerveza en un edificio situado en la calle de Eusebio Navarro, e informado que los documentos que por duplicado acompaña a su instancia reúnen los detalles y circunstancias necesarios; he dispuesto anunciar al público el proyecto conforme a lo prevenido en el artículo 372 de las ordenanzas municipales por término de treinta días, que empezará a contar desde esta fecha, estando de manifiesto en Secretaria a fin de que los vecinos que se consideren perjudicados con dicha instalación expongan ante esta Alcaldía lo que estimen conveniente: Las Palmas 22 de diciembre de 1923.- J. Ortiz” Con todo esto, don Cástor Gómez se ha convertido en un importante empresario canario que durante el bienio 1908-1910 llegó a ser vicepresidente segundo de la Cámara de Comercio de Las Palmas. El día 10 de mayo de 1924 fallecería el señor Gómez Navarro, recayendo todas las responsabilidades de sus negocios en la persona de su hijo Tomás, aumentando la carga 8 que sobre sus hombros pesaba desde 1906 en que se hizo cargo de la fábrica de chocolates y que tanta trascendencia tuvo en el rumbo que iba a tomar su vida, hasta que en 1939 pudo retomar su camino vocacional. Después de este breve paréntesis dedicado a su progenitor, situémonos en los primeros años del joven Tomás, que, como en casi todos los niños de su edad, estuvieron dedicados a recibir las primeras enseñanzas académicas, en su caso, en el Colegio de San Agustín, donde hizo el bachillerato y descubrió su pasión por la pintura de la mano de su profesor de dibujo, Nicolás Massieu y Falcón. En 1900, concluye Tomás Gómez Bosch sus estudios primarios y con el título de Bachiller en el bolsillo comienza a trabajar en un negocio familiar, sin dejar a un lado lo que en su interior le rumiaba machaconamente y no era otra cosa que la pintura y así, en sus ratos libres, comienza a asistir a las clases de Federico Valido, profesor de la Academia Municipal, animado también por la presencia en Las Palmas del pintor catalán Eliseo Meifrén, cuya influencia se hizo patente en sus primeros cuadros. En 1904, con la aquiescencia de su madre, emprende su pequeña aventura peninsular y se desplaza a Madrid, vía Cádiz, y una vez instalado en la capital de España, acude al estudio de José Garmelo y Alda para iniciar su aprendizaje en el arte de la pintura, y después de un año de permanencia en el mismo, opta por una vía más personal, acudiendo diariamente al Museo del Prado para copiar a los grandes maestros que hemos citado anteriormente, frecuentando por la tarde el Casón del Retiro, donde copiaba sus bellas esculturas. En Madrid tuvo ocasión de entablar buena amistad con su condiscípulo Gutiérrez Solana, Julio Romero de Torres, Joaquín Sorolla, Eliseo Meifrén y con Zuloaga, que como veremos más adelante lo estimuló para que se iniciara en el cultivo del bodegón, en cuyo ejercicio alcanzó gran predicamento. Su aventura madrileña iba a ser breve, apenas llegó a completar los tres años. Quizá por su carácter apacible, o por la morriña que padecemos los canarios cuando abandonamos de muy jóvenes las islas, a finales de 1906, don Tomás decide regresar a su tierra, pese a los reproches que le hiciera el maestro Meifrén, animándole a no rendirse y continuar con su carrea pictórica, para la que él consideraba, el canario tenía grandes posibilidades, habida cuenta de las notables cualidades que poseía para ello. Con esto se abre una nueva etapa en su vida. Puede decirse que su regreso a la isla supone el abandono total de los pinceles. No así el amor hacia la pintura, ya que en su 9 interior probablemente iba confeccionando una gran colección de cuadros irrealizados para una exposición que nunca se celebró. Ese mismo año, su padre adquiere la fábrica de chocolates El Escudo, encomendando a su hijo Tomás la responsabilidad de dirigirla, siendo sin duda el detonante que cambiaría radicalmente su vida, al menos en unos años. Quedaba atrás el aspirante a pintor y nacía el industrial; a partir del año 1910 la fábrica pasaría a denominarse “Chocolates Gómez Bosch. Un sábado, día primero de junio del año 1918, contrae matrimonio en la iglesia de Santo Domingo de Las Palmas, -su párroco don José Marrero bendijo la unión- con la joven Ana Arroyo Cardoso, -que resultó para él la compañera ideal en todos los aspectos-fruto del cual fueron los ocho hijos que tuvieron. En 1924, Don Cástor Gómez Navarro funda la fábrica de cervezas con la denominación de “La Tropical” pero, desgraciadamente, apenas pudo disfrutar de ella, ya que fallece a los pocos meses de su génesis, dejando las dos industrias a su hijo Tomás. Fueron muchas las vicisitudes por las que tuvo que pasar el improvisado industrial hasta el punto de que en el año 1939 se ve obligado a vender la fábrica de cerveza a la firma Sical S. L., dando por finalizada esta etapa de su vida. Pero este final de etapa no iba a dejar a don Tomás en completo desamparo, ya que, a principios de la década de los treinta, había compaginado sus actividades comerciales con la práctica en sus ratos libres, de otra de sus grandes aficiones junto a la pintura: La fotografía. De hecho la fábrica de chocolates llegó a convertirse en casi un museo donde compartían pared fotografías y copias de los grandes maestros realizadas durante su estancia en Madrid, sin olvidar que ya existían bastantes cuadros datados dentro de la década, entre ellos los retratos de su esposa y de su madre, realizados golpito a golpito, domingo a domingo, convirtiéndose el de su madre en una de las obras más elogiadas y valoradas de su carrera. La tercera etapa comprende los veinte años que transcurren entre 1939 y 1959, en los que Tomás Gómez Boch convirtió la fotografía en profesión y, por tanto, en medio de subsistencia para su familia. 10 El uno de septiembre, en un anuncio de prensa, el Ayuntamiento comunica el traslado del domicilio de don Tomás Gómez, de la calle de Canalejas a la de Domingo J. Navarro, núm. 5, donde también instaló su estudio fotográfico que pronto se convertiría en uno de los preferidos de la sociedad canaria y por el que pasaron invitados por don Tomás para posar, -hombre culto y amante de la buena música donde los hubiera-numerosos músicos y artistas que nos visitaban, contratados por la Sociedad Filarmónica o por la empresa del teatro. He tenido ocasión de visitar esa galería de famosos visitantes y tengo la impresión de que son muy pocos los que faltan en ella. En 1959, termina su etapa como fotógrafo profesional, entregando el testigo a su hijo menor, Néstor Gómez Arroyo, que siempre estuvo a su lado ayudándole en las tareas del estudio, lo que le proporcionó la debida formación como para hacerse cargo del mismo con plenas garantías de seguir contando con la consideración de su numerosa y selecta clientela. Por fin, en el año 1959, comienza la etapa más importante de su vida, que iba a durar hasta el fin de sus días, dejando a un lado todo lo que le había impedido dedicarse a su gran pasión desde que tuvo uso de razón: la pintura. Su primera exposición individual tuvo lugar en el Gabinete Literario, donde colgó 55 cuadros y fue inaugurada el 20 de abril de 1940, y la última, celebrada en la Sala Cairasco, con 35 cuadros, inaugurada el 13 de marzo de 1978; o sea, 38 años de plena dedicación profesional a la pintura, mostrando su producción a los aficionados de su tierra, Tenerife, Madrid, Barcelona, Venezuela y la Haya, dejando constancia de la maestría de sus pinceles, sin abandonar nunca sus preferencias por la escuela realista española, tanto en el campo de retrato como en los bodegones y paisajes, sobre todo los de su tierra, que plasmó en sus lienzo a pié de campo, cargando con su caballete y tocado con su inseparable compañero, el tradicional sombrero de paja. Por su edad, llegó a ser el decano de los pintores españoles en activo. Don Tomás Gómez Bosch falleció en Las Palmas de Gran Canaria el 25 de abril de 1980. El día 7 de febrero de 2007 tuvo lugar en el salón de actos del colegio Claret de Tamaraceite, un acto de homenaje a los 30 artistas isleños nacidos en el siglo XX, entre ellos don Tomás, que con sus nombres pasaron a conformar el “barrio de los artistas” ya que a cada uno de ellos se les había asignado el nombre de sus calles. Con ello, el Ayuntamiento capitalino quiso perpetuar el recuerdo de sus hijos más preclaros. 11 D. TOMÁS CUENTA SU VIDA A CANO VERA 12 Conversaciones noveladas 18 de septiembre de 1.966 El Eco de Canarias DON TOMAS GÓMEZ BOSCH CUANTA SU VIDA Por Cano Vera Medio siglo de la Historia de la Pintura. El artista y su obra figura en la Enciclopedia Espasa I D. Tomás Gómez Bosch o medio siglo de pintura canaria. Este sería el resumen de una vida dedicada casi por entero al arte. Una figura señera y venerable. Una biografía interesante por su historia dentro de la pintura insular. Gómez Bosch ha sido embajador de nuestro arte, dentro y fuera de España. Su producción artística ha sido enorme, ni él mismo conoce el número de sus obras. Sus cuadros figuran en museos y entidades culturales de toda España. Y su nombre y sus obras han sido recogidos por la Enciclopedia Espasa. La pintura de Gómez Bosch es una pintura de juego limpio que responde a la madurez lograda por su autor a lo largo de un quehacer honesto, sentido y meditado, entendido como servicio misional de creador personalísimo, sincero y noble de belleza plástica en su máxima emocional pureza, pinturas de formas con espíritu y de palpitante entraña. Nada se atisba en ella de antiestético ni anti plástico. Todo obedece a una Ley, a un orden y un concepto elevado del artista de su funcional cometido, es decir, como aconsejara Schiller, “estampando el ideal en la verdad y en la ilusión en los juegos de su fantasía y en la seriedad de sus actos o imprimiéndoles en todas, las formas sensibles y espirituales, entregándolo silenciosamente al tiempo infinito. 13 Así vemos a este magnífico y veterano pintor canario, seguro de sí mismo, y sin adulterar nada de las puras esencias del arte, del suyo. Y así lo han visto críticos de juicios más autorizados que el nuestro, como es José Francés que en el semanario “Domingo” afirmaba: Entre unos y otros, academizantes y vanguardistas, Gómez Bosch sitúa su pintura. Es una pintura que se funda y se arregla en los perennes del realismo; pintura veraz y honrada, limpia de preocupaciones, ajenas al noble y grandioso oficio de paletas y pinceles”. Federico Díaz- Falcón en el diario “Madrid” “El paisaje canario nos habla al alma. Eso explica que la pintura de Gómez Bosch sea una pintura sociológica y contemplándola nos viene a la memoria La Tour, aquel famoso pintor francés del siglo XVIII, de quien dijo Gustavo Larroumet: “cala hasta el fondo de las almas y cada retrato es una cumplida descripción del carácter de su modelo”. Lo mismo podíamos decir de Gómez Bosch.” Alfredo Marquerie en una conferencia dijo: “Se ha dicho con razón que no hay pintura sin aire. Y la de Gómez Bosch es magníficamente una pintura de algo más, una pintura de clima, abre con sus cuadros ventanales y miradores, a la contemplación de la flora y de la humanidad isleña.” Este es el pinto grancanario Tomás Gómez Bosch. Y para conocer su vida hemos ido hasta su domicilio, el tranquilo y recoleto barrio de Buenavista. El mismo artista ha sido el que nos ha abierto la puerta. Confesamos que no lo conocíamos por sus rasgos físicos, pero inmediatamente nos dimos cuenta de que tenía facha y clase. Su nariz, un poco roma, sus orejas grandes, su mirada distraída y su natural sencillez son los rasgos que más sobresalen en el pintor Tras los saludos de rigor, don Tomás nos dice que ha seguido con mucho interés las crónicas publicadas en estas columnas de “Nuestra ciudad y sus hombres” - Es una pequeña historia de los últimos años de nuestra provincia. Naturalmente servirá para hacer un poco de justicia a figuras ilustres de nuestras islas. Estamos hablando en una confortable sala de estar. En las cuatro paredes cuelgan magníficos cuadros del pintor. En un rincón, un televisor. En el bando, entre abierto, una cómoda butaca. Sobre una silla varios periódicos y revistas. En una mesa un libro. Don Tomás no pierde el tiempo: 14 - Aquí paso la parte de mi vida diaria. Desde que estuve enfermo pinto muy poco, algunos ratos por las mañanas y los domingos. El médico me dijo que no me esforzara mucho. - ¿Qué tal se encuentra? - Bien, pero uno se siente un poco acobardado. Pasan unos minutos y el artista nos invita a pasar a su estudio, que ha levantado en el último piso de la casa. Las escaleras las subimos lentamente. Se abre una puerta y ante nosotros tenemos el estudio de Gómez Bosch. Una sala de unos siete metros de largo por cuatro de ancho. Cuadros y más cuadros. Unos terminados, otros por rematar o retocar. Otros se ven que están olvidados. También observamos algunos albúmenes con fotografías y recortes de prensa. Y también una bien nutrida biblioteca especializada en arte. ¿Cree usted que yo puedo decir algo, que es interesante? - Su vida tiene que ser interesante. Usted como otros canarios, son parte de la historia de nuestras islas. No le quepa duda alguna. Nuestra profesión periodística nos lleva a husmear todo. En el presente caso tenemos predilección por las viejas fotografías, por los recuerdo de familia, por todo aquello que está enmarcado en la intimidad del biografiado. Don Tomás Gómez Bosch se sonríe levemente y nos comprende. Es parte de nuestro trabajo. Al poco rato la mesa del estudio del pintor está abarrotada de fotografías, de recortes de prensa, de programas de exposiciones, de papeles y de cartas, etc. Nos vamos situando. Pero yo observo al pintor. Me interesa su carácter, su forma de ser y de pensar. Sus pequeños gestos espontáneos. Nos sentamos frente a frente. Vemos nuevamente sus recuerdos gráficos. Seleccionamos algunos. Le pregunto por la fotografía de boda, que no la veo por ningún lado: - Verá usted, es que no quise hacérmela. Una manía ¿sabe? Después su esposa nos informaría que no fue por una manía sino que don Tomás Gómez Bosch se casó un poco mayor, con 34 años y no se veía muy guapo, quizás. 15 - Son cosas que se le meten a uno en la cabeza. Pero un mes más tarde nos hicimos una que se la entregaré el lunes. Si es que la encuentro. El primer contacto con el pintor ha terminado. El lunes seguiremos relatando su vida, sus primeros años de la infancia, allá a finales del siglo XIX, cuando Las Palmas era una ciudad tranquila, sosegada llena de encanto pueblerino, con sus tertulias, sus cafés y sus peñas de amigos. Eso dicen los más viejos del lugar. II Eco de Canarias 29 de septiembre de 1.966 1900: Una polémica graciosa y una fecha con encanto El pintor estudia en colegio de San Agustín y dibuja “clandestinamente mientras trabaja. Son las once de la mañana. El lunes se ha iniciado con una temperatura agradable. “Sentimos” el otoño, casi lo percibimos, lo olfateamos. Es una sensación gozosa que casi llega a ser una impresión de tipo sicológico, una misteriosa asociación de ideas basadas en las circunstancias climáticas. El otoño y la primavera son las dos estaciones del año más agradables. Incluso para trabajar. Y para vivir. Nos sentimos más humanos, si este término puede ser paralelo al romántico, más sensible a las circunstancias que nos circunda. Conversar con don Tomás Gómez Bosch en su estudio a esta hora del día y con esta idílica temperatura, es un placer extraordinario. Los rayos del sol penetran por una ventana, delicadamente, detenidos por la suavidad de una coquetona cortina a manera de 16 visillo. Por otra, un fresco airecillo que hace bailar los papeles y moverse a una pequeña lámpara. El pintor se ha sentado en una amplia butaca. Se ha fijado las gafas y nos ha mirado interrogativamente. Iniciamos el diálogo: - Me interesa el artista como tal y como hombre. Creo que debemos acercar las (grandes) figuras de Canarias al pueblo. - - Siempre he sido un hombre sencillo, ya lo comprobará usted. - Por eso mismo me interesa que cuente usted la vida de Tomás Gómez Bosch, primero; después la del pintor. - Tomás Gómez Bosch nació hace muchos años, en el siglo pasado, un día cualquiera de un año cualquiera. - - ¿Cuándo? - - El 17 de diciembre de 1883 - Es decir, que tiene ochenta y tres años. Para nosotros y lo decimos sinceramente, ha sido una sorpresa, porque le calculábamos, a lo sumo, unos sesenta y más años. Gómez Bosch se conserva increíblemente bien, salvando una dolencia cardíaca que no ha revestido por fortuna ninguna gravedad. Come normalmente, duerme unas ocho horas, hace algún que otro ejercicio, lee mucho y pinta a ratos. - ¿Dónde nació? - En Las Palmas. En una calle que lleva su primer apellido, Cano. No recuerdo el número, pero muy cerca, creo, de donde está actualmente la Sección Femenina. Fui el cuarto hijo de una prole de doce hermanos. Mis padres eran peninsulares: él originario de Murcia; ella de Mallorca: Vinieron muy jóvenes y aquí se establecieron al calor de la cordialidad y hospitalidad de esta capital de mi alma. - ¿Cómo transcurrió su infancia? - Aquí poco había que hacer en aquellos años. Las Palmas ha iniciado su desarrollo y su pujanza en los últimos veinte años. En mis tiempos de niño esto era un pueblo grande, y nada más. - Estudió, claro. - Así es. Fui al principio a la escuela primaria, hasta los diez años. Poco después iniciaba mis estudios de Segunda Enseñanza en el famoso colegio de San Agustín, desaparecido ya. Entonces era su director don Diego Mesa de León. - ¿Recuerda algún condiscípulo suyo que viva en la actualidad? 17 - ¡Hombre, cómo no! Don Luis Doreste Silva. Él estudiaba en un curso inmediatamente superior al mío. Me lleva un año. - ¿Pues sabe, don Tomás, que forman ustedes un dúo envidiable? - ¡Oh, eso quisiera yo! - ¿Qué tal estudiante era? - No muy bueno; tampoco malo. Solamente regular. Y era porque la pintura y el dibujo me tenían absorbido. Era una pasión grande. A todas horas estaba dibujando. Aún cuando tenía ante mí cualquier libro de texto. Se me iba la imaginación; tomaba un papel y un lápiz y estaba horas y horas haciendo garrapatos. - ¿Cuál fue el primer profesor de dibujo? - ¿Cuándo estudiaba bachillerato? - Si. - Don Nicolás Massieu. Este fue mi primer profesor. Él me enseñó muchos secretos del dibujo que yo desconocía en mi infancia. - ¿En qué año terminó el bachiller? - Un año con encanto: 1.900. - Cuando se pasa de un siglo a otro se hacen grandes fiestas. ¿Es cierto? - Igual que cuando se pasa de año. Por lo menos eso fue lo que ocurrió aquí en Las Palmas. Lo que sí recuerdo bien es que hubo una gran polémica respecto a la fecha. También respecto al año. Unos decían que el siglo XX comenzaba en 1900; otros que en 1901. - ¿Y usted qué opina? - A mí me daba exactamente igual, pero creo que lógicamente debió ser en 1900. ¿No le parece? - Termina el Bachillerato e inicia sus estudios superiores. - Pues no. Terminé mis estudios de Segunda Enseñanza y me puse a trabajar. - ¿En un negocio de la familia? - Sí, en un establecimiento de mi abuela, viuda de don Tomás Bosch y Sastre. Durante muchos años estuve haciéndolo, pero sin perder jamás la esperanza y la ilusión se seguir por el camino que la vocación me marcaba desde que era pequeño. No podía resistir la tentación. - ¿Pero olvidó por completo el pintar? - No, eso no. Trabajaba y en ratos perdidos, casi siempre en domingos y días festivos hacía un poco de dibujo. Pintura aún no. - ¿Cuánto duró esto? - Hasta que me propuse ir a París, que luego cambié por Madrid. Pero si le parece dejamos esta nueva etapa de mi vida para contarla en otra ocasión. Mañana. Me interesa mucho que ahora veamos algunos cuadros. Durante cerca de una hora, don Tomás Gómez Bosch nos va mostrando una parte de su exhaustiva producción artística. Catálogos, programas y fotografías de retratos que ha hecho a lo largo de su vida pictórica. El artista goza de esta intromisión periodística y a cada instante nos reprocha con cierta dulzura nuestro apego por las fechas. 18 - Tantas fechas. Tantas fechas. ¡Con la memoria que tengo yo, querido amigo! - Le perdonaremos algunas, palabra de honor. Don Tomás Hace un ademán como de duda y se fija otra vez las gafas sobre su roma nariz. El Eco de Canarias 21 de septiembre de 1.996 III GÓMEZ BOSCH SE HACE AMIGO DE ROMERO DE TORRES El pintor canario estudió durante tres años en Madrid Sorolla recibe un racimo de plátanos al son de la Marcha Real El joven Tomás Gómez Bosch inicia sus estudios en una escuela de enseñanza primaria, para poco más tarde al prestigioso Colegio de San Agustín para cursar el Bachillerato. Hace la correspondiente reválida y se produce un corte en la preparación intelectual o de formación del pintor. Durante algunos años trabajaba en un comercio de su abuela sin desligarse por completo del dibujo. A ratos perdidos trabajaba con intensidad en esta afición que le atrae poderosamente. El artista se va forman también desde el punto vista humano. Se hace hombre. Alguna vez asiste como mero espectador a conferencias y exposiciones. En su interior bulle la idea con la cadena que le ata y saltar las fronteras de la isla y volar hasta Paris. Rafael Martín Fernández de la Torre Gómez Bosch no es un conformista. Ni tampoco sabe aguantar con estoicismo las estocadas de la vida. Es un rebelde. Sin actitudes de cara a la galería... Echa a volar su 19 imaginación, sopesa opiniones y juicios. Y toma una decisión crucial para su futuro: marcharse a Madrid. Gómez Bosch comunica a sus familiares que deja el trabajo y que quiere proseguir sus estudios de dibujo. Es una firme determinación; su vocación hay que respetarla. Hay acuerdo familiar y Tomás Gómez Bosch, joven aún, toma el barco correo, desembarca en Cádiz y emprende viaje hacia Madrid. Es un viaje larguísimo, de semanas, una aventura casi. Entonces no había DC-8 que acercara Madrid a Las Palmas en el mismo tiempo que se hace por carretera el itinerario desde Las Palmas a San Nicolás de Tolentino. Tomás Gómez Bosch llega a Madrid, la ciudad dorada de la juventud de entonces. El ambiente cultural es intensísimo: Unamuno, Pérez Galdós, Valle-Inclán, Sorolla, Julio Romero de Torres, Azorín y otros muchos con sus famosas tertulias de los cafés de Madrid, Levante y Gijón, que ponen sobre la actualidad matritense el sello inconfundible de su personalidad. Bulle la generación del 98. Políticamente se viven momentos muy interesantes. En África ha nacido una nueva rebelión, la de 1.904. Pero Madrid vive un poco a su aire. Se habla, se comenta, pero también se procura llevar una existencia cómoda. Tomás Gómez Bosch llega a la capital de España con un bagaje inmenso de ilusiones, deseos y esperanzas. Ávido de aprender y estudiar a los grandes maestros del momento y a los clásico de la pintura española. Toma contacto con varios grupos de estudiantes y personalidades canarias e inicia su vida de estudiante, alternándola con alguna otra juerga sin importancia, en la que el mosto abunda en proporciones moderadas pero suficientes para alegrar las dificultades del momento. - Naturalmente, mi primera visita fue al Museo del Prado. Llegué hasta sus galerías con casi devoción. Muy nervioso y todo emocionado. Mi primera visita duró casi cuatro horas. Me extasiaba ante los cuadros de Velázquez, Goya y el Greco, mis maestros. Al otro día volví de nuevo. Allí estuve hasta que casi me echaron. Estos tres pintores me entusiasmaban. - ¿Volvió con frecuencia? - ¡Ya lo creo! Hice numerosas copias durante el tiempo que estuve en Madrid. Me sirvió mucho esta experiencia. - ¿Con quién estudiaba en Madrid? 20 - Fui alumno de dibujo de don José Garnelo, una figura nacional de la que aprendí muchas cosas. - ¿Pintores conocidos? - Solana, Sorolla, Zuloaga y Julio Romero de Torres. - ¿Amigos? - Conocidos excepto el pintor cordobés que tanto enalteció a la mujer de su tierra natal. Romero de Torres fue íntimo amigo mío. - ¿Cómo era personalmente? - Un cordobés cien por cien, pero sobre todo muy amable y cortés .Un caballero. - ¿Cómo se desarrollaba su vida? - Por la mañana estudiaba con don José Gardelo y después me iba al Mueso del Prado. Por la tarde al estudio del pintor Emilio Sala, no para tomas lecciones, sino para asistir a una tertulia, o más bien reunión de pintores y alumnos suyos. Algunas veces trabajaba yo en ese estudio. Sala fue muy deferente conmigo, animándome siempre en mis primeros pasos. - ¿Recuerda alguna anécdota? - A principio de siglo el plátano era un manjar diría que casi desconocido. Un día recibí desde Las Palmas un gran racimo de ellos, y como sabía que Sorolla era un gran entusiasta de esta fruta se lo llevé a su casa para regalárselos. Cuando los vio se alegró infinito y me dijo: “No sé si habrá que tocar la Marcha Real”. - ¿Cuánto tiempo estuvo estudiando en Madrid? - Unos tres años aproximadamente. - ¿Tan poco? - Así fue. Mis padres me apremiaban para que volviera. El negocio no iba muy bien y era necesaria mi presencia. Así es que decidí volver a Las Palmas y, a finales de 1906 abandoné Madrid, a donde no volvería hasta pasar muchos años. De mi estancia en esta capital guardo los mejores recuerdos de mi vida. Fueron inolvidables. Don Tomás Gómez Bosch se reclina sobre la butaca. Respira hondamente y guarda silencio. El diálogo ha quedado ligeramente en suspenso. Desde el exterior llegan los apagados ruidos de algún que otro vehículo que pasa toda velocidad. Los gritos de alegría de unos niños que adivinamos que juegan sobre la acera o en el cercano jardín. Un rayo de sol ha penetrado por el quicio de la ventana y ha roto el pétalo de una flor que permanece yerta. Un pincel está caído. El retrato de un hombre nos mira fijamente. Sigue el silencio. 21 Eco de Canarias 22 de septiembre de 1966 IV GÓMEZ BOSCH ABANDONA TEMPORALMENTE LA PINTURA En 1937 celebra su primera gran exposición en el Gabinete Literario Colacho Massieu fue un gran pintor y un entrañable amigo, casi un hermano” Don Tomás Gómez Bosch es un hombre de pocas palabras. Un ser reflexivo como casi todos los pintores de corte académico. Acostumbrado al silencio artístico, a la concentración de ideas, a la observación, muy lejos del arte publicitario, montado en el absurdo, en las extravagancias y las intemperancias. Es un hombre serio que hace una pintura seria, clásica, de finos acordes en grises y que en sus retratos obtiene una gran elegancia y una profunda verdad humana. Gómez Bosch ha logrado con su técnica vencer todos los secretos de las resistencias formularias, modelando con notable soltura la gracia siempre nueva de la materia en triunfo, para dotarla de un leve aire poético que afianza y adorna el realismo de sus cuadros. Dentro de esta seriedad de Gómez Bosch, como persona y artista, está el canario con su peculiar ironía de las cosas, un carácter bondadoso y una sencillez ejemplar en todas sus actitudes. Vive en su mundo. Lo que le rodea, excepto la pintura, es secundario. Su misma esposa nos lo decía en una amplia charla que sostuvimos el sábado. Para Gómez Bosch todo está circunscrito a la pintura. - ¿Cuándo empieza un cuadro lo muestra a su esposa o hijos? - Sí, pero especialmente a mi esposa. Ella es una eficaz colaboradora. Mis hijos son meros observadores de la obra de su padre. - ¿Son críticos veraces? - Cuando hay algo que no les gusta, lo dicen rápidamente. - ¿Usted les hace caso? - Depende de sus observaciones. 22 La conversación ha ido por otros derroteros. Volvemos al relato cronológico. Don Tomás Gómez Bosch tiene que regresar a Las Palmas, el negocio tiene que ser atendido mejor y es muy necesaria su presencia. El pintor regresa a nuestra capital a finales de 1906, después de haber pasado tres años en Madrid. - Regresé y estuve cerca de 24 años sin pintar. Fue una de las etapas más difíciles de mi vida. Mis ilusiones y afanes se vinieron abajo de repente y me vi sumido en el anonimato más oscuro. No obstante asistía, una vez más, como mero espectador a exposiciones – las pocas que se celebraban en Las Palmas - y trabajaba en mi modesto estudio muy de vez en cuando. No tenía tiempo para nada; mis trabajos comerciales consumían todo mi tiempo libre. Había que defender las industrias que poseíamos, aunque al final todo resultó vano: nos quedamos sin ellas. - ¿Qué hizo? - Monté un estudio fotográfico. Me sirvió para expansionarme un poco. A modo de escape. Y ahí está. - Prosiga. - Me casé ya un poco mayor y sigo dando gracias a Dios por este paso. Su esposa –que está junto a nosotros- esboza una sonrisa feliz. Ya nos contó el día que don Tomás se resistió a seguir la tradición de todos los casados. No quiso hacerse la acostumbrada fotografía de boda. Al mes y después de haberlo pensado mejor, se fotografió con su señora. - Mi vida transcurrió anodina durante estos largos años. Trabajaba en el estudio fotográfico y hacía algún que otro cuadro cuando era posible. Seguimos atosigándole con cifras y fechas, pero el pintor tiene mala memoria: - Fíjese hasta qué punto, que llevo en mi chaqueta un librito con las fechas de los nacimientos de mis hijos, por si me preguntan alguna vez. Don Tomás Gómez Bosch, después de veinticuatro años de silencio artístico, toma contacto con el mundo del arte en un intento de volver a él. Nuevamente su vocación le lleva a una actitud rebelde. De resistencia a todo aquello que no sea pintar. Y surge la gran ocasión: - Don Luis Doreste Silva, que como siempre ha sido para mí como un hermano más, siendo presidente del El Gabinete Literario, me invitó a que celebrar una exposición. Era a principios del Movimiento Nacional. Quizás por 1937. Naturalmente no lo pensé mucho. En unos cuantos días la organicé de acuerdo con las directrices marcadas por el Gabinete y presenté una selección de mis mejores obras, todas ellas realizadas durante los años que permanecí en silencio 23 artístico. Entre ellas, una cabeza del Generalísimo Franco. Esta fue mi primera y gran exposición. Anteriormente participé, en Madrid, en algunas de carácter colectivo. Que años más tarde volví a repetir en dos ocasiones más, hasta el momento en que de forma oficial fui presentado al mundo en el arte de Madrid, hecho que ocurrió mucho más tarde. - ¿Cuántos cuadros presentó en el Gabinete Literario? - Podría mirarlo ahora, pero posiblemente fueron unos cuarenta. Poco más o menos. - ¿Qué motivos eran? - Retratos, paisajes, marinas, floreros, bodegones, etc. - Una pregunta don Tomás, ¿recuerda la primera obra que vendió? - Eso sí que es difícil de decirlo. En aquellos años se vendía poco y mal. - ¿En la actualidad se hacen mejor las cosas? - Sí, sí, mucho mejor. - Antes del año 1936 ¿Cuál es la entidad que mas actividad artística desarrollaba? - Tal vez el Casino. Quiero decir El Gabinete Literario. También el Museo Canario. - De su época ¿qué pintores quedan? - Solamente yo - ¿Su mejor amigo entre ellos? - Colacho Massieu era de mi generación pero un poco mayor de edad. Creo que me llevaba unos seis o diez años. Nuestra amistad fue entrañable. Infinidad de veces salíamos juntos al campo, a pintar. - ¿Es usted autodidacta de la pintura? - Hasta cierto punto todos los pintores somos autodidactas. El artista nace y después se hace. Esto es evidente. Pero en su formación hay que tener en cuenta, su vocación y autoformación. No olvide, querido amigo, que la pintura es también muy ingrata, se sufre mucho hasta conseguir cierto auge y fama. - ¿La pintura es una solución económica para usted? - Cuando me iniciaba no. Más tarde fue una necesidad para mí. La vida del artista es así de desconocida para muchos. Todo no es de color de rosa. - Pues bien, si le parece don Tomás, dejamos para mañana el capítulo mayor de su vida. Cuando el pintor ha triunfado de forma definitiva, celebra sus grandes exposiciones y consigue alcanzar fama nacional como el genuino representante de la pintura canaria. - Muy bien, pero a mí me parece que mi aportación ha sido más modesta de lo que dice usted. Pienso que he hecho algo y que mis grandes éxitos han tenido lugar en Madrid, Barcelona, Las Palmas y Caracas, pero cuando pase algún tiempo más, la historia se encargará de fallar. - Canarias siempre hace justicia a sus hijos, con el lógico transcurrir de los años. 24 El Eco de Canarias 23 de septiembre de 1.966 V “RETRATO DE MI MADRE” OBRA CUMBRE DE TOMÁS GÓMEZ BOSCH “Puede que no sea la mejor que he hecho, pero sentimentalmente lo es para mí. Marquerie y Pombo Angulo presentan al pintor canario en el mundo artístico de Madrid. Don Tomás Gómez Bosch – nos decía ayer-es un enamorado del paisaje grandioso de la Cumbre. Han sido muchas las veces que se ha asomado desde aquel balcón inmenso de la isla, para contemplar el panorama que la naturaleza ha embellecido con su sabiduría. El Parador de Tejeda es el lugar de cita que el pintor ha tomado al asalto, como si fuese un castillo de hadas que se han posado sobre el pincel para llevar al cuadro la sinfonía pétrea de sus vistas. El periodista, que también es un enamorado de aquellos lugares, ha sabido comprender y captar la intensidad de las palabras del artista. Don Tomás Gómez Bosch nos habla de su vida como si estuviera dibujándola. Llevando al relato todas sus impresiones, siempre con una objetividad extrema, a veces adorna sus palabras con un suave lirismo, que hace más apto el cuadro pero siempre poniendo el color y la luminosidad de su tierra canaria, dejando en esta ocasión el gris a un lado, para llevar hasta nuestros ojos imaginativos una escena y encuadre perfectos. - Después de mi primera gran exposición en el Gabinete Literario, continúo pintando; trabajo intensamente y me preparo ya definitivamente para una vida artística mejor. Por esa época hice la obra más lograda que he llevado a cabo y la cual me valdría pasar a la Enciclopedia Espasa, que la recogió. Se trata del retrato de mi madre, que si para mi es una obra de gran valor artístico, lo es aún más desde el punto de vista sentimental. - ¿Cuánto tiempo tardó en hacer este retrato? - ¡Ah, no sé! Tardé bastante, ya que lo hacía en domingos y días festivos, porque a pesar de todo tenía que dedicarme a mis trabajos de fotografía. 25 Mi madre venía a casa durante estos días, almorzaba con nosotros y después posaba. La pobre se quedaba algunas veces dormida y yo pasaba las de Caín. Ya era muy mayor. ¿Cómo fue que la Espasa reprodujera este retrato dos veces? - Los editores vieron el cuadro en una de mis exposiciones de Madrid, me pidieron autorización para ello y reprodujeron el cuadro, aunque tengo que decirle que fue una sola vez, ya que en la segunda fue un retrato de mi mujer. - Bien, después de su exposición en el Gabinete Literario ¿hizo alguna otra? - Sí, quizás la más comentada para mí desde luego la más importante de mi vida ya que fue la presentación de mi obra ante la élite del mundo artístico de España. - ¿Recuerda el año? - Alrededor de 1947. - ¿En qué sala de exposiciones? - En el Salón Dardo, que ya hoy no existe. Fue entonces cuando tomé contacto con los editores de la Enciclopedia Espasa. Recuerdo que fui presentado por Alfredo Marquerie y Pombo Angulo, entre otras personalidades, el Ministro de la Gobernación, don Blas Pérez González, que como usted sabrá es de la isla de La Palma. Recuerdo que fue él quien me ayudó mucho en una cosa sin importancia, pero que a mí me trajo de cabeza durante dos días. - ¿De qué se trató? - Pues que cuando llegué a Madrid me pusieron una serie de pegas enormes en la Aduana de Barajas. El papeleo era enorme y los depósitos que tenía que realizar cuantiosos. Todo ello me iba a retrasar el montaje de la exposición que sería inaugurada en pocas fechas. Fui a verle, me recibió y en veinticuatro horas tenia resuelto todo el problema. Respiré con satisfacción. Ya le digo que quizás no tenga importancia, pero los que somos artistas y nos ha ocurrido alguna vez esta tortura, sí que la tiene. No entendemos de papeleos. - ¿Cuál fue su segunda exposición? Tras la celebrada en Madrid, expuse en Barcelona. Fue en el año 1950. El 30 de noviembre, fue en la sala Hespérides, que por cierto yo inauguré. Presenté 26 cuadros. ¿Esta fue la última exposición que hizo en la Península? - No, amigo, la última fue en Madrid en 1952. - Así pues, en Madrid hizo dos exposiciones. - No; fueron tres. En la primera intervine en una colectiva organizada por el Marqués de Lozoya. Fue en 1944…me parece porque en esto de las fechas soy una calamidad. La segunda, y más importante, en 1947, y la tercera y última en 1952. Y como ya le he dicho, otra en Barcelona. - Por favor, es sólo curiosidad. ¿Qué número tenía el cuadro de su madre en la exposición? - El número treinta. - ¿Dónde está ese retrato? - En mi casa, en el salón de estar, junto con el de mi esposa. - ¿Lo han intentado comprar alguna vez? 26 - Sí, sí, muchas veces. Pero no he llegado nunca a un acuerdo con los compradores. El Museo de Arte Moderno es el que más empeño ha tenido, pero tampoco hubo acuerdo. Es muy difícil para mí desprenderme de esta obra a la que tanto amo. - Seguimos pidiendo fechas y más fechas al señor Gómez Bosch y él nuevamente nos responde que no recuerda. Nuevamente llama a su esposa, quien se acerca en auxilio suyo. La señora de Gómez Bosch es una mujer amable y simpatiquísima. La admiradora número uno de su esposo, una eficaz colaboradora que siempre está a su lado. Pese a su edad, aún conserva el encanto de una belleza fina y delicada. - ¿Qué tipo de pintura le gusta hacer más? - Todos, pero tengo predilección por los retratos; es además lo que me va mejor. - ¿Le hubiera gustado se escultor? - No lo he pensado. - ¿En su juventud, qué pintura prevalecía? - La pintura de figuras históricas: personajes, batallas, actos de la familia real, estampas políticas, etc. Después, los maestros de los primeros años del siglo, Sorolla, Romero de Torres, Zuloaga, terminaron con esta forma de hacer. Nuestra conversación con el pintor canario se ha ido apartando. Algunas fechas han venido a su memoria auxiliado por su esposa, aunque quedan algunas por despejar y al final nosotros le recordamos un hecho que también se le olvidó y que ha llegado hasta nosotros por medio de de la autorizada voz de don Luis Doreste Silva, quien ayer nos decía que a Gómez Bosch se le había olvidado señalar que en su exposición del Gabinete Literario había intervenido su hermano Cástor Gómez, pianista y que fue precisamente don Luis quien hizo la presentación de los dos hermanos. Un detalle curioso e interesante. Una anécdota más que son como paréntesis gratos en el párrafo corto y chocante de nuestra vida. 27 El Eco de Canarias 24 de septiembre de 1966 VI GÓMEZ BOSCH EXPONE EN EL CÍRCULO MILITAR DE CARACAS Ha sido uno de los pocos pintores extranjeros que supo captar la luz de Venezuela. En 1960 obtiene el Premio de Honor de la Exposición Regional de Bellas Artes. La obra de Gómez Bosch es una pintura sincera. Por lo menos es objetiva. Casi una fotografía exacta de lo que se quiere llevar al lienzo. Si su pintura sólo tuviese esta cualidad –que posee más- nos quedaríamos con ella, porque la sinceridad en la pintura, en la música, en nuestras actitudes y en nuestras ilusiones, es lo más puro que el hombre puede dar y recibir. Nuestro mundo necesita de hombres sinceros, por lo menos para poder creer en algo y no dar vueltas en torno a una entelequia o a una utopía, para terminar estrellándonos con la misma sombra de uno mismo, convertida en piedra impermeable a toda acción exterior. ¿Existe sinceridad en la pintura? Suponemos que sí, por lo menos en ésta que se amolda a los patrones clásicos y academicistas. La otra puede que también lo sea, pero no queremos molestarnos en averiguaciones que nos pueden producir un desengaño artístico. La obra de Gómez Bosch responde a la misma personalidad del artista. Don Tomás es un hombre bueno, melancólico y lleno de sabiduría, que en esta faceta es técnica, ciencia y vocación. Cuando no nos hemos entrevistado, por la tarde me llama por teléfono. A la misma hora: siete y media. “Hoy me ha gustado”. O: “No me interpretó bien”. Cuando me dice que le ha gustado el capítulo es porque he puesto en boca de él una frase cariñosa para su madre, su esposa, sus hijos o amigos. Cuando pone peros es porque he olvidado algún detalle o frase en la que recordaba a alguien. 28 - El título de Colacho Massieu me ha gustado. Ha sido un pequeño tributo a alguien que ha sabido llevar el nombre de Canarias muy alto. Esto me dijo esta mañana mientras mostraba una serie de cartas recibidas en el Eco de Canarias en las que se felicita al pintor por el magnífico retrato del prelado de la diócesis, Doctor Pildain y Zapiain, reproducido en nuestra edición de ayer, que como se sabe, fue conseguido a base de una fotografía. - Plasmar el ropaje fue cosa distinta. Pero esto pertenece al secreto del sumario. - ¿Conoce el señor obispo este cuadro? - No. Aún no. Yo hubiera querido que hubiera posado pero ya conocemos todos su natural sencillez y humildad. Estoy seguro de que se hubiera resistido. Pero como pintor y católico no podía dejar de hacer esta obra de la que me siento orgulloso. Don Tomás, tras este pequeño paréntesis explicativo, vuelve a relatarnos su interesante vida. - En 1962 hice mi última exposición en Madrid. Aunque antes celebré una en Caracas. En el Círculo Militar de las Fuerzas de la Armada. Presenté 39 cuadros. De ellos cuatro o cinco los llevé desde Las Palmas, los demás los pinté allí. - ¿Cuánto tiempo estuvo en Caracas? - Un año. En este momento interviene su esposa, quien nos informa que Gómez Bosch hizo también dos exposiciones en Santa Cruz de Tenerife. Pero esto ocurrió anteriormente. Alrededor de 1947 o 48. De nuevo volvemos a Caracas. Gómez Bosch nos dice que fue un autentico éxito, de crítica y de público. Asistieron a la exposición lo más florido del mundillo artístico de Caracas, prensa y gran cantidad de canarios. 29 - Precisamente hace unas semanas estuvo aquí el general Risquet, Jefe del Estado Mayor del Ejército venezolano, quien fue uno de los que más me alentaron. Vino a saludarme con su señora y a invitarme a que volviera, pero ya va a ser difícil. - ¿En qué año fue esa exposición? - En 1959 - ¿A qué nivel está la pintura en Venezuela? - En un alto nivel. - ¿Fue su única exposición? - No. Fueron dos. Esta que tuvo lugar en el Círculo y la otra en un salón del que ahora no recuerdo su nombre. - ¿Presentó nada más que retratos? - Retratos y Paisajes. - ¿El paisaje venezolano es parecido al canario? - En cierto modo sí. Es muy interesante. Nuevamente interviene su esposa: - Precisamente la prensa afirmó, así como el público que había sido uno de los pocos pintores que mejor había plasmado el sol de Venezuela. - La luz - interviene Gómez Bosch- Allí, en Venezuela, hay un lugar que le llaman Monte Ávila que es el que rodea a Caracas, y que todos los pintores que llegan a este país intentan llevar al lienzo porque es un paisaje muy interesante. Naturalmente yo hice lo mismo. Durante la exposición me dijeron que había conseguido captar la luz y la figura de aquella imagen con suma perfección, cosa poco común entre los pintores extranjeros. - ¿Qué tal acogida se le dispensó? - Francamente estupenda. - ¿Vendió muchos cuadros? - Sí, creo que fueron todos. - Después de regresar a Las Palmas, tras un año de ausencia ¿celebró alguna exposición más? - En el año 1961, en el mes de noviembre. Y más tarde me trasladé a Madrid en el año 1962; tuvo lugar la muestra en el Hogar Canario. Esta fue mi última y definitiva exposición en la capital española. Después me limité a presentar mis obras en Las Palmas. Casi todos los años. Hasta que me puse enfermo. La última fue en 1964, también en el Gabinete Literario. - ¿Usted no opina que en Las Palmas se está produciendo últimamente una especie de inflación de exposiciones? - Eso pienso, ya son muchas. No obstante también debo decirle que esto beneficia al público siempre y en cuanto se haga una previa selección. - ¿VA usted a las exposiciones? - Antes iba a todas; ahora no. - ¿Presentará alguna exposición próximamente? - Sí, pero para mandarla a Caracas. En Las Palmas por ahora no. 30 - ¿Cuál sido el premio que con más cariño ha recibido y con mayor entusiasmo? - El premio de honor de la Exposición Regional de Bellas Artes, que como ya se sabe se celebra en el Gabinete Literario cada dos años. Lo obtuve en 1960 - ¿Con qué cuadro? - Con uno que titulé “Un retrato”. Por cierto en esta ocasión me sucedió una cosa muy curiosa. Yo no pensaba presentarme, pero me animaron y fui a la exposición con un retrato que tenía hecho a una hija política mía, el cual pensaba regalárselo en una fecha conmemorativa, onomástica o cumpleaños, no recuerdo. El caso es que lo expuse y le concedieron el premio de honor. Naturalmente me quedé sin él, con el consiguiente enfado de mi nuera. Le hice otro nuevo y en paz. Gómez Bosch ha contado la anécdota con satisfacción. Observamos que estas situaciones le divierten y que además este premio de honor ha constituido un galardón que le ha colmado su dilatada vida como pintor del sol, la luz y el paisaje interior del Archipiélago en general y de Las Palmas en Particular. Mañana diremos adiós a don Tomás Gómez Bosch. El Eco de Canarias 25 de septiembre de 1966 VII EL ÚLTIMO CUADRO DE GÓMEZ BOSCH, UN PAISAJE DE VALSEQUILLO Plasmó las figuras del Conde de la Vega Grande, López Botas, Diputado Perojo, Dr. Déniz, Eusebio Navarro, Francisco Gourie y otras La figura de Avendaño Porrúa, obra inédita. Hoy decimos adiós a don Tomás Gómez Bosch. Mejor que adiós, hasta siempre. Las despedidas deben tener un sabor menos sentimental. Sobre todo en periodismo. La vida informativa tiene, casi siempre, unos minutos, unas horas de existencia... Siempre estamos diciendo adiós porque la noticia, la crónica, la entrevista y el reportaje tienen veinticuatro horas de vida, a lo sumo; mientras nace, se desarrolla y muere. Decimos hasta siempre a don Tomás Gómez Bosch porque estamos seguros de que seguirá siendo noticia. Cuando exponga de nuevo, cuando plasme alguna otra gran obra, cuando viaje, cuando haga el juicio crítico de una exposición. Cuando se es figura del arte, siempre ocurre de esta forma. 31 El periodista tiene que agradecerle al señor Gómez Bosch una sola cosa: el haber conseguido una amistad más. No por el acto informativo de haber relatado a grandes rasgos su vida, sino por la satisfacción de haberle conocido y haberse recreado en su obra. Vivo agradecimiento para él y para otros muchos, que me están enseñando a conocer mejor Canarias y a los canarios. A través del arte, de la pintura de Gómez Bosch, hemos conocido también al hombre y hemos aprendido, porque cuando se llega a su edad – ochenta y tres años- se consigue una serenidad de espíritu, un estar de vuelta sobre las pequeñeces de la vida, que obligatoriamente sus opiniones y sus juicios -y sus actitudes- son auténticas lecciones. Nuestra última conversación con el pintor gira en torno a los últimos años del arte y de la obra que aún tiene en perspectiva. Le preguntamos por la obra cumbre que siempre ha deseado plasmar y que aún tiene en proyecto: - Sí, siempre tenemos los artistas algo que hacer y que deseamos constantemente lograr. Pero en la pintura es algo más difícil. No se piensa, o se medita o se estudia: viene por sí misma. Pero yo pienso que mi obra maestra es el retrato de mi madre. Otros afirman que es el que tengo de mi esposa. Y también hay quienes creen que lo mejor ha sido el gran mural que hay en el Cabildo Insular, en el que se plasma la constitución del primer Cabildo de Las Palmas. Este fue un trabajo que me costó mucho trabajo y muchos sacrificios. También tengo la ilusión de hacer unos retratos de ancianos. Ahí verá usted un ensayo que queda por retocar. Efectivamente, sobre un mueble hay una galería de ancianos pintados con suma maestría, recogidos con bondad y matizados de una sencillez asombrosa. - ¿Ha hecho usted algún cuadro en el que se refleje la personalidad, el prototipo del campesino canario? - Un trabajo serio, a conciencia, no. Pero en cierta ocasión hice un ensayo con un personaje muy popular en Las Palmas, conocido por Pancho “el Bruto”. Naturalmente no era – ha muerto ya- quien mejor podía personalizar al campesino canario, tan lleno de virtudes y de valores. No obstante está enmarcado dentro del personaje popular de la isla. Recuerdo que cuando posaba para mí, cuando vivía en Las Palmas, sus carcajadas se oían en una legua. Era tremendamente simpático. - ¿Presentó ese cuadro en alguna exposición? - Sí, en una regional- - ¿Y figuras de la vida canaria? 32 - El conde de la Vega Grande, (quién fundó el Hotel Santa Catalina, el viejo hotel, no el actual); todos los señores que están en el cuadro grande del Cabildo; casi todos los almirantes que han pasado por nuestra isla; don Antonio López Botas, fundador de el Gabinete Literario; el diputado Perojo; Dr. Déniz; don Eusebio Navarro; don Francisco Gourie de Armas, fundado de la iglesia de Arucas; el actual obispo de canarias Dr. Pildain y Zapiain, y el último gobernador, don Antonio Avendaño Porrúa. Y otros muchos que ahora mismo no recuerdo. - Pasando al terreno económico ¿Cuál es el cuadro que ha vendido más caro? - Los retratos. - ¿Qué es más difícil de pintar, un hombre o una mujer? - Sin discusión, la mujer. El hombre tiene caracteres más acusados y es más fácil - ¿Y de alguna parte del cuerpo humano en especial? - Para casi todos los pintores siempre han sido los ojos y las manos; pero para mí, no. Me cuesta más trabajo la boca. - ¿Cuánto tarda en hacer un retrato? - Eso depende del tiempo que se posa. No se puede calcular. - ¿Usted ha empezado alguna vez un cuadro y no lo ha terminado? - Jamás. Todos los he terminado. - ¿Cuál es el último cuadro que ha realizado? - Un paisaje de Valsequillo. - ¿De nuestra geografía qué le gusta más pintar? - Las marinas. Especialmente la zona de las canteras, con mareas vacías y en puestas de sol. Para terminar esta serie de relatos preguntamos a don Tomás Gómez Bosch su opinión sobre la pintura abstracta. -Como no entiendo no puedo emitir un juicio justo. El pintor termina haciendo un encendido elogio del Marqués de Lozoya y recordando sus tiempos juveniles. La esposa del pintor nos dice que es muy casero y amigo de la intimidad. Aunque antes de casarse precisamente era lo contrario. - Muy alegre, muy alegre… Gómez Bosch en su última entrevista con quien escribe estas líneas tuvo palabras de cariño y gratitud para con su esposa. Un pequeño homenaje a la mujer, a la madre y a la compañera. Lo dijo con emoción, entrañablemente. El matrimonio, por un instante, se miró a los ojos. Y en ellos pude captar una vida entregada al arte. Al arte de ser padres y al arte de vivir para una vocación: La del espíritu. FIN DE LA SERIE CANO VERA. 33 DON TOMAS EN “SIESTA DE MEMORIAS” DE MARTIN MORENO 34 15 de septiembre de 1.996 La Provincia SIESTA DE MEMORIAS Martín Moreno. Cronista Oficial de Gran Canaria DONDE AFLORAN LAS RESONACIAS DE OTRORA AQUEL GRANCANARIO LLAMADO TOMÁS GÓMEZ BOSCH Artista y caballero, consta inolvidable en la historia protagonizada. El señor don Tomás Gómez Bosch, caballero ´a lo redondo ´ y por otras bastantes señas esposo y padre edificante, que pintaba bonito y a lo grande, extasiado y mágico, nació en Las Palmas de Gran Canaria el 17 de diciembre de 1.883 – el año mismito de haberse registrado el 26 de febrero la bendición, por el obispo José Pozuelo Herrera en presencia de un gentío inenarrable, del comienzo de las obras de nuestro Puerto de Refugio, rematadas por la casa “John A. Swanston” de Londres- , y en su ciudad moriría el ennoblecido artista el 25 de abril de 1.980. Es decir, a más de 96 años de edad después que sintió poquito antes, como el mismo dijo a modo de despedida, “que había dejado de ser joven”. Si a don Tomás lo apreciamos tantísimo cuando estaba en este mundo, ahora, recordándolo, nos pasa igual. Seguimos advirtiéndolo tal cual, y escuchando su conversación sonreímos ambos como otrora. En 1.946, cuando en su renombrado estudio fotográfico realizamos unos planos de cine, nos doblaba la edad, todavía más con un pico de tres años a su parte, y sin embargo, la mutua suerte en la manera de ser, de respetuosa franqueza y miras ideales, apuntó la amistad iniciada hacía un lustro. Fuimos, verdaderamente, el entendimiento de dos personas forjadas en sueños de artes y el apego a lo nuestro fundamental de la tierra: lo canario del alma. Era un conversador de nacimiento: de verbo seductor simple, a lo sencillo y timbrado a lo barítono; de sabia naturalidad, a veces deliciosa sumamente al reflejar el candor del niño grande que muy a su gusto llevaba dentro el admirado personaje de amigos innumerables, a toda escala desde el habitante más elevado a la acusada modestia del peón a sus órdenes en la fábrica dirigida durante más de veinte años. Ahora que, de otro lado, la campechanía de don Tomás se mostraba desconcertante de veras en los momentos de ´distraerse´. Una vez que se cruzó con cierto amigo, dialogaron como sigue: - No sé donde se mete usted que pasan años sin que nos veamos… - Nos vimos hace menos de un mes don, Tomás; en el Teatro Pérez Galdós. - ¡Y es verdad que tiene usted muchísima razón, caramba! Esta memoria mía… - Recuerde que comentamos su última exposición. - Sí, hombre, sí. Perdóneme el despiste… Y, dígame, a lo que veo, ¿lleva usted luto? 35 - Por mi esposa, recién fallecida. - La pobre… ¡Cuánto lo siento! No me enteré, que si no… - Su ponía que ignoraba usted esa desgracia mía. - Me estoy enterando. De otro modo hubiera asistido al entierro. - De todas maneras le quedo muy agradecido. Hablarían a continuación de otras cosas, y, en la despedida, se apuntó el distraído pintor a una matrícula de honor, cuando menos: - He tenido mucho en saludarle, don Tomás. - El gusto es mío y que siga usted bien…Y recuerdos a su esposa. La historia prosigue su curso. Nunca aceptamos la razón de cierta causa por otros imaginada. Mentira no es que se sumaron unas cuantas las personas dadas a decir que el grancanario Tomás Gómez Bosch constituía un “género de milagro” en su aproximación al arte de la pintura, por advenido a ella cuando ya tenía andada mucha vida en otras ocupaciones. Eso no era verdad, aunque le pasara que durante más de cuatro lustros hubo de verse retirado de la dedicación abrazada desde niño. Veinte años tenía cuando agarró el barco que lo dejó en Cádiz para tirar con dobles incomodidades hacia Madrid, a cubrir la etapa primera de su formación como pintor; ansia que le hervía por dentro de la piel, que es donde las sensibilidades les arden a los que las tengan. O sea que, como perfectamente explica su biógrafa inspirada, María Rosa Bordes Benítez, ni soñada tenía entonces, cuando aprendía a pintar, el muy isleño de Canarias la gran familia que les obsequió el amor de la esposa muy señora que sería doña Ana Arroyo Cardoso; a la que estábamos deseando nombrar por el encanto de evocarla entre nubes desde los silencios de nuestro escritorio, ella con la sonrisa inseparable que su rostro bellísimo dibujaba. Mas, antes de rememorar las andanzas del mozo Gómez Bosch en un Madrid que se gozaba en la estela de los ilustres del 98, empezando por donde es debido veámoslo en el tiempo de su infancia, ya después de haber asistido a la escuela primaria, saliendo del Colegio de San Agustín- donde cursaba la segunda enseñanza y aprendía dibujo y nociones de pintura con don Nicolás Massieu y Falcón- derechito a su casa de la calle Cano, cercana al caserío número 12, de habitaciones aglomeradas y patios espléndidos, que más tarde sería sede de los miembros últimos de la familia. Era el cuarto de los catorce hijos dados a luz por doña Ana Bosch y Sintes, cónyuge de don Cástor Gómez Navarro, un murciano alongado a esta tierra con ánimos de negociar a lo importante y que después de intenciones varias, ya casado, fue armador de barcos de ir a Cuba y otros puertos del Caribe, de donde traían miel, azúcar, ron y especias. Abriría oficinas en la propia calle del Cano, y despabilados sus hijos en esas preocupaciones se irían estimando continuadores de una empresa finalmente desaparecida en la vorágine posterior de una ciudad que se fue modernizando. 36 Sería aquella madre, todita dulzura y consuelo, el orgullo de su esposo y la adoración de los hijos, que aprendieron de su sencillez y la inmensa ternura rociada a conservar la unidad familiar. El talento de Luis Benítez Inglott la definió “robusta encina”, y su hermano Eduardo, yerno amantísimo de la excepcional anciana, no dejaba de visitarla cada día, recordamos; siendo así que una de aquellas tardes, al pasar para su casa por la Peregrina en el regreso de verla y preguntarle don Agustín Alzola cómo había encontrado a la feliz longeva, le contestó, ocurrente, con todo el mayor cariño por delante: - Como un cañón, gracias a Dios. ¡Pero con más teclas que el órgano de la catedral! En Madrid Desde su infancia, de plácido transcurso, conocidos los primeros secretos del arte de pintar, nuestro protagonista estaba ya persuadido de que debía marchar a Madrid. Concluidos sus estudios de bachillerato comenzó a trabajar en un almacén de la familia y desde que reunió las perritas necesarias se fue en 1.904. De entrada sabría, además de otras cosas, que los literatos y pintores afamados acudían a las tertulias de los cafés más populares. Eran fáciles de ver en ellos a Pérez Galdós, todavía celebrando los éxitos de su Electra triunfal; Sorolla, Romero de Torres, Valle- Inclán, Azorín… Aún no era Gutiérrez Solana, su compañero de taller, un pintor destacado, y lo mismo hizo amistad con Eliseo Meifrén, el catalán que se ´mandó´ en la Laja más de un caldo de pescado y al que Gómez Bosch había visto aquí siendo él niño. Ávido de saber de cuanto rodeaba sus esperanzas, entró a formar en el taller de José Garnelo y Alda, pintor consagrado y su segundo profesor de dibujo, y al año siguiente se estableció por su cuenta con un plan de trabajo que entrañaba llevar a efecto todas las mañanas una visita al Museo del Prado, a copiar a los tres maestros de su preferencia: El Greco, Velázquez y Goya; y por las tardes iba al Caserón del Retiro, a trazar la belleza de sus esculturas. Dichos directos contactos con el Arte se añadirían a enaltecer y depurar su estilo, indudablemente. Sería 1.906 otro año de aprendizaje¸ aunque, convencido a la sazón de no poseer la voluntad suficiente para seguir su carrera, se acobardó, o dejó “que tirara de él su amor a la peñita natal”. Meifrén, que lo orientaba en ocasiones, sería el primero que, al declararle el canario que no lo iba a dejar del todo, le llamó “cobarde”. Pero la decisión estaba ya tomada. Quizá, llevado de su arregosto a las corridas de toros desde que en 1892, a los nueve años, viera actuar en la Plaza de la Feria a don Fernando Gómez, “El Gallo”, padre de Rafael y “Joselito”, sintió idéntica sensación que un diestro cuando le cortan la coleta. Madrid significaría para Gómez Bosch una etapa coronada de hondísimas vivencias y nostálgico recuerdos. Allí había experimentado sueños de pintor en la evaluación artística de un momento notable. Allí le había regalado a don Joaquín Sorolla el primer racimo de plátanos que su padre le mandó de Canarias e igualmente tenía edificada una gran amistad con Romero de Torres, después continuada en un rosario de cartas inefables. Zuloaga lo había empujado a pintar bodegones… Ya de vuelta, las circunstancias se le tornaron adversas… 37 2 22 de septiembre de 1.996 EL GOZO DE MIRAR AL PASADO DE LA ISLA AQUEL GRANCANARIO LLAMADO TOMÁS GÓMEZ BOSCH Ana Arroyo Cardoso fue la mejor admiradora de su marido, y la ayuda más eficaz. Decíamos el domingo que al retornar en 1.906 a sus lares se le volvieron distintas y adversas las circunstancias a Tomás Gómez Bosch. Su padre, Don Cástor, tenía recién adquirida una fábrica de chocolate sita en la calle Torres, y afrontar el progreso de esa actividad sería el inmediato destino del regresado. Así, a los 22 años hubo de aquietar los pinceles en la entrega a crecer la fama del chocolate marca El Escudo y lustros más tarde, en la calle Canalejas se haría cargo además de la industria cervecera La Tropícal inaugurada en 1924, negocio a cuyos comienzos añadirían los devenires un final no deseado. Se mantuvo 23 años sin pintar. Aunque sí lo hizo mentalmente, reteniendo en sus pensamientos observaciones profundas de formas y colores. Entonces- y aquí volvemos al auxilio de su biógrafa puntual y entusiasta- a través de aquel tiempo de reflexionar y madurar internamente fue calificado como artista recoleto, pintor silencioso, cenobita de la pintura…acepciones que no dejaban de ser válidas para caracterizar esa época suya. Se había ido encontrando un grupo de valores llamados Domingo Doreste (Fray Lesco), Tomás Morales, Rafael Romero (Alonso Quesada), Saulo Torón, Néstor de la Torre Millares, Pedro Perdomo Acedo, Luis Benítez Inglott, Adolfo Miranda, Néstor Martín- Fernández, Juan Carló, Nicolás Massieu…relevantes de la literatura, la poesía, el arte de la pintura y el periodismo de la tierra nuestra. Aún sintiéndose inmerso totalmente en el tráfico comercial a su responsabilidad, Gómez Bosch participaría cuanto pudo en las recordadas inquietudes culturales, como así mismo mantuvo con Néstor Martín-Fernández de la Torre el asiduo contacto derivado del aprecio mutuo asentado en las familias respectivas. En 1918 hizo Fray Lesco realidad la Escuela de Artes Decorativas Luján Pérez, fundación a la que, por causa de sus ocupaciones, tan solo le fue posible al artista escondido en un industrial colaborar indirectamente, asistiendo sobre todo a los actos afines a paliar la penuria económica de la incipiente entidad artística que, pasados 78 años, prosigue conmoviendo a la gran ciudad de hoy. 38 La suerte de un amor verdadero. Ese año mismito sonreiría significativamente al sorprendido Tomás Gómez Bosch, de 34 años, la cara bonita de una complacida damisela de 18 años, hija del encumbrado arquitecto municipal y diocesano don Laureano Arroyo y Velasco y doña Ana Cardoso y Ruiz de Medina, padres también de Tomás, Carmen Adela, Isidro y Consuelo Arroyo Cardoso. Veraneaban las familias de Tomás Gómez y Ana Arroyo en casa próximas de Tafira y algunas veces había conversado la pareja con deleite¸ hasta que un día, sacando la procesión que llevaba por dentro, hizo ella que clavaran frente a frente sus miradas a surgir espontánea y decisiva la gracia de un amor verdadero, para toda la vida. Armarían boda prontamente, pues el día primero de junio exaltaron su unión matrimonial en la iglesia de Santo Domingo de Guzmán, ante el altar de nuestra señora del Rosario, con la bendición del párroco don José Marrero y Marrero, orador brillante que por cierto pasaría apenitas después a ser canónigo de la Catedral. Apadrinaron a los contrayentes el padre del novio, don Cástor Gómez Navarro, y la madre de la novia, entonces ya viuda de Arroyo; y como testigos figuraron los antedichos amigos fieles del enamorado, Juan Carló y Nicolás Massieu. Colaboraría al esplendor de la nupcial ceremonia los músicos notables Costa, Terán y Casó, trío que se hallaba cosechando éxitos en esta ciudad. Pero su actuación acarrearía al santuario precioso de Vegueta a más curiosos de la cuenta a restarle intimidad al acto, efecto que hizo mella en la alabada sencillez del contrayente, enfadándolo. Ya se convertiría la esposa admirable en eficaz animadora del marido. Exquisita y delicada, la influencia de Ana Arroyo iría debilitando el carácter apasionado del hombre elegido, ayudándolo a reintegrarse a sus cuadros; aunque solo pintara los domingos y demás días festivos. Siendo ella su primera admiradora, logró el ansiado propósito. Vendría la primera niña, Ana María a aumentar con el alboroto de su inocencia la felicidad de un hogar de bien portada paz; mas, igual asomaría su presencia a señalar imborrable en la memoria de sus progenitores el paso del angelito subido a la Gloria del Señor cuando había cumplido seis añitos. Sabemos que, al recibir sepultura la muñequita inerte, las sensibilidades del enternecido y maltrecho Alonso de Quesada hicieron rodar en sus mejillas el dramatismo de unas lágrimas de homenaje; a su vez adelantado, cual se vería, como un vaticinio de la propia muerte del gran poeta, ocurrida enseguida aquel año mismo de 1925. El gran retrato de su madre Transcurrido el tiempo, advino la carga voluntaria y dichosa de los hijos y el negocio familiar se hundió sin remedio. El padre bueno se obligaría a enfrentarse a la crudeza del instante y se agarró a nueva dedicación que tenía aprendida. En la calle de José Domingo Navarro montó el estudio fotográfico que triunfó y don enseñaría a su hijo Néstor lo mucho que sabía de ese otro arte. 39 Y en aquel haz de luces y perspectivas en blanco y negro reavivaría sus ilusiones pictóricas, venciendo su voluntad de abrazar de nuevo la paleta en el ancho salón de su casa, pegadito al mismo de su esposa. Mire el lector, de aquellos pasos de su marido, los versos que escribió doña Ana. “Pasamos siempre solos La tarde del domingo En el amplio salón Que mira hacia el naciente Tomás está gozando Silencioso y tranquilo La paleta en la mano Realizando su sueño. A veces me preguntan: ¿No te aburres en casa? ¿Cómo no vas al cine, O un café a merendar? No comprendes el goce De estas horas en calma Leyendo un buen libro Y viéndola pintar.” Fueron sus obras primeras, retratos de familiares y amigos, en los que tal vez el pintor sintiera las directrices de la Escuela Castellana- Madrazo, Esquivel, Vicente López- en cuanto a la estricta realización del retrato en sí, aun conservando elementos del nuevo arte. El avance de los años maduró su estilo y afianzó su técnica, y en 1936 elaboró el cuadro más admirado por la crítica durante su carrera; el retrato de su madre queridísima, pintado a ratos grandes los domingos y otros festivos. La anciana posando en sesiones dilatadas que la vencían hasta sumirla en un hondo sueño. Pero merecerían la pena el sacrificio de la señora mallorquina que vino niña a sentirse canaria, y al tesón del hijo a la mayor gloria de su madre. Primera exposición y otros apuntes La evolución veloz de su obra y su aumento le proporcionarían a Tomás Gómez Bosch la oportunidad de llevar a cabo su primera exposición en el Gabinete Literario el 20 de abril de 1.940, con el adelanto de un concierto de piano por su hermano don Cástor y la presentación de la muestra a cargo de don Luis Doreste Silva, ilustre cronista de la ciudad. 40 Estuvo integrada por retratos y paisaje que sumaban 55 cuadros, y el éxito obtenido aconsejaría trasladar en el mes de noviembre una parte al Círculo de Bellas Artes de Santa Cruz de Tenerife, para que el autor tuviera y el honor de que el maestro Francisco Bonnin Guerín calificara la obra de “honrada y sencillamente magistral”, destacando el cuadro de la madre del pintor como “obra reposada y profundamente sentida” A continuación, sus exposiciones se sucederían anualmente en la isla natal, cosechando en todas ellas la calurosa acogida de sus paisanos En 1.944 tuvo lugar en el Museo de Arte Moderno de Madrid la Exposición de Artistas de la Provincia de Las Palmas, organizada por iniciativa de la Dirección General de Bellas Artes y de modo principal por el Marqués de Lozoya. Participaron 18 pintores figuras relevantes del momento insular –Néstor, Juan Carló, Nicolás Massieu, Juan Guillermo, Jesús Arencibia, Santiago Santana, Cirilo Suárez, Servando del Pilar…- y por supuesto Gómez Bosch, destacando de los escultores Juan Jaén, Abraham Cárdenes, José de Armas Medina y Manuel Ramos. En total 97 cuadros y 25 esculturas, obras de entre las que el Marqués de Lozoya escogió un paisaje de Gómez Bosch – el titulado “Degollada de las Yeguas” para figurarlo en su colección particular. 29 de septiembre de 1996 3 GRAN CANARIA: VUELO DE CUMBRES SOBRE EL MAR AQUEL HIJO ILUSTRE LLAMADO TOMÁS GÓMEZ BOSCH Desentrañaba en su pintura el encanto de las cosas humildes A partir de aquel año 1944, la evolución del pintor Tomás Gómez Bosch iría rezagando sus lógicas vacilaciones. No habían sido, no, ´fuegos de artificio´ las expresiones loables de la crítica madrileña a las evidencias de su obra expuesta en el Museo de Arte Moderno, volcadas extensas en las páginas de los rotativos ABC, Diario de Madrid, Arriba y otras publicaciones. En 1945, él y su amigo Nicolás Massieu, ambos en representación de Las Palmas de Gran Canaria, participaron en la Exposición Nacional de Bellas Artes, y en la alta calidad de las obras presentadas triunfaron, incluidos los grancanarios: Massieu con un retrato del pianista Rafael Romero Spínola, y Gómez Bosch con el asimismo alabado de su madre. Ese año también exhibiría don Tomás 22 bodegones en el Gabinete Literario. De nuevo en Madrid, en el Salón Dardo celebró en 1947 la primera muestra individual efectuada allá, con 31 cuadros de temas diversos: bodegones, marinas, paisajes, 41 composiciones derivadas de temas isleños, floreros, y además el consabido retrato de su madre y varios de familiares. En los días de esa exposición ofrecerían conferencias Alfredo Marquerie, Manuel Pombo Angulo y algunos otros valores en boga, y entonces ocurriría que regocijó a un elevado número de personas la sencillez dominadora en el talante del artista. Lo homenajearon con un banquete, y arrente de los postres le indicaría Pombo al agasajado que fuera pensando unas palabras de respuesta a las del comensal encargado de ofrecerle el acto. - ¡No me diga eso, don Manuel¡ - Pero… - No me condene a semejante apuro. Discursos no…No sabría decir nada. Se levantaría en ese instante el intérprete del brindis, y Pombo se entregó a aconsejarle al pintor canario - Usted, don Tomás, solo tiene que decir que está muy contento por todo, que lo agradece todo, que todo lo tiene emocionado y que jamás olvidará este momento. A base de eso diga unas palabras en tres minutos y ya está. Cuando iba a responderle el atribulado que ni así podría cumplir el encargo, por haber concluido el que hacía uso de la palabra ´empujó´ Pombo a nuestro paisano - Ahora, don Tomás… ¡Arriba!... Sin saber lo que hacía se puso en pié el comprometido, y más o menos fue su discurso el siguiente: - Les digo que estoy muy contento por todo, que todo está muy bonito, que me emociona todo y a base de eso nunca olvidaré nada de esto todo. Y sin más, el propio ´orador´ iniciaría un aplauso que se transformó general y espléndido, ante el natural sonrojo de su esposa, doña Ana. Pero, ciertamente, la gracia natural de su marido fue la nota más simpática del acto. Sin embargo, don Tomás Gómez Bosch descollaba como un conversador gratísimo y de graciosa vena, pero espontáneo. A su campechanía no le iban los discursos. Un cachito de Gran Canaria Colmado de ilusiones inenarrables retornaría al trabajo en sus lares con la pasión que le ardía. En mayo de 1.948 expuso nuevamente en el Círculo de Bellas Artes 42 nivariense, y a continuación en la colectiva de de 27 artistas que fue la Regional de Pintura movida por la Universidad de La Laguna. Dos años después inauguraría la Sala Hespérides de la Ciudad Condal, con 26 cuadros de su temática; resaltando los retratos, sin falta del protagonizado por su madre. Era, decían, “un pintor hecho y maduro que sabía lo que quería y cómo lograrlo”. Según el Noticiero Universal, pintaba “seguro de estelo y ofrecía la expresión plástica de las cosas de la tierra, dibujando con firmeza y poniendo el sentimiento y la fuerza de su línea acusada y viva”. Para la revista Destino, y para La Prensa era “un artista de sórdida formación y muy refina sensibilidad”. Volvió, volvió a su Isla con el corazón abrigado de propósitos, y sería cuando abordó el indecible empeño de realizar, durante seis meses de tarea ímproba, ´malvada´, el cuadro admirable obrante en el Cabildo Insular de Gran Canaria, con las 26 personas que constituyeron en 1913 la primera corporación de dicho organismo. En 1959 marchó a triunfar en Venezuela, con importantes exposiciones en el Círculo de las Fuerzas Armadas y la Galería de Arte de Caracas. Además de retratos y paisaje exhibió numerosas marinas y bodegones de Canarias, y de aquel país bastantes obras una vez que gozado en el estudio de sus panorámicas, en su intento de hilvanar ambas culturas. Después, en 1960, obtuvo el Premio de Honor en la IX Exposición Regional de la sociedad El Gabinete Literario, con el retrato de Fina Cáceres de Gómez e interminables se contarían las muestras celebradas posteriormente, cual la del Hogar Canario de Madrid. En 1967 una dolencia le obligó a observar un reposo de varios meses, pero no por ello dejó de rendir su puntualidad a la cita otoñal con los admiradores de su arte. Más tarde, en 1968, sería cuando el Neo-Tea –sueño mágico del imborrable Antonio Izquierdo Baños, al frente de un grupo de amigos- le tributó a Tomás Gómez Bosch un muy cálido homenaje, juntamente con su hermano Cástor, éste asimismo de infatigable vocación como virtuoso del piano. Y otra deferencia igualmente digna recibiría la persona de don Tomás Gómez Bosch el 10 de enero de 1974, ya con 90 años cumplidos. Se la ofertó el Gabinete Literario con el nombramiento de directivo y socio de honor de la ilustre entidad. Seguiría pintando hasta que dejaría de ser joven a los 96 años. Murió el 25 de abril de 1980, después de haber acogido la Sala Cairasco, en marzo de 1.978, la que sería su última exposición, y de recibir un nuevo homenaje de su tierra en la clausura de la misma, consistente en la emocionada entrega de la medalla conmemorativa del Bicentenario de la fundación de la Real Sociedad Económica de Amigos del País. Su muerte le ocasionaría a Gran Canaria la pérdida de otro cachito de su gracia: Tomás Gómez Bosch se fue con el íntimo recuerdo de haberle sido útil a la tierra 43 más querida, la natal que le apretó en sus querencias y le dejara él bien aportado su grano de arena al culto de la mayor grandeza. Más datos de familia y otros anecdóticos Aunque de prisa y corriendo sea, de aquí no pasamos sin escribir que el pintor Tomás Gómez Bosch, dimanó de un Tomás Gómez Sastre mallorquín que, por un roce casual con la isla nuestra, acabó siendo vecino de ella, y para bien de ella, a partir de 1.863. Casado con Margarita Sintes Llabrés –hija del propietario José Sintes Nadal, de afuera igualito- de tener el marino, naviero y comerciante balear un barco llegaría a tener los cinco que formaron su flota en la década postrera del XIX, veleros todos: el pailebot San Antonio (a) “Posible” y las goletas Joven Antonio, Sensat, Margarita Sintes y Juanita, los cuales ´tritones´ toditos se atrevieron a pasear sus siluetas por el Levante español, las costa noroccidental de África, las Canarias orientales,, las Antillas y a entrar también en algunos puertos del litoral norteamericano. Padre aquel señor de Ana Bosch y Sintes, esposa del murciano Cástor Gómez Navarro, fue el abuelo materno de Tomás Gómez Bosch, cuarto de los catorce hijos habidos por el matrimonio. Y siempre hablando de “Tomás, el Chico” recordando de pasada algunas visitas a sus estudio de la Calle Domingo J. Navarro, el referente a sus pinturas y el otro de la máquina de retratar, -este segundo con la presencia de su hijo Néstor-, de ningunita manera hemos podido olvidar ciertos ratos de palique con el entreverado de unos “pisquitos”, de aquellos rones que él sabía aderezar al modo de golosina. Hacía igualmente las delicias de los hermanos Eduardo (su cuñado), Miguel y Luis Benítez Inglott, Luis Doreste Silva, Nicolás Massieu, Ignacio Quintana Marrero, Feliciano Ojeda y tantos otros que se fueron, y dos que todavía lo pueden contar también: Mario Hernández Álvarez y Luis Jorge Ramírez. Asimismo tenemos presente la refinada personalidad de la señora de la casa, doña Ana Arroyo Cardoso, en sus sonrientes y fugaces apariciones “a ver cómo iba la cosa” y tampoco se nos escurrió del tino el adorno magnífico que significaba la espectacular cabeza de toro que parecía observar a los de la “reunencia”, por más datos perteneciente al que había sido hermoso ejemplar denominado ´Ermitaño´, que don Tomás viera estoquearlo, siendo niño, en la Plaza de la Feria por don Fernando él Gallo´. Dos ´casos´ Desde 1919 hasta 1980, casi llegaron a ser cuarenta las exposiciones de su arte, sin sumar las ofrecidas en Venezuela y Holanda. Nos resulta, pues, imposible la enumeración de sus retratos de personas incontables y la exagerada cantidad de parajes, marinas, bodegones, floreros recreados por el isleño inefable que, como un muchacho nuevo´, harto escaló alturas o se hundió en los barrancos a encantarse en las bellezas de su isla. 44 A todas esas sin desprendérsele el buen humor ni la sal de sus distracciones ´históricas´ Armando Bordes lo invitaba a pasar los veranos en su casa bonita de la Atalaya de Santa Brígida, y una tarde en que salieron don Tomás y doña Ana a estirar las piernas por los alrededores, al cabo de sentirse cansados acordaron iniciar el regreso. A poco se detendría el artista, con los ojos fijos en algo: - Muchacha, Anita, casa preciosa esa… - ¿Cuál? - La que tenemos delante. ¿O no miras? Es preciosa; preciosa de verdad. ¿De quién será, tú? - Si le preguntaras a Armando te diría enseguida quien es su dueño. - Seguro que él lo sabe. - Si. Yo también. Y si tú te fijaras, verías que es la mismita donde comemos y dormimos. El artista no resolló. Miró incrédulo a su amada compañera, sonrió luego, algo confundido, y humillando cómicamente la cabeza reanudó la marcha. Otro día, por haber empezado a sentir un dolor fuerte al fondo de la encía asistió a consultar al odontólogo don Alejandro Ramírez: - Me trae tieso y erizado un rayo aquí detrás, y deseo saber la causa. - Muy bien. Abra la boca… - Ah…ah… - ¡Caray, don Tomas…! - ¿Qué pasa? - Cosa rara es… - ¿Peligrosa? - No, pero rara…Porque se trata de que le ha salido el cordal cuando va usted para los noventa años - ¡Carajo! - No se preocupe. Se lo desapareceré… - Bueno…Y ya que estamos en eso, una dentadura nueva. Fuertita, mi amigo, para que me dure toda la vida. Ya decíamos que se sintió joven toda la vida, hasta hallándose próximo a morir. Unta y magua Comentaba don Tomás que su vocación le había nacido temprana y autodidacta. Se fue logrando a la manera de no imitar ni seguir estilos, ni las tendencias pictóricas de nadie ni de escuela alguna. 45 - Me hice pintando lo que veía y tal como lo veía –aclaraba- y de ahí mi tradicional realismo. Aunque permaneciera dos años en Madrid, continuando estudios y ampliando mi primera formación. Del ilustre que fue sin tregua un portento de jovialidad, el pintor eminente y fraternal amigo suyo José Aguiar, hijo de canarios de La Gomera nacido en La Habana y traído niño a la isla colombina, escribió: “Tomás Gómez Bosch desentraña en su pintura el encanto de las cosas humildes. Para los artistas como él, Dios es el mismo y distinto cada día; la fruta, la flor o el paisaje tienen siempre el mensaje nuevo y maravilloso de su presencia” Aún viendo venir la muerte, el miembro 4º de los 14 recibidos por don Cástor Gómez Navarro y doña Ana Bosch y Sintes, persistía intenso e inagotable. No había dejado de ser joven, y si ya lo tenía proclamado socio de mérito la Sociedad Filarmónica, le faltaba el “Almendro de plata” del municipio de Tejeda, a donde no pudo subir a hacerlo suyo y en su nombre lo recogieron los hijos. Ya, entonces, don Tomás guardaba cama a la cristiana espera de dormirse para siempre, al consuelo de su compañera de por vidas: Doña Ana Arroyo, valentía inseparable del lecho. Si ahora perdura en el corazón de los suyos la ejemplaridad del padre, no es menos verdadera la magua que acreditamos los que fuimos sus admiradores y amigos del hombre buenísimo que mucho amó a su tierra y la honró con la pureza de su arte. Porque Tomás Gómez Bosch es, señoras y señoras, otro de los ciudadanos notables que no tiene calle a su nombre ni rincón aparente que conmemore sus glorias. 46 PINCELADAS DEL DIARIO ACONTECER 47 Donde se relatan cronológicamente hechos puntuales, anecdóticos o intrascendentes de la vida de Don Tomás. La Provincia 13 de abril de 1912 SUSCRIPCIÓN Para los heridos de Melilla A continuación damos cuenta de las cantidades recibidas por la Junta de señoras, para el caritativo fin indicado. Figura D. Tomás Gómez Bosch con una aportación de 10 pesetas, siendo la media de particulares de 5 ptas. La Provincia 19 de noviembre de 1912 Notas de Sociedad. Viajeros Ha regresado de la Península, acompañado de su hijo D. Tomás Gómez, la Sra. Dña. Ana Bosch de Gómez. La Provincia 15 de enero de 1915 AYUNTAMIENTO Sesión Orden del día para la sesión ordinaria que celebrará esta tarde a las dos la corporación municipal: - Expediente sobre instalación de un motor de combustión interna, en la fábrica de chocolate que tiene establecida D. Tomás Gómez Bosch en la calle de Canalejas. La Provincia 16 de enero de 1915 AYUNTAMIENTO Sesión de Ayer Se concedió la autorización solicitada a D. Tomás Gómez Bosch para instalar un nuevo motor en la fábrica de chocolate de su propiedad. 48 La Provincia 16 de junio de 1915 AYUNTAMIENTO Secretaría Aprovechamiento de aguas Don Tomás Gómez Bosch ha solicitado de la Alcaldía que se inscriba en el registro de aprovechamientos de aguas el cuarto de paja de su propiedad que disfruta su casa en la calle de Canalejas. Instancias Don Tomás Gómez Bosch ha solicitado la autorización de la Alcandía para el funcionamiento de un motor de combustión interna, instalado en la fábrica de chocolates de su propiedad. Diario de Las Palmas 4 de octubre de 1916 TEATROS Y FESTEJOS Entre los nombres de los señores que se han inscrito para constituir la Sociedad “Teatros y Festejos”, que en breves días ha de quedar funcionando en esta población figuran, entre otros Don Tomás Gómez Bosch; D. José, D. Pedro, D. Antonio Gómez Bosch; D. Cástor Gómez Navarro; D. Juan Roca y Bosch; D. Luis Benítez Inglott; D. Antonio Roca y Bosch; D. Pantaleón Quevedo y Franchy; D. Enrique Orive Riaño; D. Rafael Jiménez Hernández y otros. La cuota era de 2 ptas. La Provincia 14 de mayo de 1918 Notas de sociedad En breve contraerá matrimonio con la señorita Ana Arroyo Cardoso, el joven don Tomás Gómez Bosch. 49 Diario de Las Palmas 3 de junio de 1918 UNA BODA En la parroquia de Santo Domingo, y ante la imagen de Nuestra Señora del Rosario, tuvo lugar en la noche del sábado último, la boda de la apreciable y bondadosa señorita, que une a su belleza física, sus méritos personales, Ana Arroyo Cardoso, con el estimado joven D. Tomás Gómez Bosch, apadrinándolos la Sra. Viuda de Arroyo, madre de la novia, y nuestro distinguido amigo D. Cástor Gómez y Navarro, padre del novio. La unión la bendijo el párroco de Santo Domingo D. José Marrero. Durante la ceremonia ejecutaron música selecta los notables artistas Terán, Costa y Casaux. Los invitados, muy numerosos, fueron obsequiados en el domicilio de la Sra., viuda de Arroyo. Deseamos a los jóvenes desposados muchas prosperidades. La Provincia 21 de diciembre de 1918 NOTAS DE SOCIEDAD Hoy, festividad de Santo Tomás, celebrarán su fiesta onomástica D. Tomás Quevedo Ramírez, D. Tomás Morales, D. Tomás Sintes Llabrés, D. Tomás Gómez Bosch, D. Tomás Peñate y D. Tomás Miranda. La Provincia 12 de marzo de 1920 En honor del poeta canario Tomás Morales. Anoche tuvo lugar en el “Hotel Metropole” el banquete en honor del laureado poeta don Tomás Morales, organizado por la Sociedad “Fomento y Turismo”, como homenaje al triunfo alcanzado en el Ateneo de Madrid. El comedor se hallaba artísticamente adornado. Entre los asistentes se encontraban doña Francisca Millares de la Torre, doña María Suárez de León, doña Ana Arroyo de Gómez, doña Rosa Pérez de Bird y otras. Entre los caballeros se encontraban don Bernardo de la Torre Cominges; don Néstor y don 50 Bernardo de la Torre Millares; don Rafael Hernández, en representación del Museo Canario; don José Miranda Guerra, por Diario de Las Palmas; don Manuel Hernández González por “El Tribuno”; don Juan Sintes Reyes por “Renovación”; don Juan Bosch Millares, don Antonio Gómez Bosch, don Arturo Sarmiento por “El defensor de Canarias”: don José Rodríguez Iglesias por la sociedad “Los Doce”; don Tomás Gómez Bosch, don José Hurtado por “El Espectador”, don Manuel Hernández Suarez, don Martín Saavedra Medina, director de “El Ciudadano”, don Juan Carló por la Escuela Lujan Pérez y otros muchos que harían interminable esta relación. La orquesta dirigida por el maestro don Agustín Hernández ofreció un concierto ejecutando de selectas composiciones. La presidencia estaba formada por el poeta Tomás Morales y señora, el presidente de “Fomento y Turismo y señora y el Alcalde don Bernardino Valle y señora. El señor Navarro hizo uso de la palabra ofreciendo el banquete al poeta, pronunciando un sentido discurso. El señor Valle en poéticas y sentidas frases saludó al compañero profesional y al poeta, en nombre de la ciudad. Don Luis Millares Cubas hizo un elocuentísimo discurso en honor dedicado al festejado. Don Claudio de la Torre leyó un bonito trabajo literario que comprendía datos biográficos del poeta en sus comienzos siendo estudiantes. Se leyeron varias cartas y telegramas recibidos hoy de Madrid, Arrecife, Tenerife, Agaete, Gáldar y de amigos y admiradores de Tomás Morales que no pudieron asistir, de las que recordamos las de don Ambrosio Hurtado de Mendoza, don Vicente Ruano, Alonso Quesada, don Saulo Torón, don Rafael Cabrera y otros. Tomás Morales dio las gracias por el homenaje de que era objeto y recitó varias poesías de su libro que fueron calurosamente aplaudidas por la concurrencia. A las doce y media terminó la fiesta, haciéndosele entrega de un álbum firmado por todos los asistentes al acto. La Provincia 20 de noviembre de 1921 NOTICIAS MUNICIPALES A don Tomás Gómez Bosch se le traslada dictamen del ingeniero municipal sobre queja del vecindario de la calle Canalejas contra el ruido y demás perjuicios que les causa un motor de aceite pesado, que sin las formalidades del caso ha instalado en su fábrica de dicha calle. 51 La Jornada 3 de enero de 1922 Fábrica de Chocolates de Tomás Gómez Bosch ANUNCIO El chocolate de esta acreditada fábrica Sobresale entre todos por su excelente calidad Y exquisito sabor. Es el preferido por las personas de buen gusto. Diario de Las Palmas 3 de junio de 1922 Para el Monumento a León y Castillo Figura entre los relacionados en este día, Don Tomás Gómez Bosch, con una aportación De 10 pesetas. La Provincia 14 de marzo de 1923 Por los mineros del Ruhr En la lista del señor Neizke figura don Tomás Gómez Bosch con una aportación de 7 ptas. Diario de Las Palmas 27 de abril de 1923 SECCION DE NOTICIAS Con arreglo a lo dispuesto en el Real Decreto de 26 de enero de 1920, ha quedado constituida en esta población la Cámara Oficial de la Propiedad Urbana de Las Palmas, formando su junta directiva los señores siguientes: Presidente, D. Bartolomé Apolinario; Vice-presidente, D. Pedro Barber; Vice-presidente, D. Luis Manrique de Lara; Tesorero, D. Tomás Gómez Bosch; Contador, D. Salvador Pérez Miranda; Vocales, D. Fernando Navarro y D. Francisco Caballero; Secretario, D. José Ponce. 52 La Provincia 11 de mayo de 1924 DON CASTOR GÓMEZ La muerte de don Cástor Gómez Navarro nos ha sorprendido dolorosamente, por ignorar que estuviera enfermo y por la antigua amistad con que nos honraba. Establecido en esta ciudad desde hace muchos años, el señor Gómez Navarro supo conquistarse generales simpatías y sinceras amistades por su correcto proceder y por sus especiales dotes de carácter. Trabajador incansable, dedicó todas sus energías al comercio consiguiendo después de tenaz lucha y gracias a su laboriosidad y a sus aptitudes, labrarse una brillante posición, que no influyó nunca en su natural modestia. A su viuda, doña Ana Bosch y Sintes, a sus hijos, don Antonio, don Cástor, don Pedro, don Tomás y don José, y a sus hijos políticos don José Mesa López, don Eduardo Benítez Inglott y don Fermín Martínez, estimados amigos nuestros, y demás distinguida familia, significamos la sincera expresión de nuestra condolencia. Diario de Las Palmas 18 de enero de 1926 Los últimos temporales en Las Palmas Y en Gran Canaria Los temporales en esta isla, que han castigado también a Las Palmas, a que aludimos en nuestro número del sábado, se reprodujeron en la noche de este día, con mayor intensidad, causando grandes estragos en Las Palmas, cuyas calles han quedado en estado intransitable, penetrando las aguas en casi todos los pisos bajos de la de Triana, y averiando muchas mercancías… …El barranco se desbordó frente a las fincas de Dª Josefa de la Coba y don Santiago de Ascanio, esta última frente al paseo de Bravo Murillo, quedando completamente llena de tierra y de piedras. La enorme cantidad de agua que penetró en la finca de la citada señora, derrumbó un muro que la bordea y que está junto a la calle de Eusebio Navarro, que fue donde el agua hizo efectos verdaderamente desastrosos…El agua penetró en la fábrica de cerveza “La Tropical”, propiedad de don Tomás Gómez Bosch, quedando anegada, causando grandes desperfectos. Todos los efectos colocados en el escritorio y en el despacho de cerveza, situados por la calle de Canalejas, quedaron inutilizados. Hasta las seis de la tarde de ayer, una bomba accionada por un motor, estuvo desalojando agua. Las máquinas de la fábrica están hundidas en el lodo. 53 La Provincia 20 de enero de 1926 NOTICIAS Reparados parte de los desperfectos ocasionados por el temporal en las fábricas de cerveza “La Tropical” y de chocolates de don Tomás Gómez Bosch, en el día de hoy comenzarán a funcionar ambos establecimientos. Diario Las Palmas 10 de julio de 1926 SUCESOS En la Cruz Roja fue asistido de herida contusa en el dedo pulgar de la mano derecha, F.N.S., de 12 años, que se produjo trabajando en la fábrica de chocolates de don Tomás Gómez, en la calle de Canalejas. La Provincia 17 de octubre de 1928 UNA BODA El día 7 del actual se celebró en la parroquia de San Agustín la boda de la Srta. Paca Suárez Cazorla, con el cajero del Banco Brithis, don Domingo Quintana Cruz, siendo uno de los padrinos el Dr. D. José Gómez Bosch. Terminada la ceremonia pasaron los invitados a la casa de los padres de la novia, donde fueron espléndidamente obsequiados, admirando los soberbios presentes recibidos por los novios de sus numerosas amistades, entre los que figuraba una figura de bronce para luz eléctrica de D. Cástor Gómez Bosch; un maletín de viaje de los hermanos D. Pedro, D. Antonio y D. Tomás Gómez Bosch; un estuche de escritorio de D. José Juan Mulet y señora y muchos más que harían interminable esta relación. La Provincia 1 de marzo de 1929 NOTAS DE SOCIEDAD Está enfermo un hijo de don Tomás Gómez Bosch. 54 La Provincia 13 de agosto de 1929 NOTAS DE SOCIEDAD Marchó de temporada a Tafira don Tomás Gómez Bosch. La Provincia 26 de noviembre de 1930 Última lista de donantes para el homenaje A la vejez del marino En ella figura Don Tomás Gómez Bosch con un donativo de 10 ptas. La Provincia 27 enero de 1932 VITO DUMAS Como despedida al intrépido navegante y gran deportista argentino Vito Dumas, que prosigue hoy a la una su arriesgado viaje, don Miguel Ángel de Gama, cónsul de la Argentina reunió anoche en fraternal banquete en el Hotel Atlantic a numerosas personalidades de todos los ámbitos de nuestra capital… A más de los artículos y regalos hechos a Dumas y de los que ya hemos dado cuenta, hacemos hoy mención de veinticuatro botellas de cerveza, obsequio de La Tropical, y unos paquetes de chocolate de la fábrica de don Tomás Gómez. La bella poetisa Josefina de la Torre, ha tenido la gentileza de dedicarle su libro de poesías “Poemas de la isla”. La Provincia. 11 de septiembre de 1932 SUCESOS Chocan dos camionetas Y resulta un hombre herido. Sobre las ocho de la mañana de ayer, chocaron en la calle Eusebio Navarro, las camionetas número 3.135, de esta matrícula, propiedad de don Vicente Guerra y la matriculada con el número 1.616 propiedad de don Tomás Gómez Boch. El acompañante de la primera camioneta fue asistido en la Casa de Socorro de contusiones 55 en la región parietal derecha y en la cara interna del tobillo derecho, de pronóstico leve salvo complicaciones. Los dos vehículos resultaron con desperfectos, no habiendo sido valorados los del vehículo de don Vicente Guerra, y si el de don Tomás Gómez Bosch en 120 ptas. Del hecho se ha dado cuenta al juez de Instrucción de Triana. La Provincia 14 de abril de 1934 La Gran Exposición de productos canarios del Círculo Mercantil. Concurrirán más de ochenta casas expositoras. Plácemes sinceros merece el Círculo Mercantil de Las Palmas por la plausible iniciativa de celebrar en sus salones una Exposición de productos isleños dando a conocer de este modo, ante propios y extraños, las manifestaciones de nuestra actividad industrial y agrícola. Entre las firmas expositoras figuran don Luis Correa Medina con su conocidos productos alimenticios, galletas, tabacos, chocolates. Don Juan Mulet con sus pastas alimenticias. “La Criolla” y don Tomás Gómez Bosch con varios productos de chocolatería de su fabricación. “La Salud” y “La Tropical” con cervezas y otras bebidas espumosas, etc. Diario de Las Palmas 5 de abril de 1935 “Viera y Clavijo” Este es el título de la nueva revista que los alumnos del colegio Viera y Clavijo han editado con todo lujo de detalles y soberbia presentación, en la que colaboran destacados alumnos del mencionado colegio y otros estudiantes. El sumario está encabezado por un interesante artículo de J. Rodríguez Doreste en el que comenta el retrato de Viera y Clavijo de Tomás Gómez Boch. La Provincia 9 de mayo de 1935 Crónicas de sociedad Con toda felicidad a dado a luz a un niño la señora de don Tomás Gómez. 56 Diario de Las Palmas 29 de septiembre de 1936 Comunicados oficiales que remite la Comandancia Militar Y que interesan a los ciudadanos de Gran Canaria. Relación de ciudadanos que han donado su oro para la Patria. 1926.- D. Antonio Gómez Bosch, tres anillos y tres alfileres de corbata. 1929.- D. Tomás Gómez Bosch y señora: una moneda isabelina, una cadena, una pulsera, una caja de reloj pulsera, dos sortijas, dos alfileres, una medalla, un par de zarcillos y un trozo de cadena. Diario de Las Palmas 15 de marzo de 1937 Notas del Gobierno Militar de Las Palmas Relación de ciudadanos que han dado su oro para la Patria. 3737.- Don Tomás Gómez Bosch y señora, (segunda aportación), dos alianzas. Falange 30 de marzo de 1937 Anuncio insertado en la página 2 de este periódico Fábrica de Cervezas LA TROPICAL Las Palmas Canalejas nº 5 teléfono 5-4-4-1 ========= ============== Fábrica de Chocolates EL ESCUDO De T. Gómez Bosch Las Palmas Canalejas núm. 5 teléfono 5-4-4-1 Falange 22 de abril de 1937 Junta para el pago de obreros movilizados Pago a los patronos de las cuentas del mes de diciembre Entre los patrones relacionados figuran Eloy Alonso Ramírez, José Mesa López, Francisco de Elejabeitia, Tomás Gómez Bosch, Cástor Gómez Navarro y Alfredo Schamann Romero. 57 Falange 1 de septiembre de 1939 AYUNTAMIENTO Traslados de domicilio Tomás Gómez Bosch, de Canalejas 5, a Domingo J. Navarro 5 Falange 20 de noviembre de 1939 Anuncio insertado en la página 2 de este diario ESTUDIO BOSCH Fotografías artísticas bajo la dirección del pintor Tomás Gómez Bosch Precios Tamaño corriente 7,50 copias 5 13x18 12,00 cada una 18x24 25,00 cada una Domingo J. Navarro, 5 Las Palmas Falange 20 de abril de 1940 EN EL GABINETE LITERARIO La Fiestas artística de hoy Esta tarde a las seis y media, tendrá lugar, como hemos anunciado, la inauguración de la Exposición de retratos y paisajes de Tomás Gómez Bosch. En el salón de actos, precediendo a la visita de la vasta colección de obras expuestas por el notable pintor canario, se celebrará un interesante festival artístico, cuyo programa es el siguiente: “En la apertura de la Exposición de Tomás Gómez”, palabras de Luis Doreste Silva, Presidente del Gabinete Literario. Armonía de la noche y La Campanella, de F. Liszt, por Cástor Gómez Bosch. Concierto a dos pianos de Mozart, por las señoritas Dolores Hernández y Carmen Martínez Gómez. 58 Falange 21 de abril de 1940 En el Gabinete Literario quedó abierta Desde ayer la Exposición de Tomás Gómez Bosch. Ayer tarde quedó abierta en el Gabinete Literario la exposición de pinturas de Tomás .Gómez Bosch. Un público selectísimo llenaba el salón de fiestas del Casino. El Dr. Doreste Silva hizo un magnifico discurso de presentación en el que enfocó las personalidad artísticas de Cástor y Tomás Gómez Bosch. Luego Cástor Gómez ejecutó al piano música clásica con la limpieza y maestría reconocidas. También dos de sus alumnos regalaron al público diferentes composiciones musicales. Abiertos luego los salones de la exposición, el público admiró el arte de Tomás Gómez Bosch, del que nos ocuparemos detenidamente. Falange 18 de mayo de 1940 Las sesiones del Cabildo y el Ayuntamiento. Se toma el acuerdo, a propuesta de la Presidencia del Cabildo Insular, encargar la confección de un retrato al óleo del Caudillo, al eximio artista español Julio Moisés; como también la adquisición del cuadro “Frutos de la tierra”, del que es autor el pintor canario don Tomás Gómez Bosch. Falange 16 de agosto de 1940 Un retrato de Tomás Gómez Bosch. Recientemente nos hemos ocupado de un retrato maestro debido a los pinceles de Tomás Gómez Bosch; al del alférez Porfirio Artiles, muerto por Dios y por la Patria. La neta limpieza de su colorido, sobriamente entonado, acusa mano experta y una lección perenne de lo que debe ser un retrato bien logrado, su bien lograda concepción. Hoy, que la pintura toma a veces rumbo descompuesto, place registrar la presencia de un retrato fiel a los eternos cánones del género. 59 La Provincia 21 de noviembre de 1940 EXPOSICION La Prensa de Santa Cruz de Tenerife anuncia para dentro de breves días, la apertura en el Círculo de Bellas Artes de aquella ciudad, de una exposición de cuadros de nuestro paisano el bien reputado pintor Tomás Gómez Bosch. Sabemos que en la vecina isla ha despertado gran interés la obra del pintor canario que, según nuestras noticias, exhibirá veintidós retratos y una veintena de paisajes de Gran Canaria. Deseamos completo éxito al artista amigo. Falange 22 de noviembre de 1940 EXPOSICION DE ÓLEOS DE TOMÁS GÓMEZ BOSCH Nuestro paisano, el notable pintor Tomás Gómez Bosch ha marchado a Santa Cruz de Tenerife donde se propone abrir la próxima semana, en el “Círculo de Bellas Artes” un exposición de sus más destacadas producciones. En la expresada exposición presentará Tomás Gómez a la admiración del público tinerfeño treinta obras entre retratos y paisajes al óleo, con lo cual tendrá ocasión de acreditar una vez más en la vecina isla, don ya han tenido oportunidad de conocer diversos trabajos suyos, su alta personalidad artística. La Provincia 21 de diciembre de 1940 GABINETE LITERARIO En atento saluda nos comunica el señor presidente de esta Sociedad, que la Junta General eligió para formar la Directiva el próximo año a los señores siguientes: Presidente, don Luis Doreste Silva; Vice-Presidente, Director de Fomento, don Juan E. Quevedo Ramírez; Vice-Presidente, Director de Recreo, don Antonio Grondona Martín; Bibliotecario, don Francisco Hernández Suárez; Tesorero, don Miguel Suárez Navarro; Contador, don Matías Matos del Toro; Secretarios, don Manuel Padrón Quevedo y don Carlos L. Monzón Grondona; Vocales, don Cayetano, Guerra de Aguilar, don José L. 60 Avellaneda Cardoso, don Néstor Doreste Silva, don Tomás Gómez Bosch y don Agustín Díaz de Aguilar. Agradecemos los ofrecimientos que el señor Presidente se sirve hacernos a los que correspondemos con nuestra cooperación para cuanto pueda realzar el prestigio de la antigua Sociedad. Falange 20 de diciembre de 1941 HOY APARTURA DE LA EXPOSICIÓN GÓMEZ BOSCH Esta tarde, a las seis y media en los salones del antiguo Cabildo Insular, (Triana ,46) será inaugurada la exposición de pintura de nuestro artista Tomás Gómez Bosch. La entrada será pública. La Provincia 2 de enero de 1942 Resumen local del pasado año Durante el año anterior se han verificado en esta ciudad las exposiciones de los pintores canarios Carlos Morón, Jesús González Arencibia y Tomás Gómez Bosch, y de los peninsulares Rodolfo Rinaldi (éste casi paisano nuestro por su larga residencia en las islas) y Carmelo F. González, las cuales dentro de su diverso carácter, obtuvieron cada una gran éxito y aplauso del público. La Provincia 30 de octubre de 1942 INVITACION Agradecemos al distinguido pintor don Tomás Gómez Bosch la atenta invitación que nos hace para visitar la exposición de sus obras que con el título de “Marinas de la Isla” inaugurará en los salones del Gabinete Literario, mañana sábado 31 a las seis de la tarde. Falange 28 de noviembre de 1942 AYUNTAMIENTO Libramientos al pago: En la Depositaría del Municipio de esta capital se hallan al pago libramientos extendidos a favor de los señores y entidades siguientes: …Don Tomás Gómez Bosch se encuentra entre ellos… 61 La Provincia 29 de enero de 1943 CRÓNICA DE SOCIEDAD Fallecimientos: En la tarde de ayer y con numeroso acompañamiento se efectuó el entierro del cadáver de la virtuosa señora doña Ana Cardoso y Ruiz de Medina, viuda del arquitecto don Laureano Arroyo y Velasco, cuyo fallecimiento tan sentido ha sido en el amplio círculo de sus amistades. Expresamos a sus hijos entre los que figuran nuestros amigos don Tomás y don Isidoro, hijo político don Tomás Gómez Bosch, hermanas y demás familiares nuestro sincero sentimiento de condolencia. La Provincia 28 de junio de 1944 CRONICA DE SOCIEDAD Regreso de Madrid el pintor don Tomás Gómez Bosch. La Provincia 31 de julio de 1944 CRONICA DE SOCIEDAD Bodas. En la tarde de ayer se verificó en la parroquia de San Bernardo el matrimonio del teniente de Aviación don Enrique Cuyás Díaz con la señorita Margarita Gómez Arroyo, a quienes apadrinaron doña Isabel Díaz, viuda de Cuyás, madre del novio y don Tomás Gómez Bosch, padre de la desposada. Los nuevos esposos, a los que deseamos infinitas prosperidades, marcharon a Santa Brígida. La Provincia 4 de noviembre de 1944 DELEGACION DE TRABAJO Familias numerosas. Se hace público para conocimiento de los interesados, que se ha recibido de la Superioridad los títulos de beneficiarios de familias numerosas correspondientes a los peticionarios que a continuación se reseñan:…Tomás Gómez Bosch… 62 La Provincia 23 de junio de 1945 CRONICA DE SOCIEDAD Viajeros: De la Península ha regresado don Tomás Gómez Bosch. Falange 9 de agosto de 1945 En el Gabinete Literario Exposición de pintura de Antonio García. …Antonio García, aún en plena formación pictórica, es un nuevo valor que se incorpora lleno de inquietudes afanosas al renacer de la pintura isleña, esta pintura de paisajes nuestros que, con Colacho Massieu y Tomás Gómez Bosch tienen la máxima expresión valorativa…. La Provincia 8 de noviembre de 1945 Ha comenzado la creación de un catálogo artístico. Constará de tres órdenes de aportaciones: bibliográficas, fotográficas y documentales. En su conferencia inaugural de la Exposición de bodegones de Tomás Gómez Bosch, el ilustre profesor de Historia del Arte de la Universidad de La Laguna, don Rafael Lainez Alcalá, dio a su distinguido público la agradable noticia de que con sus alumnos se dispone a confeccionar (habiendo ya encontrado en Tacoronte preciosos materiales para comenzar su redacción) Un Catálogo Artístico del Archipiélago que constará de tres partes: bibliográfica, fotográfica y documental… Falange 10 de enero de 1946 3 preguntas sobre arte y artistas 1.- ¿Cree usted necesaria una Escuela de Bellas Artes? 2.- ¿Qué papel podría desempeñar la “Escuela de Lujan Pérez” en este sentido? 3.- ¿Piensa usted en alguien para dirigir dicha Academia? 63 Las preguntas fueron realizadas a don Pedro Cullen del Castillo, don Luis Doreste Silva, don Tomás Gómez Bosch, don Néstor Álamo y don Mariano Laforet de Altolaguirre Don Tomás fue el más lacónico y concreto en sus respuestas: 1.- Sí. 2.- Importantísimo puesto que aportaría a ella toda una generación de artistas y el espíritu joven que siempre la animó. 3.- Me ha parecido muy bien el nombre señalado por los señores que han opinado antes que yo. Colacho Massieu sería el director de esa Escuela, si llegara a crearse. La Provincia 2 de mayo de 1947 GOBIERNO CIVIL Donativos recibidos en la Caja Insular de Ahorro con motivo de la Fiesta de la Flor: Suma anterior: 18.749 pesetas. …don Tomas Gómez Bosch 15 pesetas… Suma y sigue: 23.390 pesetas. La Provincia 3 de mayo de 1947 INVITACION Agradecemos al distinguido pintor Tomás Gómez Bosch la invitación que nos dirige para asistir al acto de apertura de la exposición de sus cuadros que se efectuará en el Gabinete Literario, esta tarde a las siete y media. Como tenemos dicho, en este acto disertará el distinguido crítico tinerfeño Leocadio R. Machado sobre el tema “Solana y yo a través de Gómez Bosch” La Provincia 9 de diciembre de 1947 CRÓNICA DE SOCIEDAD Hoy ha regresado de Madrid con su señora el pintor don Tomás Gómez Bosch. 64 La Provincia 27 de abril de 1948 CRÓNICA DE SOCIEDAD Marchó a Tenerife don Tomás Gómez Bosch. La Provincia 5 de mayo de 1948 CRÓNICA DE SOCIEDAD Ha regresado de Tenerife el pintor don Tomás Gómez Bosch. La Provincia 13 de mayo de 1948 CRÓNICA DE SOCIEDAD Hizo viaje a la vecina isla don Tomás Gómez Bosch. Falange 14 de mayo de 1948 VIDA DE SOCIEDAD De la vecina isla ha regresado don Tomás Gómez Bosch. Falange 11 de junio de 1948 VIDA DE SOCIEDAD De Tenerife regresó el ilustre pintor don Tomás Gómez Bosch. Falange 25 de marzo de 1949 Del homenaje a los hermanos Millares en el Casino Dos retratos de Tomás Gómez Bosch. Tomás Gómez Bosch está dando fin a dos magníficos retratos de los nunca bien llorados Hermanos Millares- don Luis y don Agustín Millares Cubas- con destino a la galería de retratos de canarios distinguidos que hace tiempo se viene organizando por el Excmo. Cabildo Insular. 65 La presentación de los citados retratos tendrá efecto en un acto que celebrará el Gabinete Literario y en el cual Pedro Perdomo Acedo, el agudo escritor y poeta, dará a conocer parte de un trabajo crítico-biográfico suyo sobre aquellos ilustres hijos del país y que a renglón publicará el “Grupo de Bibliófilos del Gabinete”. La Provincia 1 de noviembre de 1950 CRÓNICA DE SOCIEDAD Con su señora embarcó hoy para Barcelona, donde expondrá sus obras, el pintor don Tomás Gómez Bosch. La Provincia 25 de abril de 1952 Uno de los magníficos retratos que figuran en la Exposición de pinturas que en el Museo Canario ha presentado el ilustre pintor don Tomás Gómez Bosch es este cuadro del Excmo. Sr. D. Francisco García Escámez, marqués de Somosierra, a quien dedicamos hoy el homenaje de un artículo del escritor Alfonso de Gabriel. Esta magnífica pintura sólo tuvo delante al ilustre modelo muy poco tiempo y sin embargo en ella quedó plasmada para siempre la enérgica figura del héroe laureado. Don Tomás es un pintor de almas y sus pinceles reflejan fielmente la personalidad de las personas que se acercan a su lienzo, aunque sólo sea por unos instantes. Diario de Las Palmas 19 de octubre de 1953 Homenaje a Gómez Bosch en Madrid Una vez más, Tomás Gómez Bosch ha llevado este año a Madrid, donde siempre le espera el éxito, una treintena de óleos que expuso en el Salón Dardo con éxito de crítica y público. La colonia canaria acaba de rendirle, en el Círculo de Bellas Artes madrileño, un homenaje de cariño que al fin y a la postre ha sido la única forma de devolverle las emociones resucitadas en su nostalgia ante la contemplación de sus cuadros, que aparte su valor como materia pictórica, y es mucho, están llenos de condensaciones visuales de Gran Canaria. 66 Diario de Las Palmas 8 de agosto de 1953 Gobierno Civil Lista núm. 11 de donativos con motivo de la Fiesta de la Flor. Suma anterior 186.993,75 ptas. …don Tomas Gómez Bosch, 15 ptas. Suma y sigue 310.324,70 ptas. Falange 22 de noviembre de 1956 En el día de la fecha aparece insertado el siguiente anuncio: ESTUDIOS BOSCH Participa a su distinguida clientela y público en general que se hará cargo de toda clase de reportajes, así como bodas, bautizos, etc. en casa particulares, avisando en Domingo J. Navarro, 5, teléfono 6048 Diario de Las Palmas 15 de mayo de 1958 ECOS DE SOCIEDAD Regresó de Tenerife el pintor don Tomás Gómez Bosch Diario de Las Palmas 8 de octubre de 1959 Entre las noticias que nos llegan de Venezuela siempre figuran algunas referentes a nuestros artistas. Éxitos de Tomás Gómez Bosch, de Juan Ismael, de Eduardo Gregorio (que hoy ejerce funciones asesoras en el Departamento Nacional de Bellas Artes, o del escultor Juan Jaén. Diario de Las Palmas 14 de noviembre de 1959 Ecos de Sociedad Natalicios: Con toda felicidad ha dado a luz un niño, primero de sus hijos, la esposa de nuestro particular amigo don Manuel Rodríguez Martín, de soltera Sofía Gómez Arroyo. 67 Diario de Las Palmas 22 de diciembre de 1959 ¿Gran Canaria, también “plató” cinematográfico en miniatura? Desde la “Hija de Mestre” hasta que Hollywood y la cinematografía europea se acercan a los escenarios naturales de la isla. Los alemanes, los primeros que vinieron con equipo técnico. Por Luis García Jiménez A Gran canaria se le ha puesto el sobrenombre de “continente en miniatura”, pero no debemos olvidar que también puede ser una meca del cine en miniatura… “Teide Gigante” se basó en el poema de Félix Navarro “Romance del buen Ladrón” con un solo rollo de 300 metros. El equipo técnico fue el mismo que el documental anterior teniendo como asesor a Adalberto Benítez. El intérprete principal fue Nicolás Puga que personifica al Teide y en el documental se recogen las más bellas estampas de la isla hermana. Y un detalle importante. De este documental se rodaron interiores en el estudio de don Tomás Gómez Bosch…. Diario de Las Palmas 9 de mayo de 1960 El sábado se inauguró la IX Exposición Regional de Bellas Artes. El pasado sábado, día 7, con asistencia de nuestras primeras autoridades y de la Junta Directiva del Gabinete Literario, así como un gran número de expositores, tuvo lugar la inauguración de la IX Exposición Regional de Bellas Artes, que con motivo de las fiestas de san Pedro Mártir ha organizado el Casino en colaboración con el Ayuntamiento, Cabildo Insular, Club Náutico y Círculo Mercantil. Revista de Historia 1 de junio de 1960 Triunfos artísticos: En mayo pasado se hizo pública la concesión al pintor canario don Tomás Gómez Bosch del Premio de Honor en la Exposición Bienal de Bellas Artes. Diario de Las Palmas 25 de julio de 1960 LUCHA CANARIA 12-8 Victoria del Ajódar sobre Rosario, en Gáldar Presidió el jurado de esta luchada, que tuvo por escenario el amplio patio de la Graduada de Gáldar, el presidente de la Federación Regional de Lucha, Dr. Doreste Silva, acompañado de los federativos, señores Ferrera Villar y Ayala Cabrera, a los cuales acompañaba el pintor canario don Tomás Gómez Bosch. 68 Diario de Las Palmas 30 de diciembre de 1961 ECOS DE SOCIEDAD A Tenerife hizo viaje, acompañado de su esposa, don Tomás Gómez Bosch. Diario de Las Palmas 13 de marzo de 1962 ACTIVIDADES DEL HOGAR CANARIO DE MADRID Semana dedicada a Fuerteventura. En la tarde del jueves, 8 de los corrientes, se ha reunido la ponencia nombrada por la Junta Directiva del “Hogar Canario” para la preparación de los actos que han de celebrarse con motivo de la próxima “Semana Canaria” y redacción del programa a desarrollar durante dicho periodo de celebraciones isleñas. La junta directiva se propone este año revestir de la mayor brillantez la tradicional “Semana canaria”, que, en esta ocasión, estará dedicada a la isla de Fuerteventura. Aparte de los actos religiosos se pronunciarán conferencias por destacados oradores, sobre temas principalmente relacionados con la isla de Fuerteventura. El día 2 de mayo se inaugurará la Exposición de pintura del ilustre artista grancanario don Tomás Gómez Bosch. Hará la presentación el académico de Bellas Artes don José Aguiar García. El día 16 será clausurada esta exposición. Se celebrarán otros actos culturales y folklóricos y la tradicional comida de hermandad, con un menú compuesto de productos típicos de la isla de Fuerteventura. Diario de Las Palmas 19 de abril de 1962 ECOS DE SOCIEDAD Hizo viaje a Madrid el pintor don Tomás Gómez Bosch, acompañado de su esposa. 69 Diario de Las Palmas 12 de septiembre de 1963 Homenaje al catedrático y poeta don Luis Millares Carló Don Juan Millares Carló, que pertenece –como es sabido- a una familia ilustre en las letras y en las artes de Gran Canaria, ha sido profesor durante largos años y ha publicado algunos cuadernos de versos. Es natural que estas y otras circunstancia obliguen a un grupo de amigos a rendirle homenaje cuando don Juan Millares se acerca a la cima de la vida. Las adhesiones han sido numerosas, señalemos algunas de las más significativas como la de José Ramírez Bethencourt, Luis Doreste Silva, Saulo Torón, Manuel Padrón Quevedo, Ignacio Quintana Marrero, Tomás Gómez Bosch, Lola Massieu, Felo Monzón, Pedro Perdomo Acedo, Luis García de Vegueta, Antonio Izquierdo Baños, Chona Madera, Andrés Hernández Navarro, Natalia Sosa, Pedro Lezcano y otras muchas más. Diario de Las Palmas 24 de febrero de 1964 Homenaje al poeta Domingo Velázquez. El sábado se celebró en la Escuela de Hostelería del Cabildo Insular el anunciado homenaje que el grupo Neo-Tea y numerosos amigos ofrecieron al poeta Domingo Velázquez con motivo de la publicación de su libro “Poemas del sueño errante”. Hizo el ofrecimiento Juan Sosa Suárez al que siguió en el uso de la palabra Vicente Mujica. Fueron leídas numerosas adhesiones entre las que se encontraban la del Presidente de Cabildo Insular de Gran Canaria, del Centro de Iniciativas y Turismo, Alcalde de Puerto del Rosario, Fernando González, Lucy Cabrera, Tomás Gómez Bosch, Pedro García Cabrera y otras. El Eco de Canarias 26 de julio de 1964 Ayer en Agaete, homenaje al Poeta Fernando González Más de cien personas le expresaron su admiración y amistad. En el mediodía de ayer, organizado por el grupo Neo-Tea le fue ofrecido en Agaete un homenaje al ilustre poeta canario Fernando González. Unas cien personas rodeaban al poeta que, iniciando su retorno a la tierra que le vio nacer tras una larga ausencia en el pasado año, ha querido de nuevo volver a ella. 70 Tras la lectura de varias ofrendas poéticas, don Juan Sosa hizo lo propio con las adhesiones recibidas desde Arrecife Don Pedro Perdomo y las de don Juan Velázquez y Agustín de la Hoz, Lucy Cabrera, Natalia Sosa desde Madrid y Cartas de don Luis Doreste Silva, don Tomás Gómez Bosch y Abraham Cárdenes. El Eco de Canarias 21 de octubre de 1964 PUBLICACIONES Un bello número de la revista “Isla” La revista “Isla”, órgano informativo del Centro de Iniciativas y Turismo, acaba de aparecer en su número 27, correspondiente al tercer trimestre de 1964. En su portada, la reproducción en color de un bello paisaje cumbrero de Gran Canaria. El “Roque de Bentayga”, visto desde una de las vueltas de la carretera que serpentea desde la “Cruz de Tejeda” al pueblo de Tejeda, captado por el mágico pincel del maestro de la pintura canaria Tomás Gómez Bosch. Diario de Las Palmas 5 de diciembre de 1964 CHISMOGRAFIA LEVE Díaz Cutillas No hace mucho tratábamos del poco ambiente de exposiciones en Las Palmas. Ahora hay que rectificar. Porque también se ha rectificado. Hemos tenido hasta ayer la de Gómez Bosch. Con anterioridad fue clausurada la de Gabriel Rodó Sellés. En marcha está la del tinerfeño Raúl Tabares, en Galería Wiot. Diario de Las Palmas 16 de diciembre de 1964 Campaña de Navidad y Reyes Pro-vivienda del necesitado IV relación de donativos Suma anterior 685.450.00 pesetas Suma y sigue 691.700.00 pesetas Cuadro donado por don Tomás Gómez Bosch valorado en 5.000.00 pesetas. 71 Diario de Las Palmas 22 de junio de 1965 ECOS DE SOCIEDAD Necrológicas: El pasado domingo falleció en esta capital, rodeada del cariño de sus familiares, la señora Doña. Carmen Arroyo Cardoso, tras larga y cruel dolencia sobrellevada con ejemplar resignación y después de recibir los Santos Sacramentos y la Bendición Apostólica. Al acto del sepelio, celebrado ayer, con misa de “corpore insepulto”, en la parroquia de San Agustín, asistió numerosa concurrencia. Expresamos nuestro sentido pésame a sus hermanos don Tomás, Adela, don Isidro (ausente), Ana y Consuelo; hermanos políticos, doña Bernarda Medina, doña Maruxa de Celis y don Tomás Gómez Bosch; sobrinos, en particular a don Laureano Arroyo Medina, primos y demás familia. Diario de Las Palmas 26 de noviembre de 1965 Miscelánea de noticias La galería de ex presidentes del Cabildo Insular Por Orlando Hernández Parece que se ha acordado reunir en una sala denominada de los ex presidentes, a cuantos han pasado por la presidencia de nuestra Mancomunidad de Cabildos, completando, así, el número de los retratos ya existentes. Así, figurarán en breve los retratos de don Miguel Alonso, don Francisco García García, y don Antonio Limiñana, obras encomendadas al parecer a nuestros retratistas más representativos, Carlos Morón, Cirilo Suárez y Tomás Gómez Bosch, tres pinceles con muy diferente personalidad, pero bien representativos dentro de nuestro panorama insular, en ese difícil arte del retrato. El Eco de Canarias 10 de mayo de 1966 Subasta benéfica en el Gabinete Literario. En Galería Wiot se celebra una exposición de cuadros donados a la Asociación Católica de Orientación a la Joven, pro-nueva casa, por artistas de nuestra isla, que serán subastados el próximo día 12, a las siete de la tarde siendo el acto presidido por el 72 presidente del Gabinete Literario, don Manuel Padrón Quevedo, actuando de mantenedor del acto el locutor de Radio Atlántico don Carlos Martín. El importe r |
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